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Es mi tercer hijo.

Alguien dijo, Xie Lian como hijo de Shen Qingqiu y Luo Binghe. Yo dije, que ambos señores vayan de visita en el momento que está ocurriendo el asedio a los tumulos funerarios... Y se cabreen... Al punto de que Luo Binghe deje en claro una cosa. Nunca te metas con su esposo y yerno... Jajaja.
Antes qué nada, cabe a clarar qué yo utilizo a Wen Yuan y Lan Sizhui como dos personas separadas, pero siendo gemelos... Y ciertamente A-Ying sigue haciendo la broma de que los dio a luz el mismo.

Todo había sido un desastre desde el instante qué Jiang Yanli decidió invitarlo a la ceremonia de su sobrino, era simplemente extraño qué los Jiang hayan decidido traerlo de nuevo a sus vidas. Estaba resentido totalmente enojado ante la ineptitud de sus "hermanos" para protegerlo, cuando él había dado todo por ellos, los había defendido, dando su núcleo dorado, volviéndose fuerte para protegerlos, usando métodos pocos ortodoxos.

Estaba enojado, furioso y frustrado había decidido no asistir a la fiesta. Solo había tomado a su Pequeño A-Yuan en brazos y se dedico a tocarle canciones de cuna, esas canciones que su A-Die adoraba tocar en su amado Guqin.
Sólo pensó primero en la familia que tenia en los túmulos Funerarios, quienes nunca lo habían abandonado. Pensó primero en la familia nueva qué estaba creando, antes que en la familia que lo abandono a su suerte.

—¡A-Niang!—la voz de su pequeño Rábano lo saco de sus pensamientos—¡A-Die y Baba me trajeron un compañero de juegos!—chilló emocionado mientras traía a un adolescente siendo arrastrado.

Wei Ying miro a al adolescente inmortal con diversión, este se sonrojo hasta las orejas mientras agachaba la cabeza y a sentía hacia su tío político.
Wei Ying sonrió en grande, deslizandose hacia su hijo y sobrino, acaricio suavemente la cabeza castaña y con la voz más amable relajo al niño qué siempre parecía nervioso en su presencia.

—Cada día que pasa, creces un poco más Gu Zi—llamo suavemente, con ojos plateados brillando de diversión.

El adolescente sonrió tan brillante, mientras su largo cabello castaño se agitaba con entusiasmo.

—¡A-Die dice que cada día más me parezco a él!—celebro recibiendo una suave caricia en la cabeza y un asentimiento dulce.

—Puedo verlo—miro a su pequeño Rábano qué ya estaba haciendo pucheros—¿puedes jugar con Sizhui en el santuario?—pregunto suavemente—A-Yuan no se siente bien, ha estado enfermo y este pequeño Rábano extraña a su gemelo—se agacho y apretó las mejillas redondas y sonrojadas—por favor Gu Zi.

El niño asintió mientras tomaba la mano de su pequeño primo y le daba un beso desordenado en la mejilla a su tío favorito. Antes de que ambos salieran corriendo entre risas hacia la colina donde estaba el amado santuario improvisado de Taizi Dianxia y Huā Chéngzhǔ, ambos niños sonrieron contra el viento, con las túnicas de colores agitandose rápidamente a su paso.
Wei Ying tarareo dulcemente mientras regresaba su atención a ayudar a la abuela Wen mientras Wen Qing y Wen Ning se aseguraban qué Yuan estaba sanando apropiadamente.

Sonrío cuando tío cuarto insinuó qué podrían tomar un par de bebidas, se negó, su mente seguía recordando el rostro enojado de Jiang Cheng cuando se negó a ir a ver a Jin Ling, no necesitaba ser juzgado ante la secta más rica de todas, ya se juzgaba así mismo bastante bien.

Sonrio con calma, pensando en que cosas nuevas podría comprar, gracias a su esposo las tijeras eran más manejables y el sustento para los Wen era cada día más estable, tla vez podrían hacer qué Wen Qing diera unas cuantas consultas de ahora en adelante, con medicamentos e ingredientes de alta calidad para un talento como el suyo.
Era un buen día, alejándose de los intentos infructuosos de su familia adoptiva de sentirse bien por permitirle un poco de amabilidad. Amabilidad absurda qué no era más que una forma descarada de mostrarle su posición, debería hebrr permitido qué sus esposos destruyera al mundo del cultivo, sería mejor.

Todo sucedió demasiado rápido, Wen Qing había dejando durmiendo a Yuan junto a Wen Ning, para regañarlo por enterrar a los niños en las tierras de cultivo y como esto los estaba enfermando.

—¡Mejora su sistema inmune!—dio lágrimas de cocodrilo cuando Wen Qing lo golpeó en la cabeza sin demasiada fuerza—!Xian Xian tiene tres años, no le pegues!—se quejo dulcemente.

En el momento que la barrera de protección cayeron, Wei Ying estaba sosteniendo su cabeza con lágrimas sin derramar en las esquinas de los ojos.
La energía resentida lo rodeo rápidamente sise ando y agitandose abruptamente ante el peligro. Wei Ying no tuvo más remedio qué recomponerse y correr por los túmulos hasta la pequeña choza donde Yuan estaba durmiendo.

—¡Vayan al santuario!—grito hacia los remanentes Wen con dureza—¡Wen Qing y A-Ning encarguense qué todos lleguen a salvo!—sus mangas se agitaron detrás de los cuerpos y no cultivadores corriendo.

Había logrado llegar a su hijo qué parecía hervir en fiebre, Wen Ning había corrido para ayudar a la abuela Wen, Wei Ying se alejo a pasos rápidos recordando donde había visto a un viejo árbol con un hueco adecuado para dejar a Yuan durante un par de horas.
El niño dormido se aferro a sus túnicas sin querer dejarlo, pero debía soltarlo, debía salvar a todos aún a costa de su propia vida.

Wei Ying miro con odio hacia los cultivadores, Wen Yuan había sido depositado a salvo en un tronco de un viejo árbol, mientras qué Sizhui había sido llevado a un lugar seguro por Guzi, Wen Qing y Wen Ning habían sido protegidos con gran esmero, era lo último de su familia quien se escondía en el santuario, nadie podría encontrarlos gracias a las matrices de protección, estaba contento con el resultado.

—A-Ying, he traído—la voz suave y atorciopelada de una voz masculina detuvo a Jin Guangshan en el momento que quiso cortar el cuello de Wei Wuxian—dulces hechos por...—la voz se rompió cuando alzó la mirada.

Otro hombre apareció por lo que parecía ser un portal, con su cabello oscuro y rizado moviéndose de manera divertida, mientras mantenía los ojos cerrados y sonreía con calma.

—A-Ying, ¿no vas a saludar a tu Yuèfù?—su sonrisa murio cuando el sonido de espadas cayendo llego a sus oídos—¿qué esta pasando aquí?

La cesta con dulces cayo al suelo, mientras qué la mirada aterradora del hombre aparentemente más joven se oscureció, su mueca de disgusto se cubrió con un abanico de tonalidades verdes y flores de cerezo bellamente pintadas.

—¿Pueden explicarme qué le hacen a mi querido yerno?—su voz no dejaba lugar a discusiones.

Mientras qué el hombre de túnicas negras y rojas, con una brillante marca en la frente saco su espada.

—Shizun, yo digo que deberíamos descuartizarlos—la ira incandescente en su rostro se aplaco cuando el qué parecía liderar cerro su abanico.

La mano alzada señaló hacia el hombre que estaba atado y obligado a arrodillarse en el suelo, con las túnicas sucias y negras. Todos los hombres presentes, retrocedieron cuando la voz del inmortal fue tan mortal y fría como su apariencia.

—¿Quién se creen que son?—alzó la barbilla con enojo, mientras su mano libre tomaba su espada—será mejor que dejen a mi yerno en este preciso instante, ¿se creen tan poderosos para desafiar la ira divina?

Jin Guangshan se rió descaradamente mientras miraba al hombre aparentemente mayor con diversión.

—¿Y quién eres tú para decirme que debo hacer?—su sonrisa de mierda, toco un nervio demasiado potente en el otro macho.

—¿Quién eres tú para hablarle así a mi esposo?—él hombre de rizos dio un paso adelante, dispuesto a enseñarle a este insignificante mortal como debería respetar a su marido—deberías conocer tu lugar.

—Soy Jin Guangshan, el líder de la secta Jin—apunto su espada hacia ellos—Tú deberías conocer tu lugar.

Wei Ying miro el intercambio mientras buscaba a su A-Die entre la multitud. Había pocos Lan entre los Jin, Jiang y Nie. Eso quería decir que su A-Die no sabia sobre el asedio, por los dioses, estaría tan molesto.

—¿Te atreves a cuestionar al emperador de los demonios?—rompió su silencio, mientras escupia la sangre acumulada—estás enfrente de Shen Qingqiu, la Espada Xiu Ya, inmortal de la secta de la montaña Cang Qiong—se rió al ver a todos intentando retroceder—señor del pico Qing Jing, esposo del emperador de los demonios Luo Binghe, ¿a caso cuestionas a los padres de su excelencia celestial, Taizi Dianxia?

—Estás mintiendo—la voz temblorosa de los Jin detuvo la sonrisa divertida de Jin Guangshan.

—No miento—se agitó en su agarre—Luo Binghe, rey de los demonios, maestro del palacio Huan Hua, ¿a caso no ves la marca en su frente?—señaló con la cabeza—es la marca de su linaje de demonio celestial.

—He preguntado, ¿qué creen que hacen con mi yerno?—Shen Qingqiu detuvo a su esposo antes de que asesinara a todos los presentes—A-Lian no estará contento.

—Debería arrancar cada parte de tu cuerpo—él mitad demonio mostró sus colmillos, mientras los cultivadores lanzaban a Wei Ying hacia adelante.

—Yuèfù, lamento esta forma de recibirte—se retorcido entre los brazos de Shen Qingqiu quien lo abrazo apenas lo dejaron caer—debería estar preparando algo de comida para ti, perdoname.

—A-Ying—sonrió al revisar su meridianos y solo encontrar energía agotada—tranquilo, este Yuèfù tuyo entiende... Deja qué mi Binghe se encargue de todo, esperaremos a A-Lian y A-Cheng, ellos estarán felices de vernos, A-Lian sigue diciendo que quiere que conozcamos a nuestro nieto.

Con esas simples palabras, el rey demonio dejo a su esposo a cargo de su yerno, antes de lanzarse a matar a cada uno de los presentes, sí Jin Guangshan fue humillado y expuesto, ¿alguien podría contradecir a un rey demonio, un erudito inmortal, al emperador celestial y un rey fantasma muy enojados?

Hoy no salen los Esposos al final, porque Shen Qingqiu y Luo Binghe, son lo suficientemente poderosos para no necesitar a los esposos defendiendo a su amado. Jajaja os quiero por leer esto, es tan random, que no creo darle continuación.

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