Denji estaba abriendo sus ojos y lo primero que sintió fue un golpe en su pierna el cual hizo que cayera de rodillas al piso.

No entendía que estaba pasando hasta que sintio otro golpe, aunque este fue directo a su cara lo cual consiguió que cayera al piso.

- ¡Lo logré! ¡Derroté al motosierra!- dijo pingtsi la cual empezó a saltar de alegría mientras que las demás chicas empezaban a aplaudir de la impresión, aunque segundos después reaccionaron al ver que la figura del motosierra fue sustituida por la escuálida figura de Denji quien estaba adolorido en el piso.-

Rápidamente las chicas se alegraron y fueron a lanzarse encima del rubio mientras lloraban de la alegría por volver a ver al único hombre perteneciente al harem de Quanxi.

Aunque claramente lo hacían a su manera.

Por ejemplo, pingtsi empezó a decirle datos estúpidos sobre como la depresión afecta enormemente a un demonio cuando se encariña con un ser humano, aunque eso solo sea un mito en su mundo.

Long la cual era la más inocente del grupo si estaba llorando a mares mientras abrazaba a Denji, pidiéndole que no se volviera a ir.

Cosmo también estaba llorando, aunque únicamente podía decir su mítica palabra "halloween" por lo que Denji no podía entender lo que ella le estaba diciendo realmente, aunque suponía que era algo emotivo o quien sabe.

Tsugihagi era la única que no estaba diciendo nada, pero Denji al pasar tanto tiempo con ella, podía notar esos pequeños gestos que ella mostraba cuando quería expresar una emoción.

En este caso ella estaba triste, por lo que únicamente se inclinó un poco y empezó a acariciar su cabello.

Aunque también podía hablar, pero únicamente chino mandarín, por lo que si hablaba con Denji, este no iba a entenderla.

Pero al menos podía expresar su sentir con sus acciones, y eso bastaba para el rubio.

Y por último estaba Quanxi que aún se mantenia en su lugar mientras veía a Denji ser abrazado por su harem.

Y por mucho que quería ir a abrazarlo también, no dió ni siquiera un paso puesto que se sentía mal.

Las palabras del motosierra en verdad la habían dejado pensar con respecto al amor que le tenía al rubio.

En verdad lo estaba usando como un juguete?

Ella se decía asi misma que no era así y que en realidad lo amaba.

Pero a su mente venían los recuerdos de el porque lo estaba entrenando.

Y es que quería que él estuviera listo para cuando lucharán contra Makima si es que esta los atacaba.

También venía la razón por la que lo puso bajo su tutela, y es que no quería que Makima se lo llevara.

Esa fue la razón principal, no porque en verdad sintiera interés por él.

Únicamente no quería que fuera víctima de la mujer peli-roja, pero de ahí en fuera, no lo veía como alguien especial en aquel entonces.

Es por eso que, con esa reflexión, se mantuvo en su lugar y con la mirada baja.

La culpa la estaba invadiendo y aunque no pudiera expresarlo debido a su falta de gestualizacion, ella empezó a llorar.

Un llanto silencioso bajo aquella lluvia que poco a poco empezaba a calmarse.

No sabía que decir o como dirigirse a Denji, por lo que lo mejor para ella sería adelantarse para evitar una confrontación directa con él.

Pero más allá de los deseos que tenía, Denji mantenía una postura diferente a la de ella.

El rubio se levantó del piso y luego empezó a caminar directo hacia Quanxi quien aún mantenía la mirada baja.

Por lo que para ella fue una pequeña sorpresa cuando su campo de visión logró capturar al rubio quien llegó hacia donde estaba y posterior a eso, la envolvió en un abrazo.

- Denji?-

- hola señorita Quanxi...perdón por irme por una semana, se que no le gusta que esté en la calle sin usted, así que discúlpeme.-

- tú...no estás enojado conmigo?-

- para nada, y aunque lo estuviera, que podría a hacerle usted? Lo más probable es que me quiebre las piernas antes de que siquiera le dé un golpe.- dijo Denji en forma de burla para amortiguar la situación incomoda del momento.-

Y al parecer funcionó puesto que Quanxi bufó en señal de diversión y luego le devolvió el abrazo a Denji con muchísima más fuerza.

Mientras eso sucedía, las demás chicas simplemente se quedaron de expectadoras puesto que sabían lo mucho que significaba ese reencuentro entre ambos.

En otras circunstancias estarían celosas por ver cómo Denji se llevaba la atención de su maestra, pero ahora sabían que Quanxi en verdad necesitaba estar por un momento a solas con el rubio.

No sabían a ciencia cierta que fue lo que pasó en el infierno con ambos, pero si su maestra estaba así de afligida por volver a ver al rubio, entonces seguramente algo malo pasó.

Por lo que todas decidieron en conjunto en adelantarse a su casa para evitar irrumpir a ambos.

Aparte porque se podían enfermar, o eso fue lo que les dijo pingtsi la cual descubrió hace algún tiempo que los demonios si pueden sufrir de una enfermedad, aunque no era así con todos.

Pero para evitat dicha información con ella, mejor se fueron de ahí.

Ahora regresando con nuestros protagonistas.

Quanxi se sentía más calmada ahora que tenía a Denji entre sus brazos.

Por mucho que estuviera cuestionandose su amor por Denji, la realidad era diferente.

Ella en verdad lo quería, y se sentía tan tonta por no haberlo defendido cuando él más la necesitaba.

Es por eso que al estar ahí junto con él, se prometió que no volvería a cometer la misma estupidez.

Ya no volvería a dudar al momento de defenderlo a él o a cualquier persona que de verdad estime.

Así que de ahora en adelante no permitiría que Denji se alejara de ella.

Si antes ya era posesiva, ahora lo sería aún más.

Y el rubio se tendría que aguantar.

- en serio te extrañé denji.-

- yo igual... pensé que íbamos a morir ahí abajo, o en el infierno? No sé dónde queda exactamente, pero aún así tenía miedo de que algo malo le pasara, aunque puedo sacar algo bueno de todo esto.-

- uhm? Y que sería eso?-

- pues que finalmente pude verla en su forma de demonio, aunque por el miedo que sentía en ese momento no dije nada, pero debo de decir que su forma para transformarse es bastante genial.-

- hmm... supongo que está bien, después de todo te volviste mucho más fuerte que yo, así que tienes el derecho de verme en esa forma.-

- genial, ahora me dirá que cosas puede a hacer en ese estado?-

- no, te tienes que ganar esa información.-

- que? Pero porque? -

- porque yo lo decidí así.-

- eso no es justo.-

- la vida no es justa Denji, así que soporta.-

- jooo, vamos, no sea así conmigo, dígame por favor que puede a hacer?-

- uhm...está bien. En esa forma puedo tirar flechas como una ballesta.-

- eso ya lo se, pero que más puede a hacer?-

- solo eso.-

- que? Es en serio?-

- pues si. A diferencia de ti, yo no poseo un demonio súper poderoso. La mayor parte de mi fuerza bien en base a mi entrenamiento, así que mi estado de demonio es como un pequeño plus, pero a decir verdad no lo necesito para pelear.-

- Dios...no puede ser, y yo que pensé que podía tirar rayos o yo que se.-

- ni que fuera el híbrido del rayo...ahora vamonos a casa...a nuestra casa.-

- bien, aunque esto lo se va a quedar así, me debe algo más.-

- y ahora te pregunto yo, porque te debo algo más?-

- porque me oculto esa información como si fuera el mayor secreto del mundo, y no fue la gran cosa.-

- Denji, de por sí ya es información confidencial revelar el nombre del demonio con el que uno tiene contrato, ahora, contarte sobre lo que hace mi demonio y de dónde viene mi fuerza no te parece algo excesivo?-

- para nada, eso lo iba a saber de una u otra forma, pero no es justo que haya entrenado tanto como para que usted es capaz de tirar flechitas por medio del demonio arco.-

- corrección, es el ballesta.-

- la misma mierda.-

- uhm...bueno, que tal si te digo que en realidad no poseo un solo contrato con un demonio? -

Dicho eso, Denji volteó a ver a Quanxi totalmente intrigado, cosa que hizo felíz a la peli-blanca aunque no lo demostró.

- en serio? Y con quién?-

- lo siento, pero no te lo puedo decir ya que eso es algo que nadie sabe a excepción de mi.-

- oh vamos, ahora estoy sumamente intrigado, así que dígame por favor con que demonio tiene contrato.-

- hmm, está bien, pero te lo diré con una condición.-

- ¡claro! Pidame lo que quiera. Sino puedo conseguirlo entonces mandaré a las chicas para que me ayuden.-

- seguro? Podrías arrepentirte después.-

- pfff, el gran Chainsaw man no se retracta de su palabra, así que dígame, cual es la condición para que me revele el otro contrato que tiene?.-

- dios mío...me quiero morir.-

- y porque? -

- como que porque? ¡Mireme! Estoy haciendo el ridículo de mi vida.-

- pero si estás muy hermoso...te vez muy...sexy.- dijo Quanxi la cual se relamia los labios de manera lenta mientras veía a denji.-

Habían pasado dos días desde su reencuentro y ahora estaban dando un paseo por el parque.

Aunque la situación se presentaba sumamente incomoda para el rubio el cual quería que la tierra se lo tragara.

Y es que la condición que Quanxi le pidió para revelar el contrato que tenía con el otro demonio desconocido para él era que tenían que tener una cita los dos, pero con el pendiente de que él tenía que ir vestido como mujer.

Eso lo descolocó bastante, e incluso iba a rechazar a dicha propuesta.

Pero Quanxi repitió las palabras que él mismo le había dicho sobre que el hombre motosierra nunca se retracta de su palabra.

Y ahora, por culpa de eso estaba en el parque haciendo el ridículo.

Llevaba consigo una falta que le llegaba hasta las rodillas.

En la parte de arriba llevaba una blusa de manga larga proporcionada por pingtsi la cual no se molestó en ocultar sus burlas hacia él.

Y como calzado llevaba ya sus clasicas zapatillas blancas para salir y para cazar demonios.

Aunque eso sí, en su cabeza llevaba una gorra y traía puesto también unos lentes para que nadie lo reconociera.

Pero resultaba ser algo ridículo ya que no tenía amigos como para que alguien lo reconociera, aunque independientemente de eso, se sentía sumamente ridículo.

Y vaya que lo era.

- señorita Quanxi, y porque no mejor vamos a casa? Estoy seguro que ahí lo pasaremos mejor que aquí a fuera.-

- para nada, yo estoy disfrutando de esto como no tienes ni idea.-

- pero...-

- pero nada, quiero presumirle a todos el lindo novio que tengo.-

- lo sé pero...yo...usted.... nosotros... Dios mío... será que existe el demonio de la búsqueda?-

- uhm? Porque lo preguntas?-

- para poder pedirle su ayuda para encontrar mi orgullo.- respondió el chico quien sentía la mirada de algunas personas que pasaban cerca de ellos.-

Quanxi únicamente se limitó en acariciar las piernas expuestas de Denji mientras recostaba su cabeza en el hombro de este.

- descuida, son pocas las veces que tenemos la oportunidad de estar así de tranquilos, así que por esta ocasión permíteme ser así de egoísta contigo y déjame disfrutar del momento. Te prometo que no haremos esto de nuevo en varios años.-

- eh? Osea que haremos esto de nuevo?-

- claro...al ser seres inmortales es evidente que volveremos a hacer esto de nuevo en algún futuro no tan lejano.-

- pero señorita Quanxi, yo...-

Denji ni siquiera pudo seguir hablando puesto que Quanxi lo tomó del rostro y luego estampó sus labios con los de él.

Ella lo sabía porque había adquirido ese tipo de fetiche con él, pero no sé arrepentía de nada.

Únicamente quería disfrutar su vida al máximo, y si eso hacía que Denji se vistiera de mujer entonces lo harían siempre que lo deseara.

Cómo ahora que tenía unas ganas tremendas de llevarse a Denji a una habitación y tener sexo con él.

Y es lo que harían después de su cita.

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Nos vemos en la próxima.^^