✿Capítulo 28✿
Yoongi no quería ilusionarse, de verdad que no lo quería, pero le era imposible.
Y es que después de aquel primer piquito, habían venido más. Con cada respuesta bien dicha por el menor, SeokJin se acercaba a dejar un beso sobre sus labios, alborotando el sistema, corazón y mente de Yoongi. Alterando al muchachito con cada pequeño beso y reavivando las cenizas (que no eran tan cenizas) de lo que Yoongi sentía por él.
Ahora sentado en su cama, con la mirada perdida y los dedos sobre sus labios, el menor pensaba y re pensaba lo sucedido.
—¡Hey! —Hoseok chasqueo los dedos frente al castaño, viendo como este pegaba un pequeño brinco al ser sacado de golpe de sus pensamientos—, sigo aquí, amigo.
—Lo siento, Ho, sigo pensando en lo que sucedió. Tú, ¿Qué crees que signifique su actitud?
El menor hizo una mueca.
—Te ama —dijo sin más, encogiéndose de hombros y examinando sus uñas después—, es decir, si realmente amara al Jeon ese, no te habría besado, yo solo digo.
Otro encogimiento de hombros le siguió. Yoongi analizo las palabras de su amigo, queriendo creer en ellas y negándose a hacerlo del todo.
—¿Y si sólo es otra jugarreta suya?
—Podría ser, aunque lo dudo mucho —dijo Hoseok, frunciendo el rostro.
—No sé, Ho, no quiero ilusionarme —dijo con un suspiro, rescostándose sobre las piernas de su amigo.
—Pues lamento decirtelo mi querido amigo —dijo mientras acariciaba las castañas hebras en su cabeza—, pero ya estás demasiado ilusionado.
Yoongi le miró de mala manera, golpeando con un poco de fuerza el estómago de Hoseok.
—No estás ayudando.
—Solo soy sincero, Yoon, es mi deber como tú mejor amigo —le regaló una sonrisa al castaño y después miró a Taehyung ingresar a la habitación—, ¿Terminaste de contar los detergentes en la tienda, amor?
Taehyung le sonrió a su pareja, y es que Hoseok tenía la manía de enviarlo a contar las cosas que habían en la tienda más cercana, con la única finalidad de conversar a solas con Yoongi.
—Deberías de dejar de enviar a Taehyung a contar las cosas en la tienda de la esquina, Hoseok —le regaño Yoongi—, no es como si lo que habláramos fuera un secreto de estado. Además, se que se lo cuentas todo cuando están a solas.
—Ah, me ofendes —Dijo el muchacho mientras colocaba su mano sobre su pecho.
—¿Te encuentras bien, hyung? —preguntó Taehyung, mirando a Yoongi con clara preocupación.
—Un poco confuso, Tae, solo eso.
—No debería preocuparse demasiado, hyung, ya verá que las cosas se van a arreglar —dijo con una sonrisa—. Recuerde que las cosas pasan por algo.
—Ah, que niño tan sabio —dijo Yoongi con una sonrisa, golpeando el colchón para invitar al menor a tomar asiento.
—Por eso te amo tanto, bebé —dijo Hoseok con un puchero en sus labios, estirando sus brazos cual bebé para abrazar a su novio.
Yoongi simplemente se enderezó y dejó el espacio libre para Taehyung, observando a ambos jóvenes compartir un par de besos mientras él seguía pensando en los que había compartido con su profesor tan solo unas horas antes.
—No puedes estar hablando en serio —decía al borde del pánico.
—Estoy hablando muy en serio, Jungkook —la voz de SeokJin era firme, sin vacilar, sin flaquear.
—¿Qué acaso no piensas en las consecuencias que puede traer tanto para ti como para él?
—Lo he pensado, créeme, lo he hecho —SeokJin se giró para mirarle—. Pero no puedo seguir así, no puedo —negó—. Yo no te amo, Jungkook, ni siquiera siento un mínimo de atracción por ti, y no puedo mantenerme a tu lado de la manera que tú lo quieres. Lo siento, Jungkook.
Jungkook se mantenía sin decir una palabra, respirando pesado, con los puños apretados y la mirada furica.
—Te vas a arrepentir de esto, SeokJin, lo harás —dijo a voz de grito, tomando su saco del respaldo de la silla y abandonando la casa.
SeokJin soltó un suspiro, observando al menor salir de su hogar.
Con pasos pesados y puños apretados, Jungkook camino hasta su auto. En un principio había ido a aquella casa emocionado, pensando que al fin SeokJin intentaría algo con él y sin embargo, había sido todo lo contrario. Kim simplemente le había citado en su casa con la única finalidad de dejarlo, de decirle que ya no le importaba realmente si cumplía con sus amenazas de mostrar aquella fotografía o no.
Yoongi no sabía lo que sucedía exactamente. SeokJin se encontraba distinto con él, desde aquel día que le había robado besos inocentes durante las clases de apoyo, algo había cambiado. Pero no solo SeokJin se encontraba actuando extraño, no, Jungkook también había comenzado a portarse aún más extraño con él.
Yoongi ni siquiera quería entrar a su clase debido a las constantes miradas llenas de enojo que le lanzaba el hombre, además de que lo exponía ante la clase a la más mínima distracción.
Tan obvia era su manía por reprenderlo al más mínimo error, que en el grupo ya comenzaban a especular.
—¡Min Yoongi, presta atención! —decia Jungkook mientras se giraba y paraba de escribir en el pizarrón.
Todos se giraron a mirarle, nadie entendía que estaba sucediendo pues, Yoongi era uno de los mejores estudiantes y ningún profesor antes se había vuelto en contra del chico, ni siquiera el profesor de matemáticas con quién llevaba una pésima calificación, ni siquiera antes de entrar a las clases de apoyo. Pero ahí estaba Jungkook, descargando su enojo de la única manera en que lo podía hacer, reprendiendo al chiquillo a la más mínima oportunidad.
Aliviado, Yoongi suspiro en cuanto escucho el timbre retumbar en los pasillos, guardo sus útiles y se colgó la mochila al hombro.
—Min, espera —la voz de Jungkook le detuvo a solo metros de llegar a la puerta, tan gélida.
Yoongi tomó una bocada de aire y se giró para enfrentar al mayor.
—¿Si? —dijo de mala gana, mirando a Jungkook en busca de algún indicio que le diera una señal, algo para entender que estaba pasando.
Quizá Jungkook y SeokJin querían divertirse a su costa, por ello SeokJin había comenzado a ser tan suave con él, tal vez quería hacerle creer que le quería de nuevo para burlarse en su cara por su ingenuidad al lado de Jungkook.
Pero aquella teoría fue lanzada al retrete cuando Jungkook hablo.
—Dile a SeokJin que se preparé —dijo el mayor, mirando a Yoongi con aquellos ojos chispeantes y llenos de enojo y resentimiento—, su tiempo de espera ha terminado y el tuyo también —con una sonrisa siniestra paso por su lado, golpeando su hombro contra el de Yoongi y dejándole al menor una extraña sensación de temor en el estómago.
Definitivamente, algo malo se avecinaba y él no tenía ni la más mínima idea de que era aquello, pero de algo si estaba seguro, ni él ni SeokJin tendrían un buen final con ello.
Me siento emocionada porque he actualizado de nuevo en un corto tiempo 🤭💜
¿Qué tal les parece la historia? ¿Cómo ven a Jungkook? ¿Que creen que vaya a pasar con SeokJin y Yoongi? Aaah, tantas preguntas 🤭
Y bueh, estuve revisando la historia y no creo que le quede mucho por delante 🤔 aún no decido con cuántos capitulos terminarla pero eso sí, de 40 no pasa 🤭
Espero les haya gustado, se viene otro momento intenso en la trama 👀
Ahora sí, me despido, les mando muchos besitos cariñositos y recuerden que les amito mucho, laven sus manitas y cuidense mucho 😘😘
✿Kim☆Palomita✿
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