Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

162

Se levantó del sofá y caminó a la cocina. Adrien lo observó en silencio.

Suspiró con sumo pesar, apartándose el cabello del rostro.

Frunció los labios y observó sus manos.

Pronto estaría en casa, viviendo una buena vida con sus hermanos, su padre, su abuelo y la sirvienta. Sin preocupaciones. Iba a tomarse otro año sabático hasta sentirse mentalmente estable para buscar un trabajo, seguro su padre le ayudaría a abrir su propia veterinaria. Le dejaría la casa a Isamu. Pondría su propio cajón de las flores en casa, lo cuidaría por su cuenta. Sería padrino en la boda de su hermana. Sería el padrino del chiquillo que tuvieran. Iba a llevarse bien con su padre.

No le preocupaba Isamu. Sabía que estaría bien también... Lo esperaba. Esperaba volver a verlo el día de la boda de Adriana...

Su hermano finalmente salió de la cocina.

Llevaba un cuchillo en manos.

—¿Qué harás? —preguntó burlesco— ¿Asesinarme?

—Tú me dijiste, hace un tiempo, que te asesinara cuando me diera cuenta. Cuando por fin entendiera que no me amabas... que yo merecia algo mejor.

Adrien sonrió ampliamente.

Se puso de pie y se acercó a Isamu. Sujetó las manos que empuñaban el arma y las dirigió hasta su propio cuello. El filo le rozaba debajo de la manzana. Lo sentía temblar.

—Hazlo —retó—. Hazlo, aquí, en el cuello. Entierra el cuchillo y corta mi garganta. Ahora. Líbrate de mí y luego huye.

Frunció los labios, incapaz de ver directo a sus ojos.

—¿Y luego qué? —susurró. Temblaba. Temblaba mucho— ¿A dónde iré luego? ¿Y si me descubren? Yo... yo no podría vivir así. No soy como tú.

—"¿Y si me descubren?" —repite riendo— Te descubrirán, grandísimo idiota. Pero si no lo haces, ¿cómo te librarás de mí? Regresarás una y otra vez como perro con la cola entre las patas, ¿cómo eliminarás todas tus problemas si no eliminas el problema de raíz? Es mi culpa, ¿no? Yo te jodí la cabeza. Es mi culpa que no estés con tu madre, esos golpes que tienes te los dí yo, es mi culpa que haya surgido Inari, es mi culpa que nos hayamos conocidos, es mi culpa que te enamoraras de mí. Soy culpable, ¿no? Tú lo sabes. Así que, si yo muero, tus problemas ya no estarían aquí. Podrías olvidarlos.

—Me llevarán a la cárcel...

—Pero estarás lejos de mí.

Silencio.

Adrien sonríe.

—Existe otra alternativa.

—¿Me amarás?

Rió.

Apuntó el cuchillo a él.

—Así el que se irá preso seré yo, y tú siempre te librarás de mi. Es una victoria para ti.

Sonrió ampliamente.

—Jódete, Adrien.

El menor rodó los ojos y soltó al otro.

—Como quieras.

Y sin dudarlo le dio la espalda, dispuesto a irse a su habitación.

Isamu rió bajito.

—Hey, Adrien...

Se giró sobre sus propios pies para encararlo una vez más.

Isamu le sonrió ampliamente, sus rasgados párpados se juntaron tanto que parecían cerrados. Una lágrima bajó por su mejilla.

—Dile a Anzu que lo siento.

—Isamu, no vayas a...

—Te amo.

El filo se clavó en su garganta.

Su cuerpo se paralizó por largos momentos.

Observó la sangre salir a montones, manchando su ropa y el piso.

Salpicó a montones en las flores.

Se sacó el cuchillo del cuello y una cascada de sangre brotó.

Volvió a clavarlo en su piel, y esta vez hizo un corte lateral.

—¡Isamu!

Adrien no lo dejó moverse.

"¡Adrien! ¡Adrien, él se va...! ¡Se está muriendo!"

"Déjalo morir."

Finalmente el cuerpo cayó al suelo.

Nunca había visto tanta sangre en su vida.

Se apoyó en la pared al sentir sus piernas flaquear.

Lo único que había dejado Eriko en su vida...

Había muerto.

¿Por qué no se sentía mal al respecto? 

Le asustaba no sentirse mal.

Le aterraba no tener sentimientos por el cuerpo que descansaba en su sala.

Era su hermano.

Si Adriana o Adrián murieran se sentiría terriblemente mal. Lloraría a montones.

Incluso si su padre muriera no podría soportar el dolor.

Pero Isamu moría y...

Se sentía aliviado.

Como si se hubiera sacado un gran peso de encima.

Se dejó caer por la pared hasta que tocó el piso.

Bien, un clavo más para dejar un hueco en su psique.

"Puedo hacerlos olvidar eso", sugirió Fyodor, observando de reojo el cadáver.

"No... No quiero olvidar nada más".

"Bien, ¿qué hacemos ahora? ¿Hacemos la vista gorda y nos vamos?"

"Esta vez no es nuestra culpa... Es decir, no fuimos nosotros quienes sujetaron el cuchillo y se lo clavaron. Este fue un suicidio."

"¿Entonces?"

"Solo llama a la policía y que sea lo que Dios quiera."

Cerró los ojos y sacudió la cabeza.

Al abrirlos aun estaba delante del cadáver, la sala aun estaba llena de sangre.

—Oh... Supongo que esto no será tan fácil.

—Jódanse si creen que los voy a sacar de esto.

—Ojalá pudiera tener otra oportunidad... poder hacer las cosas bien...

Adriana salió de la cocina y se sentó a su lado. Observó el cuerpo de Isamu tirado en el piso, y tocó la sangre con una mano.

—Puedes tener otra oportunidad —sonrió Adrián, bajando por las escaleras—. ¡Ahora Isamu tiene otra oportunidad! Tú puedes conseguir una nueva.

—No empiecen con sus cosas. Tengo a Abel conmigo, en casa me esperan mis hermanos, papá, el abuelo... incluso Edeltrudis.

—Mira, hagamos algo —Adrián se acurrucó delante de él y le sonrió ampliamente—, te prometo que ellos estarán ahí para tu segunda oportunidad.

—¿Qué?

—Te lo juro. Todos ellos, Adriana, Adrián, Urie, Adrià, Abel... ¡incluso Eriko e Isamu! Todos estarán ahí, esperándote con los brazos abiertos. Tu dolor se desvanecerá, te lo juro.

—¿A qué costo?

Adrián frunció los labios.

Sonrió ampliamente.

—Lo pagarás con ese egocéntrico rostro tuyo, ¿qué tal?

Se levantó del piso y camino hacia su hermano, muerto.

Tomó el cuchillo del suelo.

—¿Lo juras?

—Con mi vida.

Y lo clavó en su cuello.

—¡Adrien!

。。。

eH ESPEREN AUN NO ES FINAL!! SIGAN!!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro