✿Capítulo 5✿
SeokJin se encontraba en la sala de maestros observando atentamente la mesa frente a él.
El pelinegro no se podía sacar de la mente lo ocurrido la tarde anterior, no entendía porque se sentía molesto por ver a Min Yoongi interactuando con alguien más que no fuera Hoseok, siendo que él como su profesor debería de estar contento al ver que su estudiante comenzaba a interactuar con más personas, ya que Yoongi se pasan la mayor parte del tiempo sólo, y no hablaba con nadie más que con Hoseok. Pero en lugar de sentirse feliz, SeokJin se sentía molesto. Molesto al verlo hablar con aquel chico. Molesto al verlo sonreirle a aquel chico, y más molesto se sentía al saber que por la tarde estos se habían quedado de ver.
SeokJin estaba tan enfrascado en sus pensamientos que no escucho cuando la puerta de la sala de maestros fue abierta, ni siquiera se percató del chico pelirrojo que se acercaba sigilosamente a él, hasta que sintió unos brazos rodear su cuello. Jin se sobresalto ante lo repentino de aquel contacto, giro su rostro para encontrarse el rostro sonriente del profesor Park.
—¿Te asusté Jinnie? —pregunto el pelirrojo con una voz infantil.
—Sólo un poco minnie. No deberías de hacer eso, algún día me matarás de un susto —dijo sonriendo el pelinegro.
—No, no, no, eso no pasará —rio mientras retiraba sus brazos del cuello de Jin y tomo asiento junto a este—. Y dime, Jinnie ¿qué te tenía tan distraído?
—No es nada importante minnie, sólo estaba pensando en lo que debo explicarle a los chicos el día de hoy, eso es todo.
—Haré como que te creo, si me invitas una de esas chucherías que compras en la cafetería, ¿vale? —dijo mientras se ponía de pie y tomaba la mano del mayor.
—Vale, vamos por algunas chucherías Jiminnie.
Jimin se sentía muy feliz. Pasar tiempo con Jin era lo que más le gustaba al pelirrojo.
Él y Jin se habían conocido desde la universidad y Jimin siempre había sido muy apegado a Jin. Por ello siempre buscaba tener toda la atención del mayor, en algún momento de su relación, Jimin habia llegado a confundir el cariño que tenía por Jin, pensando que sentía algo más que amistad, pero tiempo después se dió cuenta que no era así.
Estando en la cafetería Jimin se aferro al brazo de SeokJin, tratando de que la atención del mayor se centrará sólo en él, y lo había conseguido a la perfección, hasta que aquel castaño hizo su aparición justo al lado de ellos para poder comprar algún comestible.
—Buenos días Min —dijo SeokJin en cuanto observó al menor al lado del pelirrojo.
—Buenos días profesores —contestó seriamente el muchacho.
—¿Qué tal paso su tarde ayer Min? —pregunto el mayor, tratando de averiguar un poco sobre el encuentro del menor con el chico nuevo.
—Normal.
—Mmm.. espero haya terminado todos sus deberes.
—Claro que lo hice profesor Kim —dijo el menor viendo a su profesor a los ojos.
— cof cof.. —tosió el pelirrojo —. Mira Jinnie, eso se ve delicioso —dijo mientras apuntaba con su dedo el vaso con hielo molido y jarabe de chocolate que la señora encargada de la cafetería le entregaba al chico que se encontraba delante de ellos—. ¿Podrías invitarme uno de esos? —puso carita de cachorro hambriento para convencer al mayor.
La atención de Jin se centro en aquellos ojitos castaños que le suplicaban aquella bebida.
Jimin sintió alivio al ver que la atención de Jin regresaba a él, no sólo porque era una manía de Jimin querer acaparar toda la atención del mayor, sino que intentaba evitar que Jin mirase de aquella forma al menor que se encontraba junto a ellos.
Jimin no era tonto y había notado aquella vibra extraña que rodeaba al menor y a SeokJin, y quería evitarle a toda costa problemas a su amigo por fijarse en un adolescente, que para colmo era su estudiante.
—Esta bien jiminnie, te invitaré una de esas cosas — dijo mientras una sonrisa se formaba en sus labios.
Yoongi mordió su labio inferior, claramente molesto con la escena que se estaba desarrollando frente a sus ojos. Una mano se posó en su hombro logrando así distraerlo de aquella molesta y empalagosa escena que estaban protagonizando el profesor Park y el profesor Kim.
—Hola Yoon —dijo un NamJoon sonriente—. Ya no es necesario que hagas fila, hace un momento vine con los chicos a comprar nuestra comida y aprovechamos para comprarte algo —dijo mientras observaba atento los ojos del chico.
—Oh, gracias, no era necesario que hicieran eso Nam —dijo agradecido de que aquel chico lo salvase de seguir observando a sus dos profesores.
Yoongi estaba seguro de que vomitaria si se quedaba un minuto más observando a Jimin ser tan empalagoso con SU profesor de matemáticas.
—No te preocupes, sólo queríamos evitar que perdieras tiempo haciendo fila, ya que hobi comento que tardas mucho tiempo aqui y por ello nunca terminas de comer —dijo mientras tomaba el brazo del castaño para llevarlo a la mesa donde se encontraban sus otros dos amigos—. Sólo espero que aún encontremos nuestros alimentos, Tae y hobi estaban realmente hambrientos, y deje a esos dos cuidando nuestra comida en lo que yo te buscaba —dijo el pelinegro, mientras una risa se escapaba de sus labios.
—Posiblemente esa comida ya haya desaparecido Nam —dijo Yoongi mientras una sonrisa se dibujaba en su rostro.
Jin observaba a los dos menores y la molestia del día anterior comenzó a presentarse de nuevo, el mayor mordió el interior de su mejilla claramente molesto con lo que estaba observando.
Jimin se dió cuenta de aquello y la preocupación volvió a hacerse presenté, estaba más que claro que a SeokJin le gustaba su alumno, y eso solo podía significar una cosa...
Problemas
Las clases terminaron y Yoongi salió de su salón, fue a su casillero para sacar sus pertenencias y después fue directamente hacia el salón de matemáticas.
Abrió la puerta y su mirada se detuvo en su profesor, el cual se encontraba sentado en su escritorio mientras observaba unas hojas que tenía en sus manos.
Yoongi cerro la puerta y fue a su lugar.
Aquella tarde las clases fueron algo incómodas, tanto para el profesor, como para el alumno, ya que Yoongi no paraba de recordar al profesor Park siendo tan cariñoso con el hombre que se encontraba frente a él.
Y Jin no dejaba de recordar al chico nuevo siento tan amable con el menor que se encontraba sentado frente a él.
Ninguno de los dos se daba cuenta de que aquellos sentimientos de molestia que sentían al ver al contrario con alguien mas, eran claramente señales de que algo más que fórmulas, números y operaciones matemáticas se estaban desarrollando dentro de aquel salón de clases.
✿Kim☆Palomita✿
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