El Rey
Sirenia alzó su arco con la flecha a un elfo de cabellos dorados que la apuntaba a ella de la misma forma; todos los elfos dirigieron sus flechas hacia ella al ver a quién apuntaba.
- Una elfa ayudando a medianos, es inadmisible! - dijo el elfo disgustado - baja el arco traidora, somos más!
Sirenia vio a todos los que les rodeaban dispuestos a matarla y bajó el arco.
- AYUDADME!! - gritó Kimod.
A Kimod lo estaba atacando una araña pero una elfa lanzó su daga y cayó muerta.
- Registrarlos!! - dijo el elfo de cabellos dorados.
A todos los quitaron las armas que llevaban encima, Sirenia se dió cuenta que no estaba Rai pero también observaba al elfo que la había apuntado.
- Marha, las arañas están muertas? - dijo el elfo.
- Sí Lewing, pero vendrán más - dijo Marha - ahora son más peligrosas!
Lewing requisó una espada a Sirenia observándola más de cerca.
- Esta es una espada elfica antigua! Fue hecha por mis ancestros! De donde la has sacado?
- Me la dieron! - dijo ella acordándose cuando se la dió Kane.
- Eres una ladrona y una mentirosa! - dijo Lewing apuntando la espada al cuello de Sirenia - Llevadlos al reino! - ordenó.
Lewing cogió a Sirenia del brazo siguiéndolos los demás hasta llegar a la entrada del castillo; los llevaron a las celdas y los encerraron a todos menos a ella.
- Tú te vienes conmigo! - dijo Lewing poniéndole la daga en el cuello viendo que se estaba resistiendo.
- A donde me llevas? - dijo ella dejando de resistirse al notar un pequeño pinchazo en su cuello.
- Eres una elfa ayudando a medianos, has traicionado a los de tu raza y a tu Rey! - dijo Lewing.
- Yo no tengo Rey!
- Camina, vamos! - dijo empujándola.
- No empujes!
La hizo subir por unas escaleras y vio un elfo bastante intimidante sentado en un trono enorme.
- Padre! - dijo Lewing.
Sirenia se sorprendió; si el rey era el padre, entonces había amenazado al príncipe.
" Genial Sirenia, ahora sí que estás muerta " - pensó.
Observó al Rey, tenía porte, se le notaba que era un soberano de los pies a la cabeza. Su mirada era fría, indiferente, escéptica pero sobre todo peligrosa.
El rey se levantó mirando a Sirenia frunciendo el ceño.
- Padre, está elfa estaba ayudando a los medianos!
- Por qué una elfa los ayudaría? Hacia donde os dirigiaís? - dijo Tinuhel mirándola.
- Majestad! - dijo Marha apareciendo haciendo una reverencia - le informo de que las arañas están muertas pero vendrán más!
- Pues auyentalas de mi reino! - dijo Tinuhel.
- Pero irán a otras tierras, hay que matarlas! - dijo Marha pensativa.
- No me importan otras tierras ni sus habitantes! - dijo Tinuhel frío como el hielo.
Marha se quedó sin palabras con la insensibilidad de su rey, lo mismo le pasó a Sirenia.
- Ahora marchate, tengo asuntos que atender! - dijo despachandola.
Marha hizo una reverencia y se marchó.
- Responde! - dijo Tinuhel acercándose a Sirenia.
Pero ella no contestó a pesar de que estaba entre el rey y su hijo.
- Nos hemos visto antes? - dijo Tinuhel desconcertado - me resultas familiar!
- Imposible - dijo ella - nunca e estado aquí! - dijo intentando que su voz sonara firme.
- Ten respeto a tu Rey! - dijo Lewing queriendo intimidarla.
- No es mi rey! - dijo ella enfadándose.
- Ah, no? - dijo Tinuhel sin parar de mirarla - si te destierro supongo que ya no lo sería!
- No es mi rey y desde luego no puede desterrarme si nunca e vivido en su reino! - dijo asombrada de sí misma por hablarle de esa manera.
- Eres una insolente - dijo Tinuhel todavía pensando porque esa elfa le resultaba conocida - Cúal es tu nombre?
- No tengo porqué decirlo!
- Supongo que tampoco me dirás porqué estabais en mis tierras! - dijo Tinuhel alzando una ceja.
Sirenia se lo quedó mirando sin inmutarse.
- No importa! - dijo Tinuhel dando un paso hacia atrás - ya me lo dirá Athic! Lewing te encerrará en una celda y no saldrás nunca de allí! - y ahora dirigiéndose a su hijo - Lewing tráeme al mediano!
- Alguien dijo una vez que el gran Rey de este reino tuvo corazón - dijo Sirenia mirándolo - algo que yo dudo!
Tinuhel se quedó estupefacto por las palabras de aquella elfa que sin saber porqué le hizo sentir mal. Lewing se la llevó casi a rastras hasta donde estaban los demás.
- No me toques! - dijo Sirenia removiéndose.
Un elfo abrió la celda y Lewing la empujó adentro tirándola al suelo.
- Te arrepentirás de lo que has dicho a mi padre, me encargaré de que nunca salgas de esta celda! - dijo Lewing cerrando la puerta.
Después abrió la celda de Athic y se lo llevó; al rato volvieron y lo encerraron de nuevo.
- El rey te a ofrecido un trato? - dijo Drahu.
- Sí pero a cambio de joyas; lo e mandado al infierno! - dijo Athic - ELFA!! - gritó.
- QUE!!! - gritó ella también.
- GRACIAS! - dijo Athic - gracias por no decir nada al Rey!
- De... De nada! - dijo asombrada por el agradecimiento.
- Y ahora como saldremos? No hay esperanza! - dijo Thar.
- Sí la hay! - susurró Athic recordando a cierto enano.
Rai estaba escondido en las bodegas, veía a dos elfos moviendo barriles vacíos mientras dejaban las llaves de las celdas en la mesa y beber vino.
- Estará amaneciendo? - dijo Toruk.
- Nunca llegaremos a Freylea, verdad? - dijo Thar triste.
Todos estaban desanimados.
- Encerrados aquí desde luego que no! - dijo Rai apareciendo con las llaves.
Rai comenzó abrir las celdas y los demás salieron felicitándole.
- Bien hecho Rai! - dijo Sirenia chocando los cinco con él.
- Vamos seguidme! - dijo Rai.
Bajaron por las escaleras hasta las bodegas despacio ya que los elfos se habían quedado dormidos.
- Por aquí, vamos! - dijo Rai - meteros en los barriles!
Los medianos se quejaron.
- Alguien tiene una idea mejor? - dijo Sirenia enfadada - callaos y meteros de una vez!!
Los medianos se metieron sin rechistar más y cuando solo faltaban Rai y Sirenia se oyeron como los elfos daban la voz de alarma por su escapada.
- Vamos Rai métete! - dijo Sirenia dándole un pequeño empujón.
- Y tú?
Los elfos se acercaban y Sirenia tomó una decisión.
- Os daré tiempo! - y bajó la palanca haciendo caer los barriles al agua arrastrándolos la corriente.
Sirenia subió la palanca cerrando la compuerta y levantó las manos rindiéndose cuando llegaron los elfos.
- Ahora te llevarán a la peor celda donde estarás sola y a oscuras! No volverás a ver la luz del sol! - dijo Lewing a Sirenia llevándola a esa celda en la que estaba totalmente a oscuras.
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No a sido muy prometedora la primera impresión, no creéis???
Dedicado aLaChicaAnonima18 por todas las dedicatorias que recibo 😉😉
😘😘😘 A todos!!!
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