Capítulo 15- Celos.
— No está bien lo que haces Jungkook — fue lo primero que el alfa escuchó al llegar con su hermano para reincorporarse a sus labores.
—¿ De qué hablas ?— preguntó de forma fingida pues obviamente sabía a lo que se refería su hermano mayor.
— No te hagas el idiota— contestó molesto el palido— no están enlazados kook, así que es incorrecto lo que le hacías al humano.
— Solo fueron unos cuantos besos Gi, sabes como es mi lobo y créeme que nos hemos limitado mucho con Namjoon.
Ambos comenzaron avanzar mientras buscaban a Jin pues hoy era día de cacería y sabían lo ágil que era el rubio.
— Se lo que escuché y no fueron solo besos, además dijiste que apenas ibas a cortejarlo — le reprochó.
— Créeme que estoy tratando de controlarme lo más que puedo con Namjoon pero es que me vuelve loco Yoongi, todo el tiempo quiero tenerlo cerca de mi, abrazarlo, besarlo, hacerlo mío, quiero tenerlo en una caja de cristal para que nada lo dañe y que solo sea mío — admitió avergonzado.
— Pues debes controlarte, primero debe ser el cortejo, enlazarse y por último ahora sí hacer lo que quieras con él — el menor lo miró sabiendo que sus palabras eran ciertas aunque su lobo pensara lo contrario — Y dime ¿Namjoon ya te acepta?
— Por supuesto que sí.
.....
— Ya te dije que solo me atrae porque no he tenido sexo en varias semanas, solo es tensión sexual lo que hace que esté cerca de Jungkook — le dijo al moreno mientras ambos recolectaban granos de café.
— Vaya creí que kookie realmente te interesaba, últimamente los he visto muy juntos y bueno hoy llegaste oliendo mucho a él.
Al escucharlo Nam comenzó a olfatear más no identificaba nada, más que el chocolate aunque creí que se debía porque el alfa le dio eso al despertar.
— Debo alejarme de Jungkook Tae, no es bueno que esté tan cerca de ese hombre o me volveré un marica de verdad. — claro que al recordar lo que hizo justo es mañana con el mayor y la forma en que se dejó dominar y besar no le dejaba ninguna duda, pero prefería engañarse.
— Bueno a mí ver y por las marcas de tu cuello, creo que ya lo eres Namjoonie — dijo burlón.
El menor quiso defenderse pero la presencia de cierto alfa les impidió la tarea.
— Taehyung ¿Podemos hablar?— el rubio parecía triste y confundido.
— Yo iré ayudar a Hobi — Tae abrió sus ojos con enojo al ver como Nam lo abandonaba a su suerte con el alfa.
— Creo que ya no hay nada que hablar Jin — dijo a la vez que se ponía a seguir pizcando aquel café.
— Ya no me evites Tae, tenemos que hablar por favor, yo, quiero disculparme por la forma en que te hablé aquel día, pero es que de verdad no recordaba nada lo juro.
— Eso lo se, recuerda que me preguntaste si había pasado algo con Jimin — el menor fingió indiferencia aunque claro que le dolía recordar los sentimientos del alfa hacia su hermano mayor.
— Perdoname Tae, se lo que dije pero ahora estoy dispuesto a dejar todo atrás y comenzar una nueva vida contigo y con nuestro cachorro, déjame ser el alfa que mereces Omega .— al menor detuvo sus tareas para mirarlo, estaba sorprendido pues Jin parecía hablar con la verdad.
—¿Qué hay de Jimin?— al oírlo el mayor bajo su mirada inseguro pero de inmediato volvió alzarla.
— Si te soy sincero, jamás hubo algo, Jimin siempre me dejó en claro su sentir, así que no tienes nada de que preocuparte.
— ¿Pero qué hay de ti? Se que lo amas Jin, y no puedo negarte la oportunidad de que seas feliz con él, mi corazón duele de tan solo pensar que te estoy arrebatando eso que tanto has anhelado.— Seokjin al oír aquello soltó una ligera sonrisa, Tae era tan tierno y bonito que por instinto llevo su mano hacia la mejilla de este, sorprendiéndose cuando el Omega no se alejó y en su lugar se acurrucó en aquella gruesa mano cerrando incluso sus ojos por lo relajado que se sentía.
— Quiero un futuro contigo Tae— al escucharlo el moreno lo miró con ternura.
— Y yo quiero que seas feliz Jin y se que conmigo no lo serás, así que dejemos todo como está, no pienso atarte a un Omega defectuoso incluso no.....no pienso tener al cachorro — Seokjin al escucharlo soltó un gruñido pues obviamente le había dolido a su lobo escuchar esa barbaridad.
Sin embargo contrario a lo que Tae esperaba el alfa lo abrazó mientras lo atraía a su cuerpo y lo subía en su regazo para que estuviera más cómodo y se sintiera seguro en sus brazos.
— Te juro que seré un buen padre Tae, se que no tengo experiencia con cachorros, soy algo torpe y no me tomo las cosas muy en serio pero te prometo que haré mi mayor esfuerzo para que te sientas orgulloso del padre de tu hijo, formaremos una hermosa familia Omega, por favor dame la oportunidad prometo incluso ser un buen alfa para ti, cuidarte, amarte y protegerte, no dejes que todos mis defectos te hagan tomar aquellas desición.
Taehyung abrio los ojos sorprendido pues obviamente no era por Jin que estuviera dicidiendo no tener al bebé.
— Jin yo...
— Omega te prometo no fallarte y ser un buen papá pero por favor tengamos a ese cachorrito— los ojos de ambos estaban tan rojos después de lanzar algunas lágrimas — Cásate conmigo Taehyung, dame una oportunidad, déjame demostrarte que desde ahora tu y mi hijo son lo único que importan en mi vida — dejándose llevar Tae se acostó mejor en aquel amplio pecho, disfrutando del aroma del alfa, su lobo saltaba feliz pues al fin estaba con el hombre que habían elegido.
— Seokjin debes dejar trabajar a Taehyung, Yoongi también lleva rato buscándote y kookie, yo cuido a mi hermano — les dijo con tranquilidad el rubio pues su corazón latía con fuerza al ver como su hermano estaba tan relajado en los brazos del alfa que tanto quería.
Sin embargo Jin no quería soltar al menor, no entendía que pasaba su lobo le pedía estar así pegado a su pequeño Omega.
— Yo ayudaré a Jimin a cuidar a Taetae— está vez escuchó la voz ruiseña de Hobi.
— Esta bien, me voy pero cuidenlo mucho, nos vemos más tarde Omega — fue lo único que pudo decir antes de soltarlo pues sabía que si continuaba ahí ya no podría levantarse y solo pediría tener al menor en sus brazos para cuidarlo.
Después de que los omegas vieran como Seokjin se iba fue que llenaron a Tae de preguntas más este solo se limito a llorar pues realmente no sabía que desición era la mejor.
Cuando la noche llegó todos estaban cenando como de costumbre cerca de las fogatas que se hacían para ambientar el lugar, Nam estaba acompañado de Jimin pues Hobi se había reconciliado con Yoongi, motivo por el cual no los acompañaba y Jin había buscado a Tae por lo que ahora cenaban juntos.
—¿Sabes dónde puede estar Jungkook?— preguntó Nam al mayor pues había notado como todos regresaban menos el pelinegro.
— Seguramente está con el consejo, varias noches de la semana se reúnen para tratar asuntos de la manada, así que no tienes porque preocuparte — le mientras le sonreía para trabquilizarlo.
— No estoy preocupado, Jungkook es enorme y se que puede defenderse — mintió pues obviamente su pecho molestaba al no tener cerca a ese empalagoso alfa.
— ¿Cómo van las cosas entre ustedes?— le pregunto Jimin mientras continuaba comiendo.
— ¿A qué te refieres?
— Bueno, se las intenciones que kookie tiene contigo, pero que hay de ti, ¿Ya lo aceptaste ?
— No quiero sonar repetitivo pero no soy gay.
El mayor sonrió de forma burlona — Tienes tu cuello lleno de chupetones y siempre tienes el aroma de kook encima tuyo y no precisamente de que solo te haya marcado, más bien lo tienes impregnado cuando algo más a sucedido, dime Nam ¿Hasta dónde haz llegado con él?
El moreno se puso muy rojo mientras pensaba en todo lo que se había dejado hacer por el alfa — Mi trasero sigue siendo virgen jimin.— fue lo único que pudo decir avergonzado.
— Pero supongo que te has dejado besar y acariciar por kookie, así que según lo que me dijiste, eso ya te hace muy gay— aquella estúpida sonrisa quería borrarla del rubio, pero inevitablemente solo pudo agachar la mirada sin saber que decir pues su cerebro parecía congelado mientras escuchaba al otro reír con fuerza.
— Yo.....
— No te preocupes Namie aquí nadie te juzgará por ser gay — dijo el mayor tratando de calmarlo pero consiguió lo contrario.
—No soy gay.... yo no puedo ser gay Jimin, mi padre, él va matarme si se llega a enterar de lo que he hecho con Jungkook en su cabaña — su miedo había comenzado a crecer pues obviamente no quería defraudar a su progenitor.
— Cálmate Nam, tu padre no está aquí así que tranquilo.
Sin embargo el moreno sintió su pecho doler, no quería ser la vergüenza de su familia como tantas veces le dijo su padre.
— Debo irme a dormir Jimin — y sin perder tiempo se fue a su cabaña, rechazando a cierto alfa que llegó más tarde.
Jungkook no sabía que pasaba, estaba preocupado pero sabía que a la mañana siguiente le preguntaría a Nam que es lo que tenía pues no le gustaba verlo mal.
Cuando el sol salió Nam no quiso hablarle, incluso solo se limito a comer muy poco para después salir de su hogar, necesitaba despejar su mente y que mejor que estar alejado del alfa.
Todos habían notado aquel distanciamiento en la pareja pues aunque no les agradara el humano, sabían lo mucho que el alfa necesitaba a su destinado a su lado para estar fuerte y saludable.
Los últimos días se le había visto al líder cabizbajo y con una aura triste al igual que a Namjoon.
— Fuiste el último que habló con Nam así que ¿Qué fue lo que le dijiste mimi? — lo regañana Tae.
— Te juro que solo bromeaba, sabes que Nam siempre utiliza esa palabra rara para referirse a él y su relación con Jungkook y bueno yo me reí de su situación, pero prometo que mi intención no era distanciarlos.
— Vamos Tae Jimin sería incapaz de eso, es más bien Namjoon quien actúa extraño, ya nisiquiera va trabajar con nosotros y se la pasa encerrado.
— Yo voy a convencerlo de que está noche nos acompañe, saben que los líderes de la manada vecina llegan hoy por lo que habrá una gran fiesta, así dejenlo en mis manos.
Cuando la noche llegó Taehyung fue de inmediato a la cabaña de Jungkook, viendo como el alfa salía ya arreglado, admitía que era muy guapo sin embargo no era nada su estilo.
—¿Esta Namie?
— Si, pero no quiere ver a nadie Tae— la voz del alfa sonaba tan triste y sus ojos saltones reflejaban lo mucho que le dolía estar alejado del menor.
— Intentaré hablar con él, tu adelantate — el mayor le hizo caso aunque si era sincero prefería quedarse en casa y admirar aunque fuera por pocos minutos a su lindo moreno.
— Namie puedo pasar — dijo el mayor y al ver que no obtenía respuesta lo hizo. — Te ves horrible — Nam lucía algo cansado y con ojeras, su cabello estaba sucio y su piel lucía sin brillo. —¿Qué tienes Namie?
— Quiero irme a casa Taehyung — dijo para después soltarse a llorar — Ya no quiero estar aquí.
El moreno se sentó a su lado para consolarlo —¿Te hizo algo Jungkook? O porqué quieres irte.
— Hace que sea un maldito raro yo era normal hasta que llegue aquí — sus lágrimas seguían saliendo, sabía que lo que decía estaba mal pero no podía detenerse.
— ¿Estás seguro de eso Namie? No quiero juzgarte pero desde un inicio vi tu apego a kookie, incluso noté el como lo veías y bueno no era precisamente unos ojos inocentes los que barrian a nuestro líder aquella noche que te encontramos.
Namjoon soltó un alarido más fuerte pues sabía que algo de razón tenía Tae.
— No quiero ser así Tae, me asusta mucho la idea de que me atraiga un hombre.
— Pero aquí nadie te juzgará Nam, créeme que si te juzgan será más bien por tu deficiente desempeño en las labores que porque Jeon te atraiga — dijo burlón.
— Oye he mejorado — se defendió.
— Todos aquí te apoyan Nam porque Jungkook te eligió, créeme que muchos quisieran estar en tu lugar, así que vamos levántate, date un baño y borra esos instrusos pensamientos, es hora de que les demuestres que eres alguien digno para nuestro líder y que eres alguien que merece amar sin importar el sexo del otro.
Nam lo miró con ternura para lanzarse a sus brazos.
— Oye hablo enserio con lo del baño, apestas Namie — dijo burlón — te traje un lindo vestuario que quiero que uses está noche, tenemos invitados y quiero que los impresiones como nuestra luna.
Nam algo dudoso aceptó, para después de bañarse ponerse aquel traje blanco con toques de colores, lo maquilló un poco y por último le coloco una linda corona que Tae le había dicho que debía portar como la luna de su manada.
— Te ves precioso, Namie es hora de irnos.
Conforme fueron avanzando Namjoon se dio cuenta que aquella manada vecina era muy importante pues todo estaba muy bien decorado y limpio, todos los habitantes llevaban sus mejores galas.
En cuanto llegaron a dónde estaban las fogatas y la fiesta la música instrumental sonaba más fuerte, viendo como varios miembros de la manada bailaban animadamente.
Justo cuando llegaron vieron como varios aplaudían animados aunque al mirar a Namjoon se detenían de tal acción pues aunque el humano les desagradara le debían respeto al ser su luna.
Tae no comprendía que pasaba fue hasta que sus ojos se enfocaron en aquella pareja que todo tuvo sentido.
Quiso alejar a Nam pero era demasiado tarde y ahora el moreno veía hacia esa misma dirección, donde su querido Jungkook bailaba animadamente con una joven mujer.
El silencio reino de un momento a otro, llamando la atención de Jungkook y su pareja, quienes se detuvieron al no escuchar más parloteo.
En cuanto Jungkook enfocó mejor su vista sintió como incluso su propio lobo tembló con algo de miedo.
Jamás se había sentido así, era un alfa grande y poderoso, un luchador inalcanzable, una bestia al momento de atacar a otro lobo.......era un.....un pequeño cachorro que temblaba de miedo al ver aquellos ojos llenos de furia y celos que cargaba su querido Namjoon.
Estaba en problemas y lo supo en cuanto vio como su lindo moreno se acercaba a ellos.
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