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ᴄʜᴀᴘᴛᴇʀ 𝟸
ɢᴜᴇʀʀᴀ ᴅᴇ ᴍɪʀᴀᴅᴀs

El tren habia llegado a su destino por lo que todos los estudiantes y profesores comenzaron a bajarse del tren. El grupo de personas se habia hecho más grande de lo normal, mientras eran guiados por Hagrid. Madison se habia alejado de sus amigos para así poder estar junto a la persona que mas hechaba de menos Severus Snape.

—Creo que hay ataque de celos–susurró Madison al oido de Sev mientras notaba como Lily los miraba de vez en cuanto. Por lo que ambos se miraron de manera burlóna.

—Es solo porque estoy contigo ahora mientras no lo esta ni siquiera nota mi presencia—el pelinegro rodoó los ojos.

—Sabes, a veces concidero que pertenesco a Slytherin y no a Gryffindor siento que estoy en la casa equivocada—dijo la castaña mientras caminaba y le daba una mirada rápida a su mejor amigo.

—Te sientes así porque pasas la mayoría del tiempo con una serpiente—Sev sonrió divertido para así devolverle la mirada. Ambos en silencio siguieron caminando hasta llegar a cierto punto.

—¡Gyffindor por aquí!–en cuanto los perfectos comenzaron a llamar sus casas los de primer año al séptomo comenzaron a dividirse. Madison se colocó frente al pelingro mientras hacia una mueca de disgusto.

—Bueno, es aquí donde nos dividimos te veo más tarde o luego—la castaña lo miró detenidamente a los ojos.

—Entonces nos vemos luego—el pelinegro le dedicó una pequeña sonrisa mientras le besaba la mejilla de la castaña la cual se habia tornado de color rosado.

Todos como de costumbre entraron al gran comedor para así sentarse en sus respectivos lugares. Mientras Dumbledore comenzaba a dar su discurso de bienvenida Madison no pudo evitar buscar a su otra mitad con la mirada.

En cuanto ambas miradas chocaron aquella sonrisa se habia hecho presente. La castaña evitó volver a mirarlo ya que su sonrojo era imposible ocultarlo.

—¿Estás bien? Tus mejillas parecen explotar—Alice la miró divertida.

—Creo que Madi ya encontró alguien conosco esa mirada—Frank miró a su amiga de manera burlóna.

—Pueden callarse los dos de una vez ¡Dios!–la castaña rodoó los ojos. En cuanto levantó la mirada nuevamente fue entonces que comenzó una guerra de miradas con la persona que siempre intentó evitar altener contacto visual con Lucius el rubio no tardó en guiñarle un ojo provocando que esta casi se ahogara con la comida.

—¿Estás bien?–Alice la miró preocupada–Ten toma un poco de agua.

—Estoy bien, gracias—la castaña le dió un sorbo a su vazo con agua.

  Después de la cena todos fueron rumbo a sus dormitorios. La castaña al entrar a la habitación se lanzó a su cama y mientras desempacaba intentaba en no pensar lo intenso que habia sido su primera tarde en Hogwarts sabía que muchos obstaculos estaba por comenzar hacerse presente.

[...]

Gente aquí les dejo el segundo capitulo de «El Amor Duele» espero que les guste nuevamente les agradesco por los votos y comentarios anteriores.