Disney estaba de lo más feliz festejando algunos de sus éxitos de este año junto con Pixar, en el buffet del piso 3 mientras comían unas hamburguesas como celebración. La compañía del ratón por fin había logrado buenos éxitos gracias a Deadpool 3 (Hecha por Marvel) y Moana 2.

Mientras celebraba con Pixar, también aprovechaba a lanzar puro dinero de sus manos como si fuera un completo millonario gozando de la riqueza
—¡Al fin, maldición! ¡Dinero de verdad y no de fracasos! ¡Estamos volviendo a la cima, Pixar!—
—¡Lo sé, señor! Estoy tan emocionado que anoche no podía dormirme—
—Jaja, yo estaba exactamente igual. Pero ahora que estamos avanzando... ¡Hay que seguir sacando ideas nuevas! Copiarnos de cualquier idiota no resultó tan buena idea en un inicio, así que dejemos ese plan enterrado por el momento—
En lo que ambos platicaban en el buffet, Dreamworks se encontraba a lo lejos, sentado en una mesa vacía esperando a Universal, pero mientras lo esperaba, aprovechaba a observar únicamente a Disney. Estaba muy sorprendido de que el "ratoncito" estuviera teniendo los primeros éxitos después de tanto tiempo de fracaso y rechazo. No podía negar que también se sentía un poco celoso por la reputación actual de Disney, sin embargo, le importaba poco y sólo le alegraba que estuviera feliz por sus logros.

Dreamworks desvió un momento la mirada y comenzó a enfocarse en otras cosas que le parecían curiosas e interesantes. Durante el descanso, notó como otras empresas rivales mejoraron bastante desde que Holdings los unió para colaborar en el mes de febrero. Contemplaba como Marvel y DC andaban siempre juntos compartiendo momentos con Image comics; a Paramount y Columbia platicando civilizadamente entre ellos, y a Blumhouse y Sony juntándose con Lions Gate en estos horarios. Todo parecía bastante nuevo e impresionante desde la época en dónde todos ellos se llevaban pésimo, inclusive él y Disney en el pasado.

Pasó un rato y Universal finalmente había llegado. Acababa de acomodar su traje blanco porque siempre quería lucir elegante y luego se acercó a Dreamworks para saludar con un golpecito en el hombro
—Hola, Dreamworks, ¿Cómo te va el día de hoy?—
—¡Universal! Al fin llegas, je. Pues, hago lo de siempre: mirar a Disney. ¿Puedes creer que está teniendo éxito en sus películas?! Eso parece un milagro— comentó con una pizca de sarcasmo
—¡¿En serio?! Mierda, ¿Cómo es que nadie lo mencionó? Siempre soy de los primeros en enterarse de las noticias de Disney u otras empresas populares—
—¿Estuviste haciendo algo importante? ¿Cómo te va con tu nueva asistente y tu relación con Warner? ¿Acaso sigue drogándose?— habló con un tono amargo
—Ugh, no me hables de ellos. No estoy de humor para platicar precisamente de ambos—
—¿Tan mal están?—
—Fearworks es como una niña inquieta y Warner sólo está deprimido porque no me supera—
—Ja, ¿De verdad? Suena como una telenovela—
—¿Y tú qué? Parece que vives en una película de novela con Disney—
—Puede ser, pero él sigue resistiéndose a mí y ni siquiera he podido llevarme bien con uno de sus hijos—
—Debí imaginarlo. Ése roedor siempre es terco como mula y sus hijos pueden ser inquietos como él—
—¿Y tú qué sabes de los "Mini-Disney"?— entrecerró los ojos con algo de molestia por la forma en que lo describía
—Mi hijo me cuenta. ¿Tu hija nunca te dice nada o qué?—
—Mmm, pues Dreamworks Junior nunca me cuenta nada y sólo se la pasa jugando con Nick.jr—
—Comprendo...—
Con el tiempo que pasaron hablando durante el almuerzo, el descanso se terminó y todos debían volver a sus oficinas para trabajar nuevamente en sus proyectos.

Dreamworks se encontraba trabajando tranquilamente en su oficina con su computadora en el escritorio, mientras algunas aves se posaban en su ventanal con vista a la ciudad y él solamente pensaba en algo que vino a su mente. En realidad, no estaba usando la computadora para sus labores, sino que estaba buscando noticias en Google sobre los éxitos de Disney y los cambios que habrá en su empresa según su presidente al mando "Así que por esa razón está siendo tan exitoso... Disney decidió terminar con la inclusión forzada y sólo concentrarse en su negocio. Qué idiota", pensó con seriedad mientras leía más páginas e información de internet sobre el tema.

A pesar de todas las tonterías e ideas que piensa Disney, Dreamworks no puede evitar amarlo todavía más hasta el punto de hacerlo más obsesivo. Se preguntaba cómo podría hacer para conquistarlo de una vez y no dar tantas vueltas en el asunto. Han pasado varios meses desde que está enamorado de Disney y él sigue rechazándolo con excusas e insultos... ¿Y si la compañía del ratón sentía lo mismo por Dreamworks pero sólo se hacía el difícil? Eso podría ser una teoría...

De pronto, Dreamworks tuvo una idea que no podía fallar para su conquista... "¡Lo tengo! Puedo ir a la casa de Disney y hacerlo sentir más admirado si miramos sus películas exitosas juntos... ¡Cómo una noche de cine! Jaja, suena divertido y tentador". Sonrió con malicia por lo siguiente que tenía en mente: Poder hacerlo suyo una vez si era posible.

La compañía del ratón se encontraba en su ordenada oficina con estanterías de peluches de Mickey Mouse mientras decoraba cada rincón con imágenes de Blancanieves para hacerle referencia a su siguiente película Live Action. Le tenía mucha fé a este proyecto y sentía esperanza por lograr otro éxito que lo lleve a la cima de la popularidad, la fama y el respeto. Hace unas semanas, le había exigido duramente a Pixar sobre el proyecto de "Zootopia 2"; Disney quería que triunfara y desde ese entonces Pixar se ha sentido doblemente estresado y cansado, al igual que la próxima película titulada "Elio".

Disney se sintió satisfecho con la nueva decoración de su oficina y después regresó a sentarse detrás de su escritorio para trabajar en su computadora y proseguir con los detalles de "Blancanieves".

Se sentía súper concentrado, ambicioso y ansioso. No paraba de escribir en los botones de su teclado debido a cada idea que venía a su mente en cuestión de segundos. Se creía un genio por eso. Sin embargo, su concentración se quebró en 2 cuando escuchó la puerta abrirse de golpe por culpa de la inesperada e inoportuna llegada de Dreamworks sin permiso ni respeto.
—¡¿Otra vez tú?!— expresó Disney con capricho
—Aww, tranquilo, ratoncito... Sólo vine a invitarte a un lugar~—
—¡No me importa! ¡Estoy harto de caer en tus estupideces! ¡Ahora vete de aquí, que estoy ocupado!—
—¿Al menos me permites explicarte de que lugar estoy hablando?—
Disney se frotó la frente por la migraña y luego decidió escucharlo para que se largue de una vez
—¿Qué demonios quieres ahora conmigo?—
—Supe que tuviste éxito con varias de tus películas actuales y me di cuenta que aún no las he visto. Me preguntaba si podría ir a tu casa para que pueda verlas contigo—
—¿Me estás jodiendo? ¡Por supuesto que no te invitaré a mi casa! Mi reputación sería escasa si muchos se enteran que traje a mi peor enemigo a mi propiedad—
—Jaja, ¿Acaso tienes paparazzis o algo así? Nadie sabrá que fui a tu casa si no cuentas nada—
—¡No me importa! ¡No voy a soportar tu presencia! Además, me empalaga que te encariñes tanto con mis hijos. Ellos viven conmigo—
—Vamos, no te pongas celoso. Entiendo que quieres ser su única figura paterna, pero no pienso entrometerme. Sólo quiero pasar un buen tiempo contigo y llevarme muy bien con los "Mini-Disney"—
—Agh, ¿De verdad te atreves a ponerles apodos? Eres un descarado—
—Lo siento. Es que suena divertido y a ellos no les molesta, jaja—
Disney puso una expresión sombría y seria. A pesar de que Dreamworks lo ha estado apoyando, mimando e incluso acosando durante meses, aún no estaba seguro si podía confiar en él al 100%. Siempre tenía esos pensamientos revueltos que consistían en traición y humillación. Por otro lado, sabía que sus hijos lo querían mucho y todos los días preguntaban por Dreamworks.

                                Hace una semana

DisneyXD había terminado su desayuno en la mañana junto a sus hermanos y su padre; estaba muy inquieto preguntando sobre Dreamworks
—¡Papá, papá! ¡¿Cuándo veremos al señor luna de nuevo?! Hace mucho que no lo vemos...— mencionó con una expresión decaída y Disney lo miró con algo de seriedad, pero intentó ser franco
—No lo sé. Últimamente las empresas adultas como él y yo hemos estado muy ocupados con nuestros proyectos actuales, las taquillas, las críticas y las entrevistas... Tenemos mucho trabajo atareado en este año 2025—
—Ow, pero aún así lo extrañamos mucho... ¿No es así, Disney Junior?—
—Shi— Hizo un puchero triste mientras tenía algo de comida en la cara. Su padre Disney le limpió con una servilleta y volvió a responder con seriedad
—Escuchen, niños. Aunque quieran verlo, no se podrá. Ya les dije que tenemos mucho trabajo en el edificio— excusó disimuladamente haciendo ojitos mientras ayudaba a Disney Princess a cortar su desayuno.

Los "Mini-Disney" se quedaron en silencio con una cara triste a medida que desayunaban.

                                    Actualidad

Disney no paraba de recordar la insistencia de sus hijos y en la forma que Dreamworks había sido con ellos anteriormente. No podía negar que Dream era bueno cuidando a los pequeños y eso le alegraba el corazón y extrañamente lo hacía sonrojarse "¡Mierda! ¡¿Por qué estoy tan rojo por sólo pensar en la actitud de ese idiota?! ¡Ahh! ¡Ya ni siquiera deja a mi mente en paz?!".

De pronto, la voz de Dreamworks lo sacó de sus pensamientos y lo miró a los ojos
—¿Y bien, ratoncito? ¿Puedo ir a tu casa para "admirar" tus éxitos contigo?—
Disney suspiró con enojo y respondió con la cabeza gacha para cubrir su vergüenza
—Ugh, está bien... Puedes ir...—
—¡Si! ¡Gracias, ratoncito!— Dreamworks se le acercó para levantar su mentón y besarle en los labios. Inmediatamente Disney lo empujó
—¡¿Qué crees qué haces?! ¡Ya para de hacer eso como si fueramos pareja!—
—Bueno, sobre eso, todos en el edificio ahora creen que somos novios, ¿Recuerdas?—
Con sólo recordar eso, Disney se puso rojo como un tomate y sacudió la cabeza para olvidar aquel momento en que le dio su merecido a Warner y luego todos lo felicitaron, hasta que Dreamworks llegó y lo besó para mentir sobre su relación
—Todo esto es tu culpa. En ese momento me sentía un héroe por haber defendido a muchos de Warner, ¡Hasta que llegaste tú con tus cursilerías y me hiciste quedar como un idiota!—
—Eso no es cierto. Tú mismo viste como muchos nos felicitaron por ser "novios" y no escuché ningún comentario negativo—
—¡Aún así me mataste de vergüenza! ¡Y lo peor es que te robaste mi protagonismo en esa situación!—
—Ok, ok, ya olvídalo; "pasado pisado". Mejor hablemos sobre lo que haremos después del trabajo. ¿Cuáles de tus películas tuvo exito este año? Dime y así podré verlas contigo esta noche—
—Moana 2 y Deadpool 3. Aunque la última salió el año pasado, aún sigue siendo exitosa—
—Mmm, he oído críticas positivas sobre ellas—
En ese momento, el ego de Disney regresó y él comenzó a sonreír maliciosamente para alardear
—¡Pues claro que son positivas! ¡Mis películas están regresando a su máximo esplendor de nuevo! Pronto te superaré definitivamente y nadie recordará tu nombre, Dreamworks, jaja—
—Lamento romper tu burbuja, pero a muchos les gustó mi película de "Robot salvaje" y ahora todo el mundo espera mi primer live action de "Cómo entrenar a tu dragón"—
Disney comenzó a tener un tic nervioso en el ojo y una vena se encarnó en su frente por lo furioso y celoso que estaba de esa noticia, sin embargo, trató de disimular
—¡No me importan tus películas de mierda! ¡Las mías siempre fueron las mejores!—
—¿Estás seguro? Porque la inclusión forzada no fue una buena formula para tu compañía, jaja—
—¡AGH, ya cállate! ¡Esa idea ya fue desechada! A partir de ahora me concentraré en mi negocio y ya—
Dreamworks no quería seguir discutiendo porque sabía que era imposible debatir con un cabeza hueca como Disney, aunque lo seguía amando así de terco
—Bien, como digas. Ya me tengo que ir. Debo seguir con mi proyecto de dragones~— Caminó hacia la puerta y la abrió para marcharse —¡Nos vemos luego, ratoncito!— Se despidió mandándole un beso en el aire, pero Disney lo miró asqueado y a la vez sonrojado.

Cuando pasaron las eternas horas de trabajo, varias empresas por fin salieron del edificio para irse a sus casas y Disney se quedó en la entrada para esperar a Dreamworks, aunque no entendía por qué se estaba tardando tanto.

Pasó media hora y Dreamworks finalmente había llegado, viéndose en un estado exhausto después de tanto correr y con varias bolsas en los brazos. Disney lo miró extrañado y preguntó arqueando una ceja
—¿Por qué tardaste tanto? Y... ¿Qué son todas esas bolsas qué traes?—
—Uff, lamento la tardanza. Había ido al piso 9 para dialogar con Hasbro y comprar algunos juguetes para los "Mini-Disney", jeje—
—¿Qué? ¡No trates de consentir a mis hijos! No quiero que después salgan malcriados por tu culpa—
—Ay, no exageres, ratoncito. Se nota que nunca les diste obsequios—
—¡Eso no te importa! Tú no eres nadie para decirme como debo tratarlos—
—No estoy diciendo eso. Sólo trato de explicarte que no está mal regalarle juguetes a un niño de vez en cuando. No seas dramático—
—¡Bien! ¡Cómo sea! No tengo tiempo para sermones, ¡Pero sólo te dejaré hacerlo esta vez!—
—Jaja, es gracioso cuando admites tus errores—
—¡No admití nada!—
—Estoy bromeando. ¿Nos llevarás en el "Mercedes Benz" qué te obsequié el año pasado?—
Disney rodó los ojos y le hizo señas a Dreamworks para que lo siga en busca de su auto estacionado.

Afuera del edificio había un gran estacionamiento al aire libre para estacionar principalmente autos caros, lujosos o enormes. Disney no quería admitirlo, pero le había gustado el regalo de Dreamworks y desde ese entonces ha estado usando aquella limosina de Mercedes Benz para ir al trabajo y pasear de vez en cuando con sus hijos...

Dreamworks sonrió cuando vio la limosina que le había obsequiado y se sentía más que feliz por contemplar lo impecable que estaba el vehículo caro
—Se nota que has cuidado muy bien mi regalo, je— comentó Dream cruzado de brazos y Disney respondió con las mejillas rojas y la mirada desviada
—S-sí... Así es...—
Ambos subieron a la limosina y Disney condujo en todo el viaje hasta su enorme casa que parecía una mansión.

El hogar de la compañía del ratón era más grande que el de Dreamworks. La mansión de tres pisos era blanca por fuera y tenía bordes rojos en las columnas. Las puertas de entrada tenían un dibujo enorme de Mickey Mouse sonriendo. Disney tomó las llaves y entraron al interior de la mansión.

Apenas pasaron y dejaron sus abrigos, los "Mini-Disney" bajaron de las largas escaleras corriendo y yendo a abalanzar a Dreamworks en un fuerte abrazo
—¡Señor luna!—
—¡Woah!— Dreamworks cayó al piso por el peso de todos los pequeños encima de él que no paraban de abrazarlo —¡Jaja! ¡Si que tienen mucha energía! Creí que estaban dormidos— DisneyXD le respondió con entusiasmo
—¡Lo sentimos por eso, señor luna! Es que no teníamos sueño y nos alegramos cuando oímos su voz al llegar, jaja—
Dreamworks se incorporó a carcajadas mientras consentía a los niños con mimos y los regalos de Hasbro que trajo para cada uno: eran juguetes grandiosos y extravagantes.

DisneyXD, Disney Junior y Disney Princesa se fueron a la sala a jugar con sus juguetes nuevos, mientras su padre los miraba con seriedad y un poco de malhumor debido a que le preocupaba malcriar a sus hijos con cualquier cosa que pidan. Por un lado se sentía molesto, pero por otra parte se sentía feliz de ver a sus pequeños tan alegres.

Antes de que Dreamworks fuera a acomodarse en la enorme casa, se percató que aún sobraba el regalo de Disney Chanel en su mano y se preguntaba en dónde estaba el hijo mayor de Disney
—Oye, ratoncito, ¿Dónde está Disney Chanel?—
—Oh... Él...— Suspiró entristecido antes de responder —Está enojado conmigo porque en este mes lo obligué a cerrar su canal de transmisión en España. Lo hice para agrandar mi plataforma de "Disney+" con más entretenimiento y suscripciones. Desde ese entonces ha permanecido encerrado en su habitación por varios días—
Dreamworks quedó sorprendido por aquella noticia y no sabía muy bien que decir, ya que era un tema laboral y personal de la compañía del ratón y sus pequeñas empresas
—Ya veo... Espero que se sienta mejor en los próximos días— comentó Dream rascándose la nuca nerviosamente.

Ya eran las 10 pm y los "Mini-Disney" debían irse a dormir, pero se negaban a hacerlo porque decían no tener sueño y preferían seguir jugando con los nuevos juguetes que Dream les trajo. Disney no tuvo paciencia y se llevó a sus hijos con un tirón de orejas a sus habitaciones.

A Dreamworks no le pareció justo aquel comportamiento brusco con los niños y decidió ir a sus habitaciones para contarles un cuento a cada uno hasta que finalmente se durmieron y él los acurrucó con sus mantas y peluches para que no se despierten.

Bajó silenciosamente por las escaleras y luego contempló a Disney ya sentado en el sofá de la gran sala y preparando las películas para ver juntos
—Veo que ya estás preparando todo, ratoncito~—
—Dios, ¡¿Te puedes callar?! Lo primero que veremos será "Moana 2" y así sabrás porque me fue tan bien en taquilla y de más✨—
Dreamworks rodó los ojos mientras reía y después se sentó en el sofá junto a Disney.

La película había comenzado y ambos estaban concentrados, sobretodo Dreamworks, que miraba con ojo crítico cada detalle de la película para verificar cualquier defecto o error en la animación, guión, personajes, trama, etc.

Cuando la cinta iba casi por el final, Disney estaba cabeceando a causa del cansancio que lo hacía bostezar y cerrar sus párpados lentamente, lo que acabó con su cabeza apoyada en el hombro de Dreamworks. Él lo notó y sonrió con ternura al ver a su lindo ratoncito durmiendo plácidamente. No lo movió ni lo despertó y dejó que Disney usara su hombro como almohada.

Unas horas después, eran las 2 AM y Disney se había despertado en la oscuridad de su habitación y notó otra presencia a su lado... Rápidamente encendió la luz de su mesita y se asustó cuando vio a Dreamworks a su lado y aún despierto. Casi pegó un grito de susto, pero se calló al recordar que sus hijos dormían, y por ende, no tuvo de otra que hablar entre susurros
—¡¿Qué haces en mi cama conmigo?!—
Dreamworks rió en silencio y le habló con una sonrisa picarona
—Cálmate. Te traje a tu habitación porque te habías dormido al final de la película—
El menor tenía ganas de matarse de vergüenza por haberse dormido con su propia película
—Idiota... ¡Me hubieras despertado!—
—Pero te veías muy tierno durmiendo en mi hombro—
—¡Cierra el pico! ¡No me dormí sobre ti!—
El mayor no pudo evitar sonreír sensualmente por el recuerdo que tenía en mente desde hace unas horas
—Mmm, en ese caso... "Dormiré" sobre ti entonces—
De repente, Dreamworks se subió encima de Disney y lo acorraló contra la cama sujetando sus muñecas
—¡¿Qué carajos haces?! ¡Suéltame!— el menor comenzó a patalear y a jalonear. Tratando de no hacer ruido por sus hijos. Dreamworks cambió su tono de voz sensual a una más seria y honesta
—Disney...— habló tranquilamente, acariciando los labios de Disney con la yema de su pulgar —Podemos... ¿Hacer el amor?—
La pregunta sonrojó a Disney hasta las orejas y no dudó en comenzar a protestar nuevamente
—¡Ya déjate de preguntas tontas! ¡Me rehuso a hacer esa estupidez contigo de nuevo, pervertido!—
Dreamworks lo hizo estremecer cuando inició una línea de besos en su cuello y le murmuró en su oído con un tono sincero
—Esta vez no estoy siendo un tonto... Estoy hablando en serio. Por favor, déjame hacerte el amor para demostrarte cuánto te amo...~—
—¡¿P-por qué de repente se te ocurren esas cosas?! ¡Estás mal de la cabeza!—
—¿Recuerdas cuándo les dije a todos qué éramos "novios"?—
—¿Eh?— expresó confundido
—Ese día... Me sentí orgulloso de que todos creyeran eso.. Porque de verdad quiero una relación contigo, ratoncito. Ha pasado un año desde que cambié mi odio por amor hacia ti. Te amo muchísimo y... ¡Quiero estar contigo para siempre!—
Las palabras de Dreamworks llegaron al corazón de Disney hasta llenar sus sentidos.

Disney sentía los latidos en su pecho, la ruborización en sus mejillas y los nervios acompañando cada palpitación. Sabía perfectamente que Dreamworks se expresaba abiertamente sentimental a pesar de NO ser novios, pero era consciente de que sus sentimientos hacia él eran compatibles. A Disney no le salían las palabras y sus labios sólo temblaban.

Dreamworks se preocupó por su falta de respuesta y nada más suspiró decepcionado para quitarse de encima de Disney y darle su verdadero espacio, sin embargo, el menor lo tomó de su muñeca para detenerlo y observó como éste se encontraba rojo como un tomate y su mano cubriendo su rostro y algunas lágrimas de vergüenza.
—Y-yo...— habló Disney entre sollozos mientras tenía los dedos tapando la mitad de su cara y finalmente se expresó sin quejas —... También te amo... Imbécil...— susurró sin saber que más decir.

El mayor se quedó atónito... Creía que estaba soñando, pero no era así... ¡Disney por fin le había dicho que lo ama!
—¡Oh, Disney!— expresó con mucha felicidad y no se contuvo en besar sus lindos labios mientras le acariciaba las mejillas. Disney hizo un sonido sorpresa al ser besado otra vez, pero se tranquilizó y aceptó el besó de Dreamworks mientras enredaba sus manos en su cabello azulado y gozaba de la sensación.

Pronto, se separaron del beso para recuperar aire y Dreamworks le susurró con cariño a medida que acariciaba su mejilla
—Entonces... ¿Puedo hacerte mío realmente, ratoncito...?~—
—S-sí...— contestó apenado y en voz baja.

La respuesta de Disney lo encendió al instante y comenzaron con su acto silenciosamente para evitar el despertar de los "Mini-Disney"...

Dreamworks empezó con besos suaves en el cuello de Disney mientras le iba quitando cada botón de su pijama para dejar su torso desnudo y llegar hasta la zona de su pecho, en donde Dreamworks inició con lamidas y chupetones en sus pezones y abdomen, lo que provocaba los gemidos de Disney, aunque él trataba de callarlos o reducir su sonido.

Con el tiempo, la ropa de ambos terminó en el piso y sólo estaban cubiertos por las sábanas de la cama. Dreamworks preparó a Disney con dos de sus dedos en aquella pequeña entrada y luego lo besó en los labios para amortiguar sus gemidos y relajarlo para lo que seguiría a continuación...

Retiró los dedos y a los pocos segundos tomó las caderas de Disney para ponerse en la buena posición de misionero y así sumergirse en las olas del placer
—¿Puedo meterlo?—
El menor asintió con nervios y los ojos llorosos cerrados fuertemente para evitar su debilidad.

Dreamworks introdujo sólo la punta y Disney expulsó un gemido ahogado, pero doloroso, mientras se mordía los dedos y así evitar sonidos fuertes
—¿Te duele, ratoncito...?—
—S-sólo un poco...—
—Sé sincero—
—Ok... ¡Pues duele, bruto!—
—Jaja... Ese es el Disney que conozco. No te preocupes, ya sé que hacer— Dream salió de su interior unos momentos y sacó una botellita de lubricante de sus pantalones echados en el piso —Con esto no te dolerá. Confía en mí— Mostró la pequeña botella y luego esparció el contenido por su erección para estar listo de verdad.

Una vez que ambos se sintieron preparados, Dreamworks volvió a entrar y esta vez Disney estaba gimiendo de placer al acostumbrarse rápidamente. Dream comenzó a moverse y el contrario apretaba los labios y las sábanas al mismo tiempo para sentirse silenciosamente complacido.

Disney enredó las piernas en la cintura de Dreamworks y a veces acercaba su rostro sólo para besarlo o decirle cuánto lo amaba. El mayor no podía creer que realmente estuviera haciendo todo esto con amor y pasión juntos. Su sueño se había hecho realidad.

Conforme gemían en silencio, ambos estarían a punto de llegar al límite muy pronto y por eso aprovechaban cada segundo para besarse, acariciarse y abrazarse
—D-Dream... M-más rápido... Quiero venirme...— murmuró entre jadeos y Dreamworks obedeció su pedido.

Pasó el tiempo y Dreamworks se detuvo cuando se corrió por completo en el interior de Disney y éste gimió con satisfacción por sentirse llenado con amor y calidez.

Al acabar, los dos estudios se relajaron uno al lado del otro y suspiraban muertos de cansancio y sudor. Disney se volteó y apoyó la cabeza en el pecho de Dreamworks, en dónde éste le respondió con una sonrisa
—Te amo... Mi lindo ratoncito~♡⁠—
—Ya cierra la boca y mejor duérmete...—
Dreamworks se rió por sus típicas quejas y después se acercó más a Disney para acurrucarlo en su pecho y dormirse en esta linda noche.

Disney lo abrazó e inhaló su rico aroma para relajarse y besarlo amorosamente mientras entrelazaban sus dedos con los suyos...