Había varias formas de definir el miedo, Jimin lo sabía, siempre fue un niño muy asustadizo, pensado lo peor, no podía separarse de sus padres por el miedo de perderse, tenía miedo de los insectos, los perros grandes y las tormentas. Pero, nada, jamás, podría compararse al miedo que sintió después de buscar toda esa información acerca de los embarazos adolescentes y las altas probabilidades de ellos en edad temprana, además de los síntomas. Tenía una lista de ellos...

✅Fatiga
✅Sueño constante
✅Náuseas matutinas
✅Problemas de micción (ganas constantes de orinar)
✅Acidez estomacal
✅Sangrado nasal
✅Hinchazón
✅Estreñimiento
✅Falta de celo
❎Vómito

Ni siquiera se había dado cuenta que su celo lo llegaba ¿Qué clase de chico responsable era? Tenía clara dos cosas, uno, fracasaría como obstetra y la segunda y más dolorosa, estaba esperando un bebé de Yoongi, aún no estaba completamente seguro, pero, todo indicaba que así era. Y de ser así, podría hasta tener unas diez o doce semanas, tomando en cuenta que sucediera las primeras veces que lo hicieron sin protección. Se sentía enfermo.

Ni siquiera había podido ver a sus padres a la cara durante el desayuno, su madre le miraba fijamente, preguntándole qué le ocurría, y aunque le decía que estaba bien, sólo cansado por las clases, sabía que ella no daría un paso hacia atrás, seguiría preocupada y preguntando que pasaba, era débil de mente, en una de esas se le ocurría gritarlo debido a la presión.

Yoongi tampoco parecía atento a lo que pasaba porque esa semana tenía un partido importante, así que no quiso preocuparlo con sus dudas, no tenía a quien acudir. Confiaba mucho en Tae, pero su mejor amigo a veces era igual de inmaduro e inocente que él, por no decir que torpe. Creía firmemente que sin JungKook ya se hubiera intoxicado por la cantidad de dulces para niños que comía.

La única persona que sabía actuaría de forma madura era Jin, pero, no sabía ni siquiera cómo acercarse a él, sin que nadie se diera cuenta.

Estaba decaído, lloraba todas las noches debido a la preocupación, se había dicho que tenía que aguantar hasta el día del partido y después podría hablarlo con Yoongi, pero eso sólo le hizo sentir más enfermo que antes.

¿Cómo reaccionaria? Si él estaba en estado de pánico no quería pensar en Yoongi ¿Le dejaría solo? Su novio era una persona increíble, dudaba mucho que hiciera algo para lastimarlo, pero, no descartaba la idea, tener un bebé antes de los veinte no debería de ser la noticia más fácil para digerir.

Había pensado en comprar una prueba de embarazo, pero el simple hecho de entrar a la farmacia lo había puesto enfermo, casi vomita sobre el mostrador, no había opción, era un miedoso de primera.

Era la tarde del partido, agradecía la poca atención que Yoongi le había puesto esos días y el poco tiempo que tenía. La presión era enorme, mientras miraba el partido y bebía una malteada, pensaba en todo.

¿Un bebé?

¿Podría él tener un bebé?

¿Sus padres lo correrían de la casa?

El último pensamiento casi lo hace llorar, sus padres estarían muy decepcionados de él si llegarán a saberlo, si él estaba esperando un hijo, les rompería el corazón.

—Jimin ¿Estás bien? —preguntó SeokJin a su lado mirándolo preocupado.

—Sí—asintió.

—Estás muy pálido, ven vamos a tomar algo de aire, hay muchas personas aquí.

Jimin apenas pudo levantarse, Jin lo tomó del brazo y lo ayudó a salir del gimnacio, el atardecer estaba cerca, se sentaron en una banca fuera del gimnasio. SeokJin tomó sus manos que estaban frías y temblorosas.

—Jiminie, sabes que puedes confiar en mí, dime ¿Qué pasa?

Fue inevitable para él soltar toda la carga que había sostenido durante esa semana, tembló de pies a cabeza antes de ponerse a llorar, SeokJin lo abrazo por los hombros y dejó que llorara en su pecho, daba pequeñas palmadas a su espalda. Preocupado, porque nunca lo había visto de esa manera.

—¿Qué pasa? ¿Peleaste con Yoongi? ¿Con tus padres? ¿Vas mal en una clase?

Negó a cada una de las preguntas. —No.

—Entonces, ¿Por qué estás tan alterado?

—Yo...hice algo malo.

—¿Algo malo? ¿Engañaste a Yoongi? ¿Robaste un examen?

—¿Se pueden tomar exámenes? —elevó una ceja.

—Puede, todo en la vida es posible. Pero, vamos, dime qué pasa.

—Tengo miedo Jin.

—¿Por qué?

Se separó de él, tomando aire con fuerza, limpió sus lágrimas y exhaló con delicadeza.

—Creo...yo creo que puedo estar embarazado.

—¿Qué? —le preguntó con los ojos muy abiertos—. Pero ¿Cómo? ¿Por qué piensas eso?

—Cuando...estuvimos juntos las primeras dos veces no usamos protección, y...ahora tengo síntomas, no llega mi celo y de verdad creo que puedo estarlo.

—¿Yoongi lo sabe? —preguntó con una ceja alzada.

—¿Crees que podría jugar de esa manera si lo supiera?

—No, se estaría volviendo loco, mira, tienes que hacerte una prueba antes de entrar en crisis, dependiendo del resultado ya será otro paso.

—¿Tú piensas que puedo estarlo?

—No lo sé Jiminie, pero, la realidad es que si no usaste protección hay una gran probabilidad, pero no especules, dile a Yoongi y hagan la prueba.

—Mis padres me van a matar.

—Ellos no estarán felices, pero vamos, no sabemos que pasará.

—¿Y si Yoongi lo toma mal?

—Ese chico es tonto y está enamorado de ti, así que, tranquilo, te va a apoyar y cuidar pase lo que pase. Pero, tienes que decirle.

—¿Deberé dejar la escuela?

—Jimin basta—dijo mirándolo a los ojos tomando sus hombros—. No pienses antes de tiempo, mejor compra una prueba.

Estaba por decir algo, cuando la ovación dentro del gimnasio los distrajo.

—Creo que debemos volver—dijo Jimin con una mueca—. Jin, yo quisiera que no le dijeras a nadie.

—No te preocupes—le tomó de la mano para levantarse y volver—. Por favor, dime cualquier cosa que suceda, seré de ayuda, lo prometo, pase lo que pase estaremos ahí.

—Gracias—susurró con un nudo en la garganta.

Entraron de nuevo al gimnacio, para ver la victoria del equipo de Yoongi, ellos celebraban, trataron de hacer lo mismo, pero Jimin no podía sonreír en grande, la plática con SeokJin sólo le dejo más dudas y miedos.

Yoongi corrio hacia él, y le sonrió. —¡Ganamos!

—¡Felicidades!

—Espera, iré a ducharme y saldremos a festejar.

Asintió. Jin estaba besando a Namjoon, así que salió de nuevo, tenía tantas náuseas, que no se detuvo, caminó mareado a un contenedor de basura y vómito, ahí iba la comida de su madre. Terminó llorando, corrió a un baño y lavo su rostro y boca. Cuando salió, y regresó, Yoongi ya lo esperaba afuera del gimnasio.

—¿Dónde estabas lindo?

—Fui al baño.

Se acercó para darle un beso, pero Jimin se separó, acababa de vomitar no sería lindo besarlo así.

—¿Pasa algo?

Ver sus ojos, escuchar su voz, no hicieron más que aquellas emociones florecieran de nuevo, hizo un puchero que tembló y comenzó a llorar, Yoongi confundido, se acercó para abrazarlo, preocupado de su extraña reacción.

—¿Estás molesto conmigo porque no he podido estar contigo? Lo siento, pero te prometo que ahora no me despegare de ti.

—No es eso—negó con la cabeza en su pecho.

—¿Entonces? ¿Qué ocurre?

—Yoongi, yo, creo...creo que estoy esperando un bebé.

Se petrifico, Yoongi le separó de su cuerpo y le miró confundido, como si no comprendiera sus palabras. Parpadeo perplejo, las lágrimas de Jimin le decían que no era una broma, sin embargo, no sabía que responder, le había tomado por sorpresa.

—No entiendo yo...

—Tengo síntomas extraños que pueden ser de embarazo y, quiero una prueba, pero me da miedo comprarla y acabo de vomitar.

—¿Vomitaste? —suspiró—. Ven—lo tomó de la mano y lo jaló al estacionamiento, muchas cosas pasaban por su mente.

Muchas cosas que no eran para nada buenas, en primero trataba de recordar las veces que tuvieron relaciones, sólo un par de veces no usaron protección, sin embargo, no pensaba que eso pudiera ser tan importante, era un estúpido, se sentía un idiota por no haber hecho caso a algo tan importante. Estaba molesto consigo mismo, porque Jimin era pequeño y frágil.

Subieron a la motocicleta, manejó a la farmacia más cercana, y bajó.

—Espera aquí lindo, ¿Quieres un dulce o algo de comer?

—No, así estoy bien.

Yoongi asintió, entró a la farmacia, a la misma dónde había comprado condones, pero aquello se sentía tan extraño y mucho más vergonzoso que esa vez, suspiró pesadamente, agradeciendo que no hubieran personas cerca.

—Buenas noches—dijo el chico que recordaba.

—Hola, yo...estoy...quiero...bueno... necesito.

—¿Más condones?

—No—negó con una mueca.

—¿Lubricante?

—Tampoco—dijo con las mejillas sonrojadas—. Una...me das una...prueba...de...

—¿Prueba de embarazo? ¿De cuáles? —dijo con una mueca.

—De las más efectivas, quiero tres.

—Uy chico, estás jodido, tenemos descuento en ácido fólico.

—¿Para qué es eso?

—Se lo toman quienes van a tener un bebé para que no nazcan siendo idiotas, como tú comprenderás.

—Ah... pues...si, deme eso.

—Que bueno—dijo antes de cobrar—. Suerte, igual aquí también vendemos pañales.

Yoongi asintió. —Gracias—tomó la bolsa y salió—. Qué agradable sujeto.

Jimin le sonrió con tristeza, subió y acarició su manita. —Vamos a mi casa.

—Está bien.

Volvió a encender la motocicleta y manejo a su casa que no estaba lejos. Llegó seguro de que sus tíos aún no estarían ahí, llegarían tarde porque era viernes. Bajaron y entraron, subieron de inmediato escaleras arriba y se encerraron en su habitación, se sentaron uno al lado del otro con nerviosismo, perdido en sus pensamientos.

—¿Qué hacemos?

—Yo tengo que orinar en estás cosas.

—¿Quieres orinar ahora?

—No realmente.

—¿Quieres agua?

—¿Tienes jugo?

—De manzana.

—Perfecto, si, ayudará.

—Ya vuelvo.

Jimin asintió, miró alrededor, todos los trofeos y medallas de Yoongi estaban ahí, un remordimiento extraño cruzó en su pecho, si eso resultaba ser cierto, entonces, ¿Qué pasaría con todo?

Yoongi no tardó en llegar, con un vaso de jugo y unas palomitas, le entregó el jugo, el cual tomó con rapidez estaba sediento. Se sentó a su lado, tomando su mano, estaba helado.

—Pase lo que pase...

—Ya vuelvo.

Se levantó y se encaminó al baño, Yoongi asintió, estaba distante, pero creía que era porque la situación no era la más favorable. Se recostó en la cama.

¿Un bebé?

¿Qué dirían sus padres de eso? Tal vez su padre le gritaría, o tal vez no, quería pensar que ellos le apoyarían, sabía que sus tíos lo harían, ellos eran comprensivos, sobre todo si había un bebé de por medio, pero ¿Y los padres de Jimin? Ellos no lo tomarían nada bien, estaba dubitativo, entre sus deseos y lo que significaba.

Jimin salió al cabo de unos minutos, con las tres pruebas en la mano, se sentó de inmediato mirándolo.

—¿Y?

—Debemos esperar unos minutos—dijo poniendolas boca abajo en la cama, se sentó a su lado y suspiró—. Yoongi.

—¿Dime?

—¿Estás molesto?

—No, estoy nervioso.

—¿Qué haremos?

—No lo sé, esto es raro—suspiró.

—Ya lo sé, yo...¿Qué opciones tenemos?

—Hay dos opciones, pero yo no puedo tomar esa decisión amor, es sólo tuya. Aunque, si me permites decirlo, yo, no estaría mal con ninguna de ellas, estaré a tu lado en todo momento, si decides que no es el momento, entonces, esperaremos, pero, si decides que quieres seguir adelante, yo seré el mejor novio y papá del mundo. Lo prometo.

Jimin le miró con una media sonrisa. —¿Y tus sueños?

—Mi sueño eres tú, y aunque sea difícil, los voy a cumplir y haré que tú cumplas los tuyos, mis tíos nos ayudarán.

—¿Cómo estás tan seguro?

—Ellos no son crueles, siempre han estado para mí, y sé que lo estarán ahora, me preocupan tus padres.

—Me van a odiar.

Yoongi se acercó tomando sus mejillas. —Podremos con esto, podremos con todo, lo prometo.

—Yo...no sé, ni que pensar o decir.

—Te amo Jiminie, mucho y estaré a tu lado para siempre.

—Creo que deberíamos verlas.

—Bien.

Ambos parecían estar tranquilos, Jimin tomó dos de las pruebas y Yoongi una, las miraron sin expresión, antes de ponerlas en la cama, Jimin tomó la hoja y soltó el aire.

—Jimin tenemos que llamar a alguien que nos ayude a pensar.

—Soy positivas Yoongi...esto...

—¡Llamaré a Namjoon!.

—Pensé que dijiste que sólo llamarías a Namjoon—dijo Jimin apenado.

—Jin estaba conmigo, pero también hablaba por teléfono con Taehyung, que estaba con JungKook, y yo llamé a Hoseok que estaba con EunHa, todos venimos porque dijeron que era importante.

Los seis chicos estaban sentados en el sillón esperando, Yoongi mordió su labio inferior y les mostró las pruebas.

—Mierda Yoongi—soltó JungKook al cabo de unos minutos en silencio.

—¿Qué? —preguntó Taehyung confundido.

—Jimin y Yoongi van a tener un bebé, ay que lindo—sonrió EunHa.

—¿Qué planean hacer? —preguntó Namjoon.

—No lo sé, estamos en shock.

—Jimin ¿Quieres tener al bebé? —preguntó Jin con seriedad.

—Yo...

—Antes que respondas, piensen en lo que un bebé significa, es mucho trabajo, sacrificio y dolor a veces.

—¿Qué harían ustedes? —preguntó Jimin.

—Yo tendría un bebé parecido a JungKook.

JungKook sonrió a su novio y negó. —Lo que sea que ustedes decidan estaremos ahí, estamos aquí como apoyo moral. Ustedes deben elegir.

—Creo que...yo si podría—dijo Jimin con una mueca—. ¿Soy estúpido por pensar en ello?

—No, no lo eres—le sonrió Hoseok—. Mi madre fue madre soltera y joven, ella pudo sola, podrás, será complicado, pero lo harán bien.

Yoongi asintió. —Bien, creo que sí podemos.

—¿Cuando se lo dirán a sus padres?

—En una hora vienen mis tíos. Creo que es momento.

—Nos iremos para que hablen, cualquier cosa estaremos aquí. No se preocupen todo estará bien.

Los chicos se levantaron y los abrazaron, se despidieron de ellos quedándose solos. No habían ayudado mucho, pero, al menos fueron una buena compañía, Yoongi estaba seguro que Namjoon lo interrogaria y regañaria. Todo estaba en juego.

Se sentó al lado de Jimin. —¿Lo que dijiste es verdad?

—Una parte de mi quiere, pero tengo miedo.

—Tambien lo tengo, pero realmente creo que podríamos, el dinero no es problema, mis padres me dejaron algo con lo cual puedo vivir sin problema. La carrera la sacaremos a como de lugar y tú vas a estudiar lo que te gusta. Podremos.

—¿Quieres un bebé?

—No quiero mostrar que estoy feliz porque eso sería difícil para ti.

—¿Me abrazas?

Yoongi lo abrazo con fuerza besando su sien. —Te amo, y estaré para siempre.

—Tambien te amo para siempre.

—Ya decidimos, ahora, bueno, lo difícil viene, porque mis tíos acaban de llegar.

—Dios mío.

No quiero poner drama, por eso van a ver esta situación muy tranquila (ya se que en la vida real no es así) para que no comiencen. Ok. Es ficción nada más. 💜