Es un extra, realmente no hubo grandes muertes, solo digamos que Shen Qingqiu y Luo Binghe consideran qué no deberían ensuciar la mente de sus nietos con las muertes sin sentido, (sí sí hubo asesinatos pero personas como Jin Guangshan obtendrían un trato especial).

Xie Lian miro hacia los presentes con los labios torcidos en ira silenciosa.
Tamborilero sus dedos en una serie de sucesiones silenciosas, mientras todos los presentes caían sobre sí mismos en un acto patético de clemencia. Proclamando la grandioso que era el emperador celestial que podría cortar sus cabezas.
Ignoro las súplicas de piedad, mirando hacia su adorable esposo quien estaba sentado sobre uno de los cómodos cojines siendo rodeado de telas y plumas.
Parecia tan tranquilo mientras se rodeaba de las mejores telas y cosas de la corte celestial.
Wei Ying se estiró como un gato adormilado, mientras sus manos se extendía de manera infantil hacia su alteza, quien solo sonrió y asintió en recocimiento.

—¿Desea algo mi amado esposo?-aparto la ira un momento, antes de tomar con fuerza la decisión de arruinar el mundo mortal.

—A mi A-Yuan y Sizhui—pidió haciendo pucheros mientras se extendía de manera clara y confiable hacia su excelencia—su majestad—sonrió deslizando sus manos por el cuello de su túnica, mientras fingía acomodarla.

Un suave carraspeo alejo a Xie Lian de la idea de esas suaves manos envueltas en otro lado.
Se sonrojo un poco, apartando la mirada de las clavículas expuestas en un forma tan tentadora. San Lang no estaría tan contento con su Wei Ying exhibiendose abiertamente en la sala, pero Xie Lian encontraba esto de una manera territorialmente satisfactoria. Una demostración clara de que la persona mortal más hermosa del mundo le pertenecía a él y a su rey fantasma qué nadie más podría tocar o ver esa piel en exhibición.
Miro a su padre quien estaba sosteniendo su abanico contra sus labios, de una forma muy crítica.

—Su alteza, por favor concéntrese—la mirada apestosa de su Baba le hizo saber que lo estaba juzgando de la misma forma qué juzgaba a su A-Die cuando usaba sus lágrimas y ojos de cachorro para convencerlo—necesita castigar a estos mortales atrevidos—cerro su abanico con fuerza.

Los sollozos y lamentos de los hombres se elevaron rápidamente por el salón, mientras Wei Ying salía entre todas sus sábanas y almohadas para deslizarse sin pena alguna al regazo de su amado esposo.
Wei Ying sonrió acomodándose en el regazo de Xie Lian con calma, sintiendo sus fuertes brazos rodear su cintura en un agarre firme pero realmente amoroso y dulce.

Manos delgadas rodearon el cuello del contrario, dedos largos y expertos acariciaron lentamente la extensión del cuello expuesto mientras una risita dulce baila contra el cuello, labios fríos pero suaves besaron la Unión del cuello del mayor con una delicadeza experta.
Xie Lian aparto un momento la mirada del rostro bonito qué le estaba dando lindos ojos de cierva, miro a su Baba quien estaba de mal humor y suspiro de resignación cuando su A-Die entro junto a San Lang.

—Esposo—la voz del emperador demoníaco detuvo los riesgos sin sentido—¿no deseas dar un paseo por el jardín?

La reacción fue la esperada, ojos verdes furiosos como un león al asecho. Sus ojos verdes qué siempre eran el reflejo de la calma y brillaban tenuemente bajo las emociones más simples como la felicidad. Ahora mismo se había oscurecido, hasta el punto que el rostro del afamado inmortal se transformó en una mueca horrible de ira.
Sus gestos normalmente inexpresivos se volvieron tan salvajes y enojados qué Luo Binghe retrocedió un par de pasos ante el enojo puro y sin adulterar de su propio esposo.
Quién miro a su hijo en busca de una excusa para ser salvado. Pero solo aparto la mirada de manera nerviosa, evitando ver a su hijo.

Xie Lian miro a Wei Ying quien aparto la mirada y saludo a Hua Cheng, quien solo cruzo a un lado de su suegro, ignorando la ira sangrante con la que estaba amenazando a uno de los hombres más fuertes del imperio demoníaco y como este parecía reducirse a un ser con un llanto infantil.

—Mi Amado—Se agacho a la altura del rostro de Wei Ying, dejando un beso demasiado caluroso en los labios de su alteza real—¿Haz dejado de jugar?

Wei Ying se rio, mientras estaba besando la comisura de los labios de Hua Cheng, sus labios rojizos bajaron hasta su mentón y la voz amable descendió de tono a algo más sangrante, más salvaje.

—Esposo, ellos me han amenazado-—susurro con grandes ojos tristes—han puesto a nuestros hijos en peligro—un suave sollozo se deslizó de sus labios.

Lagrimas tristes bajaron por los ojos de Wei Ying, quien se lanzó contra Hua Cheng para ser abrazado, mientras miraba a los presentes con diversión. Los sollozos se deslizaban de sus labios, pero la sonrisa divertida y satisfecha de Wei Wuxian hizo temblar a todos.

—Casi me matan-—declaró aferrándose con terror a su rey fantasma—ellos querían matarme a mí, a mí familia, nuestra familia.

Los sollozos y lágrimas reales qué cayeron de sus ojos fueron los suficiente para romper la discusión de los suegros del chico y la ira fría del emperador celestial.

—Bien—declaro levantándose de su trono.

Cada uno de los dioses retrocedió sobre sí mismos, mientras intentaban detener a su emperador. Pero fue casi imposible, no cuando la mirada ardiente y enojada se enfoco directamente en Jin Guangshan qué seguía vivo para su propia desgracia.

—Los cultivadores justos creyeron qué era adecuado lastimar a mi familia—las voces de los hombres se elevaron en pánico duro y sin procesar—creo que es adecuado qué paguen el precio de su descaro—su sonrisa suave fue realmente aterradora—con la sangre de su familia.

Shen Qingqiu asintió satisfecho, muchos pensaron qué encontraría esa solicitud demasiado ilógica. Pero parecía realmente satisfecho con el resultado.

—Es menos de lo que esperaba—murmuro mirando hacia su esposo—pero aprendiste bien de tu A-Die.

Xie Lian se sonrojo, mientras qué Wei Ying limpio sus lágrimas y les saco la lengua a los cultivadores con diversión. Sí querían cazarlo como un animal salvaje, que no se sorprendieran qué sería capaz de hacer de todo para sobrevivir.

Gracias por leer esta continuación, creo que es el final, solo me gusta a Wei Ying siendo un manipulador. Jajaja