Brenna D'amico 

Estaba buscando el sitio perfecto para deshacerme de la bastarda de Cameron y huir del país lo antes posible, pero se me estaba apretando la cuestión, debo admitir que la bastarda de Cameron es muy bonita... ¡ME EMPALAGA! Que... ¡QUE ASCO! Solo espero que no me encuentre la policía tan pronto, sino hasta que esa bastarda se muera.

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Maya 

Yo estaba demasiado preocupada por mi sobrina, no hacía más que caminar de un lado para el otro, mientras me desesperaba cada vez más y mi mamá me decía que me tranquilizara porque eso le afectaba al bebé pero... Me molesta estar así sin poder hacer nada al respecto — Maya por favor — Insistía mi madre — No quiero que te pasa nada malo. 

Pero, yo de terca como siempre no quise sentarme — Cuñada por favor, no nos angusties más —Decía Pulguita — No quiero que te pase nada malo ¡DE VERDAD!

— No me pasará nada malo mamá en serio — Dicho esto, giré sobre mis talones para ir a la cocina y apenas di tres pasos, siento que se rompe la fuente — Ay... Me... ¡ME DUELE! ¡MAMÁ!

— ¿A qué te refieres con eso Maya? — Dijo Pulga aún más preocupada — ¿Qué tienes? ¿Qué te pasa?

— ¡ME DUELE! - Me quejaba - Creo que ya Kendall va a nacer ¡Ahh! — Seguía quejándome.

— Dios mío justo ahora en un momento como este — Decía mi madre — ¡BETTY! ¡Lyla! ¡VENGAN PRONTO! Daniela, llama a Karan URGENTE y dile que su hijo ya va a nacer — Ella asintió.

Libby 

¡DIOS MÍO SANTO! De verdad que... Menudo momento escogió mi segundo nieto para nacer, justo en un momento de crisis... Ahora solo me queda esperar a que Karan se vaya al hospital urgente, ¡Que dijo! Ahora debo de concentrarme en mi pequeña hija - Aguanta hija ya vamos en camino - Le decía - Ya vamos a llegar - Dejé a Daniela en casa junto con el pequeño Roger ya que Betty andaba con nosotras, y no solo por eso sino que por si acaso llegaban uno de los chicos les informaran la situación. 

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Brenna D'amico 

¡QUE BIEN! - Exclamé - Por fin encontré un sitio muy bueno para esto, una cabaña abandonada a las afueras de la ciudad, a unas 5 horas más o menos, me metí allí y me instalé con la mocosa de inmediato, la miré por un momento para así decirle — Ahora sí niñita boba, tu padre va a sufrir por tu causa bebé — Samara sonríe — Tan ingenua eres que no sabes de que te hablo bastardita. Me sumbé en un viejo sofá roto que se encontraba allí, tomé la otra línea y le marqué de inmediato a Cameron para torturarlo un poco, él contestó más pronto de lo que me imaginaba:

~Llamada telefónica~

— Hola ILUSO — Dije de malas ganas — ¿Cómo la pasa el papá instantáneo? — Suelto una risotada.

— ¡BRENNA! ¡DEVUÉLVEME A MI HIJA DE INMEDIATO! — Me gritó — ¿Dónde la tienes? ¡HABLA YA! O te va a ir peor.

— ¡OLVÍDATE DE ELLA DE UNA VEZ POR TODAS CAMERON! — Le contesté — Porque no va a regresar a tus manos NUNCA ¿Entiendes? ¡NUNCA!

— No te atrevas a hacerle algo a mi hija — Me amenaza — Porque no me va a temblar el pulso para acabar contigo Brenna... ¡TE MATO! — Ruedo los ojos.

— ¡TUS AMENAZAS ME VALEN UN COMINO CAMERON! Me valen, igual de lo que a ti te valió lo que yo sentía por ti — Le grité — Tu hija se va a morir Cameron ¡SE VA A MORIR! Y quiero que eso se te grave.

~Fin de llamada telefónica~

Me imagino en este momento la cara de angustia y sufrimiento de Cameron, se lo merece por haberse olvidado de mí... Se arrepentirá de toda la humillación que me causó justo en el día de mi cumpleaños — ¡TE ODIO CAMERON MICA BOYCE SMOLL! — Grité — Te odio con toda mi alma ¿SABES? Dios... Como quiero verla muerta ¡SUFRE SAORY! ¡SU-FRE! Porque... Eso es lo que te mereces sirvienta NACA, me imagino que a la buena para nada de Isabella, toda California le debe de estar cayendo encima en este momento... ¡PERO QUÉ FELIZ ME SIENTO POR EL DOLOR QUE ESTOY CAUSANDOLES A ELLOS! Mejor me calmaré y planearé la siguiente fase de mi plan macabro. 

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En el hospital Libby, Karan y Compañía:

Libby 

Llevamos hora y media esperando a que alguien nos dijera algo sobre Maya y mi nieto, nos preocupaba el hecho de que las enfermeras corrían de un lado para el otro, como si algo malo ocurriera allá adentro, el pobre Karan estaba muy pensativo y nervioso, primera vez que veo a un hombre tan... Preocupado, con esa reacción como él estaba ahora, ya casi cuando iban a cumplirse las 2 horas de estar así en espera, fue que salió un doctor y se dirigió a mí — Señora Libby — Decía con un gesto APÁTICO — Temo informarles que su nieto está grave — Karan se puso de pie, se acercó al doctor con lágrimas en sus ojos mientras le decía — Doctor dígame... ¿Se va a salvar mi hijo? — Decía desesperado — ¡RESPÓNDAME POR FAVOR!

— Las siguientes horas serán críticas — Dijo — Créame que estaremos haciendo TODO lo posible por salvar a su hijo señor Brar.

Karan 

En ese instante, sentía como un frío recorría todo mi cuerpo y mi Corazón se estaba debilitando — ¿Por qué a mi? — Pensaba mientras azotaba mis puños en la pared y lloraba de la preocupación y rabia, mi primogénito, mi hijo, el fruto del amor que Maya y yo nos tenemos... No puede irse ¡NO! Me niego rotundamente... ¡No! Tengo que ser fuerte para Maya no puedo derrumbarme así, no puedo, necesito a mi Maya necesito abrazarla y estar juntos en esto. Sé que él va a estar bien... Pero ¡Ya no aguanto esta angustia! ¡Ya por favor! — Di un grito desgarrador.

— ¿Y Maya Doctor? — Decía mi suegra algo angustiada — ¿Cómo está ella? ¡Dígame algo!

— Ella está bien gracias a Dios que se salvó — Contestó el Doctor — La tenemos sedada para que descanse, además aún no sabremos qué pasa con el niño y no queremos que se altere.

Libby 

¡DIOS QUERIDO! Ahora sí que... Como diría mi consuegra — La cosa está muy peluda — Por un lado, mi nuera está buscando a su hija quien fue raptada y por otro lado tenemos a Maya y su bebé quienes están en terapia intensiva ¡Dios mío! ¡AYÚDANOS A SALIR DE ESTA SITUACIÓN TAN CRÍTICA POR LA QUE ESTAMOS PASANDO! No sé que voy a hacer sin mis dos primeros nietos, me VOLVERÍA LOCA al enterarme de algo malo. 

— Bueno Libby — Decía en mi mente — No es momento para pensar en lo peor. 

Debo de ser fuerte para apoyar a mis chicas, debo serlo, además mi hijo mayor también me necesita en estos momentos.

— Ahora menos voy a estar tranquilo suegra — Decía Karan envuelto en un mar de lágrimas — No voy a soportar si mi hijo muere ¡NO LO VOY A SOPORTAR!

Lo abrazo por un instante — Se fuerte Karan, todo va a salir bien ¡YA LO VERÁS! Kendall no se va a morir.

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Cameron 

Esa desgraciada de Brenna, no tiene ni la más mínima pizca de vergüenza, secuestró a mi hija y se atreve a restregármelo en la cara, no sabe como la estoy ODIANDO en estos momentos, de verdad no sé como pude estar a punto de CASARME con alguien como ella. De repente, me acordé sobre la existencia de ISABELLA y pensé que quizás ella podía saber en dónde se encuentra la desgraciada de Brenna, necesito agotar hasta la última POSIBILIDAD que pueda existir, así que me dirigí hasta allá junto con mi padre, Saory y Eduardo para parar esto ya de una buena vez.

— ¿Qué es lo que quieren de mí? — Dijo Isabella muy pero muy ESCÉPTICA a todo — ¿Por qué tanto escándalo?

— No te hagas la loca Isabella — Dije de malos modos — Yo sé que tú sabes donde se encuentran Brenna y me lo vas a decir AHORA MISMO.

— Sé que no me lo vas a creer Cameron Mica, pero igual te lo voy a decir — Decía ella en tono sarcástico — Yo no sé nada de ese asunto, nada que tenga que ver con Brenna me importa y lo saben bien... Esa naca es mi rival. 

— ¿Por qué será que... No te he creído nada Isabella? — Intervino Eduardo — Tú sí sabes algo, solo que no te da la estúpida gana de decírnoslo ¿No es así?

— Mira hermano de la naca, que te quede esto bien en claro, BRENNA ES MI RIVAL — Decía alterada — Y por ende NO ME INTERESA lo que ella diga o haga ¿Sabes? Además si era de secuestrar a es niña ya lo hubiera hecho yo sola sin esa enferma mental.

Isabella 

Pero... ¿Cómo es posible que en estos momentos ellos me vengan con estas cosas? NO ME INTERESA LO QUE HAGA LA IDIOTA DE BRENNA EN LO ABSOLUTO, pero... Lo que es verdad es que odio a esa naca, pero la estúpida de Brenna se me adelanto, sabía que ella no era de confianza, como siempre se roba TODAS mis ideas, odio no poder haberlo hecho yo primero... Pero ¿Saben una cosa? Es mejor así, ya que no me voy a ensuciar mis hermosas manos con esa bastarda asquerosa. Esperó y Brenna cumpla su objetivo y yo poder gozar desde lejos viendo todo el drama de esos dos.

Al día siguiente:

No encuentro ya que hacer, estoy preocupado por toda esta situación, bueno no solo yo sino Meg y el resto de los chicos... ¿CÓMO ES POSIBLE QUE BRENNA HAYA CAÍDO TAN BAJO? Llevarse a la bebé de Saory, a veces no entiendo ¿Cómo una persona puede llegar a ser tan perversa? ¿Cómo una mente puede ser tan mala para lastimar a una inocente bebé indefensa y débil que no sabe lo que pasa a su alrededor? Que no puede defenderse por sí sola ¿Por qué ella no se mete con alguien de su tamaño? Como dicen. 

Me encantaría encontrarla y poder rescatar, a la hija de Saory... La verdad... ¡Que impotencia tengo en estos momentos! De no poder encontrarla... ¡Maldita seas Brenna D'amico! La justicia existe y tenlo por seguro que se hará sobre de ti. Tenlo por seguro por lo que me llamo Milo Jacob Manheim.

— Milo intenta tranquilizarte por favor, te lo ruego — Decía Meg — Ya la encontrarán créeme.

— Es que no me siento útil estando así de brazos cruzados ¿Sabes? — Dije impotente — Vamos Meg... Vamos a buscar a Brenna.

— ¿Estás loco o que Milo? — Dijo Meg algo insegura — Ni siquiera sabes por dónde empezar a buscarlas... No tienes ni una pista Milo.

— No la tengo aún, pero la voy a encontrar, ya vas a ver Meg — Decía decidido — De que la encuentro LA ENCUENTRO.

— Milo... ¡Por favor! Yo de verdad que entiendo tu desesperación, pero a la vez no quisiera que nada malo te pase, me moriría si algo te pasa en el intento... Milo... ¡Piénsalo! — Dice Meg mientras lo abraza.

— Meg jamás te habías puesto así conmigo, de verdad muchas gracias por preocuparte por mi Meg, pero de verdad que necesito hacer algo al respecto — Dije mirándola fijamente.

— Tu no entiendes nada Milo ¿Cómo es que no lo entiendes aún? ¡Me importas Manheim! — Dijo Meg y bajo la mirada.

— Meg... Dime ya ¿Qué es lo que te pasa? — Dijo Milo buscando su mirada — Meg, es en serio, mírame y dime ya que es lo que pasa.

— Nada Milo, no pasa nada — desvía la mirada - Solo es que aún no entiendes nada... Pero ya se cierra el tema.

Meg 

Milo... De verdad que a veces pienso que es algo tonto, creo que estoy siendo muy obvia pero él... Él aún debe de seguir pensando en Saory, es lo único que le importa... Aunque en un momento dado pensé que ya se había olvidado de ella pero me equivoque, sé que no cambiará de opinión así que decidí seguirle la corriente, ya que quizás en una de esas la encuentra y queda como HÉROE, conozco su egocentrismo y para lucirse está mandado a hacer, bueno para su edad es algo normal, sigue siendo un niño... Sólo quiere quedar bien ante Saory y pues la verdad yo lo apoyó en todo lo que él quiera hacer aún sabiendo que eso va a lastimarme, y es que, él cuando decide algo no hay fuerza humana que se lo pueda quitar de su cabeza.