Siguiendo camino
- Buen trabajo Rai! - dijo Athic.
- Y Sirenia? - dijo Drahu.
- Nos está dando tiempo! - dijo Rai.
- Vamos! - dijo Athic ayudando a la corriente con las manos.
Bajaban agarrándose bien a los barriles, la corriente era muy fuerte; se alejaban del Reino ( imaginad los rápidos del parque de atracciones ) empapandolos enteros. De la nada aparecieron demonios matando a dos elfos que hacían guardia y Rai tragó saliva al verlos. Lewing, Marha y más elfos llegaron lanzando flechas a los demonios.
- ACABEN CON TODOS!!! - gritó un demonio.
Los medianos no tenían armas pero Rai conservaba la suya así que demonio que caía al agua, demonio que mataba. A Drahu lo hirieron con una flecha en la pierna gritando de dolor.
- DRAHU!!! - gritó Athic.
Cuando dos demonios se acercaron a él, apareció Marha con su arco lanzando flechas.
- MATEN A LA ELFA!! - gritó el demonio.
Lewing apareció lanzando flechas a los que querían matar a Marha, esa elfa era como una hermana para él ( una sustituta de la que perdió )
La corriente los volvió a arrastrar y los demonios los perseguían.
Marha y Lewing luchaban contra los demonios lanzando flechas y atacándolos con la espada mientras iban detrás de los medianos.
Lewing estaba peleando con un demonio cuando otro se le acercó por detrás y Athic con el hacha que le había quitado a otro demonio la lanzó dándolo en el pecho salvando al elfo. Lewing contempló como los medianos y el enano se escaparon sin ver que el enemigo se le acercó pero Marha apareció quitándole la espada; cuando estuvo a punto de acabar con él, Lewing no se lo permitió.
- Marha espera!! A este lo dejaremos vivo!
- Nos siguen? - dijo Athic moviendo las manos en el agua.
- No, ya no están! - dijo Kimod - hemos despistado a los demonios!
Llegaron a la orilla saliendo de los barriles y Drahu tuvo que sentarse por la herida.
- Tenemos que seguir! - dijo Athic.
- Drahu está herido! - dijo Thar - hay que vendarle la pierna!
- Nos siguen los demonios , tenemos que continuar! - dijo Athic.
- Freylea está cerca, no podemos quedarnos aquí! - dijo Toruk.
- Pero como llegaremos? - dijo Rai.
Se tomaron un descanso; mientras Kimod se quitaba el agua de sus botas apareció por detrás un hombre apuntándolo con un arco y su flecha. Thar se puso delante queriendo atacarlo con un tronco pero el hombre lanzó la flecha atravesándolo; cogió otra apuntándolos a todos.
- El que vuelva hacerlo estará muerto! - dijo el humano.
- Eres de la ciudad del Río? - dijo Toruk - serías tan amable de llevarnos hasta allí en su barco?
- Porqué creéis que os ayudaría? - dijo el hombre yendo hacia el barco.
- Porque estamos decididos a llegar a nuestro hogar y si nos ayudas te recompensaríamos con riquezas que hay dentro de esas murallas! - dijo Athic.
Ese hombre cogió los barriles llevándolos al barco.
- Necesitamos comida, provisiones y armas! Puedes ayudarnos? - dijo Toruk.
Mientras en el reino Lewing y Marha llevaron al demonio ante el Rey.
- Vaís tras la pista de cinco medianos, porqué? - dijo Lewing poniendo al demonio de rodillas.
- Cinco no! Ya no! - dijo el demonio sonriendo - Al mediano Drahu le clavé una flecha envenenada; el veneno está en su sangre y pronto se ahogará!
- Responde escoria! - dijo Marha preocupada por Drahu.
- No respondo a perras, elfa!
Marha sacó la espada.
- Yo no la enfadaría! - dijo Lewing.
- Disfrutas matando? Te gusta la muerte? Déjame dártela! - dijo Marha queriendo atacarlo con la espada.
- Basta! - dijo Tinuhel - Marha puedes irte!
Marha miró por última vez al demonio con desprecio y bajó las escaleras mientras oía al Rey que la vida de un enano no lo importaba.
Marha pensó que si al Rey no le importaba sabía de alguien que sí y la ayudaría así que bajó hasta la celda más oscura.
- Elfa estás despierta? - dijo Marha mirando a través de las barras de la celda.
- Sí - dijo Sirenia acercándose.
- Tú eres la única que quiere ayudar a los medianos - dijo Marha - A Drahu lo han herido con una flecha envenenada y si no lo curamos morirá!
- Qué? - dijo Sirenia - sácame de aquí! Sé dónde van!
Marha abrió la celda dándola sus espadas, su arco y flechas y fueron hasta la entrada sin ser vistas.
- Y ahora? - susurró Sirenia - esos guardias nos verán!
- Sube por esa muralla con cuidado, así solo me verán a mí! - dijo Marha.
Sirenia subió con cuidado de que no la viera nadie mientras Marha salió por la puerta principal con sus armas.
Un rato después Lewing salió a hablar con los guardias.
- Cierren la puerta! Orden del Rey!
- Que pasa con Marha? - dijo el guardia.
- Que pasa con ella?
- Se a marchado con su arco y su espada y no a regresado aún!
Lewing cogió sus armas dispuesto a seguirla.
Los demonios llegaron hasta el final de las rocas en las que habían estado los medianos.
- Estuvieron aquí! - dijo el demonio tocando la sangre de Drahu que había en el suelo.
- Hay un olor diferente! Un humano estuvo aquí! - dijo otro enfadado.
Rai y los medianos estaban en el barco con el humano.
- Como te llamas? - dijo Rai.
- Will, me llamo Will!
- Soy Rai! - dijo estrechandole la mano.
Llegaron hasta la ciudad y les indicó el camino hacia su casa.
- Seguidme! - dijo Will.
Un niño abrió la puerta dejando que pasaran a la casa.
- Os traeré comida - dijo Will.
- Y las armas? - dijo Athic.
Will fue a una barca y escondidas en un saco cogió las espadas llevándolas a la casa.
- Aquí las tenéis! - dijo Will poniéndolas en la mesa.
Drahu se tuvo que sentar en una cama, empezaba a sentirse mal por la herida.
Sirenia y Marha bajaron por donde habían ido los medianos con los barriles; se miraron de reojo dándose cuenta de que las seguían y entonces las dos rápidamente pusieron la flecha en el arco girándose y apuntando a...
- Lewing! - dijo Marha suspirando y bajando el arco - creía que eras un demonio!
- Si fuera un demonio ya estarías muerta! - dijo Lewing - baja el arco elfa!!
- Tranquila! - dijo Marha bajando el arco a Sirenia.
- Has dejado salir a la prisionera - dijo Lewing - te has ido a enfrentarte a los demonios sola!
- Vaya! Ahora sí que me siento invisible! - murmuró Sirenia.
- No estoy sola, ella me ayudará! - dijo Marha mirándola - Lewing ven con nosotras!
- El rey está enfadado, lo has desobedecido - dijo Lewing acercándose - llevemosla de vuelta!
- No pienso volver a esa celda! - dijo Sirenia.
- Harás lo que se te diga! - dijo Lewing apuntandola con la flecha.
- Lewing - dijo Marha poniéndose delante de Sirenia como escudo - no puedo volver, voy a ayudar a los medianos con los demonios. Al Rey no le importa que vengan nuestros enemigos a matar a nuestros prisioneros!
- No es nuestra lucha! - dijo Lewing.
- Mientras el mundo arde, vosotros os escondeis detrás de esas murallas! Todo un ejemplo de valor! - dijo Sirenia.
- Cállate prisionera! - dijo Lewing.
- Ella tiene razón - dijo Marha - no somos parte de este mundo? Tenemos que protegerlo de los que lo quieren destruir!
Lewing la miró pensativo.
- Nos acompañarás? - dijo Marha.
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Dedicado a LaChicaAnonima18,lisbetha23
😘😘😘a todos!!!
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