Al día siguiente, el suave resplandor del sol se filtraba a través de las cortinas, iluminando la cocina mientras Tae y Jungkook se preparaban el desayuno. El aroma del café recién hecho llenaba la habitación, mezclándose con el sonido de los utensilios de cocina y la risa suave de su hijo Gijeog en la silla para bebés.

Tae estaba ocupado preparando un desayuno ligero pero nutritivo, mientras Jungkook alimentaba a Gijeog con su biberón, disfrutando de esos preciosos momentos de conexión familiar.

-Este café huele delicioso, amor -dijo Jungkook, sonriendo a Tae mientras sostenía a Gijeog en sus brazos.

Tae le devolvió la sonrisa, disfrutando de la calidez del amor que fluía entre ellos.

-Gracias, cariño. Quería asegurarme de que tuviéramos un buen comienzo en el día

Mientras disfrutaban de su desayuno juntos, Tae miró a Jungkook con una expresión seria en su rostro.

-Jungkook, hay algo de lo que me gustaría hablar contigo -dijo Tae, su voz tranquila pero llena de determinación.

Jungkook asintió, notando la seriedad en la mirada de Tae.

-Claro, ¿qué pasa, amor?

Tae tomó una respiración profunda antes de continuar.

-Creo que es hora de empezar a planificar el bautizo de Gijeog. Es importante para mí que tengamos un evento especial para marcar su llegada a nuestras vidas y darle la bienvenida a nuestra familia.

Jungkook asintió, comprendiendo la importancia de la ocasión.

-Tienes razón, Tae. Es un paso significativo y quiero que nuestro hijo se sienta amado y bendecido en este día especial.

Tae sonrió, agradecido por la comprensión de Jungkook.

-Pienso que podríamos tener una ceremonia íntima con nuestros familiares y amigos cercanos. Quiero que Gijeog sienta el amor y el apoyo de quienes nos rodean.

Jungkook acarició suavemente la cabeza de Gijeog, cuyos ojos curiosos seguían cada movimiento a su alrededor.

-Estoy de acuerdo. Será un momento hermoso y significativo para todos nosotros.

Mientras continuaban conversando sobre los detalles del bautizo, la luz del sol llenaba la cocina, creando un ambiente cálido y acogedor. Tae y Jungkook compartieron ideas, sueños y esperanzas para el futuro de su hijo, sabiendo que juntos podrían brindarle una vida llena de amor y felicidad.

Después de terminar el desayuno, Tae y Jungkook se unieron en un abrazo, unidos en su amor por Gijeog y en su compromiso mutuo de ser los mejores padres posibles para él.

-Te amo, Tae -dijo Jungkook, sus ojos brillando con sinceridad.

-Y yo a ti, Jungkook. Esto es solo el comienzo de nuestra aventura como familia, y estoy emocionado por todo lo que está por venir -respondió Tae, sintiendo una mezcla de alegría y gratitud en su corazón.

Decidieron no perder más tiempo y comenzaron a hacer una lista de los familiares y amigos que querían invitar al bautizo. Mientras escribían, Tae no pudo evitar recordar su propia infancia.

-¿Tu crees que le daremos muchos recuerdos felices? -preguntó Tae con una sonrisa nostálgica.

Jungkook asintió, riendo ligero.

-Sí, Quiero que Gijeog tenga esos recuerdos también.

-Exactamente -dijo Tae. -Podríamos incorporar algunas tradiciones familiares para que sienta la conexión con sus raíces.

Jungkook miró a Tae, admirando su entusiasmo.

-Entiendo, amor. ¡Vamos a hacer que este día sea inolvidable para Gijeog y para nosotros también!

Con el plan en marcha, decidieron que esa misma tarde harían una visita a la iglesia cercana para discutir los detalles de la ceremonia. La idea de dar ese paso importante les llenaba de emoción.

Mientras limpiaban la cocina, Jungkook se detuvo y miró a Tae, con una expresión reflexiva en su rostro.

-Oye, amor, ¿has pensado en cómo nos gustaría que Gijeog se sienta ese día? Me gustaría que supiera cuán amado es y cuánto significa para nosotros.

-Sí -respondió Tae, su voz suave. -Quiero que sienta que pertenece a algo más grande, que está rodeado de personas que lo quieren incondicionalmente.

Decididos a hacer de ese día un acontecimiento especial, comenzaron a planear no solo la ceremonia, sino también cómo expresarle a Gijeog su amor y apoyo, para que supiera que siempre estaría rodeado de un núcleo familiar sólido.

Después de su reunión en la iglesia, Tae y Jungkook se sintieron emocionados por los pasos que habían tomado en la planificación del bautizo de Gijeog. Al salir del templo, el sol brillaba intensamente, y el canto de los pájaros les daba la bienvenida al nuevo día.

-¿Deberíamos ir a comprar algunas cosas para el bautizo? -sugirió Jungkook, mientras caminaban de la mano hacia su coche.

-¡Buena idea! -respondió Tae, su rostro iluminado por una sonrisa. -Necesitamos decoraciones, y también podríamos ver algunas opciones para el pastel.

Con entusiasmo, se dirigieron a uno de los centros comerciales cercanos. Al entrar, el bullicio del lugar y los escaparates decorados llenaron su corazón de alegría.

-Mira, esos globos se verían perfectos en la ceremonia -dijo Tae, señalando una tienda con una variedad de decoraciones festivas.

-Sí, y deberíamos buscar algunas flores también. Tal vez algo sencillo pero hermoso, que refleje la alegría del día -agregó Jungkook mientras se adentraban en la tienda.

Pasaron un buen rato eligiendo las decoraciones, llenando su carrito con globos, mantelitos, y velas que representarían el espíritu del evento. Una vez que terminaron de comprar, decidieron que era hora de contactar a algunos planificadores de eventos para asegurarse de que todo estuviera bien organizado.

-¿Conoces a alguien que pueda ayudarnos con eso? -preguntó Tae, revisando su teléfono para buscar contactos.

-He oído buenas cosas sobre una planificadora llamada Lia. Deberíamos llamarla y ver si está disponible para ayudarnos -respondió Jungkook, sacando su teléfono.

Después de unos minutos, lograron contactar a Lia, quien se mostró entusiasta y dispuesta a colaborar. Quedaron en reunirse con ella al día siguiente para discutir ideas y empezar a poner todo en marcha.

-Esto está comenzando a sentirse real, ¿no? -comentó Tae, mientras caminaban hacia el coche con las manos llenas de bolsas.

-Sí, y no puedo esperar para verlo todo tomar forma. Cada pequeño detalle cuenta, especialmente cuando se trata de Gijeog -dijo Jungkook con una sonrisa.

De regreso a casa, la emoción de la planificación los envolvía. Se sentaron en el sofá, rodeados de sus compras, y comenzaron a discutir el tema de la ceremonia y lo que significaría para ellos como familia.

-Quiero que Gijeog sienta la calidez de nuestra familia y de nuestros amigos en este día -dijo Tae, con la mirada fija en un marco de fotos de la familia que tenían en la sala.

-Y también me gustaría que todos pudieran compartir algo especial, tal vez un mensaje o un deseo para él -agregó Jungkook, imaginando cómo sería la ceremonia.

Mientras se sumergían en planes y sueños, el sol comenzaba a ponerse, llenando la habitación con una luz dorada. Sin duda, el bautizo de Gijeog sería un día lleno de amor y recuerdos, y Tae y Jungkook no podían esperar para vivirlo juntos como familia.

Les dejo un nuevo capítulo
Espero les guste 🥰🥰