Extra 1
Appa

—Tengo el presentimiento de que no debería ir—DaeSoo se mostró dudosa. Su bolso estaba casi listo sobre la cama y DaeYang se estiraba en ésta para alcanzar a Bam quien movía su cabeza evitando que lo tocara. JungKook lo bajó al suelo previniendo un golpe.

—No es primera vez que me quedo a solas con DaeYang.

—Pero estar lejos por tres días me parece...difícil.

—Necesitas ir, una pijamada en casa de Yeeun con JiSoo y HyeWon no estará mal—JungKook cerró su bolso—Estaremos bien. No pienses negativo.

Las chicas habían planeado una pijamada por tres durante el fin de semana en casa de Yeeun ya que ella misma ofreció su casa de verano. HyeWon se apuntó aprovechando que los fines de semana no habían grabaciones, pero el lunes al volver tendría que ir al trabajo.

Eso dejaba a JungKook con DaeYang y Bam.

—He dejado varios biberones en el refrigerador, sólo debes calentarlo un poco antes de dárselo.

—Lo sé—asintió.

—Si llora mucho no lo consientas dándole lo que quiere...

—Intentaré distraerlo con otra cosa, lo sé.

—Intenta que no duerma la mayor parte del día o será mucho más difícil...

—Dormirlo en la noche—jaló de sus muñecas estando de rodillas en la cama—Lo sé, vuelvo y repito, me he quedado a solas con él anteriormente—depositó un corto beso a sus labios—Olvídate de nosotros por este fin de semana, diviértete con las chicas, te hará bien.

—Pero DaeYang...

—DaeSoo—reprochó con suavidad—No se quedará con un extraño, se quedará con su padre.

La castaña bajó la vista a su pierna cuando algo la abrazó. DaeYang sonrió como siempre mirándola.

—Omma.

Lo cargó besando su mejilla.

—DaeYang, te quedarás con papá por este fin de semana. Se un buen niño, ¿Sí?—acomodó su cabello oscuro—No llores mucho y se bueno con Bam.

JungKook sonrió por la imagen. DaeYang sólo la miraba entendiendo perfectamente lo que le decían.

—¿Tienes todo listo?

—Sí.

El chico recogió el bolso acompañándola a la puerta. La castaña recibió un segundo mensaje de JiSoo avisándole que la esperaba abajo en el edificio, llenó de besos al niño escuchando su risita, se lo entregó a JungKook colocando su bolso en su hombro.

—Dile adiós a mamá, DaeYang.

El pequeño movió su manito causando ternura en ambos. DaeSoo volvió a besar su mejilla dejando un beso más pero en el chico.

—Llámame si ocurre algo.

—No pasará nada, ve tranquila.

▪︎▪︎▪︎

La ventana abierta dejaba entrar el frío al departamento, afuera nevaba y Bam se encontraba apoyado en dos patas de dicha ventana. DaeYang quería hacer lo mismo estirando sus brazos aunque por su baja estatura no alcanzaba, se quejó alertando al perro que bajó de la ventana. El niño intentó subirse a Bam moviendo sus piecitos tambaleándose. Lo gracioso era que el animal no se movía conociendo las intenciones del bebé.

—¿DaeYang?—la voz de JungKook se escuchó a lo lejos. El chico se había descuidado un momento doblando la ropa y no lo veía por allí, cuando entró a la sala su alma abandonó su cuerpo al ver a DaeYang sobre Bam apoyado de la ventana abierta—No, no, no—de inmediato lo bajó cerrando dicha ventana—Bam, deja de consentirlo también—advirtió.

—Appa—llevó sus manos a su boca mordiéndolas.

—¿Tienes hambre?

—Omma—asintió.

—Mamá no está aquí, pero tengo tu biberón listo—fue a la cocina. Justo había calentado uno de los biberones, lo tomó girando sobre sus talones para volver con el niño y éste ya estaba jugando con el control remoto llevándolo a su boca—No, no, deja eso—le quitó el control subiéndolo al sofá, acomodó algunos cojines que sirvieran de protección para el niño, DaeYang sin problema aceptó el biberón succionando rápidamente.

El timbre de la puerta se escuchó extrañando al chico. Al abrirla apareció Jimin con una sonrisa y una bolsa llena de latas de cerveza.

—¿Qué haces aquí?

—Hola hyung, ¿Cómo estás, hyung?, gracias por venir, hyung—rodó los ojos entrando al departamento—Traje algo para animarnos esta noche.

—No puedo beber.

—¡Ya!, cada vez que quiero beber contigo está el bebé llorón aquí—dejó las bolsas en el comedor—¿Lo prefieres a él antes que a mí?—dramatizó.

—Sabes lo que diré—miró hacia el sofá donde DaeYang seguía bebiendo de su biberón con tranquilidad. Con una de sus manitos acariciaba a Bam mientras que la otra sostenía el biberón—DaeSoo fue a la pijamada con Yeeun, HyeWon y JiSoo.

—Oh, ¿Era hoy?—se sorprendió—Le hará bien. Podrán compartir chismes, tips, rumores, secretos...—sacó las cosas de la bolsa—Pediré una pizza.

—Quiero hamburguesas.

—Yo pizza.

—Estás en mi casa, tengo derecho a elegir.

—Soy tu hyung, tengo derecho a elegir.

Ambos se miraron retadoramente.

—¿Piedra, papel o tijeras?—propuso JungKook. Jimin aceptó contando uno, dos y tres—¡Ganan las hamburguesas!

—Es sólo suerte—revisó en su teléfono.

—Espera, ¿Y si pides ambos?

—¿Puedes comer tanto?

—DaeSoo también pregunta eso—volteó a ver a DaeYang de nuevo—¡Bam!—reprochó cuando vio que el niño le daba de su biberón y el perro lo lamía. Se acercó a DaeYang quitándole el biberón quien hizo un puchero.

—Dáselo antes de que llore.

—¿Estás loco?, el perro acaba de lamerlo—y acto seguido el pequeño comenzó a llorar. Lo cargó llevándolo a la cocina—No puedes darle esto a Bam.

—Appa, quedo—intentó alcanzar el biberón. JungKook lo dejó en el fregador abriendo el grifo, como lo estaba ignorando DaeYang lo salpicó con el agua removiéndose inquieto.

—¡Ya!—su paciencia estaba disminuyendo. El llanto sólo aumento, Jimin en silencio veía aquello convenciéndose que no quería tener hijos—Deja de llorar, por favor. ¿No quieres jugar con Bam?

—Quedo—señaló el biberón.

—No puedes tener ese biberón, está vacío—mintió un poco. El biberón estaba más abajo de la mitad—¿Ves?—DaeYang dejó de llorar.

—¿No hay?

—No, está vacío—repitió secando sus mejillas.

—DaeYang, ¿Quieres pizza y hamburguesa?—Jimin se acercó al hacer el pedido. Pellizcó la mejilla del niño, DaeYang tocó sus manos distrayéndose con los anillos que tenía—¿Te gusta?

—No le des...—ya era tarde—El anillo.

—Déjalo.

Apenas dijo eso el pequeño llevó el anillo a su boca alertando a los adultos. Al ser algo pequeño podía tragárselo y ahogarse.

—DaeYang, escúpelo—JungKook intentó abrir su boca. Éste negó con la cabeza moviéndose en los brazos de su padre, el pelinegro lo sentó sobre la mesa forzando su boca a abrirse, entregó el anillo a Jimin trayendo de regreso las lágrimas del niño—¿Por qué estás tan inquieto?, estabas siendo buen niño—se quejó.

—Omma—sollozó.

—Yo también estoy queriendo a tu madre.

—Ahora sé quien tiene los pantalones aquí.

Iba a hacer sólo 3 capítulos extras, pero teniendo en cuenta lo mucho que ha gustado les regalaré 5 capítulos antes del final alternativo ^^