¿Tiempos de calma?
Un beso sobre su mejilla, sus labios, sus párpados, descendiendo sobre su cuello. Tan cálido, tan reconfortador. Tan delicados y llenos de ternura.
Darien abrió la boca escapándose un gemido.
-Hazlo de nuevo, precioso-
El chico abrió los ojos de golpe y se incorporó sobre sus brazos con tensión encontrándose con el rostro confundido de Anubis tras su cabello alborotado.
-¿Qué ocurre?- le preguntó al ver su rostro de pánico.
Darien se llevó la mano a su frente secando el grueso sudor con la respiración algo agitada agitada.
-No, nada- Soltó un suspiro -Es que así era como me decía Horus cada vez que...tú sabes-
-Oh, cachorro, lo siento- Lo atrajo hacia él y besó la coronilla de la cabeza- No quería hacerte pasar por un mal rato-
Darien le respondió el beso pero en la mejilla.
-Olvidémonos de eso ¿Cómo están tus heridas? -
-Aún falta un poco para que desaparezcan y aun duelen pero no es nada que no pueda soportar-
Anubis se había acomodado entre sus piernas recostándolo otra vez sobre las sábanas y restregaba el costado de su rostro contra el cuello del chico bajo él.
-Pero para alguien que esta aun en recuperación estas muy caliente-
-Efecto secundario-
El comentario le hizo soltar una enorme carcajada a Darien.
-Efecto secundario mi trasero-
-Solo quiero estar un rato así contigo, déjame tocarte-
-Eso dijiste la última vez y no llegamos al final-
-¿Tan desesperado estás?- Anubis le regaló una mirada llena de deseo que lo hizo temblar. Darien apartó su rostro sonrojado.
-No digas lo que te convenga chucho-
Lo sintió acercarse a su oreja y morderle el lóbulo para después chuparlo.
-Te prometo que cuando este al 100% te tomaré tan duro que serás tú el que no pueda moverse-
Lo sintió estremecerse bajo él y sonrió complacido.
Un golpe en la puerta lo interrumpió para después pasar una mujer con una bandeja con comida fresca. Ra se había tomado en serio lo de engordar a Darien.
El chico se encontró incómodo en aquella posición. Totalmente desnudo, que seguro Anubis había sido promotor de aquello pues al dormirse aún estaba cubierto, y con el dios abriéndole las piernas con su cuerpo. Si, una posición algo embarazadora.
-Ya puedes irte- El dios chacal le ordenó después de que la comida fuera puesta cerca de ellos viendo el estado de ansiedad de su pareja.
La mujer hizo una reverencia y se alejó, aunque Darien sintió como que su mirada había estado demasiado tiempo sobre ellos. Sus pensamientos se esfumaron cuando un ruido proveniente de su estómago rompió el silencio de la habitación.
-No te burles- le advirtió señalándolo con el dedo que ya le vibraba el pecho.
-Como ordenes, aunque a cambio- se pasó la punta de la lengua por los labios- Aliméntame-
***
Ra se pasó la mano por el cabello mientras sentía las de su súbdito amasar sus hombros ayudándolo a relajarse.
Estudiaba una y otra vez el tablero del cielo y la escena que mostraba lo desconcertaba.
-Y cuando fue que viste esto- dijo en su mente.
-Hace unos momentos- recibió una respuesta de igual forma.
-¿Cómo es que llegamos a esto?-
-No tengo la menor idea, solo vino a mí y me apresure a mostrarte-
Ra sacudió su rostro consternado
-Avísame si vez algo nuevo. Esto es preocupante-
-Lo sé, estaré al pendiente, aunque esto está fuera de mi alcance- La voz sonaba cansada- Solo cerciórate de vigilar el Orbe-
La comunicación mental se cortó y Ra se incorporó enderezando la espalda.
Kalet agarró una copa de agua y se la ofreció. Tomó hasta la última copa y le agradeció al joven alborotando su corto cabello.
-Kalet, ve a buscar a tu maestro, tengo algo importante que decirle- El moreno sólo asintió y salió corriendo de la habitación pasando por al lado del dios mayor que ingresaba a la sala que lo miro de reojo.
-Bastet, a que debo tu visita-
La diosa de cabeza de gato hizo una leve reverencia y cayó al suelo de rodilla, inclinándose
-Oh gran Ra todopoderoso. Mi alma está sucia y manchada- las palabras conmovedoras salían una tras otras de sus labios- Necesito la bendición del Orbe para sanar mi alma de todo mal que la está atormentando-
El dios enarcó una ceja recordando que había algo que aún no había hecho...-
***
Kalet atravesó todo el campo de entrenamiento de dioses menores y demás soldados acercándose a la persona encargada de todo aquello y de paso, su maestro.
La esfinge sentada en sus traseros sobre el borde de un muro miró lo miró que alzaba su cabeza haciéndole señas con la mano. Descendió adoptando su imagen humana y parándose frente a él. Kalet hizo una leve reverencia en respeto
-Maestro Nastet, el Gran Ra solicita su presencia urgentemente-
-Kalet-su voz, siempre tranquila detrás de aquella máscara, que el chico deseaba quitar para ver el rostro de aquella persona que le había enseñado todo lo necesario para defenderse y pelear por los demás. La persona que seguía a Ra en su limitada lista de aquellos a los protegería con su propia carne- Te he dicho que me llames solo Nastet.
El dios menos negó con la cabeza sonrojándose un poco, no importaba cuanto tiempo hubiera pasado con cualquiera de los dos, no era capaz de dirigirse a ellos tan informalmente.
-Lo siento, maestro-
Lo oyó resoplar vencido, esa era una batalla que llevaban ya varios años y aun ninguno se negaba a ceder.
-Vayamos a ver a Ra, debe ser importante para que me haya mandado a buscar tan urgente.
Nastet pasó por el lado de su alumno y lo giró poniéndole una mano en la parte baja de su espalda acariciando el borde de su corto shenti. Kalet no podía negar que se sentía cómodo ante aquel hombre que a pesar de llevarle varios centímetros y mostraba una imagen imponente, al igual que su protector, era tan tierno que conmovía su interior.
Darien acaricio el rsotro dormido de anubis. Después de comer había caído como perro en la siesta, y lo dejo porque lo necesitaba. Aun la diferencia de color entre la piel herida y la bronceada de el era notable.
Sintió golpes en la puerta otra vez y se molesto por la intromisión. En aquel lugar no había un segundo de paz?
La abrió y se encontró con la misma criada.
Disculpe la intromisión. El Todopoderoso Ra requiere su atención
Darien la miro dudoso y cerrando la puerta después de serciorarse que su chacal estaba bien siguió a la criada alnencuentro.
Nota: Hola, se que después de esta última parte me van comer a comentarios pero bienvenidos sean, no se que piensen de Kalet y Nastet, pero bueno, aquí empieza la melcocha, que al final se que les gusta.
Se que cada vez aparecen más personajes y espero que eso no los aturda, ojala los dioses no fueran tantos...Si tienen duden en preguntar
Y antes que se olvide, los comentarios y teorías sobre de quien era descendiente Darien, me impresionaron, hasta mencionaron algunos que no tenía en mente, me lo pasé de lo mejor y veré que puedo hace para no hacerlos sufrir mucho.
Gracias de nuevo por sus comentarios y hermossoossss votos que me alegran la vida.
BESOOSSSS CON NUTELA (mente sucia recordando cierta escena, no debí escribir eso, ya no veo el chocolate de la misma manera)
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