JiHyun había pasado toda la noche conduciendo sin saber a dónde se dirigía, la dirección nueva que IU le había dado se encontraba lejos. Afortunadamente había logrado detener la fiebre del omega, quien iba dormido en el asiento de atrás, cubierto con una manta.

Al llegar a esa casa, abrió lento la puerta en estado alerta, pero efectivamente, no había nadie ahí como le había indicado IU.

Dejó a Jimin suavemente sobre un sofá viejo y se sentó a abrir la bolsa con medicamentos que había comprado.

Jimin se removió un poco cuando Jihyun le limpió un poco el rostro, lentamente sus ojos se abrieron y sus pupilas se fueron acostumbrando a la penumbra del lugar.

Trató de respirar, pero su pecho aún le dolía, el aroma de sus alfas ya no lo tenía en su suéter e incluso sentía que cada vez estaba más lejos de ellos. Con casi cuatro días cumpliéndose desde que estaba lejos de ellos, su omega lobo ya no sentía muy fuerte la conexión con sus Alfas lobos.

—Al fin abres los ojos, ven aquí y bebe agua, por lo menos ayudará a que no te sigas deshidratando.

—¿A-alfitas?

—No, no soy tu Alfa... debes descansar, si te mueres aquí será conveniente para ella, pero no para mi. Me llevarán a prisión y no podré ver nunca más a mi pequeña, Jihann.

Jimin bebió el agua que el beta le ofrecía a sorbos lentos, sintió como le dolía la garganta al paso del agua. Había pasado una noche muy mala debido a la fiebre, pero supo que los cuidados de JiHyun lo habían mantenido a salvo.

Pero en ese momento lo único que deseaba era estar al lado de sus Alfas, su aroma a chocolate y Galleta los añoraba mucho.

—Extraño a Alfitas. —Murmuró haciéndose una bolita en el sofa.

JiHyun volvió a arroparlo y se acomodó a su lado.

—¿Cuento para Minnie? —Preguntó mirando con ilusión al beta. El hombre suspiró y se sentó para poder contarle la historia a Jimin.

—Había una vez... En un pueblo vivía un viejo llamado Guepetto...

.　 . • ☆ . ° .• °:. *₊

—Malas noticias, no sé como le hace ese hombre, pero al llegar a la casa ya no estaba ahí y si hay rastro de que estuvieron ahí, pues encontramos varios envoltorios de chocolates y galletas. —Habló Yoongi, mirando preocupado a los Alfas.

Junghyun dió un fuerte golpe en la mesa ¿Cómo demonios les llevaba ventaja?

—Alguien les informa nuestros movimientos, eso es seguro, Namjoon. Hay alguien que sabe lo que hacemos y cómo estamos organizados.

Namjoon asintió.

Jungkook suspiró, la noche anterior, Suran había entrado a la oficina y le había dicho muchas cosas, entre ellas, le dijo que mantuviera los ojos abiertos y alerta, que no se confiara de IU.

Él no confiaba en ella, aún no entendía cómo se habían dejado manejar y manipular por ella.

—No quería decirles esto, Jungkook, pero mandé a analizar el café que IU les estaba dando y descubrí que les estaba poniendo unas gotas que ayudan a desvanecer la conexión entre Hombre y Alfa. Los estaba dominando por completo. —Explicó Yoongi, dejando unas hojas sobre el escritorio.

—¿Qué dices?

—Lo que oyen, Taehyung se dio cuenta de la manera en que actuaban y me lo advirtió. También lo vimos con nuestros propios ojos, lograba manipularlos.

Tanto Junghyun como Jungkook se sintieron asqueados. ¿Cómo habían bajado así la guardia?

Pero Jungkook tenía una sola razón para no despedirla, su lobo se lo advertia.

—Jungkook, ¿sientes el lazo con Minnie? —Se acercó Junghyun a su hermano. Había llegado a la oficina a primera hora de la mañana y su hermano ahora seencontraba terminando de hacer un trato con un cliente.

—Junghyun. es raro, pero la conexión se hace débil.

—¿Están mejor? —Preguntó Hobi pasando su mano frente a sus ojos varias veces haciendo que parpadearan varias veces.

—¿Namjoon, hay alguna novedad? —Preguntó Jungkook, moviendo su cuello de un lado hacia el otro, provocando que hiciera ruido.

—Sí, Jungkook, seguimos las pistas de las cámaras de seguridad de los alrededores y en una secuencia de fotos tomadas por las cámaras se ve a Minnie correr tras el globo y luego en otra se ve subir con alguien a un auto. Debe ser alguien conocido o supo como acercarse, pues Minnie se ve feliz de subir.

Jungkook y Junghyun se miraron mutuamente preocupados.

—¡Por favor, Namjoon, debe haber algo más!

Namjoon asintió.

—Rastreamos las placas del auto y son de un tipo llamado JiHyun, es un criminal de poca monta, relacionado en robos, es más que todo un carterista, jamás estuvo involucrado en un secuestro y lo más raro es que no se a comunicado para pedir dinero, estoy seguro de que sea quien sea la persona que está detrás de todo esto, no quiere dinero, solo hacerle daño a su omega. Yoongi y yo ya enviamos a nuestros equipos a registrar la casa donde vive ese tipo.

Junghyun suspiró totalmente exhausto, estaban ya desesperados por encontrar a Jimin y quizá no lo habían notado antes, pero su lazo indicaba que Jimin se comenzaba a sentir mal.

¿Pero como Diablos no lo habían notado antes? ¿A caso estaban dormidos?

Los alfas asintieron y se pusieron a hablar con Namjoon y Hoseok profundamente sobre el plan.

Nadie se dio cuenta, pero Jungkook había empapado un pañuelo con un poco de café para analizarlo en el laboratorio de la estación. Si era un tipo de veneno, esa mujer estaba cometiendo un crimen.

—Una pregunta... ¿Por qué dejan que su secretaria les diga qué hacer y que no? Eso es algo raro, ¿sabían?

Junghyun y Jungkook miraban a sus amigos sin entender nada. ¿De qué hablaban?

—¿A qué te refieres?

—Creo que Jin se refiere a que se toma demasiadas atribuciones con ustedes. —Aclaró Namjoon ante el desconcierto de sus amigos.

—Tienen razón, nos ocuparemos de eso ahora mismo. Voy a redactar yo mismo la carta de despido de IU.

—Y-yo necesito agua no me siento nada bien. —Jungkook trató de levantarse, pero fue como si algo no lo dejara levantarse.

Los demás Alfas y el omega trataron de ayudarlo preocupados.

—No me siento bien... ¡M-minnie no está bien!

—Lo sé, yo también puedo sentirlo... siento su angustia. Pero debemos transmitirle tranquilidad, si nosotros estamos fuertes, él lo estará el doble. —Indico Junghyun también, comenzando a sentir algo feo en su interior.

—Voy a matar al bastardo que le está haciendo daño. —Gruñó Jungkook con sus puños apretados.

—Vamos a hacerlo pedacitos.

Una llamada telefónica Interrumpió el momento crítico que estaban viviendo los Alfas. Namjoon se apresuró a contestar su teléfono.

—¿Si? Diga —Se levantó para salir de la oficina a hablar, pero luego en menos de 2 minutos volvió con noticias—. Junghyun, Jungkook, tenemos más información, volvieron a dar con otra casa en donde seguramente tiene a Minnie, ahora mismo iremos para allá Yoongi y yo.

—¡Mierda! Tráelo, Namjoon, trae a Minnie.

Cuando Yoongi y Namjoon se retiraron para seguir con los operativos, solo Hobi y Jin se quedaron con ellos. Jin se encargo de mandar la bote de basura la comida que IU les llevaba a los Alfas.