En casa
Sirenia nunca tuvo tanto miedo y tampoco había visto tanta furia en una mirada; se levantó temblorosa caminando hacia atrás.
- Espera! - dijo Tinuhel calmándose al instante - no me tengas miedo!
- Es... es mejor que me vaya - dijo nerviosa - no quiero estar aquí! - se dió la vuelta comenzando a irse.
- Quiero que te quedes! - dijo acercándose a ella.
- No puede obligarme!
- Este es tu lugar Sirenia! - dijo poniéndose delante de ella.
- De que está hablando?
- Hay algo importante que tengo que decirte! - dijo cogiéndola de la mano - ven siéntate!
La llevó y se sentó en un taburete; ella lo vio tan serio que la asustó.
- Es algo malo?
- Para mí es lo mejor que me a pasado en mucho tiempo pero puede que para tí no! - dijo Tinuhel agachándose enfrente de ella.
- Porqué para mi no?
- Porque te e tratado mal desde que te vi - dijo Tinuhel suspirando - y no creo que quieras ser quién en realidad eres!
- No estoy entendiendo nada - dijo ella - puede dejar de dar vueltas y decirme lo que tenga que decir?
- Verás... eres la princesa de este reino - dijo Tinuhel mirándola atento.
- Disculpa - dijo Sirenia pasmada levantándose - que a dicho?
- Eres mi hija Sirenia - dijo levantándose también.
- Pero... - dijo Sirenia caminando de izquierda a derecha - no puede ser! Como sabe que soy yo?
- Por esto - dijo Tinuhel subiéndose la manga enseñando su mancha - Lewing y tú la tenéis también, es herencia de mi familia! Y esas visiones que tienes lo has heredado de tu madre.
- Usted es mi padre y Lewing mi hermano? - dijo Sirenia alucinada.
- Puedes llamarme por mi nombre y tutearme si quieres!
- No lo sé - dijo ella.
- Claro, supongo que no quieres - dijo con tristeza - después de como te e tratado!
- No es eso - dijo Sirenia viéndolo así - es que no sé como se llama!
- No? - dijo sorprendido y la vio negar con la cabeza - me llamo Tinuhel, aunque nada me gustaría más que escucharte decir papá! - la miró intensamente - hija no sabes lo loco que me volví cuando os perdí a tí y a tu madre! Ella murió y después te busqué pero no aparecías; no sabía que hacer, os fallé a las dos y nunca me lo e perdonado!
Sirenia vio que lo estaba pasando tan mal que lo abrazó.
- Ya es hora de que te perdones - susurró Sirenia.
Se separó cogiéndole de la mano volviendo a sentarse.
- No puedo hacerlo - dijo Tinuhel.
- No creo que sea eso - dijo Sirenia mirándolo seria - no es que no puedas perdonarte; es que no crees merecerlo!
- Claro que no lo merezco - dijo Tinuhel - por mi ineficacia, por mi orgullo y arrogancia no pude ver que solo nos estaban distrayendo para conseguir su verdadero objetivo que eras tú!
Sirenia lo escuchaba atentamente.
- Cuando tu hermano y yo llegamos a la recámara vi a tu madre tendida en el suelo; había muerto pero antes se había llevado por delante a todos los demonios que osaron entrar. La llevé a la cama para que no estuviera cerca de esos malnacidos; tu hermano se acercó a la cuna y me dijo que no estabas! Corrí y grité a mis soldados que te buscaran por cada rincón, cuando no te encontraron me di cuenta que tú eras el objetivo desde el principio. Hice la promesa de manteneros siempre a salvo y ni siquiera pude cumplirla, las dos mujeres de mi vida ya no estaban! Lewing fue más fuerte - sonrió apenado - supo ponerse firme y cuando enterramos a tu madre iniciamos tu búsqueda pero al no encontrarte perdimos la esperanza, creímos que estabas muerta y ahora me arrepiento de no haberte buscado con más insistencia!!
- Entonces fue por nosotras - dijo ella entendiendo todo.
- El qué?
- Tu cambio, el cambio de todos - dijo ella - oí que erais un reino muy respetado por todos, feliz y siempre ayudando a todo el que lo necesitara pero algo pasó porque os volvisteis peligrosos, crueles y dejasteis de ayudar!
Sirenia lo vio taparse la cara con las manos.
- Lo que pasó no fue tu culpa - dijo ella apartándole las manos de la cara - tienes que dejar de castigarte; volver a ser el de antaño y así poder conocerte de verdad!
- Mi niña - dijo con añoranza acariciando su mejilla - me hubiera gustado tanto verte crecer... ver tus primeros pasos y oír tus primeras palabras...
- Lo que importa es que ahora estoy aquí - dijo Sirenia - tienes que hacer las paces contigo mismo y con el pasado para poder ser feliz ahora y en el futuro!
- Entonces te quedas aquí? - dijo asombrado.
- Que remedio - dijo ella resoplando - pero no quiero una celda como habitación eh? - le señaló en broma.
- Nada de celdas - dijo sonriendo - te puedo dar un abrazo?
- Uno? - dijo ella alzando la ceja - con todos los que me debes ya puedes hacerlo más a menudo papá! - y lo abrazó.
- Me acabas de hacer muy feliz hija - dijo conmovido apretando el abrazo - debes llamarme así más a menudo, me hace muy bien!
En ese momento entraron al salón los medianos, Rai, Lewing, Marha y Kane, al verlos así pararon al instante.
- Ya era hora Tinuhel! - dijo Kane acercándose.
- Tu lo sabías? - dijo Sirenia sorprendida.
- Lo sospechaba desde hace tiempo!
Sirenia le dió un golpe en el hombro.
- Auch eso duele! - dijo Kane masajeandose el hombro.
- Te lo mereces - dijo seria - tu sabías quién soy, por eso me pediste que te acompañara! Recuerdas lo que me dijiste cuando me pediste ayuda?
- Si!
- Repite conmigo!
- A lo mejor por el camino encuentras la verdad sobre quién eres! - dijeron los dos a la vez.
Volvió a pegarlo en el hombro.
- No era más fácil decírmelo y ya está?
- Lo tenías que descubrir tú!
- Si no fuera porque eres mi amigo te daría una paliza! - dijo Sirenia poniendo las manos en la cadera.
- Entonces doy gracias por eso! - dijo Kane sonriendo balanceando los pies mientras ella volteaba los ojos.
- Te das cuenta Marha? - dijo Sirenia mirándola - la alegría de la huerta a resultado ser mi hermano y ni siquiera me da un abrazo!
- Es que es un poco lento! - dijo Marha dándole un codazo a Lewing.
- La alegría de la huerta? - dijo Tinuhel alzando una ceja.
- No me hagas caso papá! - dijo moviendo la mano quitándole importancia - Madre mía, si que eres lento!
Sirenia se acercó a Lewing y lo abrazó mientras Tinuhel sonreía por llamarlo papá cómo si lo hubiera estado haciendo toda la vida.
- Bienvenida a casa hermanita! - dijo correspondiéndole el abrazo.
- Estábamos desayunando - dijo Sirenia separándose - os apuntáis?
Sirenia frunció el ceño al ver que miraban a Tinuhel.
- Puedo hablar contigo un momento? - dijo ella a su padre.
Tinuhel asintió y fueron a un aparte.
- Que ocurre?
- Es hora de olvidar el pasado y volver a ser aliados!
- Hija...
- Papá, a pasado demasiado tiempo - dijo ella en tono súplica - es hora de cambiar y también deberías hablar con Marha, no es justo que la desterraras solo porque me ayudara!
Tinuhel la miró unos segundos y supo que tenía razón; era hora de enterrar el pasado y seguir adelante.
- Está bien! Puedes decirle que quiero hablar con él?
Sirenia lo abrazó dándole un beso en la mejilla.
- Athic, mi padre quiere hablar contigo! - dijo llegando a ellos.
- Conmigo? - dijo sorprendido - ahora voy!
- Que ocurre? - dijo Rai.
- Que hay comida y no estamos sentados para disfrutarla! - dijo Kane dirigiendolos a la mesa.
- Porqué me has llamado eso antes? - dijo Lewing a Sirenia.
- Porque desde que te conocí eres todo sonrisas - dijo sonriendo - venga hermanito, no tienes sentido del humor? - y le pasó el brazo por el hombro.
- Si que tengo! - dijo haciéndose el ofendido.
- No le creas - susurró Marha.
- Te escuché! - dijo Lewing haciendo reír a Sirenia.
Estuvieron un poco más haciendo bromas y aparecieron Tinuhel y Athic.
- Todo bien? - dijo Lewing a su padre.
- Sí hijo - dijo Tinuhel - hemos solucionado nuestras rencillas y volvemos a ser aliados!
Athic asintió confirmando lo dicho.
- Marha - dijo Tinuhel - siempre has sido de la familia y quiero que vivas con nosotros como lo has hecho hasta ahora!
Ella asintió agradecida y Sirenia miró a su padre feliz y orgullosa.
En realidad miraba a cada uno desayunando y conversando entre risas; era la primera vez que sentía que no volvería a estar nunca más sola. Descubrió que tenía familia, por el camino hizo amigos y gracias a Kane supo su verdadero ser.
- Hija estás bien? - susurró Tinuhel.
- Sí , sabes? Estoy orgullosa de tí - dijo ella - estoy feliz de haberos encontrado y os veo a todos a mi alrededor y siento que no volveré a estar sola nunca más!
- Siempre nos tendrás hija - dijo abrazándola.
- Nunca me cansaré de tus abrazos papá - susurró feliz.
- Y yo nunca me cansaré de dártelos pequeña - dijo Tinuhel - y ahora a desayunar que si no nos vamos a quedar sin nada! Los medianos tienen fama de comer demasiado! - le susurró a Sirenia.
- Eh! Que te e oído! - dijo Athic.
- Tienes que reconocer que tiene razón - dijo Sirenia divertida - a Rai le vaciasteis la despensa en una sola noche!
- De eso nada! - dijo Drahu.
- Rai? Kane?
- Es cierto - dijo Rai y Kane asintió.
Así empezaron a bromear y así fue el comienzo de tiempos venideros entre elfos del bosque Zeodor y los medianos de Freylea.
Con la conciliación de dos Reyes!
FIN
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Hemos llegado final!!!
Os a gustado como a terminado?
Dedicado aLaChicaAnonima18,SilviaMorenoGuerra
Por apoyarme siempre 😘😘😘😘
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