Era una noche oscura, fría y neblinosa en la ciudad de LakeTown Place, la luz de los faros se veía borrosa en la lejanía, las primeras gotas de lluvia caían sonoramente, ahí estaba el cuerpo de el fotógrafo conocido como Arthur Blake, tirado en la acera, las luces rojas y azules bañaban con esa tonalidad los alrededores.

- Es el cuarto de este mes - comentaba un detective llamado Ernest Morrinson, era un hombre experimentado - Me parece que nos enfrentamos a un asesino serial -

- Sería nuestro más grande desafío - Añadió un oficial llamado Jeremy Palace, era mas joven y de pequeño había sufrido un accidente y usaba prótesis en la cara - Aunque es un poco. inquietante que en este pueblo tan pequeño hay un asesino serial -

- Podría ser tu vecino, un doctor, el que reparte los periódicos - Respondió un criminalista llamado Edward Miller, un hombre entrado en la treintena - Podría ser cualquiera -

El médico forense, un hombre llamado Arnold Ramsey, un hombre en sus cincuenta, llevaba toda la vida siendo forense, termino de examinar el cuerpo y lo dejó dentro de una bolsa negra.

- Mismas características que los otros siete, cuello cortado y puñalada en el corazón con arma blanca - le dijo sus observaciones a los tres detectives - El arma blanca parece ser algún tipo de daga o puñal y la causa de muerte es igual a la de todas las víctimas; desangramiento por corte en la Yugular, un corte limpio, el asesino es alguien con experiencia o con estudios médicos -

Luego trasladaron el cuerpo a la morgue para poder realizar la autopsia y la policía regresó a la estación

La estación de policía era un gran edificio lleno de oficinas, en el quinto piso se encontraba una enorme sala llena de escritorios con una pizarra grande en el fondo.

En la estación estaban los policías entrevistando a los testigos, siguiendo pistas, entre otras cosas.

En la pizarra habían fotos de las siete víctimas y las escenas del crimen.

Las víctimas no podían ser más diferentes; habían desde madres solteras hasta escritores, e incluso un pescador; físicamente no había relación, eran de diferente género, sus tonos de piel eran diferente, al igual que su cabello y sus ojos. En resumen no había nada, absolutamente nada en común.

-La jefa Amanda nos ordena que realicemos avances en la investigación- Comentó Edward - ¿Que tienen?

- No hay relación evidente entre las víctimas, ni físicas, ni sociales, ni de ninguna otra - le resumió Arnold

- El psicológo Chris Hansort esta analizando la evidencia - le respondió Ernest - Trata de averiguar algún patrón que nos ayude a atraparlo -

Pasaron un par de horas que parecían eternas cuando el psicológo llegó con una solución.

- He encontrado algo - dijo el psicólogo - Pero es un tanto perturbador -

- ¿De que hablas? - Preguntó Arnold -

- Observen - dijo Chris - Si trazamos líneas a través de las escenas del crimen forman un... -

- Un pentagrama... - Comento Edward -

- Pero faltan dos puntos para completar el pentagrama - dijo Jeremy - En la calle 61 y en Brodwey Corner -

- Enviaremos patrulleros para vigilar - Ordenó Edward -

- ¿Y si es una trampa? - Comentó Jeremy -

- No creo que el asesino sea tan inteligente - Puntualizó Chris Hansort -

- No opino lo mismo - Sentenció Jeremy -

Tras mucho discutir llegaron a la conclusión de que mandarían patrulleros a ambos lugares para evitar los asesinatos.