—Entonces Mingseon, si el padre de Minnie vuelve a llegar, avísanos para hacer algo, si bien no es él quien se lo llevó, podemos evitar que le quiera hacer daño de nuevo.

Mingseon asintió mientras Taehyung analizaba a los alfas. A parte de cansados por no dormir estaban comportándose raros, sonreían mucho con esa omega y ellos no eran además de dejarse dar órdenes por ella.

—¿Quieren algo más de comer queridos? —Preguntó La omega sonriendo a los Alfas.

—No IU gracias eres muy amable. —Habló Junghyun sin dejar de sonreír como bobo.

Eso no era nada normal.

"Humanos estúpidos, no beban el café, nos está envenenando"

Repitió por quinta o sexta vez el lobo de Junghyun mientras razguñaba furioso. Había logrado dormir al Humano y, si seguían bebiendo café, lograría dormir a los alfas de cada uno y después manejarlos a su antojo.

—¿Por qué les dice queridos? —Murmuró Mingseon bajito para que sólo Taehyung lo escuchara.

—No lo sé, pero es raro. —Susurró también el omega.

—Por cierto, queridos, afuera están Namjoon, Jin, Hoseok y Yoongi, esperando verlos. —Anunció la omega.

—Gracias, IU, hazlos pasar.

Taehyung abrió sus ojos. Yoongi estaba afuera, era su oportunidad.

—Si me permiten, iré al baño. —Habló de pronto el omega, saliendo de ahí lo más rápido que pudo y suspirando largo cuando salió.

El ambiente adentro era feo, horrible y pesado. El aura negra que desprendia esa mujer le provocaba náuseas, ella era mala, una bruja. Lo supo en cuando puso un pie en la oficina. Debía decirle a Yoongi que estaba manipulando a los alfas.

—¡Yoongi!

El nombrado levantó la vista cuando escuchó su nombre y sonrió al ver a Taehyung, Jin lo mirá analizando.

—Hey yo te conozco... eres el a...

—Jin, es Kim Taehyung, el Alfa a quien asustaste ayer.

Jin arrugó en ceño mirando a Taehyung quien no habia visto a Jin y se puso nervioso. ¡Lo iban a descubrir!

—El es Jin, mi hermano mayor.

—Hola, mucho gusto, eres un "Alfa" muy agradable. —Respondió Jin mirando profundamente a Taehyung, no traía olor a Omega como la otra vez, ahora olía a Alfa, pero estaba seguro era un Omega y su hermano estaba equivocado

Taehyung saludó correspondiendo a Jin.

—¿A mí no me van a presentar? —Hoseok se levantó para saludar también con un gran sonrisa al otro Alfa—. Soy Hoseok.

—Mucho gusto, Hoseok.—Sonrió Taehyung

El azabache tomó del brazo a Taehyung y lo alejó un poco de los demás.

—Taehyung, ¿Por qué te fuiste ayer sin avisarme?

El castaño mordió su labio inferior nerviosamente, mirando hacia otro lado.

—Yoongi, ahora no, ahora debo decirte algo muy importante... esa mujer la omega que esta con los Jeon, creo que los está envenenando.

Yoongi arrugó el ceño. ¿Envenenando? Era cierto que IU era como un molesto grano en el trasero, pero ¿Sería capaz de hacer eso?

—¿Con que fin lo haría, Tae? —El castaño negó rápido y encogió sus hombros.

—No lo sé, Yoongi, pero es solo con que veas el comportamiento de los Alfas, se dejan manejar por ella como dos bizarras marionetas. Ellos no son así y eso que llevo poco tiempo de conocerlos

Yoongi asintió, debía ver eso, si Taehyung se lo decía era por algo e iba a confiar en él.

La puerta se volvió a abrir y Mingseon salió.

—Vamos, Taehyung.

El castaño asintió y se despidió con la mano de los demás.

—Adiós, Yoongi. —Dijo bajito.

El azabache se despidió también con un gesto de la mano.

—T-taehyung

Pero el castaño ya no lo escuchó, pues acababa de bajar por el ascensor.

—Los alfas quieren verlos. —Anunció IU parada en la puerta de la oficina.

Los cuatro comenzaron a entrar y se sentaron frente a ellos, Hoseok se demoró saludando a sus amigos.

—IU, podrías dejarnos a solas, por favor —pidió Namjoon.

—Oh, aquí estoy bien, no te preocupes. ¿Verdad, Kook?

Jungkook asintió sin brillo en sus ojos.

Yoongi miraba todo aquello recordando las palabras de Taehyung.

—Junghyun, ¿podrías ir conmigo afuera? Traje algo que quizá te interese, es un objeto de colección de motos.

Habló Yoongi alto, más alto de lo normal.

Junghyun se iba a levantar, pero la mano de IU lo detuvo.

—Hyun, querido, estás muy cansado, deberías ir después.

—Sí, IU. —Murmuró

Yoobgi se levanto y tomó a IU del brazo.

—IU, queremos hablar con ellos cosas de hombres, ¿entiendes? Como conquistar Omegas, como hacerlo la primera vez... ¡C-o-s-a-s-d-e-h-o-m-b-r-e-s! —Deletreó lentamente, sacando a IU de la oficina y cerrando la puerta.

Namjoon y los demás miraron estupefactos la actitud de Yoongi.

—¿No se dan cuenta? —Les pregunta enojado a los tres.

Tomó el café que aún quedaba en las tazas y lo olió, luego lo arrojó a las plantitas que habían adentro.

—IU los está envenenando.

Todos quedaron con la boca abierta, menos Junghyun y Jungkook, quienes parecían estar en otro mundo.

—Así, en ese estado, no puedo explicarles lo que está  pasando. —Añadió Namjoon.

Yoongi se levantó y comenzó a buscar entre las gavetas de los escritorios, en las cajas, atrás en el cuarto hasta que encontró un suéter, lo olfateó y sonrió, era de Jimin, así que se lo puso en las narices a ambos alfas, el aroma a cerezas y algodón de azúcar pareció despertar a aquellos dos alfas de un pesado letargo.

.　 . • ☆ . ° .• °:. *₊

—¡Minnie Quiere Rameeen!

—P-pero si acabas de comer...

—¡Pero Minnie tiene más hambre!

—Aaahg, está bien, compraré más ramen y pizza.

—¿Y helado?

—Está bien, helado.

—¿de chocolatito?

—Sí, sí, de chocolatito... digo de chocolate.

JiHyun consentía mucho a Jimin. Hacía medio que habían llegado a la nueva casa que IU le dio y también se había deshecho del auto anterior para que no lo fueran a seguir por las placas.

La fiebre del omega había desaparecido, pero eso no quería decir que todo estaba bien. Debía estar alerta.

Como todos los días, dejaba a Jimin por un par de horas para ir al hospital a ver a su hermanita, nada cambiaba, todo era igual con ella porque sin ese trasplante nada podría cambiar.

—Minnie, aquí esta la pizza, y el ramen, mocoso, también el helado de chocolatito... de chocolate y galleta.

El omega salió de la piscina en donde estaba jugando y se sentó a comer, si sus Alfitas vieran aquello, seguramente lo iban a regañar por comer mucha comida chatarra, pero es que a Jimin le encantaba.

—¿Y como está hermanita? —Preguntó, llenándose la boca de la rica masa caliente con queso.

—Igual que todos los días, Mocoso, muriendo lentamente.

A JiHyun se le empañaron sus ojos de finas gotas saladas, Jimin se las limpió con uno de sus deditos.

—No llorar, si me llevas con Alfitas, ellos pueden ayudarte. Son muy buenos.

—No es tan sencillo, mocoso, si te llevo me van a meter a prisión por traerte aquí, además ella...

Cada vez que JiHyun la mencionaba a "ella" se quedaba callado, pero Jimin sabía perfectamente quien era ella, la omega fea que le quería quitar a sus Alfas.

Es más, estaba sintiendo cada vez menos patente el aroma de sus Alfas en su ropa, su lobo omega se había  arrinconado, llevaba días sin moverse.

Jimin sabía que pronto iba a necesitar de la cercanía de sus Alfas, hace un día que había comenzado a sentirse mal, pero Jimin trataba de mantenerse fuerte.