Hoy presentamos...

"Su nombre"

—Le pedí ayuda a los más inteligentes de sexto— explicó Ángel Caído.

Cuando la explicación salió por la boca del chico de lentes, Joseph tosió irónicamente.

—¿Qué? ¿Hay algún problema?

—¿Huh? No, no, no... solo que no soy tan inteligente —explicó Joseph, alargando la "a" de "tan".

—Sí lo eres, créeme... pero tú estás aquí más que nada porque conoces la letra de cada alumno de sexto —cuando él dijo eso, J.P. sintió un calor en sus mejillas, se había ruborizado delante del chico de lentes.

Ángel Caído tira un suspiro un poco pesado y se apresura a decir:

—¿Ayudaras si o no?

—Cl-claro que sí —dijo aun ruborizado.

—Bien, todo muy bonito, pero... ¿Cómo se supone que te ayudaremos? —dijo Scott.

—Buena pregunta —habló ángel caído -. Solo hay que mirar a cada chico de sexto en la espera de que alguno haga algo sospechoso.

<Excelente, estoy perdido, no le mandaré ni una carta más>

Luego, Ángel Caído y Aracelly se largaron del lugar, dejando a Scott y a Joseph solos en la terraza.

—Mira, Joseph —llamó Scott, obteniendo la atención del castaño—... yo no tengo nada contra ti...

—¿De qué hablas?

—Por Jake y Kevin... yo no soy como ellos, solo estoy con ellos por el respeto de los demás... no quiero tener nada que ver con esos dos idiotas. Cuando Jake molestó a Ryan el otro día, quería darle un puñetazo para que la dejará en paz... pero si lo hacía, me iban a golpear.

—N-no hay problema.

—Y en nombre del idiota de Jake, te pido perdón por que te haya llamado Parrish... es que él es... un poco especial. De todos modos... adiós, Joseph, nos vemos mañana —se despidió Scott.

—¡Espera!

—¿Si?

—¿Sabes el nombre de él?

—¿De él?

—De quien nos pidió ayuda.

—Ah ya, sí, es Ruben.

—Gracias —sonrió levemente.

—De nada —y se marchó de la terraza.

<Diablos, que lugar más tranquilo... ¿Cómo no pude venir antes?>