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Mis orígenes de escritura

Esto que veréis son mis segundos escritos, de los primeros hablaré más abajo. La empecé a escribir el 10 de septiembre del 2014 y si lo sé fue porque la saqué de un foro de Animal Crossing en el que estaba. Hay cosillas que a lo mejor uno no entiende si nunca ha jugado al juego, pero por lo general la historia es entendible. Intenté pasarlo a novela más profesional pero no salí del primer capítulo, así que ahí se quedó. Este fue uno de mis intentos fallidos.

Si la muestro es porque veréis que yo así no escribo ni de lejos y que ha habido muchísimo progreso desde entonces. Por ejemplo sé formar diálogos. Subo los cinco capítulos que escribí porque eran cortos y así no tengo que estructurar esto en dos partes para que no se haga pesado. El texto no he tocado nada, está tal cual lo subí.


--EL MISTERIO MALIGNO DE LOS KAPPAS--

Capítulo 1: El misterio del capitán.
Llevo casi un mes encerrada en mi casa, no, no soy una antisocial ni nada de eso, es solo que mi vida ya me aburre, quiero tener una aventura emocionante y misteriosa, pero mi vida no es así, los mismos vecinos, el mismo pueblo, los mismos amigos. Y ya me aburre todo eso, por eso he decidido encerrarme en mi casa, para que al salir, todo me parezca más nuevo, bueno, por eso y por Picuet, lo odio, solo habla de músculos, como si no hubiera otra cosa en el mundo, y como lo ignoro y lo trato fatal, cada vez que me ve, me sigue para haber si consigue caerme bien (Estoy segura de que es por otra cosa más). ¡Oh vaya! Que modales tengo, soy Alicia, y no pienso decir la broma que hace Tom Nook con mi nombre y un país maravilloso de un cuento, que me harta ya.

Veréis, como he estado en mi casa mucho tiempo, decidí mirar en mi ordenador, ahí vi un inquietante misterio sobre los Kappas, secuestran niños, he oído en la isla, (Aparte de idioteces, como todos) que varios amigos de gente que me encuentro han desaparecido y nunca los han vuelto a ver, la mayoría, antes de desaparecer, se comportan de una manera extraña, lo curioso es que desaparecen en viajes a la isla o en la isla. Aún recuerdo la historia que me contó aquella chica sobre su amiga:

"¿Sabes? Un día estábamos 4 amigos míos y yo, como solo cabían 4 en la barca del Capitán, a mi mejor amiga le tocó ir sola, pero como yo le tenía mucho cariño, fui con ella. Durante el viaje, el Capitán dijo:

-¡Eh, mirad! ¿qué es eso?

Yo miré en lado contrario hacia donde estaba mi amiga, nunca vi nada, aparte del mar, cada vez que iba a girar la cabeza, el Capitán decía lo mismo otra vez. Durante el viaje, oía como ruidos detrás de mí, y sentía como si el Capitán quisiera distraerme para hacer algo maligno...
Al llegar a la isla, mi otros amigos me dijeron que dónde estaba ella, ahí fue cuando me di cuenta de su ausencia. Fuimos a preguntarle al Capitán, pero nos ignoraba, hasta que dijo:

-¡¿Es que no tenéis otra cosa mejor que hacer?! Iros a jugar y dejadme.

Nunca la volvimos a ver, estoy segura de que le hizo algo, nunca me engañará, sé que tienen intenciones malignas, él y su familia."

Sabiendo esto, sé que aunque vaya con alguien, me podría secuestrar, tienen algo en mente para hacer con los niños, estoy segura. Lo peor, es el alcalde Mario, cuando me mudé a aquí hace 14 meses, era alegre, siempre se relacionaba, y nunca ocultaba nada, pero hace 7 meses cambió. Ya ni habla con nadie, es distante con todos y nunca habla, siempre lo veo en la playa, hablando con nuestro Capitán (Los Kappas nunca nos dicen sus nombres, así que los llamamos así), lo más curioso es que cuando lo conocí casi nunca iba a la isla, odiaba ir, y así como de repente siempre, va todos los días. Cambió así tan de repente, un día estaba alegre y al otro distante, sé que oculta algo, y tengo miedo por eso, muchos niños, antes de desaparecer, según tengo entendido, se comportan así. El Capitán lo secuestrará, y tengo miedo por eso.

No aguanto más, ahora que sé esto sobre los Kappas tengo miedo, no por mí, sino por todos, acabaremos desapareciendo, tengo que frenarlos, ¿no quería una aventura como esta? Pues ha llegado la hora, tras reflexionar sobre esto, voy a asalir de casa y averiguar el porqué de todo esto con mi alcalde. Vamos Alicia, tú puedes, pasaré de todo menos experiencias bonitas, pero es la hora de acabar con estos malditos Kappas.
Pero ahora que me doy cuenta, no puedo hacer esto sola, creo que iré al pueblo de mi mejor amiga Celeste, ella a lo mejor me cree, si hago esto sola, el Capitán podría enterarse y raptarme, muchos han intentado descubrir qué pasa con los niños desaparecidos y de la noche a la mañana han desaparecido.
No sé qué me pasará, no sé cuánto sufriré, no sé cuándo acabaré con esto, pero no me rendiré.

Sé jugar a este "juego" del Capitán, y si me rapta y me mata, alguien encontrará este diario y seguirá con mis progresos, alguien descubrirá el secreto del Capitán, no me detendréis, estúpidos kappas. Ahora, a planear un plan con Celeste, espero que funcione... ¡A la aventura!  



Capítulo 2: El viaje en el tren.
Al fin, abro la puerta, noto como la luz del sol me da en la cara, llevo mucho encerrada, así que es normal que me moleste, bien, mi objetivo ahora será ir a la estación, evitando a Lali, porque seguramente dirá alguna estupidez suya, cosa que hace siempre la muy inútil. Traspaso el puente y me la encuentro, con aires de chula, como no, algún día le meteré una hostia.

-Anda Alicia, creía que nunca te vería fuera de tu casa- Dice la muy odiosa riéndose.

-Y yo creía que nunca te vería sin ese maquillaje de payaso, pero al fin veo lo fea que eres.- Se queda mirándome con una mirada muy rencorosa, pero al fin me dejará en paz.

Una vez he llegado a la puerta de la estación, que por cierto está cerca, cojo el chat (Sí, ese para hablar, ¿tan difícil es saber de qué hablo?) y veo el nombre de Celeste, no está en línea, ¿en serio? No está en línea justo cuando la necesito, genial... Entonces veo que al fin está en línea, y le escribo un mensaje:

"Necesito que abras, es por algo muy importante, luego te cuento"

Una vez enviado me responde con esto:

"Te lo juro, como sea alguna chorrada de las tuyas, paso de escucharte toda tu vida, está abierto, puedes venir ahora mismo, yo estoy en la isla"

Genial, va a la isla, como la secuestren... Veo a Picuet, va a decirme algo, no quiero que me hable, me hará preguntas, Dios, es un pesado, ahora con más prisa quiero entrar a la estación y efectuar mi viaje, librarme de Picuet y contarle todo a Celeste, creo que ella me entenderá, como mejor amiga suya.

Entro a la estación y no está Estasio, ¿es que cuando necesito a alguien nunca está o qué? Entonces lo veo, estaba detrás del cartel ese, le pido que me lleve a Hachiko, y me dice que no tienen sus puertas abiertas. Que extraño, sí Celeste me dijo que estaba abierto, por desgracia está en la isla y no me puede abrir, así que se lo pido a una vecina suya, que pese a que nunca hablamos, siempre es conveniente tenernos por si acaso.

Le pido que me abra las puertas de su estación, y me dice algo que me deja anonadada... "¿Qué? Pero si mis puertas están abiertas, las he visto así hace unos minutos, y no he visto a nadie entrar ahí, y nuestro encargado de la estación Oisatse le ha tomado la hora libre" Esto me desconcierta, ¿quizás alguien no quiere que vaya a Hachiko por algo?

Me abre, y me subo al tren, allí cojo asiente, mientras, ruego para que al llegar no me pase nada malo, y ese estúpido gato Frax o como se llame no me hable, siempre preguntando sobre la vida de los demás, puf, me harta.

Me asiento al final y el muy idiota va y se me acerca, genial, a hacerme preguntas.

-Hola Alicia, que extraño verte por aquí.- Me dice el sosainas.

-Hola Fraaaa... Hola lindo gatito.- No pienso llamarlo por su nombre, que soy capaz de meter la pata.

-Vas a visitar a alguien, ¿verdad? Que raro en ti, como eres una antisocial.- Juro que lo mato.

-Oye, que tengo muchos amigos.-

-Bueno, si para ti un amigo son muchos- Ahora mismo me entran ganas de abrir la ventana y tirarlo por ahí, a ver si lo tiro lejos a otro país- Allá tú, aunque es algo normal en personas antisociales y feas.

Me da a mí que este no sabe lo que es ser cortés, seguro que le falta medio cerebro, fijo.

-¿Adónde vas?- ¿Y a ti que te importa? Me gustaría decirle- Seguro que a algún lugar feo, tus gustos son raros, ¡jajajaja!-

-Creo que abriré la ventana- ¿Pilláis la indirecta?

Los viajes en tren me aburren, todos me ponen muy nerviosa y solo quieren meterse en tu vida, sobre todo este maldito gato que no se corta. Así que me dedico a ver el paisaje, tan tranquilo y relajante, sobre todo me parece me gusta cuando veo a los insectos, pero el tren va rápido, así que no me da tiempo a verlo.

-He escuchado rumores sobre tu pueblo- Me dice -Parece que tu alcalde Mario está muy raro, al igual que el día que lo conocí, sin haberle mirado ni hablado siquiera, me quería evitar, le pregunté a dónde iba, solo me dijo que era un secreto, igual me respondió a más preguntas- Vaya, saber eso me sorprendió, o sea que el alcalde ya ocultaba algo, ¿entonces, para qué esa tapadera de chico alegre y sociable?- Pero no solo él, sino más, y todos son siempre niños, ninguno es adulto, inquietante, ¿no?

Saber esto, me hace pensar, que todos los que desaparecen, se mudan por algo, porque se ven obligados, y entonces fingen ser personas alegres, para evitar sospechas, y así, librarse, bueno, eso creo. Por desgracia, este gato casi nunca habla de sus cosas, solo pregunta sobre lo tuyo, que digo yo que a quién le importa. Pero, esta vez se queda pensativo y a la vez preocupado, mirando a la ventana, y preocupado, creo que sabe que a Mario le va a pasar algo.

-Alicia, me he cagado encima, voy al baño-

¡¿Qué de qué?! Me parece increíble que haya hecho eso, espera, ¡aquí no hay baño! Miro a su asiento, no hay ninguna mancha, o sea que me ha mentido, es algo muy obvio, ¿pero para qué una excusa tan guarra? Ah ya, claro, seguramente ha ido a hacer algo secreto, y no quiere que le haga preguntas, por eso me ha dicho eso, NADIE haría preguntas sobre eso, pero... Ahora sé un poco más, la gente secuestrada se muda por algún motivo, y no quieren que nadie sepa cuál es, los kappas les obligarán a mudarse, y fingen ser de otro carácter para evitar sospechas al inicio.

-Ah sí, Alicia.- Me dice otra vez el gato este.

-¿Qué quieres?- Le pregunto.

-Ten cuidado, con todos, mantente en la oscuridad, y recuerda lo que te he dicho.-

¿Mantenerme en la oscuridad? Será una metáfora, creo. Escucho que la próxiama parada será Hachiko, así que me levanto del asiento y me sitúo en la puerta del tren, miro a mi alrededor, no hay nadie, ni siquiera el gatorrón ese.
El tren se para, maldita sea, alguien me sigue, alguien sabe que estoy tras algo, no quieren que vaya a Hachiko, porque ahí habrá algo que me hará descubrir algún dato sobre este misterio de los kappas, estoy segura.
Comunican que ha habido un problema con las vías y que he de quedarme aquí parada en el tren, van a por.. ¿mí?
Imposible, no le he contado a nadie nada sobre esto, y encima he empezado hoy a descubrir cosas sobre el tema, ¿pero y si han visto las cosas en las que me he metido en internet? Todas eran cosas sobre los kappas, pero no sé ni dónde está el gato, Fran, creo que se llamaba así, se ha ido de la nada, puede que lo sigan ahora.

El tren lleva ya un buen rato (con eso me refiero a mínimo media hora) parado, tardan mucho en arreglar el problema que ha pasado, encima ni han dicho qué problema era, normalmente siempre lo dicen, tengo miedo, pero una vez que haya salido de este tren mi aventura habrá comenzado oficialmente, es más, tendré a una compañera para ayudarme, lo cual me alivia, no estaré sola durante mi aventura.
El tren empieza a moverse poco a poco, no han dicho absolutamente nada de que haya arreglado lo que pasaba, estos ocultan algo, no hay nadie en el tren, solo yo, Fran encima desaparece y el tren se para sin motivo, aquí hay animal encerrado.
Al fin veo Hachiko por la ventana, una salvación para mí, pero noto una presencia detrás mía, no quiero mirar hacia atrás, tengo miedo de que me hagan algo, la puerta se abre y corro hacia afuera de la estación.
Al fin, tras casi dos meses veo Hachiko, es la hora de decírselo todo a Celeste, pero en una cabaña que hicimos en antaño, delante de la playa o en dicha playa sería peligroso, pero, si no me cree por si acaso, no le contaré mucho.

Bueno, ahora es cuando todo empieza, pero, Picuet, está aquí, no tiene motivo alguno para ir a Hachiko, creo que me está siguiendo, pero, ¿dónde estaba en el tren? Todo esto es muy sospechoso, en fin, a seguir con esto.

¡Vamos Alicia, a acabar con los malvados kappas!



Capítulo 3: Comenzamos en Hachiko
Tras llegar a Hachiko, con bastante miedo por cierto, siento que algún kappa me sigue, pero no voy a caer en sus juegos, seguiré con esto...

Bien, Celeste me dijo que fue a la isla hace un buen rato, así que ya debe de haber vuelto, me dirijo a la playa, con el suficiente miedo a retractarme sobre ir, debido a que el Capitán de este pueblo me podría obligar a ir a la isla, y ahí secuestrarme o algo. Ya llego a la playa, a la zona del muelle, veo a Celeste y a la "otra" (No me sé su nombre) y me dirijo a Celeste.

-¿Qué tal en la isla?- Le digo.

-Bien, hemos ido y al llegar nos encontramos con un mueble único y especial, pero no teníamos medallas, así que...- A partir de ahí dejo de escucharla, en cuanto empieza a hablar, no calla nunca.

Me fijo en el Capitán, noto que se me queda observando, con una mirada desconfiada, cuando se percata de que me fijo en este, saca una maliciosa sonrisa acompañada de una mirada de desprecio, yo, por mi parte le hago un gesto indicando que no le temo, este se me queda mirando con mero desprecio y gira la cabeza, creo que intenta decirme algo. Tras esto me dedico a volver a escuchar a Celeste, que parece que está a punto de acabar de hablar.

-...Además, cuando por fin encontramos lo que buscábamos, va ella y se cae, haciendo que huya- Me explica Celeste (Que por cierto, no sé ni qué decía). Entonces, se acerca a mi oído, vigilando que nadie nos escuche y me susurra- Ah sí, ¿qué era eso que me ibas a contar sobre los kappas?

Yo, la guío hacia nuestra "antigua" cabaña, la construimos hace ya siglos, ahí siempre solemos quedar nuestro grupo cuando vamos a Hachiko para hablar con intimidad. Entramos, la habitación es de tamaño medio, sin ninguna sala más, la pared y el suelo son de madera y hay un sofá detrás de cuatro sillas mirando hacia la televisión, también hay una chimenea. Las cortinas están cerradas al igual que las ventanas y le cuento sobre todo esto.

-Me siguen, creo que son los kappas, en el tren, no vi a nadie y sentía la presencia de alguien, además, sé que los kappas se enteran de todo y creo que me siguen, solo sé que estos secuestran a niños, pero antes de hacerlo, se esperan ocho meses, por eso muchos cambian de personalidad durante este tiempo, lo peor, es que los que van a ser secuestrados, se mudan a otro pueblo por alguna razón- Ya no le cuento más, si decide creerme, le seguiré contando más cosas, sino, me callaré.

-Verás Alicia, seguramente, todo esto que te han dicho o visto, es mentira, nadie desaparece por viajar a la isla o yo qué sé, seguramente estos odiarán su vida y por eso se ponen así, y después huyen.-

-Sabes que no hay ninguna prueba que confirme tu teoría, ¿verdad? Entonces, ¿por qué todos desaparecen tras ocho meses, o por qué todos son niños?- Creo que está aliada con los kappas, aparte de que ni me cree y me contradice con cosas incoherentes, parece que los kappas se han enterado rápidamente de lo que intento, sobre todo su Capitán, que parece ser que ya sabía lo que intento.

Me voy de la cabaña, triste, porque el único animal, que podría ayudarme con confianza, ni me cree y ahora he de evitar que sepa mis planes y descubrimientos, no me queda nadie más, estoy sola. Entristecida me voy a la plaza, me gusta sentarme bajo el árbol y que me dé la sombra de este. Veo entonces a... ¡¿Picuet?! ¡¿Qué hace aquí?! Espero que no me haya seguido, pero creo que esa extraña sensación de no estar sola, era por él.

-Hola Alicia, te seguí a escondidas en el tren, verás yo...- Me dice, y se queda ahí, parado y un poco con miedo.

Estoy cabreada, me sigue, intenta descubrir mis secretos metiéndose en mi intimidad, es como, si se creyera que puede meterse en mi vida, le grito todo lo que pienso de este, y le doy tal hostia que se cae al suelo, ni siquiera me dice nada, me mira con rencor y pena, y se larga, alejándose de mí, harta, me dedico a andar por el pueblo, pensando en si rendirme o seguir con esto, ya ni sé qué hacer, nadie me creerá, empiezo a saber bastante de este tema y Celeste se ha aliado con los kappas, además Picuet me ha seguido, pero eso me alivia, saber que ese otro animal en el tren era él.
Sigo mi camino, noto como si todos los vecinos se me quedan mirado, desconfiando de mí, e intentan evitarme, excepto alguien, esa vecina con la que hablé por el chat y me abrió las puertas, esta se choca contra mí, es obvio que lo hace aposta (Que mal saben actuar algunas) y me da una nota disimuladamente, la leo y pone esto:

"Alicia, huye, huye rápido, los vecinos están empezando a hablar mal sobre ti, se creen cosas que ni son verdad, por eso te miran mal, alguien está difundiendo cosas horribles sobre ti, y todo solo por esa intención de acabar con los kappas, huye de aquí y no vuelvas tras volver a Sunshine, tan solo dos vecinos no desconfiamos de ti, somos Harpo y yo, evita todo lo que puedas a los demás vecinos y recuerda no hablar de tu estancia aquí y ahora a NADIE, no busques aliados en este pueblo, ninguno te creerá y nosotros dos, los que confiamos en ti, no podemos ayudarte, vuelve a Sunshine, por favor..."

Bueno, esta nota explica muchas cosas, me quedo pensativa, y entonces me acuerdo de que cuando me pongo pensativa no miro por dónde voy y acabo en a saber dónde, decido mirar por dónde voy y me doy cuenta de que he metido la pata... Estoy justo en las vías del tren, parada, justo cuando voy a salir la barra se cierra evitándome pasar, y veo cómo un tren se acerca y no tiene parada aquí, así que correr hasta que se pare no servirá de nada, puedo morir u otra cosa y adiós a mi investigación, noto que alguien me coge del brazo y me estira, cierro los ojos y cuando los abro veo el tren pasar por mi lado, veo a Harpo.

-Me has salvado, gracias Harpo-

-De nada, je je, deberías tener cuidado por dónde andas.- Me comenta- Me recuerdas a un tal Hiku creo que se llamaba, no sé, era un chico que vivía conmigo en mi antiguo pueblo, cuando lo visité hace ya unos cuantos meses me dijeron que se mudó y tuvo problemas con algo, ay... Era tan despistado.

Un momento, ¿tuvo problemas? quizás sea con los kappas, o, quizás si me habla de este, descubra quién es porque lo conozco.

-Háblame de él Harpo, por favor.- Le pido desinteresadamente.

-Claro, si te apetece, aunque, me recuerda mucho a alguien, a alguien de... ¿tu pueblo quizás?-

¿No será...? No, no puede ser quien creo, he de saberlo, seguro que así descubriré algo más sobre esto, Harpo puede ser una de mis pocas oportunidades para averiguar algo sobre este misterio.  



Capítulo 4: Mi alcalde no es Mario.
Harpo, empieza a hablarme, por cada palabra que dice me quedo más asombrada.

"Bueno Alicia, te contaré, hace ya unos pocos meses, diría que 5, visité mi antiguo pueblo, Sailof, al llegar mis ex vecinos, Sidney, Orestes, Miki y Elvis me recibieron en la parada de autobús, yo, pregunté sobre un chiquillo muy agradable, de unos 8 o 9 años, aunque han pasado ya 3 años y 4 meses que me mudé así que tendrá ya unos casi 13 años el niño, bueno, cuando pregunté por él, me dijeron que se mudó hace ya unos 17 meses, la verdad es que me quedé impresionado, a él le encantaba ese pueblo, cuando pregunté por qué se mudó, ninguno quiso responderme, pero, hubo un caballo que sí, ni le conocía, pero me dijo que este ya estaba antes de que él se mudase, y como nunca cogieron confianzas no le importó decirme el por qué, resulta que antes de mudarse, empezó a tener problemas con sus amigos de toda la vida, estos nunca le apoyaron en su mudanza, cada día iban peor, peleas y más peleas, los demás vecinos veían continuamente eso... A veces hasta le escondían sus cosas para que no se mudara, el día que se fue, me dijo este vecino que él dijo que sus amigos no eran más que unos asquerosos que no le dejan volar y que hará una nueva vida, con otro nombre, en otro pueblo, en una nueva vida, pero cuando dijo esto él me comentó que lo dijo como si estuviera obligado, como si no quisiera, como... una maldición que le han pasado.
Nunca le olvidaré, mejillas coloradas, ojos azules, pelo castaño, solía cambiar de peinado, pero nunca de color, ay... ¿Su nombre? Pues, era, era, era... ¡Ya me acuerdo! Era Hikaru, un nombre japonés que significa luz, esperanza, le quedaba genial, una cosa curiosa es que se parece a tu alcalde Mario, sí, ese de Sunshine, parecen hermanos, a veces incluso se me queda mirando como si estuviera enamorado de mí, ¡ja ja ja ja! Alicia, a veces creo que Mario podría ser..."

En este punto solo mira al cielo, y al suelo a veces, según esto Mario empezó a tener peleas con sus vecinos, alguien aprovechó esto y le pasó su maldición, nunca se quiso ir, pero lo hizo, por eso se cambió el nombre, le obligaron, ¡¿pero quién?! Debió de ser otro niño, cuando vio que Mario empezaba a tener problemas este aprovechó y se libró a los kappas de encima, ¿cómo? haciendo que se fijasen en Mario, seguro que a otros les ha pasado igual, los kappas o cualquier otra cosa hacen que toda su vida empeore, hasta que no tienen más remedio que mudarse y cambiarse de nombre, eso explica lo que me dijo Fran, lo de aquellos niños, a Mario, o sea, a Hikaru, le pasó igual, pero ¿quién le pasó la maldición, cuál era? No sé mucho de esto, la verdad.

-Harpo- Le digo- ¿Tienes algo más que contarme?

-Pues verás, Mario lleva 7 meses así, ¿no? En un mes, si no te das prisa, lo perderás.

-Estoy segura de que tienes algo más que contarme.-

Y sí, así es, suspira y empieza a hablar.

"Otra cosa que me contó aquel caballo, que no sé por qué quiso mantenerse en el anonimato, era que hubo un vecino pintoresco, apenas estuvo en el pueblo, nunca hablaba con nadie y era muy siniestro, escondía algo, y un día o dos antes de irse aquel chaval, se fue él, tan contento parecía cada vez más, sospecho de este, aunque no le haya conocido, a aquel chico le pasó algo, o sea, a Hikaru, alguien planeó su ida, lo hizo todo, con su marcha se marchitaron muchas vidas, los kappas, lo hicieron, seguro que se iban a llevar a ese cabr** y este aprovechó lo de Hikaru e hizo que se lo lleven a él. Nunca tuvo otra opción Alicia, los kappas se lo llevarán... Pero, ¿qué más te voy a contar de Sailof? Nadie quiso hablarme de él excepto aquel caballo, ahora, será mejor que te vayas a Sunshine, antes de que todo empeore"

-¡¡¡Aliciaaaa!!!- Escucho una voz.

Resulta que es Picuet, bueno, me iré con él en el tren, ya que he de irme y está aquí.

-Hola Harpo, Alicia, vámonos, d-e-p-r-i-s-a- Dice Picuet con mucha insistencia, ¿qué ocultará?

Nos despedimos de Harpo, que parece algo triste, a veces incluso lo veía llorar y nos adentramos en la estación, yo, me quedo pensativa, escucho a Picuet decir algo, creo que ha dicho "Nunca volvamos a este pueblo, tu falta de discreción ha hecho que ellos se vuelvan contra nosotros" Lo dice en un tono cabreado, en el tren, se sienta en otra parte algo más lejana del vagón, solo pienso que estoy sola, que este problema solo puedo resolverlo yo, no me queda nadie, nadie más, ni Celeste me cree, solo Harpo podría ayudarme, o aquella del chat, pero no pueden, si sigo con esto moriré, pero, entonces si paro, todo será en vano, voy a luchar, si me rindo, esos capas ganarán el juego, aunque, Picuet creo que ahora me odia, lo peor es que me siento mal, y la situación es la peor como para ponerme a intentar que me perdone, así que he de dejarlo pasar, en serio, ¿por qué cada vez que entro en el tren no hay NADIE? Vale, hasta los de la maquinaría del tren ocultan algo, aunque me comentaron que durante el último mes los viajes son cada vez menores, pero a saber por qué, al menos está Picuet conmigo, y no parece que sea como yo creía que era, me siento algo triste por él...
El tren se para, y se escuchan ruidos, Picuet se me acerca y me hace un gesto señalando que no me levante y que tampoco me mueva, extraño quizás. Tras un buen rato quieto el tren este sigue su curso, ¿por qué se parará? Me resulta curioso, tengo miedo por todo y apenas tengo un mes para salvar a Mario, en unas semanas será otro desaparecido más, ay...
Llegamos a Sunshine, estoy dispuesta a irme a mi casa, Lali pasa por mi lado y me dice:

-¿Qué Alicia? ¿Has ido a otro pueblo para ver si consiguen que dejes de parecer un monstruo?

Antes de abrir la boca y responder escucho la voz de Picuet en un tono cabreado y a la defensiva.

-¿Lo dice la zombie que es tan insegura que necesita meterse con otro porque se ve horrenda y para sentirse mejor ha de llamar fea a Alicia por envidia?- Me sorprende que me haya defendido.

-Tú no te metas Picuet.

Me alegra lo que ha hecho Picuet tras esa hostia tan fuerte que le di en Hachiko. Voy a mi casa y justo en la puerta Picuet me agarra antes de que entre pero está algo inseguro, no creo que sea algo sobre los kappas ni el misterio en el que estoy metida, pero bueno. Aún así lo sigo odiando un poco, todo esto hace sentirme confusa.
Al fin parece dispuesto a hablar, sobre algo bastante importante, ¿qué será ?



Capítulo 5: Las cosas ya empeoran...
Picuet, dispuesto a hablar parece dudoso, entonces se gira y se va en dirección sur, quizás al parque.

Lo dejo, ya ni sé qué hacer, si voy a Sailof, me pillarán y quizás me maten, si sigo con esto seguro que pasa igual, cansada, me voy a mi casa, ya que está aquí delante... Entro, me siento en una silla flor que hay y pienso que vuelvo a estar donde todo esto empezó, donde decidí saber qué pasaba en este mundo, ¡NO! ¡No pienso volver al inicio y rendirme! He de luchar, por lo que decidida salgo a la calle, buscaré a PIcuet, quiero saber qué me quiere decir. Bajo, entonces, justo delante del parque, escucho unos llantos, la voz me parece dulce y suave, como la de Canela, y es de ella, preocupada de acerco a ver qué está pasando, entonces veo a Canela llorar desconsoladamente y a Vesta, Perla y Cabrálex, los únicos amigos que tengo en este pueblo intentando consolarla, pero me llama la atención Picuet, este suspira y me echa miraditas, creo que indicándome que venga hacia donde están.

Al acercarme pregunto que qué está pasando, Canela me dice qué pasa, pero con tanto lloro no comprender qué me dice, así que Cabrálex me lo explica detalladamente pero con una voz algo ronca y dolorosa.

-Bueno Alicia, esto es algo duro, pero has de saberlo... Hoy, Canela ha dicho que nuestro alcalde se ha ido antes de tiempo del trabajo y le ha dicho Canela de una manera alegre que siempre será la mejor secretaria del mundo, este, se va sin decir nada más, como Canela se ha preocupado por todo esto, o sea, su cambio alegre tan repentino al igual que esa ida suya, ha salido a buscarlo, como no lo encontraba hemos estado ayudándola todo el pueblo, pero no lo hemos encontrado, Perla fue a la isla a ver si estaba pero no lo ha visto y Estasio ha dicho lo mismo, por lo que no ha salido del pueblo, así que si no está en Sunshine significa que...- Se calla, algo extraño en él.

-Lo que significa- Dice Vesta- Que ha desaparecido, bueno, todos nos esperábamos que desapareciera, pero el mes que viene, claro, ha desaparecido antes de tiempo, y esto NUNCA ha pasado en ningún caso con los kappas. aquí ocurre algo muy gordo chicos, esto no es normal ,se han llevado a Mario por algo muy fuerte.

Todo esto lo dice en un tono muy bajo, el parque está al lado de la playa, ¿será para que no nos oiga nuestro Capitán?, ¿sospechará ella también de los kappas?
Picuet me coge del brazo y me lleva a la cabaña, perfecta para algo en privado, como no... Me abre la puerta y hace un gesto para que entre, entonces me fijo una cicatriz en su mejilla, desde lueg esta mañana no la tenía, ¿qué le pasó en Hachiko?

-Picuet...-

-Calla, y entra-

Me siento muy intranquila, Mario ha desaparecido y esta vez sin motivo alguno. Picuet comienza a hablar, al fin dice algo este pájaro.

-Bueno, voy a ser directo, sé que ocultas algo, no, no voy a pensar que estás loca ni nada, pero sé que es con los kappas, ¿por qué crees que te seguí en tren? Cuéntamelo, sabes que ya no tienes opción.-

No sé por qué, pero decido contárselo todo, quizás me siento segura con él, quizás...

-Te creo, yo también sospecho de ellos, verás, creo que sé por qué han secuestrado a Mario antes de tiempo, saben que si él sigue aquí te contará todo lo de Sailof, ¿crees que no dudará en hacerlo? Si te cuenta qué pasó en Sailof, todos sus motivos, básicamente, avanzarás en tu investigación, por eso se lo han llevado, no creo que lo maten, supongo que prefieren tenerlo como una especie de cebo.
Si decides tenerme de ayuda, estaré encantado, adiós por ahora.-

-Picuet...- Solo me salen esas palabras, no sé qué más decir-

Se marcha, es increíble, el último animal en pensar que me ayudaría, en el que nunca confié y siempre odié, es mas, lo he tratado fatal, ha sido el único en querer ayudarme, y sin embargo, el primer animal en confiar, y en pensar que me ayudaría ha sido la única en tratarme como una loca, no sé si decir que esto es una ironía u otra cosa.
Voy tras Picuet, y cuando le atrapo está en el ayuntamiento, bueno, en el exterior, y me dice otra cosa, genial, ¿puede empeorar esto?

-Hay otra cosa que he de decirte, esa presencia más en el tren que sentimos, eso de hacer que todos en Hachiko se vuelvan contra ti, y que además sepan los kappas tus progresos es porque creo que alguien te sigue.

-Nos- Le digo.

-¿Cómo que nos?

-Que nos siguen, quiero que me ayudes a acabar con los kappas, eres el único que me queda-

Él acepta, lo cual me alegra, ya que no estoy sola y quizás Picuet sepa qué debemos hacer ahora, aunque bueno, eso espero. Escuchamos una conversación cerca, son Vesta y Aliste, hablan de los kappas, juro que algún día mataré a quien está planeando todo esto. Vesta se percata de nuestra presencia y nos cuenta lo que le estaba diciendo a Aliste, me saltaré la introducción y os comentaré lo que nos dijo, que por cierto, tiene que ver con los kappas, o eso creo...

"Resulta que hace años, yo diría que cientos, antes de que las tortugas evolucionasen a kappas y tras la gran destrucción que acechó este mundo y se encontrase esa piedra que nos concedía la inmortalidad a cambio de no tener nunca hijos. Pues veréis, yo vivía en un pueblo dedicado a las ovejas, al pirncipio éramos 34, pero unas 4 ovejas más se mudaron, entonces algo cambió, cada día desaparecían ovejas, hasta que quedamos unas diez, como no, cada oveja vivía en una casa dedicada a él o ella, había una oveja, Lanolina que nunca nos dejaba entrar en su casa, pero dos vecinos Beelén y Kikolor entraron a su casa por la noche, lo que vieron les dejó traumatizados, utensilios de conina, sangre y de todo, pero entonces vieron la piel de Lanolina, y corrieron a decírselo a los otros siete vecinos. Al día siguiente vimos a Lanolina tan campante la acorralamos y le quitamos toda su lana, pero no era lana, sino un disfraz, era una loba y juró venganza contra todos y que algún día todos sufriríamos por descubrir su secreto y echarla. Al final decidimos abandonar el pueblo, y no volver a vernos, ahora en ese pueblo creo que está la Capital.

Que extraño, ¿será acaso esa loba la que gobierna a los kappas? Puede que, que sepamos esto nos ayude en algún futuro. Al final nos vamos, y Picuet me cuenta que como mejor amigo de nuestro alcalde, le enseñaba todas sus cartas, así que entramos en su casa, que por cierto no sé qué hacía la puerta abierta y vamos a una sala donde tiene una caja fuerte, en la cual, según Picuet guardaba sus cartas, este pone la combinación y vemos MUCHÍSIMAS cartas dentro, así que separamos las cartas en "Vecinos de Sunshine" y "Vecinos de Sailof", tras dividirlas, leemos las de Sailof y nos damos cuenta de que Mario se fue por un motivo anterior al de sus amigos, alguien le pasó ya esa "maldición" y le arruinó la vida, obligándole a marcharse de Sailof , también, nunca contestaba a las cartas que le escribían sus amigos, solo respondió a una o dos cartas en las que parece ser que nunca quiso marcharse pero lo tuvo que hacer porque si no lo hacían, lo mataban, sí, pese a la inmortalidad podemos morir, digamos que solo consta en no crecer nunca, si por ejemplo yo le corto la cabeza a alguien muere, ya que en lo único que cambiamos y conseguimos fue no crecer nunca y morir de viejos.

-Oye Alicia, creo que Mario aún guara otras cartas mucho más secretas en el ayuntamiento, vamos a allí-

Nos dirigimos al ayuntamiento y justo cuando entramos a su despacho, veo una carta en la que pone:

"Lo siento idiota pero...", parece ser que es de quien le pasó la maldición, si la leemos, descubriremos cuál es esa maldición que le pasaron, pero, aún no sé qué hacer.

-Bueno, ¿la vas a leer o no?-

-¿Y si la leo y el que nos persigue le cuenta a los kappas que sabemos en qué consiste todo esto y van a por nosotros?-

-No te preocupes, jamás nos pillaran.-

Decido abrirla y saber quién le hizo todo esto, es la hora, abro el sobre, que por cierto ya está medio abierto y al leer lo que pone, me quedo asombrada.  

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Lo primero que escribí fue un fanfic de Súper Mario. Bueno, en realidad fueron varios. Hablaban de las aventuras de Mario y Luigi junto con amigos que luego se les unían a lo largo de la historia. Tenía como ocho o nueve años cuando decidí empezar a escribir. Por desgracia, y ya me adelanto, los tiré y no los tengo ya. Me arrepiento muchísimo de eso, cuando los leí sabía que no iba a continuar con sus historias, creo que ya iba al insituto y los vi tan malos que no vi ningún motivo para tenerlos ahí guardados.

El caso, para los interesados, la primera historia se basaba en los Korvs (que viene de los Shroobs, que yo los leía como Shorbs), unos alienígenas que deciden invadir el reino Champiñón porque su planeta está muriendo. Clara copia de Mario & Luigi: compañeros en el tiempo. Lo que pasa que yo meto a Bowser de amigui, a Huesitos y hasta la mismísima Daisy.

A Peach no, a esa la secuestran. Mi línea favorita fue «¡Que me secuestran! Suerte que ya estoy acostumbrada».

En la siguiente viajan a un planeta de robots por un accidente en una fiesta de tartas. Donde, cómo no, Wario se cuela. Resulta que debían buscar no sé qué cosas para crear una máquina que los devolviera a su hogar. En la tercera, que ya escribí con once años y noté mejora y decencia, un monstruo los come e intentan salir, esta vez eran solo Mario y Luigi junto con Daisy, transformada en Aurelia 2.0. Ya la última iba sobre el espacio y, la verdad, solo escribí el inicio.

En cuanto a esta, y ya olvidando a Súper Mario, iba a ser una saga de cuatro partes (tetralogía), en una de ellas Alicia acaba metida en un juego donde hay 100 personas y solo puede quedar una viva. Yo inventé Fornite, solo me robaron la idea. También en la segunda o tercera parte, no sé cual, viajaban al pasado because yes.

En cuanto a cómo continuaba esta ni me acuerdo, de hecho no sé qué ponía en el sobre. Creo que era una carta a Mario del antiguo y verdadero alcalde, de por qué lo había dejado todo. Eso o cartas a alguien donde Mario le contaba por qué había abandonado su antiguo pueblo, pero voto más por lo primero. Creo que era que el tipo le explicaba que había renunciado al puesto porque sabía lo que implicaba y que lo vendió a él.

Gracias por haber leído todo esto, vuestro querido gato se despide.

· Mensaje del día: Consuela orquesta rifas occidentales navideñas ante varios intrusos rusos usualemente sancionados.

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