Es extraño...cada vez que te veo...me entran ganas de golpearte. ¿por qué? bueno, quiero desquitarme ya que estoy confundido...confundido de lo que pienso.
¿por qué no puedo sacarte de mi cabeza? ¿será por que te odio? no, no creo que fuese por eso. Es más, no te odio. ¿que siento por ti?

Tu inocencia, tu delicadeza y tu inteligencia...es todo lo contrario a mi. Estás concentrado en el patinaje siempre y no te rindes...otra cosa que admiro de ti.

Cuando estás con Victor, no puedo evitar ponerme celoso. ¿estúpido? si, lo sabia.

¿puedes verme? yo a ti si. Veo las lágrimas que derramaste, el sudo que salía de ti cuando patinabas y el esfuerzo inmenso que usaste para llegar a la sima.

¿que es esto? ¿te envidio o algo? no sé el motivo de mi corazón aselerado o mi fuerte sonrojo.
Es muy extraño.
Me enojo siempre contigo sin razón, ¿que digo? me enojo con todo lo que me rodea! ¿como es que me soportas? Estoy casi seguro de que me echarían de la casa si fuera elección. ¿no lo crees?

Necesito que alguien me consuele si lloro, que alguien me calme cuando estoy enojado, que alguien me de comida si estoy hambriento...eso es lo que haces tu.

Hay veces en las que no controlo mi temperamento y mis sentimientos explotan pero, DATE CUENTA HOMBRE! QUE SON POR TI!!!

Date el tiempo de ver mi corazón de vez en cuando, de que si tengo uno! Vamos tonto! TE QUIERO! ¡¿CONTENTO?! YA ME OÍSTE!!!

Reíste.
Pensé que ibas a burlarte de mi pero...

-Yo también te quiero, Yurio.- respondíste con la sonrisa que siempre me dabas.

Te quiero, Yuri.