- ¡No, ni loco! - dijo Konsu horrorizado - Para empezar, no se que cara voy a poner ni que voy a decir luego de semejante escena hace tres días, va a ser muy incomodo. Ademas... no me atrevo a ir solo.
- ¿Y yo que soy, una roca? Déjame ir contigo - dijo Nandiza decidida - No pienso dejarte solo y no solo porque Scar me lo haya pedido.
- ¿Estas segura? - dijo Konsu algo dudoso - En ese lugar están... ya sabes... ellos.
- Lo se... - dijo Nandiza suspirando - pero en algún momento debo volver.
- Eres muy valiente, amiga - dijo Konsu invitando a Nandiza a subirse a su lomo, ella lo hizo - De acuerdo, iré... por ti.
- Ese es mi muchacho - dijo Nandiza felicitándolo.
Aunque ambos trataran de disimularlo, estaban muy nerviosos de regresar a las Praderas: Nandiza por su pasado y Konsu por lo de hace tres días... y porque, por alguna razón, ese lugar lo confundía a mas no poder. Ya estando a pocos pasos de la entrada, Konsu se detuvo.
- Esto es una estupidez - se dijo a si mismo.
- ¿Ahora que? - se quejo su amiga bajándose de su lomo.
- No debimos venir, esto... esto es un error - dijo Konsu tratando de irse pero una voz lo detuvo.
- ¿Konsu? - dijo Vitani acercándose al mencionado, notoriamente sorprendida y feliz - Viniste.
- Pues... si, eso creo - dijo Konsu nervioso e incomodo - La verdad no se si hice lo correcto, ni se como van a reaccionar al verme.
- ¿Lo dices por lo que paso hace tres días? - dijo Vitani, Konsu asintió - Escucha, no te voy a mentir; dijiste muchas cosas fuera de lugar... pero Simba también y lo reconoce, ahora quiere hacer las paces contigo.
- No lo se... - dijo Konsu dudando - es posible que ya se haya olvidado de su propuesta.
- Te aseguro que no lo hizo.
Ambos entraron en la cueva y, al ver a Konsu, todos lo miraron sorprendidos. Konsu no tuvo el valor de mirar a nadie a los ojos y Nandiza ni siquiera entro, solo se mantuvo oculta en la entrada.
Continuara...