CALENTAMIENTO.

El amanecer de un nuevo día comenzó a brotar por toda la ciudad de Royal Woods. Rachel y Liam habían llegado antes al salón, solo esperaban a que el peliblanco llegara.

"¿Crees que Lincoln llegue?" Pregunto la pelinegra.

"Estoy seguro, hoy entregan las notas finales. A menos que haya ocurrido un inconveniente." Comento Liam.

"No creo que sea Chandler, escuche que había sido suspendido junto con su pandilla. Y no dudo que haya sido Lincoln quien les haya dado una lección. Posiblemente ellas, digo, no es novedad después de tanto." Dijo Rachel.

"¿Qué paso entre ustedes cuando me fui?" Pregunto Liam.

Rachel tuvo un ligero sonrojo al recordar lo que paso con Lincoln, pero luego recordó que habían sido interrumpidos con los mensajes de sus padres.

"Recibió un mensaje de sus padres. Pero decidió esperar a que tuviera que regresar." Respondió la pelinegra.

"Eso confirma todo, una pelea o discusión." Dijo Liam.

El peliblanco había llegado a las instalaciones, algo diferente, llevándose las miradas de los presentes quienes comenzaron a murmurar. Lincoln tenía una expresión fría, mirando hacia el frente.

En ello un par de personas pasaron frente a él con la misma cara, como si trataran de amenazarlo. Y lo único que el peliblanco hizo fue detenerse un momento, y levantar su brazo, formar su mano como un arma, y hacer un gesto de disparo. Y que de fondo se escuchó decir, oh la miseria, todo mundo quiere ser enemigo.

Se dio vuelta y continuo con su camino. Llego al salón llevándose las miradas de todos nuevamente. Veían al peliblanco de forma diferente, parecía más duro, frio. Vistiendo su vieja camisa naranja, pero ahora abierta, mostrando una playera gris oscura de manga corta, mostrando algo de musculatura en sus brazos, y un par de cicatrices en ellos.

Liam y Rachel, iban a hablar con él, pero este se les adelanto en hablar.

"Se los contare todo en el receso." Dijo el peliblanco.

Las clases comenzaron, los alumnos realizaron los exámenes finales. Entre los tres chicos se podía sentir la tensión, Liam pese a la curiosidad podía trabajar sin problemas. Rachel por su parte le costaba concentrarse sin tener que mirar al peliblanco, al tratarse de un asunto delicado, era obvio que estaba impaciente.

Pasaron alrededor de 15 minutos, y el peliblanco ya había terminado y fue a entregar su examen. Antes de retirarse, le dio una mirada Rachel, indicando que volviera al examen, en un momento sabría la verdad.

Luego de que todos terminaran y llegara la hora del almuerzo. Rachel y Liam fueron con el peliblanco, quien estaba en el salón de música tras escuchar unas melodías peculiares.

Estaba practicando con su vieja guitarra. Pareciendo una canción que él peliblanco acompañaba con el sentimiento de ira.

En ocasiones la vida solo nos quiere lejos

Sin importar que ha nosotros nos vaya mal o bien

Nos trata como inmundicia sin valor.

No importa cuánto te esfuerces

Sino demuestras ser el más apto

Te pisaran sin piedad.

Si le sumas las injusticias y dolor,

Solo es un fabricante para el miedo y la ira

Pero

A MI NO ME IMPORTA

No me importa si estoy acabado y sin ganas de poder pelear

Me levantare las veces que sean necesarias.

Peleare con todo, porque esto es la guerra,

Si acabo contigo

Podré estar en paz

De una vez por todas.

Rachel decidió intervenir, en la melodía, tomando una guitarra.

Por más que quieras venganza

No puedes dejar que te consuma...

El dolor esta presente en la vida y te deja cicatrices

Pero las heridas sanan, al igual que alma.

La venganza no es la solución

Estas dolido porque tu historia no tendrá un principio feliz

Pero... eso no te convierte en quién eres

Has demostrado ser más que un guerrero

Y eso es lo que caracteriza, das todo por los que quieres.

Ten calma porque estoy aquí

No voy a dejar que te vuelvan a herir

No quiero que cambies esa personalidad

Eso es lo que hizo que tu fueras mi amigo.

Serás duro como una roca por fuera

Pero por dentro, yo sé que eres dulce

Te has abierto conmigo, y eso es algo que agradezco,

Y no pienso irme

Jamás lo hare por más difícil que sea

Y por duro que llegue a ser

El dolor.

Lincoln nuevamente toco la guitarra.

Se que intentas protegerme del corrompimiento

Pero no lo puedes evitar

Y eso te llena de impotencia por no cubrirme del dolor.

Pero no importa, porque estoy roto desde hace tiempo

No quiero que tu sufras, porque no tienes que ver en mi guerra interna.

Mi historia es como el horror de Hollywood

Presión, dolor, alteraciones y humillaciones

...

Ya nada importa

Lo único que importa es detener esto

Antes de que me convierta en un monstruo sin corazón.

Y no quiero que veas

El dolor de mi alma

El dolor de mi ser, siendo destrozado

Consumiéndome de poco a poco.

Rachel

Crees que el dolor es imposible de superar

Pero no es así, seguirá ahí si tu no lo superas

Tus luchas podrán no tener sentido

Y tu familia sin solución

Pero no es tu deber arreglarla y tampoco es tu deber

Hacer que te comprendan

Mi familia es así, pero les demuestro mi fortaleza

Y ellos entienden que mi camino y mi vida

Son mi decisión.

Y puede que yo no los entienda jamás

Pero eso no me detiene a lograr grandes cosas,

Tu deberías pensar en eso,

Porque no estas solo.

Lincoln estaba preparado para tocar, y Rachel estaba en las mismas para que los pudieran responder.

Lincoln

Desde que te conocí

No es has despegado ni un segundo

Pude parecer alguien patético

Aunque jamás pensé que te llegara a importar

Rachel

Serás un despistado

Porque ni siquiera captaste mis indirectas

Pero debo admitir que me gusta esa inocencia

A pesar de estar roto, aun eres ese niño pequeño

Lincoln

Quizás hayas sido dura en los primeros instantes

Pero era porque jamás llegaron a comprenderte

Lo bueno que no eres la única en el club

Nos sucederán cosas locas

Pero es toda una aventura nuestra amistad

Rachel

Estando en posiciones diferentes,

No quita el hecho de que somos muy buenos amigos

Sin importar lo loco que llegue a ser

No me molesta estar contigo.

Lincoln y Rachel

Estando juntos es lo que importa, siendo ignorantes

De lo que pasa alrededor

Viajando como millonarios vagabundos

Riendo, jugando o platicando.

La verdad es que agradezco haberte conocido

Sin importar las circunstancias

Siempre será así.

Ambos terminaron, dejaron los instrumentos aun lado.

"Nunca dejas de sorprenderme Rachel, también sabes tocar." Dijo Lincoln.

"Quien dice que eres el único que lo hacía. Aun recuerdo cuando tocaste en ese concurso de talentos, en eso me inspire a poder entender el ritmo de tus canciones." Comento Rachel.

Liam estaba viendo todo y soltando un par de lágrimas. "Eso fue hermoso. No sabia que ambos tocaban juntos."

"Oh no, no suelo tocar muy a menudo." Dijo Rachel. "Supuse que era bueno acompañar el momento. Dejando eso de lado, ¿Te gustaría explicarnos que fue lo que paso?"

"Chicos, cambio de planes." Dijo Lincoln. "No solo iré contra mis hermanas. Para poder ser libre, debo vencer a mi familia."

Rachel supo de inmediato lo que dijo. "Me lo suponía. Tus padres se pusieron de lado de ellas." Comento.

"Ayer tuve una discusión con ellos, dijeron que porque no ayudaba a la familia, que mi actitud era rebelde, y para rematar que estaban decepcionados." Dijo el peliblanco con algunas risas. "Lo único hice fue darles viada, pero sino fuera porque Lynn colmo mi paciencia mientras las demás estaban con sus sonrisas pedantes.

Exploté, y lo hice de una forma que nunca lo había hecho. Sacando a la luz muchas verdades." Dijo Lincoln.

"Normalmente diría que no debiste actuar así, pero... me alegra que por fin hayas tenido el valor de enfrentarte a ellos, y por fin tuviste los pantalones para decir las cosas como son." Dijo Rachel.

"Tú lo dijiste. Debía enfrentar mis problemas tarde o temprano." Dijo Lincoln.

"Jamás te dije eso, pero entendiste el mensaje." Dijo Rachel.

"¿Y que más paso?" Pregunto el granjero.

"Estaba en el baño cuando todo termino, o eso creí. Terminaba de ducharme y fue cuando escuche por el ventilador a lo demás." Dijo Lincoln.

Pasando a la retrospectiva, Lincoln fijo su atención a lo que se decía en la habitación de sus padres.

"¿Qué podemos hacer para Lincoln entienda que debe apoyar a su familia?" Pregunto Rita.

"No lo sé cariño. Lincoln jamás había actuado así. Me pregunto que lo habrá cambiado de esa manera."

"Si tuviera que decirles algo, creo que sus relaciones le han afectado en su comportamiento." Dijo Lisa.

"Sin mencionar las múltiples faltas de respeto que nos ha dado. Se ha vuelto un completo bravucón con todas nosotras. Hace tiempo que ya no nos ayuda con nuestras actividades y se atrevió a decirnos perdedoras." Dijo Lola.

"Nosotras pensamos que un castigo no bastara. Creo que deben ser más duro." Dijo Lana.

"Lo sabemos chicas, pero no tenemos idea de que podemos hacer ante la rebeldía de Lincoln, ustedes a diferencia de él, se han mantenido por el buen camino." Dijo Rita.

"Si nos lo permites mama, nosotras nos encargaremos, haremos un acuerdo con Lincoln, y cuando lo logremos, verán que pronto estará con la familia."

"Hagan lo que deban hacer chicas." Dijo Lynn padre.

Volviendo al presente. No hacía falta mencionar las expresiones que tenían Rachel y Liam.

"A veces me pregunto como personas como ellas pueden ser padres." Dijo Rachel sobándose su sien.

"Hasta parecen padres sacados de anime, y me quedo corto." Dijo Liam.

"Y eso no fue todo, ellas esperaron a que todos durmieran, y me llamaron a la habitación de Lori y Leni." Dijo Lincoln.

Regresando a la retrospectiva, vemos como el peliblanco se estaba acercando al punto de reunión y estando frente a la puerta de la habitación, dio un suspiro, y cuando se abrió la puerta, entro con una determinación.

Como era de esperarse, las hermanas estaban de pie esperando al peliblanco. Frente a frente, estuvieron así por un momento. Hasta que Linka y Liberty dieron un paso al frente.

"Muy bien Lincoln, supongo que sabes la razón del porque estás aquí." Dijo Linka.

"Lo sé. Quieren que lleguemos a un 'acuerdo' de todo esto." Respondió el peliblanco.

"Antes de que pasemos a tu sentencia. Te lo diré una ultima vez Lincoln. Dejémonos de estas tonterías, olvida todo, vuelve a la familia y todo será como antes." Dijo Linka.

"Aunque suene tentador, debo decir que no me gusta retirarme cuando estoy ganando." Respondió el peliblanco.

"Muy bien. Entonces pasemos a lo que todos estipulamos." Dijo Linka.

Ambos bandos, fueron a realizar un pequeño acuerdo. Estipulando y quitando ciertas reglas para que fuera pareja la situación. Por parte de Lincoln, era cuidadoso con lo que estaba de acuerdo y con lo que podía estipular, sabía que no podía dejar vacíos legales que podrían perjudicarlo.

Posteriormente de que todo estaba terminado y acorde a lo que tenían pensado. Una vez todos firmaron, ya no había vuelta a atrás.

"Bien hermanito, ve despidiéndote de todos, porque no creo que puedas vencernos, ni siquiera a podrías vencer a Lily." Dijo Lola con arrogancia.

"Me alegra que tengas esa gran seguridad pequeña sigue así." Dijo Lincoln con burla mientras revolvía su pelo.

"Muestras mucho valor para enfrentarnos a cada una de nosotras, espero que no pienses echarte para atrás." Dijo Lynn. "Te advierto que no tendré compasión hacia a ti."

"Con suerte y logres darle a una pelota de golf."

"Con suerte sepas dar un solo de guitarra."

Las chicas comenzaron a balbucear de que son mejores para el aburrimiento del peliblanco sabiendo que no son más que provocaciones. Nuevamente en su cabeza comenzó a oírse voces. Empezaron a escucharse de una forma suave.

"(Acabalas... acabalas... acabalas.)"

...

"(Acabalas... Acabalas... ACABALAS.)" El peliblanco llevo sus dedos a su sien tratando de calmar el dolor.

...

"(ACABALAS, ACABALAS, ACABALAS, ACABALAS.)" Se hacia más y más fuertes las voces mientras eran acompañados los cacareos de las demás.

Si quería evitar un dolor de cabeza lo cual parecía inevitable a que pasara, debía ponerle un alto a todo esto.

"Yo que ustedes mejor dejo el parloteo antes de que las consecuencias lleguen para ustedes chicas." Dijo Lincoln.

"Ja que podrías hacer tu contra nosotras." Dijo Lynn.

"Ya no soy ese niño de 9 años al que podías sermonear a tu antojo Lynn, y como se los demostré a cada una de ustedes. Puedo patear ese trasero plano tuyo las veces que yo quiera." Dijo El peliblanco haciendo que la deportista se enfadara.

"Te crees mucho solo porque nos agarraste desprevenidas, pero eso no volverá a pasar." Dijo Lana con enojo.

"Tengo dos palabras para ti si es que tengo que tomarte en cuenta, y son higiene personal." Dijo Lincoln.

"¿Y que piensas hacer para ganarnos perdedor?" Pregunto Leni molesta.

"Tengo un corazón rebelde. Puedo hacerlo si quiero..." Se adelanto a lo ellas iban a decir. "Y antes de que saquen otro comentario tonto, les diré que mejor se callen de una vez, porque cada vez que tengo que escucharlas, empiezo a escuchar voces en mi cabeza, voces que me hablan a mí, diciendo... que acabe con cada una de ustedes... Y ustedes no querrán ver como es que empiezo a obedecer esas voces, y ver como es que saboreo el dolor de cada una de ustedes." Dijo El peliblanco.

"Parece que te golpeaste fuerte la cabeza, y estas empezando a volverte loco." Dijo Liberty confundida.

"¿Y de quien es la culpa?" Pregunto el peliblanco con enojo.

El peliblanco comenzaba a molestarse, se tranquilizo un momento, y quiso tomarse la situación con un poco de humor.

Dando una pequeña risa dijo. "Les deseo suerte, chicas, pero antes de retirarme, les daré una pequeña probada de mis habilidades."

Y le dio una patada en la quijada a Lynn, logrando derribarla con las demás. Y con una sonrisa de victoria, salió de la habitación.

Volvemos al presente. Lincoln termino de contar lo transcurrido. No hacia falta mencionar las expresiones de Liam y Rachel.

"Vaya forma de calentar las cosas Loud. Eso quiere decir que tenemos mucho trabajo por hacer." Dijo Liam.

"En efecto, aunque por ahora podemos ir tomando las cosas con calma, los eventos comenzaran dentro de un mes, tendremos una semana libre antes de comenzar con lo que tengo en mente." Dijo Lincoln.

"Suena bien, aunque no dudo que tus hermanas se querrán aprovechar de esto para..." decía Rachel, pero el peliblanco lo interrumpió.

"Me asegure de que no cometieran algún acto tonto, estamos seguros por ahora de estas niñas cumplan por lo menos una parte de su palabra por ordenes de Linka y Liberty." Dijo Lincoln.

"De acuerdo. Tendremos que avisarle a Sayaka sobre el cambio de planes." Dijo Rachel "Exactamente ¿Qué tienes pensado Lincoln?"

"Solamente practicar un poco Rachel, conozco los puntos fuertes y débiles de esas chicas, solo debo utilizarlos a mi favor. No digo que será fácil, pero esta base que tengo la podemos ir construyendo de poco a poco." Comento el peliblanco.

"Usted tiene un plan Loud, hagámoslo." Dijo Liam con emoción.

El timbre sonó indicando el regreso a los salones.

"Hora de que entreguen las notas chicos, veamos que tal nos fue." Dijo Liam mientras se adelantaba en el camino.

Lincoln y Rachel salieron del salón de música. El peliblanco estaba algo cansado luego de lo transcurrido en la noche anterior, en su cabeza seguía retumbando las voces de sus hermanas, además de pedir que acabe con ellas, solo hacían que tuviera un dolor de cabeza. Por sino fuera poco, como si un rayo partiera su cabeza, recordó el trato que hizo con los señores River a espaldas de Rachel, haciéndolo sentir mal en el progreso. Sabía que no había bien, sin embargo, las circunstancias conllevaron a que le mintiera a su amiga a cambio de obtener beneficios.

Su cabeza estando a punto de estallar, los problemas no dejaban de hacerse sonar, conllevando a que el albino se llevara mano a su cabeza, tratando de poder disipar un poco el dolor.

Rachel noto esto y dijo. "Lincoln ¿Qué ocurre?"

El peliblanco salió de sus pensamientos, y miro a la joven. "Descuida Rachel, solo estoy algo cansado por todo esto." Respondió el peliblanco.

Rachel notando esas ojeras y el rostro de cansancio del peliblanco, pensó en algo que quizá ayudaría.

"Oye Lincoln ¿Te gustaría venir a mi casa? Supongo que necesitas un descanso de todos ellos, y te ayudara a despejarte un poco." Propuso la pelinegra.

"Me encantaría Rachel, pero no quiero dejar a Luan sola lidiando con..." Recibió un mensaje en su teléfono, era de Luan.

_Hey Linc, te aviso que hoy no podré estar en casa, iré a una pijamada con mis amigas. Así que si tienes un plan con tus amigos, puedes quedarte con ellos sino quieres lidiar con los demás. _

"Conveniente." Dijo el peliblanco, y comenzó a textear.

_Okey Luan, estaré con ellos después de las clases, avísame si necesitas algo, diviértete. _

_También tu hermano. _ Respondió Luan.

"Bueno... Luan ira a una pijamada con sus amigas. Supongo que aceptare tu invitación." Respondió el peliblanco.

"Bien, iremos después de la escuela." Dijo Rachel.

Ambos chicos llegaron al salón, yendo a sus respectivos lugares y a esperar que recibieran sus notas.

"¿Nerviosa?" Pregunto el peliblanco.

"Algo, la verdad es que no había sentido así antes con esto. Normalmente le daba viada a esto, pero ahora siento que esto es importante de algún modo." Dijo Rachel.

"Te esforzaste Rachel, mejoraste durante todo este tiempo para ser una buena estudiante, es normal que sientas esos pequeños nervios." Dijo el peliblanco.

"Si... aunque fue gracias a ti... de no ser por ti creo que no hubiera decidido hacer esto." Dijo Rachel.

"Claro que no Rachel. Solo te di un empujón, tu fuiste la que actuó para mejorar." Respondió Lincoln.

Pusieron atención para poder recibir cada uno sus respectivos expedientes. Mientras ellos se encargan de eso, pasaremos a ver a la mansión River.

Nos centraremos en el despacho de los señores River. Michael y Tatchel regresaron temprano del trabajo, y tenían que hablar un tema en particular.

"Michael, no creo que sea momento para hablar sobre la inversión de la magicorbata." Dijo Tatchel con seriedad.

"Primero que nada sería una buena inversión, y segundo, no es el tema que quiero hablar. Quería preguntarte sobre Rachel." Comento el padre.

"¿Se metió en problemas?" Pregunto Tatchel.

"No, solo que... ¿No has notado que pasa mucho tiempo con Lincoln?" Pregunto Michael.

"Umm... ahora que lo mencionas, es verdad. Pero no creo que sea nada malo. Lincoln a demostrado ser un chico de confiar, y no haría nada malo con nuestra hija." Dijo Tatchel.

"Si, aunque no se si has notado que ella a estado un tanto distraída cuando platicamos." Dijo Michael. "Es como si tuviera la cabeza en otro lado."

"Lo he llegado a notar querido, aun así, no creo que sea por Lincoln, me imagino que deben ser cosas de la escuela o de sus pasatiempos." Dijo Tatchel.

"Umm... puede ser, aunque no paso por alto que tal vez tenga que ver con él. Es decir, pasan tiempo juntos, ya sea por gusto o por escuela, siempre habla sobre él, y no dudo que ha de pensar sobre él." Expuso el señor River.

"¿Quieres decir que nuestra hija puede estar interesada en Lincoln?" Pregunto Tatchel de forma deductiva.

"Es una posibilidad, aunque yo diría que es Lincoln quien este interesado en nuestra hija, y que la esté atrayendo de una forma. Recuerdo que una vez conversamos sobre el futuro de nuestras hijas y no le agrado la idea que teníamos sobre los pretendientes para ellas." Dijo Michael.

"Bueno, es entendible, Lincoln se ha hecho un buen amigo para Rachel, es lógico que se llegue a preocupar por ella. No crees que nos recuerda a nosotros de jóvenes."

"Si... pero eso fue diferente... esos tiempos eran horribles." Dijo Michael, mirando hacia la ventana.

"Aun recuerdo la vez que te acercaste a mi para hablar conmigo, con tan solo decirte hola ya ibas a lanzarte por la ventana." Dijo Tatchel abrazándolo.

"Si..." Dijo Michael con algo de vergüenza por recordar eso.

"Y recuerdo que festeje mi cumpleaños con mis amigas, teniendo un muffin con una vela, y llegaste con mi pastel favorito."

"Bueno... era lo menos que podía hacer por ti." Respondió.

"Y en el baile de graduación en la primaria no tenia nada que ponerme, y me llevaste al centro comercial a comprarme un vestido."

"Te veías radiante en ese baile."

"Si bien, me consentiste con esos lujos, lo que realmente valore de ti, es que me defendieras en todo momento, me cuidaste cuando estaba enferma, y me consolaste cuando... mis padres murieron. A pesar de lo que tus padres dijeran, siempre estuviste ahí para mí." Dijo Tatchel.

"Lo sé cariño. Es solo que... me preocupa el futuro de Rachel. Se que podemos confiar en ella, pero no me fio de quienes estén con ella. Es por eso que necesitamos conseguirle un pretendiente cuando sea el momento, y dejar las reglas claras para que no se quiera aprovechar de ella." Dijo Michael.

"Creo que te preocupas demasiado cariño. Lincoln sabe muy bien lo que le corresponde, y para ello necesita ganarse la confianza de nuestra hija. Puede que tengan un acercamiento, pero no creo que pase más allá de eso." Comento Tatchel.

"Eso espero." Dijo Michael.

Retornando con el trio en la escuela, fueron saliendo de uno por uno luego de recibir sus notas. Lincoln y Liam habían salido primero, solo esperaban a Rachel con sus resultados.

Lincoln por su parte estaba pensando en lo que había hecho cuando firmo el acuerdo con los Señores River. Viendo lo trascurrido hasta llegar en donde están, por un momento pensó que no todo era malo, ya que Rachel mejoro su posición en la escuela y cambio su manera de ver a su familia, además de eso, se estaba ganando la confianza de la familia River, incluso a verlos como una familia.

Y también se sentía mal por haber llegado a tales extremos solo por ya no ser más la oveja negra de su familia. Y ahora que lo pensaba, llego a la conclusión de que ellos jamás lo quisieron del todo, quizá por riñas contra el abuelo, solo para añadir el hecho de que él tiene más capacidad que cualquiera de ellos.

Jamás quiso ser superior a ellas, tenía miedo de hacerlas sentir mal en esos momentos, pero ahora viendo las circunstancias, debía imponerse ante ellos para ser libre de una vez.

Salió de sus pensamientos cuando Rachel salió del salón de clases, tenia un rostro sin emoción. "Chicos..." Dijo con tono seco. "Si pase. Logre pasar chicos."

Expresando felicidad, Lincoln y Liam festejaron eso abrazándose los tres juntos. Habían tenido éxito antes de poder comenzar las vacaciones. O al menos, el verdadero reto que se les venía en frente.

CONTINUARA...