CAMINOS DISTINTOS
Tras la visita del Almirante, mis amigos y yo estuvimos hablando por horas. La noticia de que tendría una rehabilitación larga tras someterme a las cirugías de mis extremidades robóticas haría que dejara la armada y claro está mis amigos. No sabía aún mi destino pero al menos sabría que los tendría apoyándome aunque fuera desde lejos. El apoyo económico del Almirante sería hasta que pudiese adaptarme a ello. Desearía que fuera rápido todo eso pero mi regreso al escuadrón Leopardo Negro no sería posible. Pasarían años para siquiera pensar valerme por mi mismo.
- Joel, tienes que ser fuerte - me dice Jhon algo agobiado por todo lo sucedido. - Ya verás que de alguna manera saldrás adelante. Tuviste suerte como dijiste en cambio los piratas que cayeron por los sádicos si sobrevivieron quedarían peor que tu. -
- Jajajaja, no me imagino a ese par darse gusto en el campo de batalla - dije riendo a carcajadas - me hubiera encantado no estar inconsciente para ver su cara. -
- Se pondrán tristes todos al darles la noticia de partida del equipo - Eduardo - Más Sveta. -
- ¡¿QUEEEEEEEÉ?! - dije sorprendido, no me lo esperaba. - Nunca pensé que yo le gustara a una mujer atractiva, menos a ella - los malditos se dirvertian al ver mi expresión de sorpresa e incredulidad, yo sabía que ella tuvo un amorío y no le fue bien. Ella es asediada siempre por hombres y mujeres por su belleza y personalidad relajada. En fin, estoy divagando mucho.
Tras someterme a la primer cirugía, mis amigos partieron a sus deberes en la armada. Venían a verme cuando podían y yo lo entendía bien ya que estuve a su lado en cientos de misiones por ocho largos años y muy pocas veces se tenía tiempo para la familia y amigos. A pesar que extrañaba de sus malos chistes, no eran mejores de lo que estaba pasando en mi recuperación.
Tres años después. Sistema Wolf 365.
Tras semanas de explorar el planeta por bloques no encontraba ese maldito mineral. Estaba reparando mi pierna metálica que dañó una lanza de un nativo. Al menos no estaba en un desierto o pantano como las ultimas dos busquedas, de menos estaba en planeta de clima agradable. - Maldita suerte la mía, de tantos lugares tenía que toparme con una tribu nativa agresiva y para colmo tenían que ser parecidos al perro de mi vecina - dije balbuceando mientras trataba de sacar esa punta de lanza. Pamela me miró mostrando una cara de burla.
- Te lo tienes merecido Joel - dice ella esbozando una sonrisa macabra. - ¿Para que les silbas como a un cachorro? -
- Cierra el pico Pam - dije molesto - Lo que los hizo enfurecer fue el hueso que les lanzaste, hija de puta -
- Jajajaja, ya pasó calmate cabrón -
- Bueno está bien, pasame esas tenazas para sacar ésta mierda - dije molesto - Llama a Molina si ya encontró algo. Espero que ese par lo esté pasando mejor que nosotros. -
Después de aquel rescate del cual terminé como ciborg, de recuperarme y todo eso. Empecé un negocio de cazarecompensas, rescate de personas o búsqueda de artefactos raros alienígenas así como minerales extraños para industrias o millonarios. Recluté a tres de aquel escuadrón, bueno ellos me siguieron ya que los entrené cuando eran mocosos inadaptados busca pleitos. Pamela, Molina y Sveta. Viajamos en una nave hermosa que llamé el Buitre. Cien toneladas de chatarra interestelar poco llamativa pero rápida en las retiradas. Siempre metiéndonos en problemas con piratas o mafias.
- Molina, ya deja de hacerte pajas y contesta - siempre con tacto lo llamaba esta bruja así - contesta engendro mal parido -
- ¿Que sucede? - contesta éste algo agitado. - Cariño te puedo llamar en en cinco minutos, estamos algo ocupados aquí con una bestia enorme -
- ¿Donde se encuentran? - le quité el comunicador a Pam - Si le pasa algo a Sveta te mato - le dije furioso.
- Les mando las coordenadas -
Salimos de inmediato a su encuentro. No estaban lejos en vuelo. Al llegar los vimos en una zanja metidos y los tenía acorralados un animal enorme. Parecido a un oso, pero éste era mas aterradora, de seis patas y del tamaño de un elefante. Su pelaje era gris, sus caninos sobresalían como un jabalí, sus garras eran del largo de mi brazo. Miré alrededor para ver por donde sería mejor atacarle o llamar su atención para que salieran ese par de ahí con vida. Pam señaló un lugar donde hay una gran caída y se puede dar un ataque aereo. Yo sacaría a Molina y Sveta y ella lo distraerá lo suficiente.
-
Molina, ¿me escuchas? Los sacaremos de ese lugar solo que tendrán que correr en cuanto se aparte ese animal. Espero que puedan hacerlo - - Entendido, ¿hacía donde tendremos que correr? - responde aliviado éste.
- hacia la maleza donde estaré con munición por si se vuelve a nosotros, mientras tanto esperen a que Pam dispare una ráfaga a la criatura. - respondí esperando a que funcionara el plan.
Pam me dejó cerca sin que esa cosa se diera cuenta. Después voló hacía el despeñadero, yo corrí para dar a donde estaban mi mujer y ese engendro descuidado. Di la orden y se dio inicio a rescatarlos. Demonios esa cosa no recibió ningún daño, pareciera de metal su piel ya que rebotaban las balas. El animal se volteo hacía el Buitre peor que un perro con rabia. Se sacudía del dolor pero no lograba hacer daño. Esa cosa se ponía cada vez mas enojada. Pam voló bajo para que se alejara de ahí y así pudieran salir a donde yo estaba. Demonios que no se volteé aquel animal, que de hacerlo no habrán partes robóticas que nos puedan poner. De repente empieza la lluvia, no se puede poner peor las cosas y de repente la bestia salta al buitre haciéndolo tambalear. Los chicos llegaron a donde yo estaba, le avisé a Pam que estaban a salvo. Ella hace una maniobra rápida y lanza por la pendiente al animal ese. Ya fuera de peligro desciende en el claro y corremos para entrar en la nave por si volviese, ya dentro le meto una palmada en la nuca a Molina.
- ¿Que pensabas pedazo de animal? - raspé a Molina - Sabes muy bien que debes de avisar cualquier peligro por mínimo que sea éste -
- Lo sé señor, pero ni tiempo nos dio - se soba el golpe que le di - Pero logramos encontrar la gema que buscábamos. -
- Ok, vayan a lavarse y coman algo, yo me encargo de lo demás y Sveta por amor de dios no vuelvan a ponerse así en peligro -
- No vuelve a pasar, lo prometo. Estábamos emocionados de haber encontrado eso que no nos dimos cuenta de la bestia -
- Vale amor, descansa, voy a contactar al cliente para hacer la entrega. - le besé y después me dirijo a la cabina de mando con Pam y volver al Sistema Solar donde veríamos al cliente. - Pam, ve a descansar yo dirijo la nave un rato. Pero antes me puedes traer una cajetilla de cigarros por favor - me asiente y se retira a molestar a Molina. Ese par parecen hermanos, solo se molestan entre si por deporte. Ya encendido mi cigarro le llamo al cliente.
- Señor Tyler, ¿Cómo se encuentra? Ya le tengo su pedido. -
Bueno mis amigos, aquí está la continuación de la historia. Sus comentarios me serian de ayuda para ver que puedo mejorar.
Muchas gracias por leerme!!!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro