Darien vio el reflejo de la espada brillar sobre él y por segunda vez la vida pasó ante sus ojos, como que se estaba volviendo costumbre, una muy desagradable. No le daba tiempo a retroceder, a escapar, una sola imagen lo invadió demostrándole quien era dueño de todos sus pensamientos.

Otra vez. 

Anubis.

Mencionó su nombre, esperando lo peor, cuando unos brazos rodearon su cintura y lo alzaron esquivando la espada que impactó en la piedra del suelo agrietándola.

Los ojos de Darien se abrieron al sentir el contacto del suave y oscuro pelaje contra su piel. Y ahogando un jadeo de alivio abrazó el grueso cuello que apenas sus brazos cubrían y enterró el rostro. 

Sintió el cuerpo mayor gruñir y tensarse mientras lo sostenía contra él con tanta fuerza que sabría que le dejaría marcas, pero no le importaba, con tal de sentirse protegido.

-No puedo permitir que mueras tan rápido, aunque te pido que no vuelvas a escapar de mí, o no dejaré que Anubis te rescate de nuevo- Ra se incorporó después de haber quitado el hechizo de congelación del dios chacal para que salvara la vida del chico, ya que ni el mismo podía detener a un bennu cuando alzaban su espada contra alguien. Eran seres leales y muy útiles, pero nadie era perfecto.

Anubis retrocedió dos pasos sin parar de gruñir.

-Y guárdame los dientes dios de los muertos, o te los haré perder-

Darien sintió como el cuerpo del dios ocultaba sus muestras de agresividad pero no se calmaba. Mantenía la guardia arriba. ¿Tan peligroso era Ra?

¿Qué le harás? - le pregunto con voz ronca.

-Por el momento, intentar saber quién es, si se dejara interrogar, después ya pensaré en un mejor método para lidiar con la que ha armado entre ustedes tres-

-Horus fue el que intervino-

-Tú te involucraste con un humano- con eso lo silenció- No estás tan libre de culpa. Conoces nuestras reglas-

Anubis bajó la cabeza reprimiendo su respuesta. El conocía las consecuencias de sus actos y aun así había estado cegado como para comprenderlo a tiempo. Gracias a su descontrolado comportamiento, el chico en sus brazos no paraba de estar en peligro. Pero era tan egoísta como para no dejarlo ir, y menos ahora que lo había recuperado.

Ra se giró dándole la espalda haciendo una seña hacia Horus. Se escuchó un chasquido proveniente de su cuello que hasta a la pareja le dolió y el cuerpo del alado cayo inerte sobre el agua.

Dos bennu aparecieron a su alrededor y lo cargaron cada uno por un brazo.

-Confínenlo en su templo hasta que me acuerde. Destruir el templo del manantial sagrado es una blasfemia y debe cobrarse un castigo-

Los tres se desvanecieron dejando que el agua los tragara lentamente.

En cuanto a ti, Anubis- Ra volvió su atención hacia él.

-Nooo- El grito de Darien hizo eco en las paredes mientras se abrazaba más a su protector y amenazaba con sus ojos al regente.

Le tenía terror, pero todo menos que lo separaran de nuevo de Anubis. No otra vez. Como si tenía que luchar con uñas y garras, no dejaría que lo apartaran de su lado.

-Veo que alguien te tiene mucho aprecio- 

El chacal se encontró reconfortado ante la acción del humano. Por estar con él era capaz de enfrentar a Ra, algo impensable para su persona. Restregó el hocico sobre su cabeza reconfortándolo, dándole a entender que había entendido su acción, pero no dejaría que siguiera. Si enfadaba al Todopoderoso su vida no tendría que peligrar ya que no le daría tiempo ni a pensárselo.

Ra se deleitó con la escena antes de dar dos aplausos y volver a sonreír. Ese día estaba de buen humor. Suerte para ellos.

-Bueno dejemos esta incómoda atmósfera y vayamos a un lugar más acogedor, dejemos el castigo para después-

-Síganme- y caminó hacia la entrada donde los escombros se corrían hacia los lados como si tuvieran vida propia.

La pareja se puso tensa.

-Síganme- repitió serio al no sentir nadie tras él.

Darien y Anubis dudaron un momento y el dios avanzó acomodándolo entre sus brazos.
-Puedes bajarme. Ya puedo caminar- le dijo contra su pelaje.

-No- La respuesta fue cortante aunque cálida.

-Gracias- A pesar de todo lo que le había ocurrido, se sentía feliz de que el dios estuviera a su lado.

Nota: ¿Qué creen que tiene en mente Ra?
Quiero conocer las diversas y maravillosas teorías que se les ocurren. Ya hay algunas en los comentarios de otros temas que WOW.
Gracias por leer y votar de antemano. besos