POV Freddy

Estaba en la sala de espera aguardando a que me llamaran.
Dos hombres bajaron por unas escaleras del segundo piso donde debía estar la doctora Sanders. Tomados de las manos y claramente felices. Al de menor estatura (que era mitad hurón) se le notaba un leve bulto en su vientre.
Es divertido pensar que yo estaré así algún día. Pero es triste saber que yo no tendré a nadie a mi lado con quien pueda salir con una sonrisa de ese lugar.

-¿Frederick Stone? -llamo el joven pelirrojo que estaba atrás de un escritorio como recepcionista tecleando varias cosas en un computador-.

Me levante de el sofá en la sala de espera y fui a donde el chico. Aparentaba apenas veinte años, como ya había visto, pelirrojo, ojos verdes y tenia unos anteojos color rojo. Estaba sonriendo y no pude evitar devolverle la sonrisa.

-S-Soy yo -dije nervioso-.

-Mucho gusto, soy Fritz Smith. La doctora Sanders te esta esperando, puedes subir. Es la tercera puerta a la izquierda -dijo amistoso el chico-.

-Gracias -dije amablemente para después dirigirme a las escaleras-.

Ya arriba fui al lugar indicado, la puerta estaba abierta y en ella había un letrero que decía "Pase usted". Entre y había una mujer detrás del escritorio observando su computador.

Tengo que admitir que era muy bonita. Su cabello era completamente albino, sus ojos eran amarillos, iba levemente maquillada, sus uñas estaban pintadas de un rosa pálido y su piel era muy blanquecina.
Levanto su mirada del computador para ver quien había entrado y sonrió

Le devolví el gesto pero con una sonrisa más nerviosa. Intente actuar natural, pero la verdad me sentía en un camino sin fin.

-Es normal que para ser "madre" primeriza estés nervioso. Tranquilo, no muerdo. Estoy para ayudarte. Toma asiento -dijo calmada y comprensiva sin quitar la sonrisa de su rostro-.

Me sentí más calmado por ello. Me senté en una de las sillas enfrente de su escritorio sin hacer ruido.

-Mucho gusto Frederick, soy la doctora Marlene Sanders. Llámame Mangle.

-Freddy. Solo Freddy. Mucho gusto -dije amable-.

Guardo silencio un momento y me inspeccionó con su mirada. Al menos para mi fue un momento incómodo. Como si quisiera averiguar algo.
Ya le había comentado por teléfono (más bien a Fritz) por que quería la cita, pero todavía sentía que era algo vergonzoso.

-Bueno, dejemos los rodeos. Se que debes estar muy confundido -y no sabe cuanto- y desde hace días que debes tener la pregunta de como puedes estar embarazado. Déjame te explico. Mas que obvio no eres el único que a pasado por esto. Así que no pienses que eres un fenómeno por poder quedar embarazado. Todo estará bien.

Mangle comenzó a contarme las cosas mas básicas de el embarazo, partiendo desde que el feto entra en el "útero masculino" (del cual no tenia idea de que existiera algo así), hasta lo que sera mi primer mes de embarazo. Ah todo lo que decía Mangle, yo escuchaba atento, a pesar de que fuera algo difícil de asimilar y comprender, y no por que fuera hombre. Era confuso por el hecho de que no era como un embarazo femenino. Pero me sentía mas tranquilo de saber como funciona esto, y tener en claro que no es ninguna anormalidad en mi cuerpo.

Si un hombre se entera de que esta embarazado y teniendo las pruebas, obviamente se asustaría y pensaría que hay algo mal el cuerpo. Por lo menos esa es mi conclusión, y también lo pensé así.

-No entendí eso, ¿a que se refiere con que solo ciertas personas pueden? ¿Que los hace diferentes al resto?

-Sencillo, cuatro de cada diez hombres que su genética la comparte con algún animal mamífero oh procede de una familia en la que se tienen parientes animales-humanos, tiende a tener el ochenta por ciento de probabilidades de poder concebir un bebé. Por ejemplo, el sujeto uno -tomo una pluma azul haciendo referencia a una persona- es un hombre cualquiera, no tiene familiares con procedencia animal, por lo tanto no tiene genética animal-humana Así e no puede concebir un bebé dentro de él. Y el sujeto dos -tomo una pluma roja haciendo lo mismo que con la anterior- es otro hombre, pero a diferencia de el primero, este tiene familiares con procedencia animal, con el resultado de que el sujeto dos puede concebir un bebé -explico pacientemente mujer-.

-Entonces solo personas con procedencia de animales mamíferos.

-Exactamente. Solo de animales mamíferos. -sonrió- y para concluir, una cosa mas. Como ya viste que los embarazos masculinos son diferentes a los femeninos, el mayor tiempo que podría durar el bebé dentro de ti es de once meses -concluyo calmada-.

-¿¡Once meses!? -dije espantado. Si me asustaba la idea de tener un vientre hinchado lo que yo pensaba que serian nueve meses, ahora resultaban ser once-.

-Aproximadamente, a menos que se hiciera el caso presente de que se te adelantara el bebé -dijo calmada- pero también tenemos que tener en cuenta de que tu cuerpo todavía es joven y aun no has terminado de desarrollarte por completo, y eso puede afectar en que tan rápido se desarrolle el feto dentro de ti. Pero de eso no hay que preocuparse todavía, en los embarazos masculinos eso se determina en el sexto mes de gestación.

-No pensé que fuera tan complicado -dije preocupado-.

-Te mentiría si te dijera que es pan comido -me miro entre risas- pero paro eso estoy. Para ayudarte a llevarlo. No tienes que preocuparte por nada -concluyo sonriente-.

Inevitablemente le devolvía cada gesto que hacia, era una mujer muy dulce y comprensiva. Resulto tener veintisiete años, lo cual me sorprendió mucho, ya que aparentaba menos edad. Mucha edad.

Lo que siguió de eso fueron todas las cosas que no podría hacer, con lo que tendría que tener cuidado, lo que podía hacer, etc., inclusive en el lapso de tiempo sacábamos algún comentario para alegrar el ambiente. La verdad es que fue muy divertido, ya sentía mas la seguridad de venir cada mes sin estar nervioso, hasta podría decirse que me emocionaba.

-¡Jajaja! ¿En sábado? Por Dios Freddy, ni yo era tan despistada para ir a la escuela un sábado. Jajajaja -se siguió riendo de mi pequeña desgracia un poco mas para después ya poder calmarse. Suspiro, ya mas calmada me miro, pero ahora algo incomoda. Como si temiera decir algo erróneo- hablando ahora de otro tema Freddy, -tomo un semblante un poco mas serio- ¿sabes quien es el padre de tu hijo? Y si lo sabes ¿ya le dijiste que estas esperando un hijo de él?

Me quede tieso en mi lugar. No sabia que responder.

Obviamente no voy a decirle "Oh, lo que pasa es que ese idiota me engaño con un imbécil que tenia mas cara de zorra que las putas de los clubs. Así que ya no es nada para mi". No.
Al menos no de esa forma. Un poco mas sutil.

-Si, si se quien es... Pero él y yo ya no tenemos nada que ver -dije serio con un deje de tristeza no muy notorio. Gire mi cabeza sin fijarme a donde mirar. Termine viendo una foto en su escritorio donde aparecía Mangle y un hombre de su edad de cabellos azules felizmente abrazados. Suponía era su esposo (ya había mencionado que estaba casada)-.

-Se que no me incumbe tu vida privada pero -suspiro. Pude sentir su mirada clavada en mi, logrando incomodarme- era necesario saberlo. -hizo pausa un momento sin despegar su vista- Sin embargo no me haz respondido una pregunta, ¿él sabe que estas esperando un bebé?

-No -dije sin mas-.

POV General

Mangle se quedo callada, meditando sus palabras. No podía obligar a Freddy a que le dijera lo sucedido si el no quería, pero como encargada de la salud de Freddy tenia que saber que fue de el padre para poder acoplar el embarazo de Freddy a la situación.

Mangle no era ignorante para no darse cuenta de que Freddy y el padre del bebé ya no eran una pareja, por lo tanto tendría que trabajar con Freddy sin él si así lo quería el menor. Y Freddy no estaba dispuesto a hablar o decir algo acerca de Shane. Estaba decidido a tenerlo y criarlo sin él

-Comprendo lo que me quieres decir Freddy, y entiendo que ya no quieras volver a verle la cara. Pero lo más preferible es que el esté enterado de esto. ¿No existe la posibilidad de que le digas lo que está pasando? -preguntó Mangle intentando sonar lo más sutil posible-.

-Realmente no. Y preferiría que siguiera así -dijo firmemente el castaño-.

No era la primera vez que Mangle pasaba por un caso de este estilo, y sabia que no podía presionar a Freddy. Si esa era la decisión del menor, tendría que respetarla y trabajar solo con él. Solo era cosa de tiempo para que estos dos algún día puedan llegar a tener un gran lazo de confianza. Y tal vez, le llegara a contra lo que pasó.

Mangle suspiro resignada y se dispuso a seguir con la consulta.

-Bien, no te obligare a nada que tu no quieras ni ahora ni en un futuro. Así como es tu decisión trabajaremos así -le dio una sonrisa para seguir contándole todo lo que habría que hacer-.

Llevaron casi dos horas más en el consultorio. Freddy no creía que los embarazos masculinos fueran extremadamente delicados.

Cuando por fin terminaron ya eran las nueve treinta, Freddy se había retirado del consultorio, no sin antes haberle agradecido a Mangle y despedirse y sacar otra cita para el próximo mes.

Ahora lo único que pasaba por la cabeza del oso castaño era llegar a su casa y dormir un poco. Había sido un día agotador, juntando el hecho de querer olvidar las palabras de su ex pareja dichar unas horas antes.

Al entrar a su casa vio a Puppet y a Chica sentados en un sillón platicando animadamente. Pero centro su atención en Bonnie, que estaba sentado de piernas cruzadas a un metro de la puerta principal en el suelo. Justo como lo haría un perro que espera a la llegada de su dueño.

-Te tardaste -dijo el peli-morado después de unos minutos de silencio-.

-¿Qué hacen aquí? -preguntó el oso evadiendo olímpicamente el comentario de su mejor amigo-.

-Hola Freddy, ¿qué tal te fue? ¿Qué te dijo la doctora? ¿Todo en orden? Me alegra verte -intervino la única mujer del lugar ganándose la atención de los dos primeros nombrados-.

Puppet solo disfrutaba de la escena que montaban todos sus "niños". Podían ser unos inmaduros (sobre todo Bonnie), pero así les quería y apreciaba a todos.

POV Freddy

En estos momentos tenía mucho sueño y en el camino venía con la intención de llegar a dormir, pero con estos dos al parecer tendré que darles un gran resumen de lo que pasó hoy.

-Freddy, Freddy, Freddy, Freddy, Freddy, Freddy, Freddy -Bonnie se había parado del suelo y había comenzado a picar mi mejilla- Fredo, Freddy.

-¿¡Qué!?

-¿Vas a contarnos o no? -preguntó Chica-.

-¿Que cosa?

Bonnie puso una cara de fastidio mientras se daba un golpe en la frente.

-De la consulta con la doctora, genio -dijo él conejo de lo más obvio-.

Suspiré cansado y me senté en el sofá y comencé a contarles todo lo que me dijo Mangle.
Se podía ver que escuchaban atentos y se les veía impresionados por sus expresiones. Mientras tanto yo intentaba no quedarme dormido.

Una vez que termine de contarles hubo un gran silencio en el que todos estaban mas que sorprendidos. Cuando por fin me había dignado a irme a dormir, Bonnie hablo.

-Así que, hombres mitad animales mamíferos pueden... Embarazarse -dijo una vez saliendo del trance-.

-Tienen mas probabilidades que un hombre sin ADN animal mamífero -respondí tranquilo-.

-Entonces, yooo... -dijo espantado-.

-Si Bonnie, si te la meten podrías quedar embarazado -respondí de la misma forma que antes-.

-¡Frederick! -reprocho mi papá por mi vocabulario-.

-Perdón papá -dije temeroso. Nunca fue bueno hacerlo enojar. El solo suspiro resignado, me miro y rió-.

-Dejando de lado el que Bonnie también podría embarazarse... Yo voy a ser la madrina ¿verdad que si Freddy? -dijo Chica poniendo una cara inocente y a la vez que se incava enfrente de mi y se recargaba en mis piernas. Yo solo puede reír ante su acción. Era tan divertido cuando hacia este tipo de cosas solo para conseguir lo que quiere-.

-Quítate pollo, en tanto ese niño me tenga a mi como padrino no harás falta tu ¿verdad Freddy? ¿Verdad que yo seré el padrino de tu hijo? ¿¡Verdad mejor amigo!? -dijo Bonnie con aires macabros-.

Para estos entonces mi papá y yo ya nos estábamos riendo del show que montaban esos dos. Era tan divertido cuando esos dos se peleaban por tonteras. Como la vez en la que se pelearon por quien saltaba desde el segundo piso a un inflable a los nueve años en una fiesta de cumpleaños. El muy idiota de Bonnie salto y se rompió la pierna por no caer bien.

Una vez que me calme de tanto reír me dispuse a intervenir antes de que esos dos se sacaran los ojos.

-Chica, si puedes ser la madrina. Bonnie, si puedes ser el padrino. ¡Pero ya cállense! -solo estaba un poquito cansado. Si no duermo, me enojo-.

Una vez que Chica y Bonnie se fueron, me despedí de mi papá y me fui a mi habitación. Lave mis dientes y me metí en mi cama, dispuesto a dormir, con todos los recuerdos de hoy en mi cabeza, cai dormido.

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Creo que es el capítulo más aburrido que eh escrito hasta ahora ._.

Sé que me tarde, perdón por eso, pero sinceramente no se me ocurría nada para hacer este capítulo.

Dejando eso de lado, ¿qué tal quedo?
¿Gusta, no gusta? ¿Riko, no riko?

A mí me aburrió, pero era necesario :3

Lamento haberlos hecho esperar, prometo que no volverá a pasar :)

Y gracias a las personas que han leído esta historia, han votado, comentado y agregado a sus listas de lectura ;u;

Muchas gracias, y no possss

Bye ^^ 💙❤️