Capítulo 5
Capítulo 5
Aprendiendo
DaeSoo suspiró dormida ajena de la personita que había sido colocada sobre su cama. Ésta gateó hacia ella jalando un poco su cabello, Dae se quejó sin despertar del todo aún. DaeYang miró a su madre dormir y luego a su padre quien cuidaba que no se cayera.
—Despierta a mamá, DaeYang—susurró.
—Ma—acercó su carita a la de ella colocando sus manitos en su rostro. La castaña entreabrió sus ojos volviendo a cerrarlos—Ma—volvió a llamar con esa vocecita dulce.
DaeSoo somnolienta abrazó con fuerza al niño cubriéndolo con las mantas. DaeYang se echó a reír.
—Mamá tiene mucho sueño, DaeYang.
—Hora de levantarse, dormilona—JungKook apartó las sábanas. El niño se soltó de sus brazos subiéndose sobre su madre, ésta restregó sus ojos deseando dormir un poco más—¿Lista para ir al parque?
—No lo creo, estoy un poco enferma.
El chico tocó su frente entrecerrando sus ojos.
—DaeYang, tu madre es muy mala mentirosa.
—Ma—sonrió divertido recostándose de su pecho. Volvió a abrazarlo dándole la espalda a JungKook.
—Queremos dormir un poco.
—Ya—reprochó divertido—No me hagas levantarte.
—Atrévete.
DaeYang se escapó de nuevo queriendo estar libre. JungKook rodeó la cama cargando a la chica como una bebé, el niño se echó a reír viéndolos así, aplaudió sonriendo más que feliz. DaeSoo le sacó la lengua y eso le recordó a él a la vieja Dae que conoció.
—Que madura, señorita Joon.
—No iré al parque, hace mucho frío afuera y no me siento bien—fingió desmayarse. El pelinegro la hizo quedar colgar de cabeza haciéndola entrar en pánico.
—¡¿Qué estás haciendo?!—sus manos se aferraron al pantalón del chico, DaeYang no dejaba de reírse—¡Ya!, voy a vomitar si no me subes.
—¿Irás al parque?
—No.
—Entonces te soltaré.
—¡No me sueltes o caeré! —se aferró más a él—DaeYang no te rías de tu madre—advirtió ocasionando más carcajadas, JungKook lo estaba disfrutando demasiado.
—¿Qué está pasando? —JiSoo entró a la habitación—¡Dios mío!, ¡JungKook bájala!
—No quiere ir al parque con nosotros.
—Unnie—con su cabeza colgando y las piernas sobre el hombro del pelinegro todo lo veía al revés—Ayúdame.
—Dijiste que irías con ellos.
—No me siento bien para salir.
—Mentira, no tiene fiebre y se encuentra perfectamente.
JiSoo sonrió enternecida por la imagen de DaeYang con las mejillas rojas por tanto reír. El niño quería bajar de la cama y lo ayudó dejándolo en el suelo, gateó hasta su madre jugando con el cabello que colgaba, DaeSoo pellizcó sus mejillas haciéndolo sonreír.
—DaeYang disfruta esto.
—Yo estoy disfrutando esto—JungKook sonrió divertido.
—Esta no es manera de tratar a alguien con depresión.
—Esto es algo que harías si fueras más fuerte que yo.
—¡Soy más fuerte que tú! —dijo ofendida. DaeYang enredó sus manitos en su cabello—¡Auch!, oye, no puedes jalar el cabello de mamá.
—Ma—dejó salir otra carcajada.
—Déjala en el suelo o no se alistará—JiSoo volvió a salir del cuarto. JungKook la dejó caer...pero en la cama, la forma en que cayó fue tan graciosa que padre e hijo se rieron de una forma muy similar.
DaeYang sólo se reía así cuando sus padres estaban juntos.
▪︎▪︎▪︎
DaeSoo ya estaba vestida y abrigada luego de un baño lista para salir. JungKook llevaría su cubre bocas como siempre, DaeYang iba en su coche con un gorro de lana en su cabeza, estaba tomando su biberón, su bolso con lo necesario se encontraba en la bolsa que tenía debajo dicho carrito.
—Bien, hora de irnos—JiSoo les abrió la puerta.
—¿No quieres venir? —propuso Dae mirándola.
—Debo editar unas fotografías y revisar unos correos, necesito concentrarme, anda y disfruta la tarde con esos dos hombres.
JungKook arrastró el carrito saliendo del departamento. DaeSoo se detuvo en el marco de la puerta dudando, intentó armarse de valor metiendo sus manos en los bolsillos de su abrigo, los tres bajaron juntos en el elevador, JungKook acomodó el cubre bocas en su rostro dejando a la vista sólo sus ojos. Lo difícil fue llegar a la puerta del edificio, Dae se detuvo sintiendo su corazón latir rápido.
No quería salir.
—Deberíamos volver.
—No volveremos—JungKook fue a ella obligándola a caminar, la chica estaba tensa—No pasará nada.
—No me siento cómoda, me siento expuesta—parecía más pálida que antes.
JungKook pasó su brazo por el suyo quedando enganchados mutuamente. La castaña lo miró y éste sonrió un poco.
—Caminaremos al mismo ritmo, ¿De acuerdo?, no me sueltes hasta que te sientas cómoda.
—Recuérdame, ¿Por qué debo hacer esto?
—Porque estar encerrada no es recomendable para nadie.
▪︎▪︎▪︎
El parque a esa hora de la mañana tenía varios visitantes de diferentes edades. Ambos estaban sentados en un banco mientras DaeYang seguía en su coche jugando con uno de sus juguetes. JungKook todavía tenía a DaeSoo sin soltarlo, seguía estando tensa.
—Respira profundo—ella obedeció—Nada malo pasará, sólo estamos disfrutando de la mañana con nuestro pequeño travieso.
Como si DaeYang supiera de que hablaban sonrió. DaeSoo sonrió un poco mirándolo.
—Sonríe mucho cuando estamos juntos.
—Sí, lo he notado. No lo había escuchado reír así.
A pesar del frío que se sentía en la ciudad había niños corriendo por ahí jugando entre sí, algunas parejas sentadas en el césped o algunas personas haciendo ejercicio. Tanto a JungKook como a DaeSoo les llamó la atención una pareja con un bebé, los tres se veían muy felices y la pareja se veía enamorada.
—Y...—JungKook fue quien rompió aquel silencio incómodo—¿Te decidiste entre los grupos de apoyo?
—No.
—¿Necesitas ayuda?
—¿Vas a acompañarme también a esos grupos?
—Podría hacerlo.
Dae lo miró sin creerle.
—Empezarás a trabajar, no creo que tengas mucho tiempo libre cuando las filmaciones inicien—tomó una de las manos de DaeYang.
—¿Qué dije sobre ayudarte?
—Que estarías conmigo hasta que me sintiera mejor—ambos se miraron unos segundos. El niño llamó la atención de ambos cuando quiso bajarse del coche, DaeSoo lo cargó levantándose del banco acomodando su ropa. DaeYang no quería estar en brazos, quería estar en el suelo—No puedes gatear aquí, vas a ensuciarte.
Le permitió estar de pie sin soltar sus manitos. Éste no tardó en hacer el intento de caminar, JungKook sonrió ante la imagen del pequeño inquieto.
—Pa—llamó al chico queriendo ir hacia él. DaeSoo soltó una de sus manos y ambos vieron como caminó hacia JungKook sorprendiéndolos.
—¡Oh! —el pelinegro la miró con ojos bien abiertos—¿Lo viste?
—DaeYang, ¿Puedes caminar hacia papá? —DaeSoo lo alejó un poco agachándose, el niño inquieto extendió los brazos hacia el pelinegro, JungKook le abrió los brazos invitándolo.
—Ven hacia papá, DaeYang.
—Appa.
—¡Oh! —la sorprendida fue la chica.
—¿Qué dijiste?
DaeYang sonrió divertido por las expresiones de sus padres.
—Appa—repitió más claro. Sus ojos fueron a la castaña—Omma.
—Así es, yo soy mamá y él es papá—la felicidad que estaban sintiendo en ese momento era inexplicable. ¡DaeYang estaba hablando!
—DaeYang, ¿Puedes caminar hacia papá? —el chico extendió sus brazos hacia él. DaeSoo lo soltó despacio viendo cómo sus piernitas se movían, caminó hacia JungKook tambaleándose, pero nunca se cayó—¡Eso es, campeón! —lo cargó apretándolo entre sus brazos sacándole unas risitas. El niño quitó su cubre bocas sonriendo más.
—Appa.
—Espera, te ayudo—DaeSoo se levantó acercándose a él acomodando su cubre bocas. Los ojos oscuros del actor se mantuvieron en ella, cierto nerviosismo mezclado con algo más sintió al tenerla tan cerca—Listo—DaeYang los miró disfrutando tenerlos así—¿Por qué me ves de esa manera?
—Nada—se limitó a decir recordando la conversación con Jimin. Su teléfono interrumpió el momento, lo tomó de su bolsillo viendo el nombre en pantalla—Hola, Yeeun.
DaeSoo cambió su expresión con un suspiro, volvió a sentarse en el banco fingiendo acomodar el coche donde minutos antes estuvo el niño.
Estos dos...me frustran :v
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