Después de la enfermedad de Gijeog, Taehyung comenzó a cuestionarse si debería trabajar desde casa para estar siempre disponible para su pequeño. La idea de perderse momentos importantes o no estar presente cuando Gijeog lo necesitara le preocupaba.

Una noche, mientras cenaban, Taehyung compartió sus pensamientos con Jungkook.

-He estado pensando... tal vez debería dejar el taller y trabajar desde casa. Así podría estar siempre con Gijeog.

Jungkook lo miró con comprensión, pero también con determinación.

-Entiendo por qué lo piensas, pero no quiero que sacrifiques algo que amas. Tu arte es parte de ti, y eso también enriquece a nuestra familia.

Reflexionaron juntos sobre cómo podrían encontrar un equilibrio que les permitiera estar presentes para Gijeog sin renunciar a sus pasiones. Fue entonces cuando Jungkook sugirió una idea.

-¿Qué tal si nos turnamos para trabajar desde casa algunos días? Así, cada uno puede concentrarse en su trabajo y al mismo tiempo estar con Gijeog.

Taehyung sonrió, aliviado por la propuesta. Sabía que no tendría que renunciar a su arte, y al mismo tiempo, podría asegurarse de estar allí para su hijo. Decidieron establecer un horario flexible, donde algunos días Taehyung trabajaría en casa, pintando y cuidando de Gijeog, mientras Jungkook se encargaba del spa. Otros días, Jungkook se quedaría en casa, permitiendo que Taehyung fuera al taller.

Con el nuevo plan en marcha, ambos sintieron una carga menos pesada. Gijeog también se benefició, disfrutando de tiempo de calidad con cada uno de sus padres. Los días en casa se llenaron de creatividad y risas, mientras Taehyung pintaba y Gijeog exploraba nuevas formas de arte. Los días en el spa, Jungkook le enseñaba a su hijo los secretos de la calma y la serenidad.

Cada noche, compartían las experiencias del día, sintiéndose afortunados por tenerse el uno al otro y por poder adaptar sus vidas en función del bienestar de su familia.

Con el tiempo, descubrieron que este equilibrio les permitía no solo ser mejores padres, sino también fortalecer su relación y sus carreras. Gijeog crecía feliz y seguro, rodeado del amor y la creatividad que sus padres cultivaban cada día.

Con el nuevo sistema en marcha, la vida de la familia se volvió más equilibrada y llena de momentos compartidos. Taehyung y Jungkook encontraron que la flexibilidad les permitía disfrutar de lo mejor de ambos mundos: sus carreras y la crianza de Gijeog.

Un día, mientras Taehyung trabajaba en casa, decidió experimentar con una nueva técnica de pintura que había estado considerando. Inspirado por la energía de Gijeog, empezó a incorporar elementos de juego y espontaneidad en su arte. Para su sorpresa, estas nuevas piezas capturaron una esencia fresca y vibrante que resonó profundamente con él.

Gijeog, con sus manos llenas de pintura, se convirtió en su pequeño asistente, añadiendo su toque personal a cada obra. Taehyung se dio cuenta de que trabajar desde casa no solo le permitía estar cerca de su hijo, sino también abrir nuevas puertas creativas que no había imaginado.

Mientras tanto, Jungkook aprovechaba sus días en casa para desarrollar nuevas ideas para el spa. Inspirado por el tiempo con Gijeog, creó una serie de productos naturales para el cuidado de la piel, diseñados especialmente para familias. Estos productos se convirtieron en un éxito entre sus clientes, quienes apreciaban el enfoque personal y familiar que Jungkook aportaba.

Con el tiempo, decidieron organizar un evento conjunto, combinando una exposición de las nuevas obras de Taehyung con una presentación de los productos de Jungkook. El evento atrajo a una gran cantidad de amigos, familiares y clientes, quienes disfrutaron de una velada llena de arte, bienestar y comunidad.

Durante el evento, mientras Gijeog corría alegremente entre los invitados, Jungkook y Taehyung se tomaron un momento para observar todo lo que habían logrado juntos. Se dieron cuenta de que la clave había sido siempre apoyarse mutuamente y encontrar soluciones creativas a los desafíos que enfrentaban.

A medida que la noche avanzaba, rodeados de risas y conversaciones, sintieron una profunda gratitud por la familia que habían construido. Sabían que el amor y la colaboración les permitirían enfrentar cualquier obstáculo que la vida les presentara.

Finalmente, al regresar a casa, acunaron a Gijeog para dormir, sintiéndose más unidos que nunca. Habían aprendido que el equilibrio no significaba sacrificar partes de sí mismos, sino integrarlas de manera que todos pudieran florecer. Y, con cada nuevo día, seguían construyendo un hogar donde la creatividad, el amor y la felicidad eran los pilares fundamentales.

Pasaron los meses y la rutina flexible que habían creado permitió que cada miembro de la familia floreciera a su manera. Taehyung continuó explorando nuevas formas de expresión artística, inspirándose en los momentos cotidianos con Gijeog. Sus obras comenzaron a ganar reconocimiento por su autenticidad y la emotiva conexión que transmitían.

Jungkook, por su parte, expandió su línea de productos para el spa, integrando experiencias sensoriales que promovían la conexión familiar. Su visión de crear un espacio donde las familias pudieran relajarse juntas resonó profundamente con su clientela, fortaleciendo su negocio.

Un fin de semana decidieron hacer una escapada al campo, buscando un poco de aventura y descanso en la naturaleza. Rodeados de paisajes verdes y el canto de los pájaros, sintieron una paz que solo el aire libre podía ofrecer. Gijeog, fascinado por todo lo que lo rodeaba, corría de un lado a otro, explorando con curiosidad cada rincón.

Una tarde, mientras el sol se ponía, Taehyung tomó un cuaderno y comenzó a esbozar el paisaje, capturando la belleza del momento. Jungkook, sentado a su lado, observaba a Gijeog jugar y sintió una profunda satisfacción al ver a su familia tan feliz y unida.

Al regresar a casa, decidieron organizar más escapadas y actividades en la naturaleza, reconociendo la importancia de esos momentos de conexión y tranquilidad. Sabían que esas experiencias no solo enriquecían sus vidas, sino que también le brindaban a Gijeog recuerdos invaluables.

Con el tiempo, Taehyung y Jungkook se dieron cuenta de que habían creado una vida equilibrada y llena de amor, donde cada día era una oportunidad para crecer juntos. Entendieron que la clave para mantenerlo era la comunicación abierta, el apoyo incondicional y la disposición a adaptarse a los cambios.

Al reflexionar sobre su viaje, compartieron algunas ideas y mensajes que esperaban inspirar a otros:

1. Valora el tiempo en familia: Los momentos simples y cotidianos son los que construyen los recuerdos más preciados.

2. Encuentra el equilibrio: No se trata de sacrificar, sino de integrar las pasiones y responsabilidades de manera que todos puedan prosperar.

3. Apóyate en la persona que amas : La colaboración y el apoyo mutuo son fundamentales para superar los desafíos.

4. Sé flexible y abierto al cambio: La vida está llena de sorpresas; estar dispuesto a adaptarse es clave para el crecimiento.

5. Cultiva la creatividad y el bienestar: Encuentra formas de expresarte y cuidar de ti mismo y de tu familia.

Con estos principios en mente, Taehyung y Jungkook continuaron su camino, sabiendo que habían creado un hogar lleno de amor, donde cada día traía nuevas oportunidades para ser felices juntos.

Le dejo un nuevo capítulo
Espero les guste
🥰💕