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—Mamá, ¿podrías dejar de atormentar a nuestro Omega?
Jungkook y Junghyun parecían lobos rodeando a su presa, dando vueltas al rededor de su madre y de Jimin. Esta lo tenía sentado a su lado mientras le mostraba fotos de sus dos hijos cuando eran pequeños.
—¡Hyunnie en la bañera! —Gritó Jimin, señalando la fotografia del Alfa rubio de cuatro años metido en una bañera azul con agua, jugando con sus patitos de hule mientras Jungkook estaba desnudo, parado detrás, llorando.
Junghyun se llevó una mano al rostro para tapar su evidente vergüenza.
—¡Koo detrás sin ropa! —Jimin empezó a reir tapando su boca.
—¡Minnie! —Jungkook trató de quitarle la fotografia sin éxito.
—A ver. —Mingseon corrió al lado de Jimin para ver la fotografía, cualquier cosa seria buena para después avergonzar a esos Alfas, mientras Junghyun se ponía rojo de la vergüenza al ver al curioso de su "suegro".
—Ese día Kook lloraba porque no se quería bañar. —Contó la mujer sonriendo, recordando con nostalgia a sus pequeños,.
—Nunca le ha gustado el agua, es un cerdo. —Junghyun vio la oportunidad de no ser el único avergonzado.
—¡Mamá, guarda eso! —Pidió Jungkook de nuevo sin éxito, pues la mujer había sacado más fotografias. Taehyung y los demás se acercaron detrás de la Omega y de Jimin para ver ese gran espectáculo.
—¿Qué día es hoy? ¿El de exponer a los Alfas Jeon? —Refunfuñó Jungkook, tratando de alcanzar las fotografias, pero Jimin fue más rápido.
—Está fue el día que Junghyun llegó llorando a casa del Kinder porque una compañerita omega lo mordió. Dijo que le quería hacer la marca como su mami a su otra mami. —En la fotografia estaba el alfa de unos 5 años llorando, sujetando su brazo mientras Jungkook se reía de él.
—Mamá, por favor —Pidió Junghyun en vano. Jimin parecía muy divertido viendo a sus Alfitas de pequeños.
—Esta fue el día de su presentación. —Chilló emocionada la mujer.
Yoongi y Namjoon se apresuraron a ver las fotografías donde los Alfas aparecían ambos postrados en cama, con paños en la frente y sus mejillas muy rojas; Junghyun llorando por el dolor y Jungkook dormido. Tenían quince años.
—Papá tenía la mala costumbre de tomar foto de absolutamente todo. —Añadió Jungkook, arrebatando esas fotos "vergonzosas" de las manos de Namjoon quien se quejó porque quería seguir viendo.
De pronto un flash alumbro toda la sala de estar y todos voltearon a ver al Alfa que estaba parado en el umbral con su teléfono celular en la mano. Era alto, pelinegro, con algunas sombras de canas y blanco bigote.
—Aún tengo la costumbre, hijo.
El Alfa sonrió, arrugando la nariz como lo hacían sus hijos.
—¡Papá!
El Alfa se acercó a saludar a todos y se detuvo frente a Jimin un momento, analizando al omega quien se tensó, estaba frente a una versión más madura de Jungkook y Junghyun, pero bastante más intimidante, daba miedo. Todo en la sala de estar era silencio.
—¿Así que tú eres el dichoso Park Jimin?
Su rostro era muy serio y las aletas de su nariz subían y bajaban analizando el aroma que Jimin desprendía, su voz salió bruscamente casi golpeada.
—No Park Jimin, no, Jeon Jimin, pero gusta más Minnie. —La voz del pequeño omega salió firme y segura a pesar del lobo intimidante que tenía frente a él.
El hombre de inmediato comenzó a reír con una estruendosa carcajada, lo jaló del brazo para hacerlo parar y abrazarlo. Todos también comenzaron a reír.
—Me gusta que tengas actitud y carácter, Minnie, estoy feliz de conocerte. ¿Te tratan bien tus Alfas? —En el fondo de la estancia se oyó un "Noo" de parte de Mingseon. Y luego un "ay" porque el sacerdote le había pellizcado.
—¿Te alimentan bien? ¿Te llevan al médico regularmente? Eres el Omega Luna y debes de gozar de perfecta salud.
Él apretaba a un abochornado Jimin de mejillas rojas mientras asentía.
—Mentira, no lo cuidan bien. —Murmuró Mingseon y Taehyung comenzó a reír por lo bajo.
—Bienvenido a la Familia Jeon, muchacho. —Dijo antes de soltarlo.
—Gracias, Papá Alfa grande.
—Awwww. —Fue el murmullo general que recorrió el lugar, mientras Jungkook y Junghyun estaban de brazos cruzados enojados por que Jimin estaba acaparado por todos y no les permitían un momento con él.
El timbre sonó y Nana corrió a abrir la puerta.
—¿Vendrá alguien más? —Preguntó Junghyun mirando a su madre.
Pero no fue necesaria una respuesta, pues un aroma bastante familiar les llegó a la nariz, hacía años que no sentían ese aroma: Lavanda y limón.
Una dama muy elegante y hermosa entró, haciendo sonar sus tacones por el piso de mármol pulido, llevaba varias bolsas de compras de marcas caras. Las dejó sobre la alfombra y corrió rápido a lanzarse a los brazos de los Alfas, primero a Junghyun y después a Jungkook, comenzó a dejarles besos por todo el rostro mientras ellos hacían muecas de asco
De pronto un gruñido proveniente del interior de Jimin hizo a todos sobresaltar. El omega miraba la escena muy enojado.
—M-minnie, tranquilo. —Murmuró Jungkook, acercándose para abrazarlo.
—Minnie celoso. —Chilló, cruzando sus brazos y haciendo un puchero
Otro "Awwwww" general recorrió la estancia.
De inmediato Junjn fue arrancado de los brazos de su Alfa, la chica que era otra omega lo había jalado.
—¿Tú eres Minnie?
El omega asintió a punto de ponerse a la defensiva.
Tenía goma de mascar en su bolsillo por si a caso.
—Si eres tan adorable como los idiotas te describieron. —Chilló la chica, apretando repentinamente a Jimin que estaba a punto de asfisiarse de la presión.
—Basta, Adora, lo vas destripar.
—Tenía tantas ganas de conocerte, Jimin, mis hermanos me han hablado mucho de ti, es de lo único que hablan. —Bajó la voz para proseguir mientras apretaba sus mejillas, que a estas alturas ya debían estar rojas de tanto apretón—. Antes de ti, no recibía llamadas ni mensajes de esos dos. —Acabó en un Susurro
Jimin arrugó el ceño, jamás había escuchado que sus Alfas tuvieran una hermana, es más sus Alfas jamás le habían hablado de su familia, quizá porque su rutina se iba de juego en juego, paseos y diversiones, no tenían tiempo de hablar cosas profundas e importantes. Se sintió mal por ello, de inmediato deseo no ser un Omega tonto y raro, sino un omega normal para sus Alfas.
Jungkook y Junghyun pudieron percibir el aroma agrio y decaído de Jimin, pero antes de que dijeran algo, Adora ya lo había tomado de la mano y lo arrastró con ella.
—Mira, bebé, te traje muchas cosas. —Le entregó las bolsas a Jimin, quien abrumado las recibió.
—Esta loción de Coco Chanel es exquisita, le pregunte tu aroma natural a los bobos y me dijeron que era a Algodón de azúcar y cerezas, así que esta contrastará perfecto, ah, este es un abrigo de Prada, te quedará precioso y esto de aquí son unos lindas conjuntos sexys para tus Alfas. ¡Mira este trae orejitas de osito!
Jimin sacó una prenda de la bolsa y la examinó en el aire, era un conjunto de lencería atrevido, traía un pompóm en la parte de atrás.
—¿Minnie poner eso?
Junghyun y Jungkook querían matar a su hermana.
Virgen de la capilla, Padre nuestro que estas en el cielo... —Se podía escuchar al sacerdote Kim.
—Minnie, guarda eso, bebé. —Pidió Junghyun acercándose a quitarle la bolsa, pero Jimin ya había tomado otro de orejas de conejo y colita esponjosa.
—Mira, Tae Tae, este para ti, trae orejas de gatito como GiGi.
Los colores en el rostro de Taehyung dejaron en evidencia al pobre Omega, quien ni siquiera se atrevió a mirar a Yoongi que estaba a tres personas de él, entre Namjoon y Jin quienes reían por lo bajo mientras el alfa tosía con su rostro rojo.
Mientras Hoseok no dejaba de admirar a la hermana de sus Amigos.
—Bien, suficiente por ahora, Adora, luego le muestras todo lo demás, vamos a ir a comer, Minnie debe comer a sus horas y ya nos pasamos dos. —Jungkook arrebató las prendas a Junghyun, quien muerió por la curiosidad, ya había sacado otra color rosita que traía medias de maya. Jungkook también se había imaginado a su Jimin con una de esas, pero era algo que iban a discutir en privado.
—Dame eso, amorcito. —Pidió, Jimin de mala gana entregó el de conejito.
El almuerzo comenzó a ser servido por Sunhee, Adora, Nana y Mingseon mientras todos los demás charlaban animadamente en la mesa de afuera, todos los regalos de Jimin fueron trasladados adentro.
—A él le gusta sin la cáscara.
—La cáscara trae vitaminas, dejalas, beta necio.
—Omega tonta, no sabes lo que le gusta a Minnie. —Refunfuñó Mingseon mientras le arrebataba la fruta de Jimin a Nana.
La mujer negó rendida.
—Son tal para cual. —Jungkook rodó sus ojos, escuchando a los dos discutir.
—Yo sé muy bien lo que le gusta a mi muchacho.
—¿Tu muchacho? En todo caso es Mí muchacho porque vive aquí conmigo.
La comida fue muy amena, el Alfa padre preguntaba muchas cosas a Jimin y él respondía sin dejar de sonreír.
Jimin jamás pensó que iba a estar rodeado de muchas personas como ellos, pues de pasar a estar solo en aquel frío rincón, paso a estar sentado en medio de sus dos Alfas y rodeado de muchas personas que ahora eran su familia.
—Jungkook, Junghyun, podemos hablar un momento, es que debo decirles esto antes de irme y es urgente.
Namjoon se acercó a los Alfas, quienes habían estado dando de comer postre a Jimin en la boca.
—Vayan, cariños, le daré yo el postre a Minnie. —Sunhee amablemente se ofreció y los Alfas haciendo una reverencia se levantaron para seguir a Namjoon y a Yoongi.
Caminaron hasta adentro para poder hablar en privado y, en cuanto la puerta se cerró, todo se volvió serio por un instante.
—¿Qué es?
—Estuve investigando y según el hombre que contrató IU para llevarse a Minnie, sus planes eran venderlo al medio oriente como esclavo a los Turcos.
Los Alfas se tensaron, Junghyun apretó su mandibula y Jungkook sus manos.
—Maldita, perra... me parece que habrá un ligero cambio de planes y la que se va a convertir en esclava será ella. Iremos a darle una linda despedida y luego de eso véndela por un muy buen precio.
—¿Qué? pero... Jungkook.
—Oíste a mi hermano, Namjoon, haz lo que Ordenó. Yoongi, eres policía, haz todo para que nadie haga averiguaciones cuando esa maldita ya no esté, desliganos de todo eso.
El azabache simplemente asintió, él no era un policía corrupto y no lo sería porque sólo estaba ayudando a sus amigos a vengarse de una injusticia, ¿no? Era verdad que la justicia por mano propia no está bien aplicada, pero en casos exentos era necesaria.
—¿Y el hombre que retuvo a Minnie?
—Está aún en la estación. —Respondió Yoongi.
Jungkook asintió y con una rápida mirada a su hermano, quien también asintió, se pusieron de acuerdo.
—Con el dinero que te den por ella será suficiente para que la pequeña hermana del secuestrador de Minnie pueda realizarse la operación, y asegúrate que sea bastante alto el precio. Así que déjalo ir.
—Por supuesto. —Namjoon asintió.
Por ahora tenían una cita con IU, debían darle una muestra de su afecto al estilo hermanos Jeon.
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