Taehyung no dejaba de comer fresas, unas que Jungkook le había traído esa mañana, las compartía con Jimin quien estaba más que feliz, últimamente sus días eran más tranquilos y llenos de momentos increíbles al lado de Yoongi. Ambos pasaban mucho tiempo juntos y hablaban por las noches hasta quedarse dormidos.

—Entonces mamá y Kook me regañaron por no comer el desayuno, bla, bla, bla.

—Debes comer el desayuno es la comida más importante del día.

—No, esa es la cena, si comes mucho en la noche, por la mañana aún hay comida en tu panza y no tienes que desayunar, ahorras tiempo.

—No funciona de esa manera Tae.

—Olvidaba que eras doctor—suspiró—. Simplemente no me da hambre o lo olvido, esas cosas pasan.

—Tú también lo serás. Entiendo, igual no creo que Jungkook te deje olvidarlo.

—Es un buen novio, ¿Y Yoongi? ¿Cómo es como novio?

—Increíble—sus ojos brillaron como siempre lo hacían al hablar de él—. Es lindo y atento, me gusta estar con él, aunque no entiendo sus preguntas o datos random a veces. Es dulce.

—Oh, el amor es hermoso—rio encantado—. Creo que es bueno que experimentes el esplendor del primer amor, aunque ten cuidado, no vayas a perder la cabeza por amor, si sabes a lo que me refiero.

—Sí—asintió creyendo que se refería a tener cuidado con sus sentimientos.

Jimin tenía muchas dudas sobre la sexualidad que el internet no hacia más que avivarlas, porque si bien había mucha información, tenía preguntas particulares que en foros eran respondidas de manera indirecta y contradictoria, tenía dudas, y estaba demasiado avergonzado para decirlas en voz alta. Pero, de una cosa estaba seguro, tenía que buscar la manera de ser cuidadoso. Le gustaba esa parte en su relación, pero, intentaba mantenerlo en silencio.

Yoongi era un gran novio, siempre atento, amable y divertido, le gustaba pasar tiempo a su lado, como esa mañana, que estaba juntos en el campo de atletismo, había veces donde el equipo de baloncesto entrenaba en las canchas exteriores, a la misma hora que tenía su clase de deportes, como ese día. Lo veía reír con sus compañeros de equipo, mientras él corría.

Taehyung que estaba a su lado tomó su mano para hacer que parara. Se encorvo debido a la falta de aliento.

—Soy demasiado viejo para esto. ¿Qué ves? Ah, tú novio no te quita la vista de encima, tan lindos.

—¿Quien compra los condones? ¿Tú o Jungkook? —la pregunta salió tan de repente que hasta a él le había sorprendido, tal vez había pensado en voz alta.

Taehyung paró en seco y le miró pasmado. —Esa pregunta es algo...rara, Park Jimin ¡¿Ya te desfloraron?!

Algunos compañeros les miraron debido al grito, Jimin le cubrió la boca a su amigo.

—No quiero que nadie se entere, sólo tú, es por seguridad....cosas que se tienen que saber o hacer.

—Entiendo—dijo cuando quitó su mano—. Pues, no lo sé, aparecen en el bolsillo de Kook, por arte de magia—soltó una ligera carcajada.

—Ah. Esto es vergonzoso—dijo cubriendo su rostro.

—No, es algo normal entre amigos, ¿Estás planeando hacer el acto de la sexuacion?

—No creo que se diga así, pero, bueno, es...nosotros...ya...

—Parece que tienen un cohete en las patas—rio por lo bajo—. ¿Todo bien? ¿Cómo estuvo?

—Lloré la primera vez, no porque me haya lastimado o fuera malo, sino...me sentí extraño.

—Suele pasar, depende mucho del significado que le des a la primera vez, no ayuda mucho las creencias y esas cosas, entonces ¿Ha sido más de una vez?

Jimin asintió, ambos caminaron en silencio unos momentos. Taehyung rio después de unos momentos de tensión, le dio un golpecito a Jimin en el hombro.

—No le des muchas vueltas al asunto—suspiró—. ¿Usaste protección?

—No—negó con una mueca.

—Bueno, eso no está bien, debes conseguir eso, si vas a iniciar tu vida sexual siempre hay que ser responsable.

—Tienes razón, es sólo que, realmente no tenía pensado tener sexo.

—Tranquilo, lo entiendo, la calentura a veces no deja ver coherentemente, pero debes de usarlo a partir de ahora, ¿Y si tomas una pastilla del día siguiente?

—Sucedió hace más de una semana, no creo que funcione.

—Bien, puedes esperar una semana más y hacer una prueba, sales de dudas—se encogió de hombros.

—¿Crees que pueda estarlo? —dijo sin ocultar el miedo en su voz, realmente hasta ese momento es cuando se daba cuenta de lo que podría suceder. Se sentía estúpido.

—Todo en la vida puede pasar, pero, no creo realmente, ¿Cuántas veces lo has hecho?

—Dos.

—Esperemos que no seas tan fértil, no te estreses Jimin, pero de verdad busca condones.

Jimin asintió, mirando a lo lejos a Yoongi quién le saludó con una enorme sonrisa, él le devolvió el gesto, aunque, en su mente había una infinidad de dudas. Unas que querían dejarlo en abstinencia por el resto de su vida.

Mentiría si decía que pudo concentrarse en sus clases, lo cual era malo porque tenía examen al día siguiente, su mente estaba dispersa, así que cuando salieron de clases se despidió rápidamente de Taehyung, para correr al estacionamiento en donde Yoongi le estaría esperando, porque su equipo de básquet no tendrían entrenamiento los jueves por ser la temporada más baja.

Lo vio recargado en la motocicleta, con el celular en la mano y la chaqueta de cuero, sonrió como tonto, sin duda estaba en el piso por su novio, que era tan apuesto que llamaba la atención de las demás personas, no comprendía como es que Yoongi decía que nadie se fijaba en él.

—Hola—saludó con una sonrisa tomando con fuerza las correas de su mochila, estaba nervioso.

Yoongi despegó de inmediato su vista del celular y le sonrió en grande, acercándose para tomar su cintura y darle un dulce beso en los labios, Jimin enrojeció hasta las orejas, se separó mirando alrededor, habían llamado la atención de algunas personas que les observaban curiosos, según Taehyung todos estaban interesados en saber quién era el novio del capitán y qué tenía de especial.

—¿Quieres ir por pizza?

—Me encantaría, pero mañana tengo examen y debo estudiar ¿Tus exámenes terminaron?

Yoongi hizo una mueca. —Tengo álgebra mañana.

—¿Por qué no me dijiste? Has estudiado ¿Verdad?

—Algo así—rio rascando su nuca.

Jimin hizo mala cara. —Debes estudiar, no puedes volver a repetir la materia.

—No lo haré, es sólo que es tan aburrido estudiar solo.

Jimin sonrió y negó. —Ya no tienes cinco años—bufo—. Podemos estudiar juntos, vamos a la biblioteca.

—Lo de estudiar me parece bien, pero vamos a mi casa y comemos pizza.

—Está bien, pero tengo que estar en casa a las ocho.

—Perfecto—dijo tomando el casco para ponérselo—. Vamos lindo.

Jimin estaba riendo a carcajadas por el puchero que Yoongi había puesto después de haberse negado a darle un beso, eso porque no estaba poniendo atención a su guía de estudio, ambos estaban en la habitación del mayor estudiando en la cama, mientras había algunas botanas regadas, la pizza aún no llegaba y aparentemente los tíos de Yoongi no estaban en casa, este decía que era extraño verlos temprano, que siempre llegaban en la noche, pero que tomaban la cena juntos.

—Eres cruel Minie.

—No soy cruel, me preocupo por tu educación—bufó.

—Es que yo no puedo trabajar así, necesito incentivos.

—¿A sí? Pues yo soy más de la creencia de las recompensas, haz bien los ejercicios y te daré un beso.

—Eres cruel, pero justo—rio.

—¿Tus tíos no se molestan si estoy aquí?

—No, ellos te adoran, mi tío Lay pregunta por ti, ¿Qué es lo que harás en vacaciones?

—Mis padres me inscribieron a un grupo de estudio en las mañanas ¿Y tú?

—Conseguí empleo en una heladería, siempre trabajo en vacaciones. Podré llevarte helado cuando te vea.

—Ese trabajo suena bien—suspiró—. Mis padres no me dejan trabajar, me dicen que debo de centrarme en mis estudios, así que prefieren pagar cursos de verano.

—¿No deberías descansar un poco? El próximo semestre tendrás tus primeras prácticas ¿No?

—Sí, pero a ellos no les gusta que deje de estudiar, de hecho están más al pendiente, no quieren que por tener novio deje de lado mis estudios.

—Eso es mucha presión, ya eres el mejor y muy inteligente ¿Cuándo se supone que disfrutes tu vida?

Jimin hizo una mueca ligera. —Debo esforzarme para cumplir mis sueños, y mis padres sólo me están ayudando a hacerlo.

—Bien, sólo no descuides tu salud, y yo te animaré siempre.

—Yoongi ¿No te sientes preocupado por el futuro?

Yoongi se recostó boca arriba con ambos brazos detrás de su cabeza, miraba al techo pensativo, hasta que observó a Jimin de reojo.

—No lo sé.

—¿Cómo es que no lo sabes?

—Verás, nunca he sido una persona que se caracteriza por complicarse mucho la existencia, desde la muerte de mis padres trato de vivir un día a la vez, me centro más en el presente, claro que hay unas cosas que me estresan, pero intento no darles tanto peso.

Jimin suspiró de forma profunda. —Me gustaría ser más como tú.

—Yo te quiero como eres—alargó la mano para tomar su brazo y jalar, para que se recostara a su lado, Jimin encontró refugio entre sus brazos y sonrió mirando el techo.

—Debemos estudiar.

—Jimin ¿Sabías que el cerebro produce energía como para encender una bombilla?

—No creo que eso sea posible—dijo riendo.

Yoongi se incorporó y subió ligeramente sobre su cuerpo, le sonrió mirándolo a los ojos, tan cerca, que Jimin podía sentir su aliento sobre su rostro, su corazón latió con fuerza. Yoongi acarició su mejilla haciendo que un mechón de su cabello despejará su frente.

—Eres muy hermoso—susurró sobre sus labios.

Jimin no pudo responder, porque en un abrir y cerrar de ojos ya tenía a Yoongi besando sus labios, y el escalofrío que sintió recorrer todo su cuerpo lo dejo a su merced, la mano de Yoongi bajo por su costado hasta su camisa, y la adentro para acariciar la piel de su cadera, la excitación crecía, suspiró lleno de satisfacción hasta que se dio cuenta de lo que estaba pasando y recordó algo importante, puso las manos en los hombros de Yoongi separándolo de su cuerpo, el mayor alfa le observó confundido.

—¿Sucede algo?

—Yoongi...—desvió la mirada avergonzado, con las mejillas rojas—. Debemos comprar.... protección.

—¿Protección? Oh...si...ammm—se separó rojo de la pena—. No te preocupes yo los compraré ¿Quieres que vaya ya?

Jimin relamio sus labios nervioso. —Debe...debemos estudiar.

—Sí, tienes razón—dijo rascando su nuca—. Yo...igual creo que llegó la pizza, alguien debe haberla recibido ¿Tienes hambre?

—Yoongi...¿Crees que con las veces pasadas pueda....estar....en estado?

—¿Estado de qué? —ladeó la cabeza confundido.

—Hablo de estar...embarazado.

El rostro de Yoongi se volvió más pálido de lo normal, comenzó a reír nervioso, en un momento se quedó en silencio pensando, hasta que negó.

—No, no lo creo—se sentó a su lado y lo abrazó—. Sinceramente tener un bebé no es tan sencillo como muchos piensan, mis padres tuvieron que esperar dos años y mis tíos, bueno, ellos jamás pudieron hacerlo. No conozco a nadie que haya quedado embarazado las primeras veces.

—Mis padres tampoco lo lograron hasta después de tres años de casados—suspiró—. Igual tenemos que ser cuidadosos.

—Sí, debemos esperar por lo menos unos diez años más—rio por lo bajo.

—Tengo hambre—susurró—. ¿Pizza?

—Claro lindo—dijo besando su mejilla.

Sólo había dormido media hora, se había quedado despierto toda la noche estudiando en serio, porque con Yoongi no había podido concentrarse adecuadamente. Estaba vistiéndose, con los nervios de punta, siempre se ponía nervioso cada que tenía que dar un exámen. Pero, ese día la náuseas debido al estrés eran diferentes, su estómago estaba tan revuelto que no tuvo más que correr al baño a regresar todo lo que estaba en su estómago, vomitar era la peor de las sensaciones y terminó llorando.

Debido a eso salió de su casa sin tomar el desayuno, tomó el autobús, y corrió a sus clases, sintiéndose enfermo. Le fue bien como siempre, pero el malestar persistía.

—¿Estás bien? —preguntó Taehyung al terminar el exámen.

—No lo sé—hizo una mueca—. ¿Creo que es el estrés? ¿Cómo te fue?

—Espero que bien, rece toda la mañana.

Jimin rio por lo bajo. —¿Has decidido que vas a hacer en vacaciones?

—Viajaré con Jungkook y su familia a Busan—sonrió más relajado—. ¿Me vas a extrañar? —dijo abrazando sus hombros—. Yo te traeré algo de por allá.

—Claro que te voy a extrañar, yo me la pasaré estudiando.

—Y saliendo con Yoongi, trata de disfrutar, porque el siguiente semestre estará pesado.

—Ya lo creo—suspiró pesadamente.

—Esperemos que el próximo ciclo nos sorprenda.

—Yo también espero buenas sorpresas.

Ambos se sintieron, sin saber la enorme sorpresa que les deparaba el destino.

Yoongi empuñó sus manos, anduvo de un lado al otro pensando, tomando aire y exhalando, estaba afuera de una farmacia, había analizado lo mal que había comenzado con Jimin, en su defensa ambas ocasiones habían sido imprevistas, pero se reprochaba no haber tenido una primera vez romántica, o no cuidarlo como debería.

Había dejado de lado lo importante que era tener protección, así que después de ese golpe de realidad, hizo lo que Jimin le pidió, buscar condones.

Claro que jamás se imaginó que la situación fuese demasiado vergonzosa, estaba debatiéndose en qué momento entrar, quería hacerlo cuando nadie estuviera, pero las personas seguían llegando, mordió su labio inferior con fuerza y tomo aire para ser valiente y entrar por fin.

La farmacia estaba llena de medicamentos y neceseres, dulcería y hasta artículos de regalo, miró los estantes dándose cuenta que los condones no estaban a la vista. Tomó una bolsa grande de frituras y un sprite, fue al mostrador, dónde un hombre atendía a una mujer que llevaba un bebé, el pequeño le miraba mientras lloraba, una imagen que le frustró, no, definitivamente necesitaba condones.

Cuando la mujer terminó y tomó sus cosas para irse, Yoongi llegó al mostrador, atrás del chico encontró una variedad extensa de condones ¿Cuáles se supone que debía comprar?

—¿Qué vas a llevar?

El sudor recorría su nuca. —Esto...

El chico asintió tomando las cosas y pasando el escáner, mientras tanto, Yoongi seguía mirando los condones.

—¿Algo más?

—Sí...

El chico se quedó esperando, pero Yoongi estaba tan avergonzado que no pudo decir más.

—¿Y bien? Estás retrasando la fila.

—Ammm, me das unos—la voz no salía, así que terminó por señalar el estante que estaba detrás de él.

—¿Condones? ¿De cuáles?

Eso lo puso en una encrucijada, tragó en seco, el chico miró su indecisión y vergüenza y se volvió a tomar unos del estante.

—Estos son buenos ¿Algo más?

Yoongi negó bajando la mirada. —¿Cuánto es?

Al decirle la cantidad, sacó el dinero rápidamente y se lo entregó, Yoongi tomó la bolsa con las cosas y salió casi corriendo. Una vez en la calle bufó.

—Que cobarde Min, que cobarde—se repitió mientras caminaba a su motocicleta.

Nadie le dijo que comprar condones sería lo menos vergonzoso que haría.

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Y gracias a los demás por la espera. Los amo 💜