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CAPÍTULO II 05

Sun-hee

Subo a mi habitación, tirando mi mochila en el pequeño sofá. Me siento en la cama respirando con alivio, jamás imaginé que pudieran ocurrirme esas cosas. Algo que comenzó como una aventura, resultó en una tragedia. Sentí que no iba a volver con vida a casa o mi hermano. Cualquier persona que tuviera de frente, al traficante lobo negro ya hubiese muerto al instante. He escuchado todo lo que ese desalmado hombre hace. Soy afortunada o fue cuestión de suerte, pues no creo que alguien como él nos haya dejado con vida, y me resulta imposible aún creer que nos dejó irnos después de saber lo que vimos.

─ ¿Estás bien? ─ mi hermano entra a la habitación y se sienta a mi lado. ─ Ya todo pasó, prometo jamás ponerte en peligro de nuevo. ─ puso un brazo en mis hombros.

Siempre ha sido así. Desde pequeños siempre ha cuidado de mí y el hecho de lo que pasó, eso lo lamenta. Sé lo que él está pensando, y ha de sentirse arrepentido. Lo oigo suspirar y sobar uno de mis hombros. Yo lo conozco demasiado.

─ Lo sé. ─ recargue mi cabeza en su hombro ─ No es tu culpa, ninguno sabía que eso podría suceder. ─ No quiero que se sienta culpable, eso fue una desafortunada situación inimaginable.

─ ¿Cómo está tu rodilla? ─ se aparta para verme.

─ Oh, está bien. Solo fue una leve cortada. ─ toque el vendaje que Suk me había puesto antes de irse. Le ofrecí quedarse, pero no aceptó. Tenía que acomodar algunas cosas y los libros de la escuela para mañana.

─ Duerme, tenemos que ir a la universidad más tarde. ─ asentí. Me da un beso en mi cabeza y se levanta.

─ Tomaré una ducha y dormiré. ─ miré la hora en mi reloj en la mesa de noche. Eran las 3:51 am.

─ Bien, haré lo mismo ─ camina para salir de mi habitación

─ Que descanses.

─ Que descanses.

|......|

Habían pasado las dos primeras clases para que sonara el peculiar timbre y salir para almorzar. Mi mejor amiga estaba conmigo en la cafetería de la universidad, platicando cualquier cosa sin sentido mientras comíamos.

─ Hola, chicas ─ Yoongi, el mejor amigo de mi hermano, llega a sentarse a un lado mío saludando, lo cual respondimos cortésmente.

─ ¿Y Taehyung? ─ dije y me llevé una papa frita a la boca.

─ Bueno, él está con el entrenador. Quiere estar libre para este sábado, y faltar al entrenamiento.

─ Pero es el capitán, y los capitanes no deben faltar. ─ mi amiga lo observa con su ceño fruncido ─ Taehyung jamás se ha perdido un entrenamiento ─ ahora yo soy la que la observa y baja la mirada incómoda.

«¿Cómo sabe y está tan segura de eso? Algo me huele aquí»

─ Sí, lo sé. Pero tenemos planes... ─ Las dos lo miramos

─ Si me entero de que vuelven hacer sus estúpidas carreras clandestinas, no saldrán de esta y los mataré a ambos por estúpidos. ─ Solté señalándolo con mi dedo índice.

El año pasado Taehyung y Yoongi salían mucho los fines de semana para poder jugar en esas carreras ilegales.

Carros lujosos con diseños personalizados por ellos Mismos, como también la compra de nitro y esas cosas que a veces no entiendo. Tal y como de esas películas de rápidos y furiosos. Es prácticamente toda la fascinación de Taehyung y de Yoongi, pero la última vez que fue a una me prometió no volver a conducir una carrera, ese día en el hospital donde estuvo en coma por tres semanas y su situación aparentaba jamás mejorar, hasta que se recuperó.

─ Tranquila Sun... ─ bebe un poco de su botella ─ No es eso. Quiero decirte, pero tu hermano me lo prohibió.

«¿Prohibió decir? ¿Por qué me están ocultando algo? Siempre nos contamos todo.»

─ ¿Qué? ¿Pero por qué?

─ No me pidas explicaciones... ─ dice para empezar a comer.

─ Déjalo, seguro no es nada malo. Él te lo prometió y no rompe sus promesas, es la ley de los Kim. ─ asentí. Hacer una promesa en nombre de nuestro apellido tenía que ser cumplido. Nadie faltaba a esa palabra.

─ Por cierto chicas... ─ habla con la boca llena, típico de él.

─ Por favor, ten modales ─ dije con asco lanzándole una servilleta de papel, pero me ignora.

─ Park Jiyu, volvió ─ Dice mirándonos. Mi amiga y yo nos tensamos al escuchar de nuevo su nombre

─ ¿Volvió? ─ asiente comiendo ─ ¿Cuándo? ─ vuelve a preguntar Suk.

─ Creí que están al pendiente del periódico escolar.

Mire a Suk y ella a mí un momento.

Park Jiyu, era nuestra mejor amiga, las tres éramos inseparables nos queríamos como hermanas, pero después Jiyu comenzó a cambiar. Se justificaba diciendo que le presumíamos todo por ser de familias ricas, ya que mi padre es un empresario reconocido y el padre de Suk es quien tiene una marca de vino famosa internacional. Sus actitudes eran siempre hacer escenas en público diciendo cualquier ofensa hacia nosotras cuando discutíamos. Yo jamás y puedo hablar por Mi-Suk también, de que no hacíamos eso inconscientemente, nunca, pero nunca le habíamos echado en cara el dinero de nuestros padres. Fue cuando entonces mi amiga y yo nos dimos cuenta de que fue gracias a la estúpida de Deghu quien le metía ideas a la cabeza.

Nuestra enemiga desde octavo grado.

Jiyu se dejó mal influenciar por esa arpía, y llegó el momento de que se apartó de nosotras para estar con ella y la mejor amiga de Deghu, Lee Hana.

Jiyu, Deghu y Hana, no eran de familias adineradas, pero lo tenían todo. No me enorgullecía ser de familia rica cuando no tenía padres en mi vida que se preocuparan por mí. Joder, ni siquiera usaba ropa de marca, excepto Mi-Suk que le gustaba y lo hacía a modo para llamar la atención de su padre gastando dinero a lo loco, pero parecía estar metido en su propio mundo, pues mi amiga me contaba que ni así pudo obtener nada de él.

Mi padre siempre ha sido ausente en mi vida, solo tengo a Taehyung para mí. Es mayor que yo por un año y ha estado haciendo de padre de vez en cuando en ocasiones importantes. Yo también he estado para él en cada juego y me ha dedicado sus victorias.

Ellas han tenido una familia que las aman y no valoran eso, lo que daríamos mi amiga y yo por tener un poco de lo que sus padres les dan. Siempre están para ellas.

─ ¿Jiyu no se había ido a su carrera de modelaje? ─ Mi-Suk pregunta .

─ Sí, le fue bien. Por lo que escuché de ella hasta ahora ha sido una de las modelos más hermosas de la ciudad. ─ responde Yoongi. Ella siempre quiso tener esa oportunidad en modelar.

Antes de que ella ya no formara parte de nuestro grupo nos contó que se quería acostar con un hombre dentro de esa industria para poder entrar. Nosotras le dijimos que lo pensara mejor, que ella podía hacerlo sin necesidad de llegar a esos extremos, pero ella nunca nos escuchó.

Le irguió entrar de inmediato y de una forma que jamás a nostras nos agradó.

─ Claro, abriendo las piernas fue lo mejor para poder llegar a esa posición. Zorra.

─ Suk ─ la reprendí

─ ¿Qué? Sabes que es una puta, intentó acostarse con Taehyung una vez ─ Jiyu siempre estuvo enamorada de Taehyung, pero mi hermano no pudo corresponder a sus sentimientos. Ya sabrán por qué ─ No me sorprendería que haya hecho eso.

─ No es nuestro problema ─ dije.

─ Hola, chicos ─ Taehyung por fin llega a sentarse del lado de Suk y de Yoongi. ─ ¿Qué ocurre nenas? Tiene una expresión un poco...

─ Jiyu, es lo que pasa ─ mi amiga dice callando las palabras de mi hermano.

─ Ah, ya se enteraron ─ dijo y mordió su sandwich.

─ ¡¿Tú también lo sabías?! ─ golpeé la mesa con la palma de mi mano, lo cual llamé la atención de todos.

─ Cielos, cálmate un poco ¿Sí? ─ deja su sandwich en su bandeja ─ Mañana vendrá al instituto. Lo subieron al periódico escolar.

─ De seguro estás feliz de que tu puta regresa ─ habló mi amiga sin mirar a nadie más que en su propio celular.

─ ¿Disculpa? ─ dice mi hermano, mientras Yoongi y yo miramos con diversión ─ ¿Estás haciéndome una escena de celos, preciosa? ─ Yoongi suelta una risita, pero le pellizco el brazo para que se calle.

─ Por supuesto que no, tu y yo no somos nada. No sé por qué te haces esas ideas en la cabeza, alucinas. ─ Mi-Suk lo mira con seriedad. ─ Jamás en mi vida tendríamos una relación.

─ Valla, cuantas explicaciones ─ sonríe de lado ─ Tu rostro me lo está demostrando linda. Sé que te encanto ─ le guiña el ojo mientras que mi amiga rueda los ojos y continúa con su celular. Suk trataba de disimular, pero un leve sonrojo abarcaban sus mejillas.

─ ¿Qué fue eso de que hablaste con tu entrenador para faltar a la práctica del sábado? ─ cambio de tema. Taehyung mira a Yoongi con molestia y este suelta una nueva risa de nervios diciendo un "lo siento".

─ Nada, te lo diré en casa. Jamás te ocultaría nada, lo sabes. ─ asiento. Me sentía más tranquila ahora que me lo iba a contar.

─ ¿Saliendo de clases, vamos a mi casa? ─ pregunté lo cual Mi-Suk y Yoongi asienten.

─ Claro, ya sabes que no hay nadie en mi casa más que los sirvientes de papá. ─ Dice mi amiga encogiéndose de hombros con la mirada en su celular.

─ Yo no tengo nada que hacer, puedo hablar con Yoonmi desde la suya ─ Yoonmi, su hermano gemelo. No vive aquí. Cuando sus padres se divorciaron, cada quien se llevó a uno. Yoongi se quedó con su mamá, mientras que Yoonmi se quedó con su papá en Japón.

─ ¿Y como está él? ─ pregunté.

─ Muy bien, vendrá a quedarse este tiempo con nosotros. Mamá está muy feliz por ello.

─ ¿Vendrá? Ósea que se quedará aquí, ¿para siempre? ─ mi amiga indaga.

─ Bueno, eso creo, él nació aquí y ahora que papá se volvió a casar dice que no quiere estar cerca de su nueva esposa y su hijo. Son odiosos por lo que me contó, no les agrada. Estará en la escuela con nosotros.

─ Ya veo. Me da gusto que esta vez pasen más tiempo juntos.

─ Lo sé, ya no será como las épocas navideñas. Cuando yo iba o él venía.

Suena la alarma en señal de que el descanso había terminado para comer, lo que hace levantarnos e irnos a nuestras clases nuevamente.

|....|

─ Se supone que la pizza debería haber llagado hace 19 minutos... ─ se queja Yoongi, pero suena el timbre de la casa. ─ Valla, ya era hora.

Abrió Taehyung la puerta y paga al repartidor.

─ ¿Qué película quieren ver? ─ preguntó Suk.

Habíamos estado jugando videojuegos un buen rato, lo que después nos aburrimos mi amiga y yo. Yoongi y mi hermano siguieron un rato más, hasta que pedimos de cenar una pizza.

─ Todo menos de terror, tengo suficiente de ayer ─ dije sentándome en el sofá. Una fuerte carcajada se escucha de Yoongi.

─ Vi su transmisión en línea ─ vuelve a reír ─ Saliste corriendo. Qué cobarde eres ─ dijo y se sentó a mi lado. Lo golpeé con el cojín.

─ Cállate, no viste lo que yo vi. Harías lo mismo en mi lugar ─ él niega sonriendo.

─ ¿Y por qué no vemos una de sus transmisiones? ─ dijo Yoongi ─ veámoslo otra vez. La tienen en mejor calidad.

─ No lo creo, no tengo mis cosas.

─ ¿Por qué? ¿También las perdiste en el bosque como tu celular? ─ Su celular..., el que le quitaron a mi hermano.

Los hombres encapuchados.

Los hombres de ese delincuente.

─ Eh... Sí, también se me perdió todo. Olvidé una mochila allá y ya no pude encontrarla ─ habló mi hermano un poco nervioso.

─ Qué descuidado, pero puedes comprarte otro juego, otra vez. ─ dijo y pasó uno de sus brazos por mis hombros.

─ Cuidado con esas manos ─ habló mi hermano en tono celoso.

─ Oye, soy tu mejor amigo. Jamás intentaría algo contra tu hermana ─ alza sus manos en modo rendición, mi hermano se gira para ir a la cocina. ─ Aunque sea sexi. ─ termina de decir Yoongi y mi hermano vuelve a voltearse

─ Que gracioso idiota, estás cavando más tu propio hoyo. ─ aprieta sus puños ─ Aléjate de ella ya de una vez y comportate, no te salvas por ser mi amigo ─ niego sonriendo por esos dos.

El timbre de la casa suena a lo que nos miramos todos con extrañez.

─ Iré a ver ─ dije cuando me levanté. Los pasos de mi amiga se oían tras de mí. Abrí la puerta y fuera se encontraba un hombre con un ramo de rosas rojas y dos cajitas de terciopelo.

─ ¿Señorita Sun-hee?

─ ¿Sí?

─ Paquete para Kim Sun-hee. ─ dijo el hombre ─ firme de entregado por favor ─ firmé y me entrega todo lo que mi amiga me ayuda y cerramos la puerta.

─ Hay que divino ─ chilló mi amiga.

─ ¿Quién mierdas te envía esas cosas? ─ dice mi hermano.

─ Esto es muy cliché, ¿tendré algún admirador secreto? ─ ignoré a mi hermano mostrando una sonrisa viendo los obsequios. Me emocionaba ya que me encantaba leer libros de romance. Soy de esas chicas que le encantan estas cosas como salidas al cine, dar detalles especiales, las cenas románticas, etc.

─ ¡Ábrelo tonta! Ya quiero saber ─ mi amiga brinca de emoción, lo que Taehyung rueda los ojos por su comportamiento infantil. Es una ternurita.

─ Veamos ─ saqué una tarjeta del ramo.

─ Puedo abrir por ti los regalos ─ asentí y ella con desespero abre las cajitas mientras desdobló el papel para leer.

Conocerte el día de hoy fue fascinante, Mi corazón te eligió a ti en ese momento y el destino quiso juntarnos.

De ahora de en adelante estarás bajo mi cuidado, ya que eres mi ángel. Un ángel que protegeré con mi oscuridad de cualquier peligro.

LOBO.

Mis manos quien sostenían la trajera comenzaron a temblar. Estaba paralizada. El narcotraficante sabía mi dirección, sabía donde estaba mi casa. En ese momento mi celular suena en el bolsillo de mi pantalón cuál saqué y vi en la bandeja de mensajes un número desconocido. Abrí el mensaje y pude ver el contenido.

DESCONOCIDO:
-Espero que te gusten los regalos preciosa. Son poco para lo que te mereces

«¿Cómo pudo obtener mi número?»

DESCONOCIDO:
-Ni una palabra a nadie o tomaré medidas que no te gustarán. Ya conoces mi fama.

Recuerdo que ese hombre tiene el celular de mi hermano. Ahora todo tiene sentido al saber mi número y dirección.

─ ¿Qué tienes ahí? ─ Mi hermano me arrebata la tarjeta, la lee y su expresión cambia rápidamente ─ Maldición, no... ─ Suk se acerca sonriendo hasta que su sonrisa se le borra al mirar la tarjeta.

─ No puede ser ─ dijo soltando un jadeo y tapa su boca con su mano, sus ojos se abren grandemente.

─ ¿Por qué todos tienen esas caras? ─ Yoongi le arrebata el papel a Taehyung ─ ¿Quién es el lobo? ─ dice confundido ─ Oye ¿Y qué tal si es el narcotraficante famoso de la ciudad? ─ se ríe ─ sería algo loco.

─ No puede ser chicos, él sabe donde viven. No dudo que también sepa dónde vivo yo. ─ Mi-Suk habla con temblor en su voz.

─ A estas alturas ya sabe todo sobre nosotros... ─ dice mi hermano.

─ Están actuando raro, ¿qué les pasa? ─ Yoongi nos mira con su ceño fruncido.

Suk le explica todo lo que pasó a noche y porque Taehyung mintió acerca de su celular. En las cajitas de terciopelo hay un collar y en el otro un brazalete con un dije de la cabeza de un lobo.

¿A caso esto era una reclamación?

No podía estarme pasando.

Me acabo de dar cuenta de que reencarne a Yoongi y Mi-Suk de Mi Alpha Rogue jsjjsjsjs

Habrá otra actualización, el próximo sábado y Domingo ❤️✨ nos vemos bebés..