Noah no era totalmente estricto con Stiles. Porque el chico había demostrado que como podía meterse en líos, también podía salir de ellos. Como aquella vez que le partió la nariz a Jackson por burlarse de Scott, y pensar que años después él mismo chico que hacía enojar a su muchacho, ahora sería su beta.

—Espero que no estés armando un harem—expresó mientras Stiles hacia la tarea en total silencio en la sala, intentaba tomarlo como una broma.

—Papá, ser alfa no me convierte en pervertido—sonrió aún con los problemas que podían ofrecerle el concentrarse para no investigar en total profundidad los temas que le estaban dando.

Noah no era un hombre temeroso dee Dios, lo fue hace mucho tiempo. Había rezado, orado, suplicado perdón para su alma inquieta. Pero Stiles le había sonreído, tomado su botella de sus manos cuando se dormía de lo borracho que estaba. Stiles había sido sido su iglesia, su religión, su culto, que no pedía más que adorarle, tenía hasta un extraño humor en los funerales, que hacía amar tanto al chico. Y no era porque viera ha su hijo de una manera más allá de él amor paternal. Era porque cuando estuvo a punto de caer y dejar solo a su hijo, este le sostuvo hasta que pudo ponerse de pie.

—Dile eso a las vecinas chismosas—soltó exasperado.

—La vieja señora Smith no tiene nada mejor que hacer, que hablar sobre nuestras vidas—comentó mordiendo la punta de su pluma en busca de concentración.

Noah dejó el tema de lado, solo sonrió en reconocimiento hacia su hijo. Escucho al castaño tararear una melodia de posiblemente bandas sonoras que eran muy cercanas a Star Wars, si bien que ya se conocía al pequeño crió.

Solo asintió dejando a su hijo ser. Tomó sus llaves y llamó a Stiles desde la puerta para hacerle saber que saldría por algunas cosas al supermercado.

—¡Regrese a salvo!—despidió Stiles en reconocimiento.

Benditos oídos de hombre lobo. Noah no le tomó importancia cuando por el camino se encontró con Scott en su motocicleta. Tampoco cuando Derek lo abordó en el estacionamiento del supermercado, cuando Lydia le saludo por los pasillos junto a Jackson y Danny tampoco lo pensó mucho. Pero cuando Peter e Isaac le siguieron de cerca hablando, haciendo compras, preguntándole que le gustaba ha Stiles mientras juntaban la cosas de su carrito con el suyo, es cuando dejó de pensar que era coincidencia. Ser de un pueblo pequeño no impedía encontrarlos. Pero no a todos de una vez, en un solo lugar, a una sola hora.

—¿Qué sucede Peter?—preguntó directamente observando cómo Isaac parecía preocupado.

—No sé de qué está hablando Sheriff—se desvío ignorando al hombre mayor.

Isaac negó divertido y abrumado. Pero se alejo cuando su ahora padre adoptivo comenzó a querer interrogar a Peter. Tal vez podría conseguir un par de chocolates y dulces para comer con Stiles cuando regresarán a casa. Esto de estar siguiendo a Noah era cansado. Solo porque Stiles lo había pedido. No es que estuviera encontrá de la idea, pero era demasiado obvio si se encontraban todos juntos al mismo tiempo.

—¿Puedo llevar estos dulces?—llamo siendo consciente de que Peter lo escucharía sin dificultad.

—Todos tuyos cachorro—las palabras fueron escuchadas como si estuviera cerca suyo.

Cuando regresó al pasillo donde Peter y Noah estaban hablando, chocó contra alguien. La barras de chocolate, junto a las bolsas de sabritas y algunas otras botanas pensadas para pasar el tiempo se cayeron de sus manos.

—Maldicion—se quejo agachandose para recuperar sus cosas.

—Isaac...

La voz de Peter se vio cortada, por el aroma de pólvora, mezclado con acónito y plata lleno por completo sus sentidos. Alzó la mirada encontrándose con una chica de cabello castaño ligeramente rizado. Se erizo notablemente intentando forzar una sonrisa al exterior. Allison aún no sabía que había sido mordido, no a menos que los estuviera vigilando. Eso debería ser demasiado cerca, como para entrar en su territorio sin permiso.

—Lo siento tanto—se disculpo tranquilamente recogiendo sus cosas, casi suplico en sus adentros que Peter llegara ha salvarlo.

—Tú eres él chico Lahey, ¿no?—preguntó con falso tono inocente la chica.

—Sí, lamento haber tropezado contigo, no me di cuenta—Isaac se encogió dentro de su misma altura.

Ella era una cazadora y él un hombre lobo, se supone que debería tener menos miedo de la chica, luego de que su alfa la retirara del territorio. Pero es que su olor, su presencia lo estaban intimidando. Al parecer el sherrif y Peter se dieron cuenta. Porque el lobo mayor se acercó dispuesto a destripar a Allison enfrente del pasillo de los cereales y las verduras si tocaba un solo cabello de Isaac.

—No te preocupes por mi chico, preocupate por los perros con los que te estas metiendo—Exclamó ganándose un gruñido amenazador de Peter.

La chica solo sonrió burlonamente dando la vuelta en su mismo eje. Con el cabello cayendo en cascadas castañas de rizos por su espalda, con ese olor característico de cuero, pólvora, acónito y un toque de plata fundida en todo su conjunto. Noah observó de cerca, nadie podía intimidar tan fácilmente a Isaac desde que Peter había estado entrenando al chico, Stiles había aportado su propia chispa al chico.

—Vaya, veo que estas bien Hale—escupió con una sonrisa estática—¿cómo está tu perra?

—No lo sé, ¿cómo está tu tía?—expresó sin mirar dos veces a la chica—era mi perra antes de que la matara—pasó de largo, arrastrando las palabras tan bajo y peligrosamente que solo ellos podrían escucharlo.

Ayudo a Isaac a levantarse ignorando por completo la mandíbula apretada y el olor a enojo que la chica estaba dejando a su alrededor.

—Allison Argent—llamó Noah con una ligera sospecha.

—Sheriff Stilinski, ¿usted sabe de todo esto?—señaló a los lobos que estaban juntando la compra con la de Noah sin mirar a la dirección de la cazadora.

—Argent, no debo inmiscuirme en asuntos de la manda de mi hijo—señaló alzando los hombros—pero piensa bien tú siguiente paso, porque podrías ya no estar al día siguiente.

—Sheriff...

—Vamos chicos—se dio la vuelta ignorando a la chica, mientras abrazaba ha Isaac para relajar al chico. Peter solo miró detrás de su espalda para asegurarse que no los estaban siguiendo.

El titulo definitivamente es una referencia, claramente lo es. Jajajaja así que... Esperen salseo en el siguiente capitulo.