Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

El Amor (no) Existe

Existen muchos significados de la palabra amor, pero el sentimiento es difícil de describir. 

¿Cuándo sabes que amas?

¿Cuándo sabes que te aman?

¿Difícil saberlo verdad?

Mi historia en la búsqueda del amor comienza así.

Kim Taehyung, hijo mayor, tres hermanos. Mi familia es aparentemente "perfecta". Más adelante les contaré porque ahora no pienso así.

Cuándo inicie mi vida escolar, era de pocos amigos, pero yo no me sentía mal por eso, al parecer mi maestra no pensaba igual.

Mandó a llamar a mis padres porque según ella, yo era antisocial. Creo que no fue la palabra adecuada, tal vez mi maestra no conocía al fondo ese tema.

Pero aquel adjetivo lo usaba en mi, porque yo no me integraba con los chicos de mi edad.

Pero es que, yo siempre he sentido que nací en una época diferente, siempre sentí que no encajaba, por eso permanecía solo, y aunque para otros era extraño, yo me sentía cómodo con eso.

A la edad de 10 años, experimenté eso que llaman "atracción". Aquel chico era hermoso, sus ojos eran expresivos, su piel blanca, su cabello castaño.

Era tan amable conmigo, especial. Era mi único amigo se podría decir. Uno real, no de apariencias.

Pero todo aquello duró poco, al siguiente año escolar, él no volvió, jamás lo volví a ver, solo recuerdo su apodo, porque su nombre es borroso aún para mi.

Cuándo empecé mi preadolescencia, donde todos empiezan a tener pretendientes, yo era un alma inexistente. Tal vez no era lo suficiente, o mi personalidad extraña los alejaba, aún no lo sé.

Sin embargo, en mi inocencia de la vida, creía en el amor de cuentos, no de princesas. Siempre me gustaron aquellas épocas donde existía el caballero y la dama, el amor creo que en esa época fue diferente, era un poco más real, no sé.

Me hubiese gustado vivir en aquella época. Creo que mi mente vive allá, en este mundo tan moderno.

A esa edad, consideraba que el amor era hermoso, donde se cortejaba, se cuidaba el corazón, no había sufrimiento.

Pero unos años después, mi mundo perfecto, empezó a ir en picada. Cuándo me enteré que mi perfecta familia no era cómo pensaba.

Mi padre le era infiel a mi madre, ella por mantener la familia y el matrimonio, lo perdono. No una, sino tres veces.

El hombre perfecto que era mi padre, mi héroe, se cayó del pedestal.

Ahí empecé a dudar, si la perfección existía. Yo apenas tenía 13 años. Y sin poder comprender mucho, mi corazón se fue agrietando.

Puedo decir que mis amigos los contaba con la palma de una mano. Solo algunos entendían mi compleja forma de pensar.

Cuándo entendí que el amor tenía género, según la sociedad, me asusté. Yo pensaba que el amor se daba con quien tu congeniabas, o quien te atraía.

Allí comprendí. Que era homosexual. Recordé con dolor mi primer amor. Mi chico sin nombre.

Ser homosexual es el mayor pecado en mi sociedad. Yo sin saber a quien confiarle mis dudas, o preguntas sobre aquello. Lo guardé para mi. Hasta que fue tan evidente que empezaron las burlas.

Muchas palabras horribles cayeron sobre mí, ahora trato de no recordarlas. Pero las más dolorosas no eran sobre mi sexualidad.

"Nadie nunca lo va a querer"

"Nunca tendrá novio"

Frases que hicieron dudar de mi aspecto, no creo ser el más hermoso, pero no creo ser tan feo.

Para mi mala suerte, los años pasaron y nunca tuve un pretendiente. Todos a mi alrededor, ya habían tenido su primer novio. Ya algunos hasta se preocupaban por embarazos.

Y yo a mis 16 no sabia que se sentía dar un beso. Me empecé a sentir la persona más fea del mundo. Era delgado, pero empecé a no comer. Me veía fatal.

Hasta que llegó él. Uno de mis mayores karmas.

Mi vecino.

Era alguien muy alegre, se hizo muy amigo de mi hermano, permanecía mucho en casa, jugando videojuegos.

Un día en el juego de la botella, nos dimos un beso. Mi primer beso. Fue algo raro, pensé que sería mágico, lamentablemente fue algo muy húmedo y baboso. No me gustó. Faltal mi primer beso.

Pero de ahí, aquel chico empezó a buscarme. Me pidió ser su novio.

Era simplemente tan perfecto y bueno que no parecía real. Muy romántico, me escribía cartas todos los días.

Iba por mi al instituto, me sentía en las nubes. Hasta que me pidió la "prueba de amor". Se molestó cuando me negué. Nuestra relación terminó porque no quise entregarle mi cuerpo.

Lloré por las noches, arrepentido. Pensando en que debí hacerlo, para no perderlo.

Fue tan difícil, aquel amor tan bonito que me profesaba quedó en aquellas cartas. Porque al mes ya tenía otra pareja.

Verlo con su nueva pareja, fue la peor tortura de mi vida. El amor dolía, no entendía porque, si para mi el amor era hermoso, pero verlo con otro, mi corazón se agrieto un poco más.

Dirán que soy masoquista, porque luego de unos meses volvimos, terminamos la relación diez veces, en un ciclo de terminar y volver. Me di cuenta que era un amor tóxico.

Empezó a celarme en exceso, prohibiendome usar ciertas prendas.

Cuándo iba a iniciar mi vida universitaria, debía viajar lejos de casa, le propuse terminar, pero él no quisó, dijo que me amaba. Yo aún no sentía eso por él, la palabra "te amo" para mi, es demasiado. Lo quería, si. Pero aún no "lo amaba".

La distancia enfrió todo. Mi primera relación llegó a su fin.

Cuándo cumplí la mayoría de edad. Los anhelados 18 años. Seguía virgen y con un solo novio en mi historia amorosa.

Conocí a un chico muy trabajador, pagaba sus estudios, ayudaba a sus padres. Era casi el hombre perfecto. Caballero y atento, como me gustan.

Sin temores, perdí mi virginidad con él. Fue mágico, realmente amé mi primera vez.

Me llevó a un hotel, decorado con globos, flores.

Me desnudo poco a poco, yo con temor de mostrar mi cuerpo, pero él me dijo tantas palabras hermosas que termine por exponer tanto mi cuerpo como mi corazón.

Hubo sangre. Me dolió. Pero él me cuido. Agradezco que él haya sido mi primera vez.

Me sentía tan feliz, era un hombre maravilloso. Salimos a bailar, a comer, al cine. Pero todo acabó cuándo falleció.

Dicen que las motos son peligrosas. Yo ahora las odio. Una moto se llevó a mi segundo amor. Mi corazón se agrieto otro poco por su ausencia.

Duré dos años sin ninguna relación. No quería saber nada del amor. Solo quería terminar mis estudios, enfocarme en algo que no siguiera dañando mi corazón.

Hasta que aquel hombre llegó a mi vida. Quien puso mi mundo de cabeza.

Cuando dicen que la persona que amas es la que más daño te hace, la frase carece de sentido. Si alguien te ama, no lastima.

Pero aquella persona que tiene tú corazón en las manos, es la que te puede destruir con facilidad.

-¡Vamos Tae!, hoy es viernes, ya tienes 22 años, debes vivir tu vida-

-Sabes que las fiestas no son lo mío Jimin-

-Vamos, sólo por hoy- Me suplicó, y bueno Jimin es mi mejor amigo, accedí por él.

Escogí mi mejor atuendo, desde que falleció mi exnovio no había salido a bailar, casi no salía a nada. Todo me lo recordaba.

En aquella fiesta habían estudiantes de todas las carreras, de todos los semestres, podrías conocer a muchas personas o tal vez a ninguna.

Y allí estaba él. Jeon Jungkook el chico más popular de mi carrera. Inteligente, carismático, muy atractivo.

Amigo de Namjoon, el novio de Jimin. Nunca habíamos cruzado palabra más allá de trabajos en la universidad.

Pero era agradable, y conmigo muy amable.

Esa noche me invitó a bailar, y casi toda la noche hablamos. Al parecer teníamos muchas cosas en común. La conversación fluía maravillosamente.

Las palabras de Jimin retumbaban en mi mente.

"Esta noche olvidate de todo, deja atrás el pasado, date una oportunidad, no pienses tanto las cosas"

A veces pienso que mi vida hubiese sido distinta, si las decisiones que tome fueran otras. Pero no puedo llorar, ni cambiar nada.

-Eres hermoso Taehyung, ¿Lo sabías?-

No sé si es por mi inexperiencia en el amor, pero las palabras de afecto o los halagos, me sonrojan fácilmente.

-No me lo habían dicho, gracias-

-Porque las personas no saben apreciar la belleza-

Mi corazón dolió. ¿Aquel chico quería jugar conmigo?

-¿Qué quieres, porque me dices esto?- Mi semblante se puso serio

-No quiero nada, sólo he notado que te escondes, te aislas, nadie te ve, excepto yo. Eres hermoso, quería decírtelo-

-Mira, Jeon... Si buscas sexo, solo dilo, no necesitas decirme palabras bonitas-

-Entiendo que te pongas a la defensiva, hoy en día muchos usan el amor cómo excusa para el sexo. No niego que quisiera tener sexo contigo, me gustas mucho, pero antes de eso, quisiera conocerte más, tal vez tener una relación-

-¿Qué tipo de relación?-

-Una relación amorosa, un noviazgo-

-Lo siento, yo no estoy listo para eso-

-Bueno entonces déjame cortejarte-

"Cortejarme"

-Nadie usa esas palabras hoy en día-

-Yo si, no soy nadie, soy Jeon Jungkook-

Mi agrietado corazón se sentía cálido. ¿Tal vez era él a quien yo esperaba?

-¿Cómo piensas cortejarme?-

-Por ahora podemos seguir bailando- Me extendió una mano para salir a la pista en medio de aquella fiesta.

Aquella noche bailamos hasta que los pies me dolieron. Me acompañó a casa. Fue paciente. Caballero.

Mi corazón dudaba, pero también quería dejarme llevar por el remolino de emociones que me hacía sentir.

Durante dos meses, tuvimos muchas citas, sentía que lo conocía de toda mi vida, como si fuera mi alma gemela perdida.

Nos hicimos novios, luego de varios meses de "cortejo" como lo llamaba él.

La primera noche que nos entregamos, sentí que fue como la primera, porque fue maravillosa. Aquella no tuvo flores ni globos, pero si amor. Hicimos el amor.

Durante dos años tuve la mejor relación del mundo. Sólo él logró que mi corazón dijera "te amo" por primera vez.

Terminamos la universidad, nos casamos, ambos teníamos los mismos planes. Un hogar, una familia. Envejecer juntos.

Pero luego de casarnos. Empecé a conocer a otro "Jeon Jungkook"

Uno más temperamental, que se alteraba con facilidad, discutiamos por cosas sin sentido.

Empezó a refugiarse en el alcohol, debido a esto perdió varios empleos.

Pero yo soportaba. Lo amaba. Pero en el fondo amaba al otro "Jungkook". Anhelando que regresará algún día.

Una noche de discusiones se fue. Llegó al otro día, con evidencias de una infidelidad. Aquello fue el inició de mi sufrimiento.

-Perdoname amor, yo estaba ebrio, no sé ni qué fue lo paso-

Mis lagrimas salían, mi corazón que parecía sano, empezó a agrietarse con mayor intensidad.

-Yo jamás pensé que tú- Me detuve, mi respiración me falló. -Me fueras infiel- Permanecí sentado en el sillón, con mis ojos rojos, mi nariz con estragos del llanto, sin poder respirar.

-Perdoname-

Lo perdone.

Fue muy difícil volver a confiar, cuándo se rompe esa línea, ya no hay vuelta atrás.

Las infidelidades siguieron. La culpa la tuvo el alcohol, luego un viaje de negocios que se salió de control, un chico que se insinuó que no supo cómo rechazar y así un sin fin de excusas.

Mi corazón ya no tenía grietas, estaba destrozado, imposible de volver a reparar o unir. Estaba tan mal que era imposible de sanar.

-Quiero el divorcio-

-Tae, no me dejes... tú.. eres mi vida.. mi todo-

Cuándo firme el papel del divorcio. Deje mi vida, mi corazón. Mi amor, mi único "te amo"

Le entregue mi corazón a ciegas, lo ame, me amo, me destruyó.

Conocí el amor mas lindo con él, pero él se encargó de mostrarme que realmente el amor no existe. Al menos para mí.

-Te amo Jeon Jungkook, nunca nadie me hizo sentir como tú. Conocí el amor por ti y por ti también dejé de creer en él-

Fueron las últimas palabras que le dije, antes de irme lejos. Necesitaba sanar mi alma.

Cumplí 30 años de vida.

Vivía solo, no he tenido pareja desde mi divorcio.

Intenté quitarme la vida en tres oportunidades. Aún pienso que es la única manera de dejar de sufrir.

He entregado mi cuerpo, en los placeres del sexo. Pero mi corazón está guardado en una caja fuerte, donde nadie tiene acceso. Creo que a veces, ni yo tengo acceso a él.

Me volví frío. No creo en el amor. No creo en las amistades. Todo el mundo es falso, todos te buscan por algún beneficio. Nadie te busca sin una intención.

Soñé con tener una pareja y llegar hasta mi vejez. Amar toda la vida. Cómo aquellas películas románticas que me gusta ver.

Creo que el amor existe, es hermoso, te llena de calidez el corazón. Sólo que no fui afortunado de vivirlo a plenitud. En mi historia particular el amor no existe.

Hace un año no se nada de Jeon Jungkook.

Me buscó durante tres años, suplicando mi perdón. Hasta que tal vez se cansó.

Mi vida se puede decir que no es perfecta. Pero por lo menos es tranquila, tengo paz. Disfruto mi soledad, amo mi trabajo. Vivo y ya eso es mucho qué decir.

Todo en mi vida tiene una rutina algo simple.

Me levanto, voy al trabajo, al finalizar el dia voy al gimnasio y luego a casa. A veces los fines de semana salgo a cenar o tomar algo con Jimin y Namjoon.

Tengo sexo casual. Ninguna relación.

Mi vida estaba bien, hasta que una tarde lo vi. Mi corazón parecía el de un adolescente. Maldito corazón traicionero. Aún lo amo.

-Hola Taehyung-

-Hola Jungkook-

-¿Cómo estás?-

Mal debí decir.

-Bien, ¿Cómo estás tú?-

-Vivo aún-

Namjoon me había contado que Jungkook fue a rehabilitación por el problema de alcohol. Nunca más lo vio salir con alguien, ni siquiera algo casual, desde nuestro divorcio.

-Me alegra que estés bien- Quería irme pero mis pies no respondían. ¿Qué esperaba?

-Todavía eres muy hermoso-

-Gracias.. creo-

-Aún te amo-

Yo también. Pero no dije nada.

-¿Me odias?- Preguntó

-No, no te odio, no siento nada, todo eso quedó en el pasado. Yo te perdone, seguí con mi vida. Deberías hacer lo mismo-

-Mi vida eres tú, sólo tú, y siempre serás tú-

-Yo.. la verdad no quiero hablar del pasado, me alegra saber que estás bien-

Mi cuerpo le dio la espalda, mientras una lágrima traicionera rodó por mi mejilla. Intenté caminar, pero sus brazos me envolvieron, impidiendo que me moviera.

-Te perdí y no sabes como me duele el alma, pensarás que me cansé de buscarte y rogar tú perdón, pero no. Decidí mejorar por mi, ser alguien mejor para ti-

Ya no era una lágrima traicionera, era un mar de lágrimas que inundaron mi rostro. ¿Por qué tenía que seguir amándolo?

Mi corazón luchaba por salir de aquella caja fuerte. Queriendo brincar a sus brazos, sus besos. A él.

-Es bueno que mejores por ti, no lo hagas por nadie más-

Volteó mi cuerpo, con sus manos limpió mis lágrimas.

-¿Me amas?-

¿Qué podía decir? ¿Mentir? No me gusta mentir.

-El amor no existe Jungkook- No dije que lo amaba, duele si quiera pensarlo. Duele incluso decir aquella frase.

-¿Amas a alguien más?-

-No, yo ya no sé qué significa amar, creo que a veces ni siquiera me amo a mí-

Dolía demasiado. ¿Por qué? No lo sabía. Sólo sabía que moría por besarlo, así fuera una última vez.

Sin embargo, saqué fuerzas de quien sabe donde y me solté. Empecé a caminar rápido, temiendo que me persiguiera. Pero no fue así, él se quedó quieto, mirando como me alejaba. Dolió, pero fue lo mejor.

Llegué a mi casa luego de caminar por varias horas. Estaba cansado, exhausto tanto física cómo mentalmente. Me duché, no cené. Me fui a dormir.

Un ruido interrumpió mi descanso por la madrugada. El timbre de mi casa no dejaba de sonar. Baje un poco adormilado, estaba realmente cansado.

Abrí la puerta, reconocí su figura. ¿Qué hacía aquí? ¿Cómo sabe donde vivo?

Pero aquellas preguntas quedaron sin respuesta, mi mente estaba inmersa en cómo sus labios estaban en los mios.

Había besado antes, pero ese beso se sentía como levitar en el cielo. Me dejé llevar, envolver por sus besos, sus caricias, lo besé con mayor intensidad.

-El amor perfecto no existe, pero yo te amo y no hay nada más real que eso-

Siguió besándome y yo cómo una marioneta me deje llevar. Lo amaba, mi cuerpo se lo demostraba. Mis labios traicioneros se lo gritaron.

-No creo en el amor, pero quiero, maldita sea quiero creer en tu amor por mi- Le dije en medio del beso.

-Te amo Kim Taehyung-

-Te amo Jeon Jungkook-

Luego de aquella madrugada, decidimos volver a intentarlo.

Por años permanecí resistente a creer, pero el amor de aquel hombre me demostró que aquello no solo eran palabras.

Hoy tenemos 20 años juntos y no todo ha sido perfecto. Pero por lo menos mi corazón agrietado y destruido, poco a poco ha unido sus piezas, las grietas son visibles, como cicatrices que recuerdan mi pasado.

Pero late con fuerza cada vez que digo "te amo" o me dicen "te amo".

Aún no tengo una respuesta concreta a estas interrogantes

¿Cuándo sabes que amas?

¿Cuándo sabes que te aman?

Pero puedo decir que el amor existe, no es perfecto, no es de cuentos, ni de príncipes azules, ni de épocas antiguas.

El amor es real, solo hay que encontrarlo.

Gracias por leer mi historia en búsqueda del amor. Espero puedas encontrar un amor real en tu vida.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro