Por lo general, todos los grupos o círculos amistosos tienen tradiciones o costumbres, al menos una sola. Algunos se reúnen todos los viernes mientras juegan videojuegos y comen chatarra, o ven películas días específicos de la semana.

Nosotros no nos quedamos muy atrás, todos somos amantes de la comida y, el día del cumpleaños de cada uno acostumbrábamos a llevar comida al colegio para compartir; es decir, si llevábamos nuestro desayuno, el mismo se multiplicaba por siete, o al menos por cinco para todos poder comer.

Sino, uno llevaba dulces o torta, el punto estaba en llevar algo comestible para quedarnos en el salón a la hora del recreo y poder comer.

Éramos (Y somos) unos tragones de primera.

Miguel siempre llevaba panquecas con queso mozzarella, era la especialidad de su mamá. Por otro lado, el resto nos repartíamos entre Arepas, mandocas, empanadas o pan dulce. Cerca del colegio vendían uno dulce llamado "Andino", que era bastante bueno y los menús variaban dependiendo de cuánto tiempo se tenía para preparar por las mañanas o lo que tuviéramos a disposición.

La dinámica era muy fácil, nos sentábamos todos en círculo y se proseguía a decir unas palabras para el cumplementado y luego, cada quien empezaba a agarrar de lo que más llamara su atención, era el famoso "todos con todos", ahí no había quien se negara a dar de su comida porque sino, "chaopescao". Equidad o nada, eh.

Una de las últimas que hemos hecho ha dado un cambio radical porque 1: No ha sido en el colegio sino en mi casa. 2: Ha sido pizza lo que ha sido puesto en el menú.

Así que para las siete de la noche, teníamos a mi hermanito haciéndonos pizza mientras lo ayudábamos (claramente). Alrededor de las diez estuvo lista la última y tuvimos un total de ocho pizzas, divididas entre jamón, cebolla, maíz y pimentón. Nos sentamos todos en círculo y, como ya es costumbre, dimos las gracias y algunas palabras para con nosotros, lloramos un poquito y nos reímos.

He decidido contar sobre nuestras comelonas porque hoy es el cumpleaños de uno de nuestros integrantes. Hoy, trece de junio de dos mil veinte, Ibrahim se ha desbloqueado legalmente en la República de Venezuela y, es por ello que era importante recalcar nuestra tradición para los cumpleaños.

Así que... ¡Feliz cumpleaños, Ojimiel!
La familia dos punto cinco te ama.

Lección del día:

Tener tradiciones familiares es bonito y muchas perduran a lo largo de la vida y el transcurso del tiempo, se comparte con la gente que uno más quiere y se disfruta de un rato agradable y sin duda, las tradiciones amistosas cumplen el mismo rol pero, con la familia que tú escogiste durante el transcurso de tus días.

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