Parte 22 La maldición de Xuan Wu
Xuan Wu era una Deidad venerada principalmente entre los nobles y personas del clan imperial, aunque también era popular entre la gente común. En la capital había muchas estatuas en la calles, pero el santuario principal estaba en los jardines del palacio del Emperador.
Por eso su santuario era diferente a las demás deidades. Estaba bien estructurado y cuidado. Dentro se asemejaba al salón del escándalo el Emperador, con diván (1) en el centro, a los costados estatuas de pie de Xuan Wu, por delante un jardín artificial que se asemejaba a un lago con un pequeño puente que lo atravesaba y una pequeña casa.
Shi Qing Xuan miró a su alrededor intentando buscar una pista, pero estaba muy ordenado, había muchos objetos ambiguos que podrían significar muchas cosas y a la vez nada.
Se detuvo frente a la escultura de Xuan Wu, la palabras hermoso no lograba describirlo era como una fina pieza de jade esculpida para ser lo más bello que los mortales podrían apreciar, incluso las estatuas de los dioses no eran tan meticulosas como está. Los detalles eran muy vivos, casi pensaría que el verdadero Xuan Wu estaba delante suyo.
Bai WuXian solo miró fijamente el lugar hasta término involuntariamente en Shi Qing Xuan
"Todo por él ¿Eh?"
Había un sentimiento difícil de describir en su pecho cada vez lo miraba. Era diferente a la sensación que tenía cuando estaba en el cielo y solo se sentaba a ver como su presencia desaparecía sin importarle.
—¿Mi señor? — Shi Qing Xuan lo llamó al verlo callado.
Bai WuXian bajo sus ojos hacia la mano herida de Shi Qing Xuan —¿Por qué no lo arreglas?
Siguiendo la mirada del ex Emperador de los cielos, Shi Qing Xuan vio su mano y poco avergonzado la escondió entre sus mangas—Sanará si dejo así, solo tengo una mano bien. No puedo venderlo bien aunque quiera.
Dándose que dijo una tontería, Shi Qing Xuan río y le dio la espalda a Bai WuXian. No lo vendió bien porque no quería acostumbrarse a usar sus dos manos, una vez que las Deidades de su interior saliera y el poder de Hei Zheng desapareciera volvería a ser mendigo lisiado.
Sabía bien que todo era temporal y conocía bien su lugar. Un mortal común y corriente, un mendigo con pierna coja y brazo torcido. Solo eso.
— ¿Ha notado algo mi señor?
En silencio, Bai WuXian se fijó el pequeño jardín artificial. No había nada llamativo, pero era extraño en sí.
Viendo que dios marcial estaba mirando el jardín, Shi Qing Xuan también le prestó atención siendo continuamente golpeado por un dolor de cabeza, intentó superarlo, pero la intensidad aumentó y fue incapaz de soportarlo.
Su cuerpo cayó hacia adelante sin llegar a tocar el suelo porque fue atrapado por dos manos.
Bai WuXian se dio cuenta de inmediato de lo que pasaba al mirar su cara —Fuiste hechizado, seguramente no quieren que intervengas o... ¿Tienen miedo de que descubras la verdad?
Cualquiera que sea la respuesta no era asunto suyo. Desconocía cuál era el verdadero objetivo de todo, pero sabía que no debía dejar que se llevaran al Señor del Viento.
Cargó en sus brazos a Shi Qing Xuan y salió del templo a pasos lentos como si estuviera dando un paseo casual, pero en cada paso ya había avanzado mucho metros hasta regresar de nuevo a ciudad.
Tal vez sus poderes estaban debilitados, pero no sus sentidos. Puedo averiguar dónde estaba reunidos Xie Lian y los demás avanzando hacia su localización.
En la posada, sentados en una mesa estaba Mei Ning Qing bebiendo té, a su lado estaba Xie Lian también con una taza en mano al igual que Hua Cheng, solo He Xuan se mantenía alejado en un esquina.
Los cuatro estaban en silencio como si disfrutaran de la tranquilidad de una tarde cualquiera, pero había tensión entre ellos. Mei Niang Qing miraba de forma desaprobadora a Hua Cheng, en cambio el Rey demonio le sonrió con burla, solo Xie Lian sonría de forma rígida.
—Maestro le aseguro que San Lang nos ha ayudado mucho...
Sus palabras quedaron ahí. Una briza sopló moviendo las cortinas y cuando retomaron en su lugar los cuatro se habían movido.
Xie Lian estaba delante de He Xuan y Mei Niang Qing delante de Bai WuXian.
Solo Hua Cheng permaneció en su silla comiendo semillas de melón — Ge ge tengo semillas ¿Quiere?
En otras circunstancia, Xie Lian habría aceptado, pero ahora estaba en medio de algo grande— Solo está dormido. — Le dijo a He Xuan.
Pero el supremo ni siquiera le prestó atención, sus ojos estaban enfocados en Bai WuXian. Había un sentimiento amargo bajando por su garganta y se instalaba en su pecho cada vez que lo veía a lado de Shi Qing Xuan
Mei Niang Qing tomó la muñeca de Shi Qing Xuan examinando su pulso. Frunció las cejas y dijo— Estás dormido, pero este no es un sueño común fue inducido por hechizo ¿Le ha pasado antes?
—Sí, después de que regresó a la capital—Respondió Xie Lian—Durante tres días permaneció en ese estado ¿Es malo?
—Sí— La expresión de Mei Niang Qing cambió de seria a preocupado— El periodo de tiempo que dormirá será cada vez más largo y sus despertares serán cada vez menos hasta que no vuelva abrir los ojos.
Xie Lian no podía creer lo que escuchó, pensó que la Deidades nunca le harían daño a Shi Qing Xuan pero ahora intentaban matarlo ¿Eres ese el objetivo de Xuan Wu?
—Maestro, parece conocer el hechizo ¿Puede romperlo?
Mei Niang Qing negó con la cabeza — Solo escuche de él en algunos textos antiguos de Wu Yong. En ellos decía que antes de que existiera una verdadera división entre los tres reinos, los dioses y demonios para prolongar sus vida entraba en un periodo de sueño que podría durar años, entre más fuerte era uno debía permanecer dormido durante décadas, sin embargo, este método también era arriesgado porque podrían no volver a despertar.
Confundido Xie Lian pensó en las acciones de la anteriores Deidades, cada uno incluyendo Zue Que provocó indirectamente que los poderes de Shi Qing Xuan creciera ¿Xuan Wu buscaba lo mismo? Pero ¿Por qué usaría un método tan arriesgado?
—Entonces la próxima vez que Qing Xuan despierte — La mirada de Xie Lian quedó puesta en el Señor del Viento.
—Te has vuelto menos inteligente Xie Lian— Bai WuXian interrumpió las palabras de Xie Lian— Tan ingenuo como siempre.
Bai WuXian camino por la habitación hasta llegar a la cama donde dejó a Shi Qing Xuan en ella. -- El Señor del Viento se ha estado comportando de forma rara ¿No lo notaste?
— ¿No eran amigos? O ¿Es hasta ahí qué te preocupas por él?
Xie Lian no supo qué decir. No noto nada en Shi Qing Xuan, el que pasó más tiempo con el Señor del Viento no era él. Su mirada decayó en He Xuan de forma inconsciente.
He Xuan no reveló ninguna emoción cuando habló—Cuando llegamos la niebla que rodeaba la capital nos separó, no sé si encontró Xuan Yu en ese periodo.
—Nosotros no vimos ninguna niebla—dijo Xie Lian.
Entonces la respuesta ya lo sabían. Xuan Yu ya había sólo atacado al cielo sino se encontró con Shi Qing Xuan sin que lo supieran.
—Qué lástima da el Señor del Viento— Bai WuXian sonrió de forma suave, pero en su tono de voz no había rastro de ninguna gentileza— ¿Hay alguien que realmente le importe lo que le pase? Ya no tiene un mejor amigo que pueda ayudarlo, porque desde el principio sus amigos no exigieron.
La habitación quedó en silencio, uno pesado y sofocante.
Estaba oscuro, como si la oscuridad se hubiera comido la luz dejando solo un color negro como paisaje. Tampoco había ruido como si la vida se hubiera extinguido, Shi Qing Xuan podía escuchar hasta sus propios latidos de su corazón como única prueba de que estaba vivo.
No sabía cuánto tiempo había estado inmerso en aquel abismo oscuro, no podía verse así ni tampoco a su alrededor. No sabía si estaba caminando o estaba quieto. No sabía nada.
De repente, una luz emergió en la distancia. Se sintió aliviado al verlo y se dirigió a ella con desesperación, extendió su mano queriendo tocarlo lo más pronto posible. Antes de poder tocarlo, escuchó algunas voces y recuerdos emergieron de ese resplandor
— ¡Ming-Xiong!
Era el mismo llamando al Maestro de la Tierra mientras corría por la avenida con tal alcanzarlo. "Ming Yi lo" miró indiferente y con un tono frío le habló— ¿Qué quieres?
— ¡Vamos a beber juntos a la capital!
—No, piérdete.
—No digas eso, te dejaré comer todo lo que quieras.
Shi Qing Xuan sintió en su pecho a ver esa imagen ¿Por qué nunca se percató que lo miraba odio? ¿Cuántas oportunidades de matarlo tuvo y no hizo? Se sintió avergonzado, la buena vida que vivió se la había robado alguien más.
La imagen cambió, estaba en subterráneo de Agua Negras. Él se encontraba encadenado a la pared, rodeado de aquellos seres desafortunados que lo tocaban como si quisieran arrancarle una entremedias, frente suyo He Xuan había golpeado a su hermano.
— ¡He Xuan! Fue decisión mía usarte para alejar las desgracias, esto no tiene nada ver con mi hermano menor.
—Tu hermano menor tuvo la oportunidad de ascender al cielo, gozo de gloria infinita, mientras usurpo mi destino; disfruto de la divinidad que se me fue arrebatada.
— ¿Y tú me dices que no tiene nada ver con él?
— ¡Ya que ...siempre has estado a su lado , debería saber muy bien que él no es alguien que pueda ocultar algo, ¡realmente no sabía nada de esto!
—¡Eso es precisamente porque es tan despreciable!¡Porque no se le permitió conocer nada!
Shi Qing Xuan levantó la cabeza—Ming-Xiong yo..
—¡Cállate!—gritó Xuan.
— ¡Te he dado oportunidades!
—Lo siento –susurro Shi Qing Xuan.
He Xuan se detuvo— ¿¡Y de qué me sirven tus disculpas!?
—¡Sé que es inútil, pero yo!.
He Xuan dijo fríamente: ¿Pero tú qué? sabes que es inútil pero todavía quieres mostrar tu mayor sinceridad, esperando poder conmoverme para que dejara de lado todo este rencor.
—¡Eso..!¡Eso no..!¡No es a lo que me refiero!
— Shi Qing Xuan dijo apresuradamente: —Yo solo...Yo solo...Realmente me siento triste por ti!
—De verdad Ming...He..Joven maestro He...Lo sé, la equivocación es mi hermano y mía.
—En este punto, ya no podemos remediarlo, pero...
— ¿Y?
—Qing Xuan, ge ge se adelantara primero
Al terminar su oración, He Xuan colocó su mano sobre la cabeza de Shi Wu Du y agarró sus cabellos. El alma de Shi Qing Xuan parecía que iba a dejar su cuerpo, las cadenas de hierro golpearon la pared con locura—¡MING-XIONG !
—¡MING-XIONG! ¡MING-XIONG! LO SIENTO, LO SIENTO, LO SIENTO, LO SIENTO.¡SOMO LOS QUE PECARON! ¡SOMO LO QUE ESTAMOS EQUIVOCADOS!¡ES MI CULPA!¡MI HERMANO LO HIZO POR MÍ!¡MI HERMANO SE HA VUELTO LOCO, ESTÁ LOCO NO PUEDES VER, YO TU...TU!,
He Xuan lo miro en un momento fugaz, parecía haber recordado algo. Se calmó y se detuvo, al ver esto fue un hilo de esperanza para Shi Qing Xuan, dejó escapar un suspiro de alivio y las lágrimas finalmente bajaron por su mejillas.
Pero antes de que pudiera hablar, escucho sonar la voz cruel de He Xuan—Haz llamado a la persona equivocada.
Luego levantó la mano y arrancó la cabeza de Shi WuDu de su cuello.
— ¡Ahaaaaaaaaaaaaaaaaaahaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!
—¡Basta! No me muestres esto— Shi Qing Xuan se arrodillo en el suelo y sujetó su cabeza, aun así las imágenes no se tuvieron. Penetraron su mente como He Xuan mataba a Shi WuDo.
Un momento después He Xuan preguntó ¿Tienes algo más que quieras decir?
. — ¡Quiero morir!
—Sigue soñando—dijo Fríamente He Xuan, luego extendió su mano hacia Shi Qing Xuan.
—Todos dicen que el Misterioso Demonio de Aguas Negras nació del resentimiento, pero estaría bien dispuesto a quedarme en la profundidad del monte Tong Lu.
—Si de esa forma. ¡No habría tenido que conocerte!
—A partir de ahora, vuelve a amado reino mortal ¡Desaparece de mi vista!
Cuando pensó que esa pesadilla se acabaría, no fue así. El recuerdo cambió de repente.
La mano de He Xuan apresó directamente su cuello y comenzó a estrangularlo. Con fuerza, pero al mismo tiempo el agarre se volvía débil como si buscara torturarlo poniéndolo al borde de la muerte, pero no le concedería tal deseo.
Las lágrimas se desbordaron por su rostro. Lo que se estaba destrozando no era su cuerpo era su alma.
Shi Qing Xuan no quería seguir viendo esas imágenes. Se levantó y corrió hacia la luz para escapar, pero de repente sus cabellos, sus pies fueron sujetados por delgadas manos y comenzaron arrastrarlo hacia la oscuridad.
— ¡No! Déjame ir
Fue jalado con fuerza y tirado hacia el suelo. Sintió algo pegajoso en sus manos, bajó sus pestañas y sus ojos se ampliaron lleno de horror.
Había mucha sangre a su alrededor, estaba arrodillada sobre un charco de sangre, el mismo estaba cubierto de ella.
Horrorizado levantó la cabeza y frente suyo estaba He Xuan. En sus manos estaba una espada manchada de sangre y aun lado estaba el cuerpo desmembrado de Shi WuDo colgado de una cadena como si fuera un animal.
Cada una de sus extremidades estaba tirada en el piso como si fuera resto de carne podrida de la cual aquellas personas se alimentaban.
— ¡Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!
Gritó con todas su fuerzas hasta que su garganta se desgarró. Los hilos de sangre salieron por las esquinas de sus labios.
"¿Por qué? ¿Por qué?"
— Te di oportunidades.
He Xuan avanzó hacia él y sujetó sus cabellos tirando sus cabellos hacia atrás — Aún no terminé contigo.
—¡No!
Con miedo, Shi Qing Xuan logró liberarse del agarre y se arrastró por el suelo hasta alejarse lo suficiente de Agua Negra. Luego se levantó y comenzó a correr.
El paisaje dejo de ser negro, un bosque sombrío lo reemplazo. Los árboles eran altos con hojas abundantes y gruesas que impedían que la luz lo atraviesa.
El terreno era rocoso y los arbustos llenos de espinas filoso. Shi Qing Xuan corrió a través de ellos rasgando su ropa y su piel en el proceso. Tropezó y rodó por un barranco hasta terminar un río.
En la desesperación intentó levantarse, pero su débiles piernas se lo impidieron .Alzó la cabeza al escuchar un ruido y vio a He Xuan frente suyo.
Lo miró con terror —Ya mataste a mi hermano ¿Qué más quieres?
Contrario a su miedo que tenía su cuerpo, el enojo se apoderó de su corazón— ¡Ya no soy un dios! Vivo en la miseria ¡No tengo nada!
— ¿Y qué?— Lo interrumpió He Xuan— Nada de lo que pasado se compara con yo he vivido.
— ¿Entonces porque no me mataste aquel día?
—Porque te odio, quiero que sufras mil veces de lo que he pasado.
— ¡Mátame entonces!
De miles de formas vio como He Xuan mataba a su hermano, como lo torturaba frente a sus ojos y lo humillaba. Su castigo no fue diferente, fue encadenado a la pared y usado como un saco para recibir golpes, pasó hambre hasta el punto en el que su piel fue uno con su huesos .
Fue manoseado por aquellos lunáticos y alimentándose con comida para cerdos. Cada día un hueso de su cuerpo era roto por la calamidad y era cortado por algún objeto filoso dejándolo desangrar hasta que se desmayaba.
La tortura no parecía tener fin, los sentimientos de culpa que habían atormentado su corazón durante tanto tiempo fueron cambiado por enojado e ira.
—Lo odias ¿Verdad?
Shi Qing Xuan no tenía fuerza para responder, la sangre que se filtraba de su cuerpo no le daba lo suficiente energía para abrir la boca o moverse, sino fuera porque su cuerpo estaba suspendido por las cadenas estaría tirando en el piso.
—Tú no hiciste nada malo, no sabías nada, pero pagaste por todo.
—Ni siquiera recordó el tiempo que pasaron juntos, ni la sincera amistad que compartieron. Solo te uso para su venganza y una vez que se completo, te descotó como si fuera un trapo viejo
—¿Y sabes por qué?
—N-No.
—Porque esa era la miserable identidad de ambos. Fuiste un ignorante y él un resentido. Todo el cariño y afecto que se sentía era falso.
—Tenía que pagar esa deuda con sangre y lo hizo ¿Pero tú qué hiciste? Intentaste solucionar el asunto y regresar al reino mortal sabiendo que eso no sería suficiente para pagar los pecados cometidos ¿Pero qué más podías hacer?
—M-Morir—Susurró Shi Qing Xuan.
—Así es, debes morir. Solo así su resentimiento desaparecerá.
—Pero antes cae en la oscuridad.
Cuando esas palabras terminaron de ser susurradas, la oscuridad envolvió a Shi Qing Xuan. Las cadenas desaparecieron al igual que sus heridas y la sangre. Una luz cayó sobre él y levantó la cabeza, hubo un ruido cubriendo su oído con sus dos manos, pero igual pudo escuchar.
—Ódialo y muere.
Sus parpados se cerraron por un momento al abrirlos de nuevo vio la espalda de alguien le era extremadamente familiar al igual que sus cabellos negro y túnicas negras.
Extendió su mano queriendo tocarlo.
¡¡Boom!!
El suelo tembló y la tierra se sacudió. La posada voló en miles de pedazos y entre el humo dos figuras se movieron a gran velocidad, una de ella era He Xuan. Retrocedió hacia atrás saliendo de la cortina de humo con un brazo herido y un agujero en su abdomen. Frunció las cejas y su mirada llena de confusión estaba dirigida al frente.
Xie Lian y Hua Cheng que habían retrocedido por la explosión repentina pensaron era Xuan Wu quien atacaba de nuevo, pero cuando el polvo se dispersó sus ojos se ampliaron con incredulidad.
En medio de los escombros estaba Shi Qing Xuan. El abanico en su mano se desplegó con un suave movimientos y poderosos vientos fueron creados y siendo dirigidos hacia He Xuan
El supremo fue incapaz de esquivar el ataque y fue golpeado hasta estrellarse con decenas de residencias, intentó levantarse, pero aplastado contra el suelo por el pie de Shi Qing Xuan.
—¡¿Por qué tenías que matar a mi hermano?!
— ¡Yo era el culpable de todo! ¡Solo yo debía morir!
Shi Qing Xuan grito. En sus ojos las emociones eran claras. Odio, tristeza, furia y resentimientos.
He Xuan quedó abrumado al verlo, nunca vio a Shi Qing Xuan en ese estado, sobre todo con tanto deseo de matarlo. Ni siquiera logró reaccionar cuando una espada de viento perforó su pecho.
— ¡Mátame! Si tanto me odias.
—¡Qing Xuan!
Xie Lian intentó sujetarlo, pero un fuerte viento lo apartó del Señor del Viento. Hua Cheng tuvo que atraparlo para que no fuera arrojado contra la pared del palacio real.
Sin escuchar las voces que lo llamaban, el Señor del Viento fue rodeado por furiosos vientos cortantes. Nadie podía acercarse a su entorno, incluso He Xuan que estaba cerca fue incapaz de resistir la opresión que lo aplastaba contra el piso.
Sin embargo, en medio de los vientos furiosos Bai WuXian logró acercarse a Shi Qing Xuan y cubrir su rostro con una máscara medio riendo medio llorando.
De inmediato todo volvió a ser silencioso y como la última hoja que cae después de una tormenta, Shi Qing Xuan cayó sobre los brazos de Bai Wu Xian.
—¿Qué le hiciste?— He Xuan se incorporó con dificultad.
—Nada, su deseo de matarte venía solo de él. Su odio era genuino — Bai WuXian miró a Shi Qing Xuan y le quitó la máscara encontrando que dos líneas de lágrimas bajaban por su rostro.
—Si rompen su corazón, el sol se apagará y dios estará triste.
—¡Ya basta!
—¡Ya basta!
En medio de la oscuridad, Shi Qing Xuan sollozaba. Cubría sus oídos como si no quisiera escuchar nada.
—No temas nada es real.
Un esfera de luz apareció en frente Shi Qing Xuan y tomó una forma humana. Brillante túnicas blancas destacaron en el paisaje oscuro, pero el Señor del Viento ni siquiera lo miró.
So Ko Zhen se agachó e intentó tocarlo, pero al darse cuenta que no podía oírlo suspiro— Estás siendo muy cruel Xuan Wu.
De entre las sombras, Xuan Wu emergió— Eres un entrometido ¡Vete de aquí! No me estorbes.
—Has ido demasiado lejos
Una tercera voz emergió y pronto una pequeña esfera de luz resplandeció tomando la apariencia de un joven.
—Así que tú también ¡Desaparece Zue Que!
Zue Que suspiró —No dejaré que lo lastime.
Xuan Wu río como si hubiera escuchado un chiste— Déjame decirte algo bueno.
—Tu amado Señor del Viento morirá si no te unes al banquete.
(1) Divan es un sofá de madera largo y estrecho que también funciona como cama
Hola queridos lectores. Gracias por leer.
Esto es lo que le hizo Xuan Wu a SQX cuando se encontraron la primera vez. A esto se refiere con apagar el fuego de su vida.
¿Qué harán las deidades? ¿Irán la banquete o dejaran morir a SQX?
Espero que les haya gustado el capitulo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro