Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 8


//Horas después de la Batalla del Dragón Negro//

Me siento tranquilo, me siento relajado, me siento en paz...

Nunca me había sentido de esta manera. Puedo sentir como es que floto a la deriva entre las calmadas e inmóviles aguas de un infinito océano. La humedad tan refrescante.

No hacía calor, no hacía frío. Era la temperatura perfecta.

Mi cuerpo esta de lo más liviano. Como si fuera una pluma navegando entre suaves mareas. No había peligro, no había preocupaciones, estaba a salvo.

No me quiero levantar, pero un instinto me hizo abrir lentamente mis ojos. Lo primero que vi fue el cielo oscuro, no había estrellas, no había luna. Solamente estaba una densa oscuridad.

Ladee mi cabeza aun lado mío. Me encontré con una mezcla de naranja y rojo. Me mire a mi mismo y veo como es que estoy desnudo y flotando a la en esas aguas rojas.

Saboree un poco esa agua. Era sangre, la dulce y deliciosa sangre por la que siempre lucho por no sucumbir, de no caer en la casi irresistible idea consumir ese líquido vital que tan fácil es de conseguir.

Realmente estaba en paz.

¿Morí?

¿Este es el cielo del que tanto humanos están obsesionados en creer?

No, es mucho mejor.

Ese tono de voz... es Bloody.

Es... extraño, normalmente es un fastidio tener que oír su voz. Mi voz. Pero con ese característico tono tan irritante y estridente que tanto caracteriza a mi otro yo.

Sin embargo, ya no me molesta. Es como si en lo más profundo de mi ser deseara escuchar siempre esa voz. Esa voz que me llama, que me guía, que me aconseja.

Esa maldita voz en mi cabeza que nunca se calla...

No me moleste en buscar a Bloody, no hacía falta, lo puedo sentir. Esta cerca, muy cerca.

Como si se tratase de un destello fugaz, un instinto se apodero de mi y la sangre en la que descansaba tan plácidamente comenzó a levantarme. Yo no me moví, solo dejé que la sangre me controlara.

La sangre que se elevaba termino por cumplir su cometido de levantarme. Me mantuve parado, tocando la sangre sin hundirme. Me miré las manos pues vi algo que llamo mi atención.

Cicatrices...

Que extraño. Nunca en mi vida había tenido una cicatriz, cada que me lastimaban, que me cortaban, que me disparaban, que me golpeaban y hasta que me explotaran siempre sanaba mis heridas.

Siempre me regeneraba hasta estar como nuevo. Mi cuerpo nunca me había dejado ni una sola cicatriz, ni siquiera la más minúscula e insignificante. Mucho menos la más profunda y grave.

Nunca.

Entonces... ¿Por qué mi mano está llena de cicatrices?

¿Por qué las siento tan sensibles?

¿Por qué tiemblan?

¿Por qué siento que me arde?

¿Por qué estoy sintiendo dolor?

-Porque esas cicatrices representan todo tu resentimiento y tus arrepentimientos.

Mire adelante. Ahí, frente a mí, a solo unos pasos de distancia se encontraba Bloody. Exactamente en la misma condición en la que yo estoy. Con las mismas cicatrices en nuestras manos.

-¿Mi resentimiento? ¿mis arrepentimientos? – Pregunte sin entender del todo.

-Esas cicatrices, no representan heridas físicas, representas heridas psicológicas y emocionales. No debemos extrañarnos por conocer esto, después de todo esta es nuestra mente.

-¿Estoy en mi mente? – Pese a lo relativamente fácil que es comprender esto, hay una parte de mi que sigue dormida, profundamente dormida y hace que me cueste comprender todo.

-Así es, este mundo que ves aquí es creado por nuestro cerebro para mantener nuestra consciencia. Aquí es donde soñamos, donde nos relajamos, donde nadie jamás podrá irrumpir para fastidiarnos.

Bloody me mostro sus palmas y al mismo tiempo yo hice lo mismo. Estábamos completamente sincronizados el uno con el otro...

-Solo hecha un vistazo a todo y nota que más cosas podemos ver

Volteamos nuestras cabezas hacía la derecha. Ahí mire lo que parece ser una enorme estatua. Era tan grande que se perdía en la oscuridad del cielo. Tenía la figura de una mujer.

Volvimos a girar nuestras cabezas hacía el lado contrario. Ahí pude ver otra estatua. Era tan grande como la anterior solo que esta parecía ser la figura de un hombre.

Nuestras cabezas no regresaron a nuestra posición inicial. De hecho, siguió girando hasta llegar a los 180 grados sin siquiera mover la espalda. Atrás de mí, había una tercera estatua, quizás un poco más pequeña que las otras dos, era una figura femenina, sin duda, pero encajaba mejor con la silueta de una niña. Sin embargo, una parte de mi me decía que esta estatua era tan o más importante que las otras dos.

Mi cabeza termino de dar el giro de 360 grados. Justo al mismo tiempo que Bloody. Nos miramos fijamente, nuestras miradas chocando como si estuvieran conectadas. Esos ojos tan intimidantes, esa esclerótica tan roja como la sangre al coagularse y ese iris completamente negro cual brea.

Esos eran los ojos de un ser más allá del depredador o la presa.

-¿Qué son esas estatuas? – Pese a que aun seguíamos inmersos en los ojos del otro, no titube al preguntar.

-Son los pilares que sostienen tu cordura.

-¿Por qué solo hay tres?

-¿Quiénes son los seres que más putas apreciamos en nuestra vida?

De inmediato mi mente hizo "Click". Ahora tenía sentido el porque tenían esas formas. ¡Ellos son...!

-Si, son "ellos". Aquellos los cuales somos incapaces de nombrar como nuestro corazón realmente desea llamarlos, pero que, sin embargo, hay algo superior que nos impide hacerlo, aun con todo el amor y cariño que guardamos para ellos.

-Lo comprendo... - Hubo un largo silencio por un rato, hasta que otra duda invadió mi mente. - ¿Por qué apenas entro en este lugar?

-No es la primera vez que estamos aquí. No conscientemente, siempre entramos aquí cada que dormimos, es aquí donde los sueños se manifiestan, así como también las pesadillas.

-¿Y por qué hasta ahora es que puedo estar consciente de esto?

-Eso es gracias a la puta loca con la que peleamos y con los otros tres malditos que nos dejaron fuera de juego. Esos hijos de puta, son de nuestra misma especie. Al estar rodeado y con el suficiente tiempo es que pudimos "desbloquear" esto.

-Es... como un mecanismo que se activa automáticamente al estar en contacto con el resto de piezas restantes.

-¡Que comes que adivinas!

Ahí estaba de nuevo esa actitud de mi otro yo. – Entonces esta es una reacción de mi cuerpo para cuando hay otros como, ¿Correcto? – Bloody asintió y yo lo hice junto a él.

-Tampoco es solo eso... hay otra razón por el que estamos aquí

Dio un paso y yo inconscientemente hice lo mismo. Nos acercamos el uno al otro hasta estar cara a cara. Yo... me estremezco al tenerlo tan cerca. Yo... creo que ya sé cual es esa otra razón.

-Por fin seremos uno...

Tanto tiempo huyendo y rechazando esa idea. Por alguna razón siempre me aterro la sola idea de que esa era mi naturaleza. Esa que sentí hace ya tanto tiempo, pero que soy incapaz de recordar.

Esa naturaleza tan peligrosa y llena de gula. Esos pequeños susurros del viento que me suplican parar, que me suplican no hacerlo, que me suplican el rechazar mi propia naturaleza la cual a mi mismo me aterra y ahora... está a punto de hacerse realidad.

Bloody fue levantando su mano lentamente, yo lo imite o... ¿él me imitaba a mí?

En estos momentos no tenía importancia, era simple y puro instinto. Uno que ya no puedo resistir...

Nuestras palmas estaban a escasos centímetros de tocar nuestros cachetes a escasos centímetros de unirse el uno con el otro.

Pero...

¡¿Qué es esto?!

Sentí una abrumadora fuerza el obligarme a detenerme y pude ver que Bloody también lo sintió. Su cara demostraba lo molesto que estaba.

-Bastardos, hijos de perra, justo ahora nos despiertan... como sea, es mejor despertar, ya seremos uno otro día, ahora, los malditos de nuestros hermanos nos llaman para tener respuestas.

No pude decir nada, la presión que me aplastaba no me permitia formular palabra alguna y de un momento a otro este mundo de destrozo en miles de pedazos.

Ahí desperté... 

~0~0~0~

-¡Mira el bello durmiente esta despertando! – Lincoln lentamente fue abriendo sus ojos al escuchar esa voz.

-Parece que aun tiene el cerebro frito – Otra voz hablo desconcertando más a Lincoln que sentía que su cabeza quería explotar.

-¿Qué mierda paso? – El albino pregunto mirando a los dos tipos frente a él. Sintió el frío extremo en sus manos y pies, mirándose más a detalle tenía los pies y las manos congeladas a una silla.

-Te peleaste con la loca de fuego, luego te ataque yo dejándote inconsciente y de ahí te trajimos aquí. Donde apenas te estas despertando, ¿así o más detallista quieres que sea? – El más alto de los dos le contesto.

Era considerablemente más alto que Lincoln, con más masa muscular. Cabello castaño oscuro, tez ligeramente oscura, un lunar en su rostro y con una evidente heterocromia en sus ojos haciéndolos rojos y azules.

https://youtu.be/Jpp5frH6gXk

El chico le sonrió al albino burlándose de él. – Cada día te esfuerzas más por ser más sarcástico, ¿no es así? – Dijo el otro mirando a su compañero.

El otro chico era de la misma altura que Lincoln, así como de su misma complexión, tez blanca, cabello castaño claro y unos gélidos ojos celestes.

-¿Lo notaste?, ¡Que bien, al fin lo hicieron! – El más alto cerro su puño de manera dramática. Su compañero solo rodo los ojos.

-Es evidente ese intento desesperado por ser alguien "genial" – El chico de los ojos celestes bufo.

-Me lo dice el estúpido que imita a esos personajes "fríos" de cualquier shonen genérico – El otro le respondió a su compañero con una sonrisa al ver la molestia en su rostro.

-¡Cállate imbécil, al menos a mí me queda esta actitud! – El de ojos celestes miro a su compañero de ojos bicolor con molestia.

-Te quedara cuando dejes de usar esa puta piyama de cordero – Le contesto burlonamente, pero antes de que el otro pudiera responder, Lincoln hablo.

-Pueden dejar sus problemas maritales para después – Lincoln desde hace un rato que se había liberado de esas ataduras y ahora se encontraba frente a ambos. – Y gracias por los pantalones, en verdad que fueron amables, pero supongo que toda una muda de ropa era demasiada amabilidad, eh – Se sacudió el hielo roto de los dichosos pantalones.

-¡No hay de qué! – El de ojos bicolor le di un pulgar arriba al albino.

-Me agrada este imbécil – Bloody se rio para sus adentros.

-Tampoco íbamos a dejarte con el pene fuera todo el tiempo, tuve suficiente con tener que mirarte tu pecoso trasero en todo el camino aquí – Lincoln levanto una ceja y no pudo evitar dibujar una sonrisa socarrona en su cara.

-¿Tan aburrido era todo el camino como para solo fijarte en mi trasero? – Los ojos rojos del albino chocaron con los celestes del castaño. Era increíble el como el secuestrado conversaba con sus secuestradores.

-¡¿En serio eso estuviste haciendo?! ¡Pensé que solo estabas haciendo esas reflexiones edgy que tanto te gusta actuar jajajajajajaja! – El otro solo comenzó a reírse de su compañero.

-No voy a comentar nada... - El chico solo desvió la mirada a otro lado para gracia de los demás.

-No importa, no me molesta que me vean, claro, mientras solo veas y no toques nada estaremos bien. En fin, ¿Cómo se llaman? – Lincoln se cruzo de brazos y los miro.

-Ah, cierto, discúlpanos es que tenemos pésimos modales como has podido comprobar – El de ojos bicolor tomo del hombro al de ojos celestes. – El tipo frío y medio bisexual es Dipper y el chico agradable soy yo, Marco – El mencionado Marco se presentó.

-Jódete     

-Dipper y Marco, eh – Miro a ambos inspeccionándolos de arriba abajo. – Un maricon y un idiota, mi combinación preferida jajajajaja – Bloody se relamió los labios.

-¿Sabes el porqué de esos nombres?, Obvió que no. El mío lo obtuve jugando al "Marco Polo" mientras que el de este idiota lo consiguió por la puta marca de nacimiento que tiene en su frentesota que se parece al bendito astro – Marco le levanto el cabello a Dipper y efectivamente tenía una marca de nacimiento bastante similar al astro espacial.

-¡Joder! ¡¿Por qué siempre que traemos a alguien nuevo siempre cuentas ese dato innecesario, idiota!? – Dipper le dio un codazo a su compañero con el cual se escucho claramente el como se rompió una costilla de Marco. Sin embargo, este permaneció bastante tranquilo.

-Fácil, mi amigo, es para tener nuestra propia introducción como dúo. Ya que ni a ti ni a mi nos gusta el cómo Connie nos presenta a los tres – Lincoln solo veía el como ellos dos discutían entre sí.

-(Debo de admitir que es bastante entretenido verlos discutir) – Pensó Lincoln mirando el cómo seguían discutiendo el uno con el otro.

-Es como ver a dos simios tirándose mierda mutuamente tratando de disimular lo pequeñas que son sus bolas – Bloody soltó una carcajada que casi hacen que Lincoln suelte una también.

Afortunadamente, Marco y Dipper seguían demasiado metidos en su discusión como para notar esa sonrisa maliciosa y burlona del albino.

-(Como sea, me dan ganas de ver cómo termina esto, pero voy a ver un poco todo este lugar) – Caminando tranquilamente rodeo a ambos chicos que seguían inmersos en su discusión. – Este lugar es mucho mejor que nuestro miserable departamento – Las palabras de Bloody no eran por nada pues ese lugar contaba con muebles bastante nuevos.

Sillones que solo veías en las vitrinas de alguna tienda de muebles, pero era demasiado caros como para comprarlos. Dos televisiones de alta definición y de cincuenta pulgadas. Consolas de videojuegos, con bastantes estanterías llenos de juegos tanto viejos como actuales. Así como también una gran variedad de libros. Posters de algunas bandas, así como de franquicias de cualquier videojuego.

Este lugar era la sala de estar perfecta. – (¿Cuánto apuestas a que lo robaron todo?) – Lincoln acarició los sillones, eran bastante suaves. Miro que la televisión estaba prendida en el canal de noticias.

La noticia de la cual estaban hablando tenía como título; "¡Misterioso incendio arrasa con tres cuadras Woodlawn Ave!" 

-(Creo que ya sé cómo termino mi pelea) – Lincoln se sintió verdaderamente indiferente ante toda la destrucción que había causado. Él no se dio cuenta, pero era evidente.

-¿Dónde estará la loca de Demencia?, Que queremos volver a partirnos la madre con ella – Bloody se pregunto a lo que al albino le pico la curiosidad.

-(Cierto... estaba demasiado concentrado en esos dos que olvide en la situación en la que estoy) – Lincoln cerro los ojos y se concentró. Al hacerlo, pudo escuchar el latido de cientos de corazones en un rango de cinco kilómetros. Al concentrarse más detenidamente en la zona donde se encontraba pudo escuchar doce latidos [Sin contar los suyos]. Tres provenían de Marco y dos de Dipper.

Los otros corazones que restaban se encontraban en la habitación de al lado, cinco de esos corazones pertenecían a una persona y las dos restantes a la otra. Pudo reconocer a esas dos personas. Eran Demencia y la enmascarada.

El resto de la zona estaba limpia de cualquier otro invitado especial. Volvió a abrir los ojos, pudo sentir que las dos chicas estaban conversando, no tenía idea de qué, pero las sentía cada vez más animadas.

-(Bien, ya todos están ubicados... ahora... ¿Qué se supone que haga?, no puedo escapar sin que lo noten, es imposible hacerlo, por muy metidos que estén en sus conversaciones ellos notaran de inmediato que trato de largarme) – Lincoln se rasco un poco su cabello, algo consternado por la situación.

-Podemos quedarnos y ver que es lo que quieren. Esos dos idiotas de allá no nos contaron nada del porqué nos trajeron aquí. Seguro tenemos una charla interesante – Lincoln miro de reojo a Bloody. El ente tenía razón.

-(De acuerdo, me da mucha curiosidad, aparte que aquí hay cinco individuos de la misma especie, y... debo de admitir que estar en este lugar me trae mucha tranquilidad) – Lincoln estaba siendo honesto. En toda su vida solo muy pocos lugares lo hacían sentir en verdadera tranquilidad. – (Aunque quizás debería llamar a Ricardo para decirle que estoy bien)

-Sería una buena idea, si nuestro celular siguiera hubiera sobrevivido a esa escupe fuego

-Ugh, buen punto – Lincoln murmuro. Volvió a echar una mirada al lugar en busca de un teléfono, pero no encontró ninguno. – Mierda... *suspira* solo espero que Roxan no me estrangule al llegar a casa tan tarde.

-Eso sería muy divertido de ver jejejejeje – Lincoln miro con una sonrisa a su otro yo entendiendo a lo que se refería con eso. – Entiendo muy bien lo que trataste de decir, pero este no es el momento de pensar en eso

-Siempre es momento de pensar en esa mujer tan encantadora jajajajajaja

-Lo que digas. En fin, adelantemos esto... ¡Hey par de putos! ¡Dejen de decirse cosas bonitas y vengan a explicarme por qué estoy aquí!

Marco y Dipper detuvieron su discusión para mirar al albino. – Claro cariño, si también se te antoja te puedo traer una tacita de té o una puta corona de diamantes y obsidiana – Marco le saco el dedo medio mientras decía eso.

-Encantado, a mi té ponle tres terroncitos de azúcar y mi corona la quiero al estilo victoriano, por favor – Lincoln le saco la lengua en respuesta.

-Je, te cayo el hocico – Dipper se burlo de su amigo y antes de que Marco pudiera responder. Su boca literalmente se congelo cortesía de Dipper. – Bien, anciano, si tantas respuestas quieres debes esperar a que nuestra líder termine de charlar con la lo... - Fue interrumpido abruptamente por la puerta abriéndose de golpe.

-¡Que tanto están joteanto esta vez! – Una chica alta, tez oscura y cabello castaño oscuro miro con una ceja levantada a los chicos. – Y así arruinas el momento de suspenso que estaba creando – Dipper se sintió bastante decepcionado con su amiga por aparecer tan repentinamente a interrumpirlo y a decir esa otra estupidez.

-¿Quién jotea y no invita? – Asomando la cabeza al lado de la chica de tez oscura estaba Demencia mirando divertida todo el espectáculo hasta que vio a Lincoln que fue corriendo hacía él. - ¡Cabello semen, despertaste!

-Claro... (¿Cabello semen?, esta chica en serio se está esforzando por darme apodos) veo que estas bastante bien luego de nuestra pelea – Lincoln solo miro como es que Demencia lo miraba de arriba abajo.

-Debes de darme la revancha que hubo metiches y no alcanzamos a terminar – La chica de cabellos verdes se rio jocosamente. - ¡Eso sí, solo espérate a que "Chocolatito" te lo explique todo!

-¿Chocolatito? *Miro a la chica sonriente detrás de la peliverde* eres bastante creativa con tus apodos – Una idea susurrada por Bloody hizo que al albino le creciera una sonrisa – Sería increíble que también le dieras alguno a los idiotas detrás de mí – Demencia miro atrás del albino y vio a Marco sonriéndole y guiñándole un ojo mientras que Dipper solo le saco el dedo medio.

-Ah, a ellos ya les puse unos. Él es "Paleta de limón" *Apunta a Dipper* y él es "Bocón" *Apunta a Marco* son geniales, ¿no lo crees? – Ante esos apodos tanto Lincoln como la otra chica empezaron a reírse.

-¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA! ¡Sin duda los mejores!

-¡Eso es lo más gracioso que he oído en todo el día, loca bastarda! – La chica también disfrutaba ese momento, en especial la expresión de sus compañeros.

-Sigo sin entender por qué "Limón" está incluido – Dipper murmuro. Entendía lo de "Paleta", pero no lo de "Limón".

-Porque hueles a Limón – Demencia le respondió con una sonrisa de oreja a oreja.

-¿Hablas en serio?

-Sip, ¿Qué no te habías dado cuenta? – Ante eso Dipper se olfateo a sí mismo y comprobó que era verdad. Olía a bastante Limón.

-Ahhhh que buenas risas – Lincoln paró de reír y miro a la chica la cual le faltaba conocer su nombre. – ¿No te vas a presentar o te da pena? – Ante ese comentario, la chica entrecerró los ojos maliciosamente.

-Como has podido comprobar tenemos pésimos modales. Sin embargo, tú ya agarraste bastante confianza como para estar siendo un maleducado también

-Yo tengo excusa, ya que ustedes me secuestraron.

-Tienes un punto, aun así, esa respuesta haré como si no la hubiera escuchado. Soy Connie – Se presento finalmente la dichosa Connie.

-Lincoln – El albino hizo lo mismo, pues en ningún momento se presento con Marco y Dipper

-Un placer fufufufufu – Connie extendió su mano y Lincoln correspondió el gesto. Al hacerlo, ambos sintieron una chispa recorrer todos sus cuerpos. Gracias a esa estimulación los ojos de ambos brillaron fuertemente.

Rompieron el apretón de manos casi de inmediato. – Uh, interesante... - Connie sintió su mano temblar. Aun podía sentir esa chispa aturdir su mano.

-Veo que también fue tú primera vez con eso, eh – Lincoln también sonrió mirando fijamente los ojos dorados de Connie.

-¿Qué mierda?, ¿Tuvieron sexo en dos segundos o por qué dicen eso? – Demencia se acerco curiosa por esa reacción.

-Sí, ¿Qué pedo con ese mini-orgasmo? – Marco también se acerco curioso.

-Quien sabe... como sea, creo que ya nos alargamos demasiado para el acto principal y estelar de la noche, la razón del porque los trajimos aquí

-Ya habíamos olvidado eso, que buena onda de su parte el recordárnoslos – Bloody miro malicioso a Connie.

-¡Vas a flipar cuando te lo diga! – Demencia invadió indiscriminadamente el espacio personal de Lincoln. A lo que Lincoln la aparto.

-Sorpréndanme – Lincoln se cruzo de brazos mirando a Connie.

-De manera corta, sencilla y para toda la familia. Lo que buscamos es encontrar a todos los miembros de nuestra especie

-Okey, lo consiguieron – Lincoln se sorprendió del objetivo. – Sin embargo, pudieron usar métodos menos amenazantes y más amigables, ¿no lo crees?

-Posiblemente, pero siempre nos ha gustado probar la fuerza de nuestros semejantes – Connie se encogió de hombros. Sin embargo, pese a no mencionarlo, en el fondo se sentía realmente viva a la hora de medir su fuerza con los de su mismo calibre.

-Ahora te lo cuento de la manera larga para ahorrarme preguntas molestas, así que te voy avisando que sí me interrumpes te arrancare un testículo, ¿vale? – Lincoln deslizo su dedo por todo su labio dando a entender un cierre cerrándose.

-Así me gusta, los obedientes siempre son los mejores – Miro levemente a Marco. El chico con poderes eléctricos desvió su mirada silbando. – Que empiece la cháchara...

-Desde que tengo memoria he sentido que no pertenezco a esta ciudad, a esta sociedad, incluso a este planeta. La gente siempre se alejaba lo más que pudo de mi y por mucho tiempo estuve sola contra el mundo hasta que conocí a Dipper y a Marco. Ellos no eran muy diferentes a mí, solitarios y perdidos. Descubrí que había más como yo, gente que podía a hacer cosas increíbles que los humanos solo sueñan con tener. En general, nuestras historias no son muy diferentes las unas de las otras.

-(Es como yo... todos... antes de conocer a Ricardo estaba solo) – Lincoln se sentía totalmente identificado con ellos. En verdad, las personas como él no eran muy diferentes los unos de los otros.

-Al tener un tiempo viviendo juntos los tres nos pusimos de acuerdo en una cosa. Había más como nosotros. El problema era que no sabíamos cuantos y donde se encontraba. El cómo encontré a estos dos imbéciles fue simple suerte – Connie les sonrió a ambos que le devolvieron la sonrisa. Ese gesto no paso desapercibido por Lincoln ni por Demencia.

-Otras más dudas nos asechaban, pero decidimos dejarlas y empezar nuestra búsqueda para encontrar a más miembros de nuestra especie. No avanzamos mucho, a decir verdad, así que decidimos posponer eso para mejorar nuestras habilidades y mientras hacíamos eso encontramos un secreto oculto en cada uno de nosotros – Connie extendió su mano y de inmediato esta se separo en cuatro manos distintas. Incluso su tono de piel cambió cual camaleón en muchos tonos de colores – Mi habilidad natural es controlar al más mínimo detalle todo mi cuerpo, puedo alterarlo a nivel molecular en cualquier forma que quiera. Pudo cambiar cada cosa desde mi tamaño, mi peso, mi estructura, mi apariencia, crear muchos más miembros como te los estoy mostrando, aunque también puedo cambiar todos mis órganos internos y hasta puedo cambiar de sexo si quiero. Literalmente soy el puto eslogan de Barbie en todo el sentido de la palabra.

-Se me olvido preguntártelo, pero... ¿puedes tener dos vaginas? – Demencia interrumpió. Su curiosidad bastante perturbadora.

-Podría, la verdad no lo he intentado, pero estoy segura que puedo hacerlo – Connie sonrió pícaramente y le guiño un ojo tanto a Demencia como a Lincoln.

-Vaya dato perturbador, pero extrañamente excitante – La curiosidad de Bloody también era perturbadora.

-(Perturbadoramente fascinante) – Lincoln se mantuvo en silencio, pero tanto él como su otro yo sentían mucha curiosidad respecto al tema.

-En fin, ahora te haré una pregunta, así que puedes hablar

-Escúpela

-¿Alguna vez te has puesto a pensar del por qué somos de la misma especia cuando cada uno de nosotros puede hacer cosas totalmente diferentes?

-Instinto, es lo primero que me dice que son como yo – Lincoln no dudo en responder, pero esa pregunta lo dejo pensando.

-¡Exacto! Simple y puro instinto el que te avisa cuando hay más como tú. Una cosa que debes de saber es que biológicamente somos totalmente distintos los unos de los otros, eso incluye a los humanos y los animales. Nuestra biología se adapta dependiendo a nuestras habilidades. El simple hecho de que los presentes tengamos más de un corazón es prueba irrefutable de eso. Nuestro cuerpo puede llegar a fabricar órganos nuevos y desconocidos para el ser humano con tal de optimizar nuestro rendimiento con nuestras habilidades. El poder regenerarse que todos tenemos es otra prueba

-¿Y esto a qué va? – Por muy interesante que fuese conocer estos detalles, Connie se estaba desviando del tema. La chica sonrió.

-A eso voy, tranquilo impaciente – Lincoln volvió a colocarse el "cierre" y no dijo nada. – Bien, más allá del instinto, no compartimos una misma biología los unos con los otros. Cada uno es algo completamente distinto al resto de seres vivos, entonces debe de haber algo de lo cual nos identifique como semejantes. Mientras entrenábamos me descubrí eso que nos uno e identifica como especie... - En ese instante, Connie bajo el cierre y se dio la vuelta dejando ver a los demás su espalda.

-Mira atentamente... - Lincoln puso su total atención. En un principió no vio nada resaltante hasta que un líquido blanco comenzó a salir justo donde iniciaba la nuca. Ese líquido bajo por la espalda de Connie a grandes cantidades, pero sin desbordar nada. Abarcando en su totalidad toda la espalda. Al cubrirla por completo, la piel de Connie volvió a absorber ese líquido blanco. Al irse por completo revelo algo impactante.

-Eso... es algo que cada uno de nosotros tenemos, ¡es la pista que necesitábamos para reconocernos los unos con los otros! – Lincoln se encontraba impactado.

En la espalda de Connie se había revelado dos cosas parecidas a un tatuaje que decían; Beelzebub [3]

-"Beelzebub" es el nombre de un demonio bíblico muy temido y poderoso. Por lo que creo asumir que ese es mi nombre verdadero, ya que "Connie" me lo puso una niña que conocí. Me gusto el nombre, así que me quede con el. Ahora, en cuanto al número estoy segura al 100% que se trata de un número en serie. Es decir, un número de fabrica... - Al poco tiempo que apareció, ese "marca" volvió a desaparecer. Connie se volvió a cubrir.

-Todos y cada uno de los que nos hemos encontrado que pertenecen a nuestra misma especie tiene su propio nombre y su número. Estoy segura que hay algo más que nos vuelve una especie más allá de un nombre ya sea de un ángel o un demonio y un puto número. Pero de momento este descubrimiento es el más importante que hemos hecho.

-Así es. Con esa cosa que sale de la espalda de Connie podemos descubrir nuestro propio nombre y número. Yo soy "Mammon [29]" – Agrego Marco.

-Y yo soy "Alastor [22]" – Dijo Dipper.

-Con eso pudimos darnos una idea de que pertenecíamos a algo más. Esos números seguro deben de ser la cantidad de ejemplares que hay, pero de momento lo máximo que sabemos es que hay 29 más como nosotros. Claro, que aun no sabemos ni tu número ni tú nombre y siempre que conocemos a otro como nosotros siempre hacemos esto. Hace rato lo probé con Demencia – Explico Connie.

-Fue divertido y hacía cosquillas sentir ese líquido seminal en mí espalda, así como también saber mi nombre y número. Soy "Baal [13]" – Dijo Demencia feliz.

-Wow... esto sí que me ha dejado sin palabras – En verdad estas revelaciones habían sido muy impactantes para el albino.

-Entonces... ¿listo para conocer tú nombre y tú número? – Connie pregunto ya con ese líquido blanco en su mano.

Lincoln no dijo nada, pero asintió y se dio vuelta. Connie no dudo y comenzó a embarrar ese líquido en toda la espalda de Lincoln. El resto fueron para ver la revelación. Rápidamente la piel de Lincoln absorbió ese líquido revelando...

-Wow – Dijo Marco.

-No jodas – Dijo Dipper.

-Menudo Plot twist – Dijo Demencia.

-Interesante... - Dijo Connie.

-¿Qué dice? – Pregunto Lincoln esperando la respuesta de los demás.

-Resultaste ser más interesante de lo que eres... "Lucifer [1]" eso es lo que dice – Revelo Connie.

Lincoln abrió los ojos muy sorprendido. – ¿Soy... el primero? - Estaba perplejo. 

-Veo que estas tan sorprendido como el resto. No tiene caso preguntarte cosas de nuestro origen – Analizo Dipper.

-(Nuestras iniciales serían "L.L". ¡Jejejejejejejejajajajajajaja vaya noche más divertida ha sido!) – Bloody se carcajeo bastante fuerte. Lincoln aun no terminaba de procesar toda la información. Aun así, una duda le llego a Lincoln.

-¿Con cuántos de nosotros han tenido contacto hasta ahora? – Miro seriamente a Connie. El rojo y el dorado chocaron nuevamente.

-Contando a los aquí presentes... catorce – Respondió Connie calmadamente.

-¿Y qué harán cuando encuentren a todos? – Volvió a cuestionar.

-Quien sabe, para serte honesta, nuestro segundo objetivo es descubrir nuestro origen, pero eso se retrasando debido a la muy poca información que tenemos. Y creo que entre todos nosotros debe de haber alguno que conozca el como sucedieron las cosas, o al menos que tenga una pista respecto a eso – Connie se acerco y coloco su mano en el hombro de Lincoln. – Mira que tampoco es eso, también te haré la propuesta que siempre hacemos cada que nos encontramos a otro "demonio" por decirlo así.

-¿Qué?

-Lincoln... ¿Quieres unirte a nuestro grupo?, Parece que solo somos tres, pero en realidad somos seis los que están en este grupo, solo que los otros tres salieron.

-¡Hey! ¡¿Qué hay de mí?! – Demencia inflo los cachetes molesta.

-Bueno, siete. Ella acepto antes de que viniera a explicártelo todo. Entonces... ¿Qué dices? ¿Te nos unes? – Connie miro con una sonrisa reconfortante a Lincoln.

El albino por otro lado la miro en directamente los ojos de Connie, estos estaban siendo sinceros y le imploraban que aceptara. Lincoln desvió su mirada y vio como Marco le sonreía guiñándole un ojo, Dipper no lo miro a los ojos, pero si había una pequeña sonrisa en su rostro. Demencia lo veía con una sonrisa de oreja a oreja, suplicándole a más no poder con la mirada.

-(Yo... no sé qué hacer...) – Lincoln en verdad se encontraba contrariado. No sabía que pensar o que decir.

-Un simple "sí" es suficiente – Lincoln miro a Bloody sorprendido. Este le sonrió macabramente. – Nosotros sabemos perfectamente lo que nosotros querremos

Esas palabras de Bloody terminaron de convencer a Lincoln. – Esta bien, me uno – Sentenció Lincoln con una sonrisa sincera.

-¡Genial! ¡Incluso tu voz interior te tuvo que dar un empujón para aceptar! – Connie abrazo por el cuello a Lincoln dándole unas fuertes palmadas en su espalda desnuda.

-¿También eso de la voz molesta que apenas se calla la tenemos todos? – Lincoln se rio disimulando el ardor que sintió en su espalda.

-Desafortunadamente todos tenemos una – Dipper se encogió de hombros resignado.

-Creí que yo era esa voz – Tras el comentario de Demencia, todos soltaron unas risas.

-Esa fue buena – Marco admitió.

-Oigan, ¿Por qué es que no usan sus "nombres"? – Pregunto Demencia curiosa.

-Porque nos prometimos no usarlos hasta conocer nuestro origen – Respondió Connie.

-¿Y cómo funciona este grupo? ¿Tienen algún nombre o algo así? ¿Y qué hacen los otros tres restantes miembros? – Pregunto Lincoln.

-¡Ah Cierto!, Nuestro nombre de grupo es... ¡Avanged Sevenfold! – Revelo Marco moviendo sus manos de un lado al otro.

-¿Esa... no es una banda de metal? – Se cuestiono Lincoln.

-Y nosotros que pensábamos que la zorra de Ricardo era el ser con menos imaginación del mundo, llegan estos a quitarle el trono – Bloody saco la lengua.

-¡Oye! ¡¿Tienes idea de lo difícil que es encontrarle un nombre a este grupo?! – Connie exclamo molesta. – Como sea, los otros tres están en otra misión, no deben tardar. En cuanto a nuestro modus operan di. Nos dividimos en escuadrones de tres. Por descarte, tú y Demencia son equipo.

-¡Genial! ¡Yo quería estar con "Cabello Semen" porque es el que mejor me cae y por su vergota! – Demencia levanto a Lincoln de un gran abrazo. - ¡Aunque pese más que un puto edificio! – Demencia en verdad hizo un gran esfuerzo para cargar a Lincoln. El albino por otro lado no supo cómo tomarse esos comentarios.

-Gracias, supongo...

-El próximo miembro que se una a los "Avanged Sevenfold" lo tendrán que reclutarlo ustedes para que sea parte de su escuadrón. Eso sí, deberán esperar a que regresen los otros tres para presentarlos formalmente – Indico Dipper.

-(Creo que tendré mucho que explicar cuando llegue a casa) – Pensó Lincoln viendo venir la reacción de Roxan y Ricardo. – Eso, si es que dejan explicarnos – Con esas palabras dichas por Bloody, Lincoln soltó un suspiro.

~0~0~0~

-(Recuérdame la razón por la que estábamos aquí...) – Lincoln le pregunto a su otro yo. El chico se había mantenido mirando a las recién llegadas sin expresión alguna.

-Era algo sobre ayudar a la mocosa – Bloody respondió con un tono de voz más plano que la misma Lynn.

-¡Y sigues con esos chistes! ¡¿Qué no sabes parar?! – Lynn grito furiosa contra su hermana.

-Vamos Lynn, no seas amargada, ya suficiente es con que te falte más "pechonalidad" – Luan por el contrarió no le tomo importancia a la acusación de su hermana, aparentemente.

-Como vuelvas a decir un chiste más te juro que... - Lynn trataba de contener sus ganas de abalanzarse contra su hermana para demostrarle que con ella no se juega.

-Su madre esta desmayada en la sala – Interrumpió Lincoln de pronto, intentando que por fin le prestaran atención.

Ambas lo miraron sin decir una sola palabra. Lincoln pudo sentir como el corazón de Luan se aceleraba a un ritmo alarmante y su sangre bajaba de temperatura. En cambió Lynn fue lo contrarió a ella solo se encontraba hirviendo de ira.

-¡¿Por qué sigues aquí?! – Lynn estaba a nada de estallar por completo. Una palabra mal dicha y se abalanzaría contra el albino.

-Wow, Lana no bromeaba cuando decían que son malas hermanas – Lincoln no se midió con sus palabras. Ya se había cansado de tanta descortesía y ver esa reacción de Lynn solo le había demostrado que casi nadie aquí, apreciaban a su familia.

-¡¡AAAAAHHHHHHH!! – Eso fue el colmo para Lynn. Que un extraño la llamara de esa manera no lo iba a permitir bajo ninguna circunstancia. La castaña corrió furiosa hacía el albino que no se movió.

La chica parecía un toro enfurecido dispuesto a matar al torero. Sin embargo, Lincoln no se alteró, cuando Lynn se encontraba a solo un escalón de él, extendió su brazo y golpeo suavemente su frente. La fuerza fue lo más mínima que Lincoln podía medir, pero fue suficiente como para empujarla hacía atrás provocando que cayera de espalda contra las escaleras hasta llegar al suelo.

-Necesitas ser treinta centímetros más alta como para querer golpearme, gatita – Lincoln se burló con una sonrisa, mientras que Lynn le gruñía tanto de dolor como de rabia.

-¿Quién te crees que eres, imbécil...? – Lynn gruño esa pregunta poniéndose de pie.

-Un invitado del cual no han tenido la mínima decencia de presentarse - Esa respuesta solo irrito más a Lynn.

Apretando los puños con rabia se encontraba dispuesta a volver a tratar de golpear a Lincoln. Inesperadamente Lola chillo. - ¡Quieren callarse que estoy tratando de estudiar! – Lola se encontraba realmente fastidiada. No solo bastaba con que la profesora de geografía fuera una bruja despiadada que manda un gigantesco temario para el examen donde muy seguramente la mitad de los temas ni vendrían en el examen, sino que ahora llegaban sus fastidiosas hermanas a interrumpir su estudio con sus estúpidas peleas.

Lana solo maldijo en voz baja. La niña esperaba por acabar antes de que el resto de su familia llegara, pero toda esa esperanza se fue casi por completo cuando supo que Ecuador no solo era una línea, sino también un país. Y esa pequeña esperanza que aun tenían de acabar a tiempo se fue cuando llegaron sus hermanas a arruinar todo.

-¡A nadie le importa eso! – La castaña de cabello corto regreso ese grito con la misma intensidad que Lola había hecho [Pero sin la agudeza de la princesa].

-A mi si me importa eso, fue por eso que vine aquí en primer lugar – Lincoln bajo las escaleras tranquilamente pasando completamente de Lynn. Ella solo se volteo llena de rabia hacía el albino maldiciéndolo de todas las formas posibles.

-¡Vas a pagármelas! ¡¿entendiste?! – Amenazo Lynn.

-Págame esta – Lincoln ni la miro cuando dijo eso. – Por cierto, soy Lincoln, ¿Y tú eres? – Esas palabras no fueron dirigidas a Lynn, sino a Luan que solo miraba todo indecisa.

-¿Eh?, ¿Me hablas a mí? – Se pregunto Luan desconcertada.

-No, seguramente le estaré hablando a la pared – Ante ese comentario tan sarcástico las gemelas no pudieron contener una pequeña risa que se les escapo. En cuanto a Luan se sintió tonta, pero forzó una sonrisa, pese a estar muy ansiosa.

-Jajajaja okey, ahí me atrapaste – Luan se rio, pero Lincoln noto de inmediato el como la estaba fingiendo.

-(Si hay algo que le tengo que reconocer es que es una muy buena actriz. Puedo sentir claramente toda la tensión de sus músculos y hasta puedo oler su ansiedad. A pesar de eso, realmente no lo aparenta, tiene un buen manejo de la expresión corporal de su cuerpo bastante impresionante) – Lincoln tuvo que reconocerle eso a Luan que a diferencia del resto de sus hermanas sabía muy bien esconder sus emociones.

-Meh, Jim Carry es mejor

-(¿Y eso que tiene que ver?)

-No lo sabemos, solo queríamos decirlo – Lincoln sintió la necesidad de suspirar. A veces su otro yo podía actuar como un niño. – ¿Acaso necesitamos recordar que tenemos trece años? – Ante esa respuesta del ente Lincoln solo se encogió de hombros.

-(Tuche) - Niño de trece años con nunca tuvo infancia, pero a fin y al cabo niño. 

-Como sea, soy Luan Loud, un placer Lincoln... ¿Cuál dijiste que era tu apellido? – Luan se presento formalmente con el albino.

-No lo dije, soy Lincoln Buttowski – Extendió su mano para hacer un saludo formal. De inmediato Luan acepto. El albino sintió una leve descarga eléctrica recorrer su cuerpo, esa descarga resulto ser un poco más fuerte que lo normal para un humano cayendo en esa broma. Sin embargo, eso no fue más que un pequeño cosquilleo.

-¡JAJAJAJAJAJAJA! ¡Un clásico nunca muere! ¿no crees? – Luan se rio. Lucía más animada, como si ahora esa broma hubiera aliviado cualquier tensión en ella. Eso era mentira. Lincoln podía sentir que aun seguía tensa, incluso más que antes.

-Por supuesto, no es un animal atropellado como para morir tan fácil – Lincoln sabía que a Lana no le había gustado ni un poco ese chiste y a Luan tampoco, pues sintió como es que la chica se puso aún más tensa.

-Jajajaja sí... también podría ser como un prisionero con sentencia de muerte – La castaña le seguía la corriente al albino y eso se notó claramente.

-(Se obligo a sí misma a seguirme la corriente, aun cuando se notó que no le gustan el humor negro y barato. Supongo que solo quiere agradar de alguna manera) – Concluyo Lincoln mirando detenidamente a Luan.

Lynn por el contrarió seguía ahí mirando al albino charlar tan tranquilamente con su hermana. La deportista se sentía realmente humillada, pues desde su punto de vista un perdedor trataba de mostrarse superior a ella.

Se le iba a acercar cuando la puerta volvió a abrir entrando tres personas más.

-¡Chicas llegamos! – Anunció un hombre castaño y calvo de suéter verde, camisa de rayas por debajo, pantalón caqui y zapatos negros. Llevaba cargando bolsas llenas de suministros.

-Hola papá – Saludo Luan.

-Se ve como un pelele – La impresión de Bloody sobre el recién llegado no era muy buena que digamos.

-Un gusto Señor Loud, soy Lincoln Buttowski – Lincoln se acerco al hombre extendiendo su mano como saludo. Un saludo que no fue respondido pues el hombre se le quedo mirando. Como si estuviera viendo a un fantasma.

-¿Se encuentra bien? – Lincoln temía que él también se desmayara como su esposa.

-¡Tierra llamando a papá! – Luan también se extraño de esa actitud. Normalmente su padre era amable con todos los extraños que venían a la casa, ya fuesen los "amigos" de Luna, los de Lori o los testigos de Jehová.

El hombre reacciono de inmediato y sacudió su cabeza. – Eh... sí, lo siento, es solo que... no importa, no es nada jejejeje – El hombre apretó tímidamente la mano de Lincoln.

El albino pudo darse cuenta al instante que el hombre se sentía incomodo con su presencia. – ¡Hola! – De improvisto una hermosa chica rubia saludo con su mano al albino.

La chica era alta y hermosa. Vestida con una blusa aqua de manga larga, un pañuelo verde amarrado a su cintura donde había unos shorts blancos, en sus manos tenía dos grandes brazaletes rojos, una linda diadema blanca adornada por un moño verde, medías blancas y zapatillas verdes. Era toda una belleza.

-(Wow... esta sin duda es la mejor sorpresa que he tenido hoy) – Lincoln no pudo evitar sorprenderse de la belleza de esa chica.

-Esta mujer entra fácil en nuestro Top 3 de mujeres con mejor cuerpo que nosotros hemos visto. En especial con ese culo y esas tetas... – Incluso Bloody se impresiono ante tal belleza.

-Hola mucho gusto, ¿Quién eres y cómo te llamas, dulzura? – Lincoln soltó la mano del Sr. Loud y se acercó a Leni. La chica solo sonrió dulcemente.

-Soy Leni y vivo aquí – Fue su simple respuesta. - ¿Tú quién eres abuelito? – La chica pregunto con inocencia, Lincoln pudo detectar que no había un solo gramo de malicia o burla cuando pregunto. Leni genuinamente lo había dicho sin ofenderlo.

Con un pequeño tic y una sonrisa Lincoln respondió. – Soy Lincoln y tengo trece años – Al oír la edad del albino el resto se sorprendió, en especial Lynn que no podía creer que ese chico fuera dos años menor y la hubiera humillado de esa manera, más aún que tuviera esa apariencia de adolescente de diez y seis o diez y siete años.

Con un chasquido de lengua, Lynn se retiro jurando que las cosas no se quedarían así. Ese albino ya se las pagaría.

-¡Wow! ¡Pero tu cabello es tan blanco como el de mi abuelito! ¿Qué clase de marca usas para teñírtelo así? – Leni se sentía maravilla al ver ese color de cabello tan blanco y que se viera tan natural le daba un plus. 

-No me lo he teñido, así es mi pelo naturalmente – Respondió Lincoln.

-¡Asombroso! Aunque como que tú outfit es medio Dark... pero podría hacerte uno nuevo, así que no te molestaría ser mi modelo – La chica le propuso con una gran sonrisa, pero antes de que Lincoln respondiera, Leni sintió un jalo en su blusa y miro atrás donde se encontraba otra rubiecita.

Esta era la más pequeña por lejos, cabello rubio atado en una pequeña coleta, vestido morado con estampado de triángulos, una camisa negra por debajo, medias blancas y zapatillas negras.

La niña miraba tímidamente y un tanto temerosa al albino. – Oh Lily, ahorita estoy en medio de algo puedes esperar un momentito pliss – La niña no hizo caso y siguió tirando de la blusa de su hermana.

Lincoln miro a la niña por unos segundos, cuando Lily se dio cuenta de ello lo miro muy nerviosa. Lincoln solo se rio y le guiño un ojo. Ante eso la niña se oculto detrás de su hermana.

-No me molestaría serlo, pero creo que tienes otros asuntos con la pequeña – Leni aplaudió - ¡Perfecto! No puedo esperar a que te pongas el disfraz de cordero que hice – Al conocer ese detalle Lincoln se alarmo.

-¡De hecho!, ahora que recuerdo, tengo otro compromiso, lo lamento jejejeje

-Oh... es una lástima, te abrías visto tan a la moda. Bueno, vámonos Lily. Adiós abuelo Lincoln – Se despidió Leni cargando a Lily y subiendo al segundo piso. Pero antes de que eso pasase, la chica se resbalo, se volvió a levantar, pero el golpe la dejo aturdida por lo que choco contra la pared. Hasta que pudo subir sin golpearse. 

-Yo... creo que también me voy – Luan ya no soportaba tanta ansiedad, necesitaba ir a su cuarto para tomar su "medicina" antes de que le dieran ganas de morderse las uñas. Con esa idea en la cabeza de la castaña se fue dejando a Lincoln con su padre.

El hombre solo se había limitado a mirar hablar a Lincoln. Lynn no era el hombre que se dejaba guiar por sus instintos, pero en algo en Lincoln le causaba una gran melancolía. Lincoln al darse la vuelta, el castaño reacciono y camino directo a la cocina.

-Bueno... eso pudo ser peor. Aunque... siento que olvido algo... - Lincoln sentía que olvidaba algo muy importante.

-¡¡RITA!! – Grito Lynn al ver a su esposa tumbada en el sillón.

-Ahí esta

-Mierda... - Se acerco al hombre que lucía muerto de preocupación por su esposa. – Eh... creo que debí decirle esto antes, pero su esposa se desmayo desde que llego a su casa. Lamento no haberlo dicho antes – Lincoln se disculpo con el hombre. Sin embargo, el hombre no le respondió.

-¡¡LUNA!! – Para Lynn solo podía ser obra de Luna, ella era la que siempre hacía que su esposa y él mismo tuviera esos desfallecimientos con sus actos.

-Ella... llego poco después de su esposa, un tanto... - Hizo la seña de una botella siendo agitada. – Así que la lleve a su cuarto, esta dormida justo ahora – El hombre sintió una gran angustia al saber de eso.

-*Suspiro* Lamento que vieras eso, ya hablare con mi hija... - Lynn miro a la cocina donde las gemelas seguían estudiando. - ¿Y por qué estás aquí, Lincoln? – Cuestiono.

-Pues viene a ayudarle a Lana a estudiar para su examen de geografía y ya que Lola también estaba haciendo lo mismo las estoy ayudando a ambas.

-¿Podemos darnos un respiro, Linc? – Pregunto Lana viendo la oportunidad de parar, ya estaba harta del tema y en serio quería darse un descanso.

-No hasta que termines con las preguntas – Dijo Lincoln sin mirarla. Lola estuvo apunto de aprovechar para molestar a su hermana, pero Lincoln lo vio venir. – Y eso también va para ti, Lola – La princesa Loud se trago sus palabras y ambas gemelas golpearon sus rostros contra la mesa acompañado de un quejido de molestia.

-Bien, bueno, veo que estas haciendo un buen trabajo, así que siéntete como en tu casa muchacho – Lynn aprobó lo que el joven estaba haciendo.

-(Que rápido se convence de las cosas. No me ha preguntado nada más acerca de mí, ¿Qué acaso no le importan las amistades de sus hijas?) – Lincoln miro al hombre y le asintió.

-Si las hijas son basura, los padres son unos inútiles – Bloody ahora le veía más sentido a la descortesía y falta de respeto de la familia tanto como para las personas externas como dentro del núcleo familia, no era sorpresa el porque sus casi todas sus hijas eran tan desconsideras y estúpidas. 

Con eso aclarado Lincoln regreso con las gemelas para seguir estudiando. Tardaron cerca de tres horas más mientras que el patriarca Loud le daba una que otra mirada a Lincoln, cosa que el albino notaba, solo que no le importaba. También alguna de las demás chicas bajaron de vez en cuando a la cocina por algo de beber o comer, solo que ellas no le prestaron atención al maestro y sus pupilas.

-¡POR FIN! – Lana grito al borde de las lagrimas al terminar todos los ejercicios que Lincoln le había puesto.

-¡Dios! – Lola se sentía al borde de desmayarse del cansancio mental que esto le provocaba. – Ya acabamos... - Con saber eso la pequeña princesa se encontraba mucho mejor.

-Bien, al fin lo completan – Lincoln reviso y en efecto habían contestado bien todas las preguntas que les había hecho. – Mínimo quiero una "B" en el examen – Lincoln suspiro. El albino también se sentía cansado.

-Sí, si, si, con todo lo que aprendí hoy ese examen es pan comido – Lola dijo confiada de sus nuevos conocimientos. Aparte que tenía un plan de respaldo en caso de reprobar que incluía fotos sugerentes de la profesora con un chico de secundaria.

-Ya este examen ni me preocupa. Ahora solo queda aprobar los demás – Al recordar un pequeño detalle su corazón se detuvo - ¡Cierto! ¡También toca matemáticas y ese si va estar difícil!

-¡¡Tenías que recordarme eso justo ahora mujer!! – Lola se sentía molesta con su hermana por recordarle eso.

-¡¿Nos puedes ayudar con ese también?! – Lana le imploro a Lincoln que levanto una ceja.

-La primera vez es de prueba y siempre será gratis, la segunda ya voy a empezar a cobrarte querida – Lincoln se divirtió cuando vio la expresión tan adorable que Lana había puesto al estar molesta.

Antes de que la pequeña mecánica dijera alguna palabra billetes fueron lanzados a la cara de Lincoln. – ¡Ahí esta tú pago por adelantado! ¡Ahora, quiero que vengas temprano antes del mediodía para acabar antes de la comida que tengo una fiesta de té muy importante que no me pienso perder! – Lola ordeno.

-Como usted ordene Madame – Lincoln recogió todos los billetes y comenzó a contarlo. Eran cincuenta dólares. – Es suficiente, ¿Cómo a qué hora quieren que esté aquí? – Pregunto guardando el dinero en su cartera.

-A las nueve estaría bien – Lana comento a lo que Lola asintió de brazos cruzados.

-Bien, en ese caso aquí estaré. En fin, ya es tarde y debo volver para arreglar otros asuntos, nos vemos chiquillas – Lincoln tomo sus cosas, pero antes de dar el primer paso Lana lo abrazo.

-Gracias por ayudarnos Lincoln, en verdad muchas gracias – Lana le sonrió. Fue una sonrisa sincera y pura.

-Sí... supongo que fuiste de utilidad después de todo – Lola solo desvió la mirada con un pequeño, pero notable color carmesí en sus mejillas.

-Je, no fue nada – Lincoln se sintió genuinamente feliz y les revolvió el cabello a las gemelas, para el agrado de una y el disgusto de la otra respectivamente. – Nos vemos mañana – Con eso dicho, se despidió y fue a la entrada de la casa.

Justo antes de irse sintió a alguien husmeando en el segundo piso, viéndolo. Se dio la vuelta rápidamente y por un breve instante vio a Lucy que se escabullo y se fue apresurada.

El chico solo se rio por lo bajo, tomo el pomo de la puerta, la abrió y se fue cerrando la puerta.

Justo cuando cerro la puerta Rita despertó de golpe bañada en sudor.

-Mamá, ¿estás bien? – Lola se acercó a su madre al ver que había despertado. La mujer no contesto.

-¡LYNN TENGO QUE HABLAR CONTIGO! – Con ese grito dirigido a su marido se levanto y cual alma que persigue el diablo se fue a buscar a su esposo.

-Yo la veo bastante bien – Dijo Lana al verla irse.

En cuanto al albino. Él se encontraba caminando tranquilamente, el camino estaba bastante vació y el chico se encontraba con las manos en los bolsillos. El sol ya comenzaba a ocultarse en el horizonte.

-Menuda casa de locos

-Así es... bastante más disfuncional de lo que había pensado que sería – Lincoln agarro dentro de su bolsillo los "dulces" de Luna. – Veamos... ¿a qué lado batean esta chica? – Lincoln tomo todas las drogas en su mano y se las llevo a la boca.

Las mastico tranquilamente, saboreando su sabor amargo. - ¡Ah sí será estúpida! Estos son antidepresivos de los chafas. La estafaron, pero bien bonito – Lincoln negó un tanto divertido. – Esa chica es muy estúpida o esta muy desesperada como para comprar antidepresivos de tan mala calidad.

-Pueden ser ambas jajajajaja – Bloody se burló. Ellos no tendrían ninguna repercusión al ingerir esos antidepresivos, su sistema impedía que cualquier droga pudiera dañar su organismo.

Poco a poco la felicidad y el buen humor que Lincoln sentía se esfumaron cuando recordó algo muy importante. – (Ella también usaba antidepresivos... ahora que lo pienso, Luna y Roxan se parecen en eso) – Pensar en Roxan siempre le había llenado de una gran tristeza. Parecía que cualquier otro buen momento que haya tenido en el día, se vería totalmente arruinado cuando Lincoln pensaba en una de las personas que más amo en todo el mundo.

-¡Tsk! – Con un chasquido de lengua, Lincoln comenzó a correr, su velocidad fue tan alta que en menos de dos minutos ya había cruzado la mitad del pueblo y llego a su edificio departamental. Subió apurado hasta llegar a su departamento donde entro y cerró la puerta.

Recargo su espalda en la puerta deslizándose lentamente hasta sentarse. El albino se quedo mirando a la nada tras casi unos veinte minutos, luego posó su mirada en la gran tina que tenía. – Creo que eso podría venirme bien... - Con un pensamiento en la cabeza comenzó a desvestirse, tirando su ropa al azar sin importar donde cayera.

Se acerco a la tina ya estando completamente desnudo y metió su mano derecha. Y con un rápido movimiento de su brazo izquierdo, corto su propia mano que cayo inerte a la tina.

La sangre salió a borbotones y en menos de cinco segundos ya había llenado casi toda la tina. Con la tina llena de sangre, la mano cercenada de Lincoln volvió a su lugar.

Lincoln entro sin ninguna espera dentro de la tina. Él no fue cuidadoso al entrar, pero pese a su movimiento brusco, ni una sola gota de sangre salió fuera de la tina.

El albino se recostó suavemente. Sintiendo su sangre tibia por todo su cuerpo cerro los ojos dispuesto a una cosa...

Regresar a su mente.

~0~0~0~

https://youtu.be/oPTC9t7yQI4

Abrí mis ojos y lo primero que vi al hacerlo fue oscuridad. Pura oscuridad, luego fui golpeado por una ola de sangre. No me moví, ni siquiera me dolió ese golpe. De ahí le siguieron más y más golpes.

El tranquilo y pacifico océano de mi mente se había vuelto agresivo y traicionero. La marea de sangre cada vez más y más agresiva, más peligrosa...

No sentí absolutamente nada, ni temor, ni dolor, ni felicidad, ni paz. Nada. Solo pura indiferencia. Seguía recostado dejando que mi cuerpo fuera llevado por las fuertes mareas que se conducían por este infinito lugar. Solo recostado, sin importar lo fuertes o grandes que fueran las olas.

Estuve así un muy buen rato, solo mirando el oscuro cielo, no me levante si no es que vislumbre una grieta... una herida... una cicatriz que no sanaba. Que no podía sanar...

Era enorme, era como mirar una disrupción del espacio tiempo del tamaño de la luna que resquebrajaba mi mente y mi ser. Esa herida que ÉL me abrió y que jamás pude cerrar.

De esa enorme herida chorreaba un líquido blanco que lo único que hacía era oscurecer muchísimo más los infinitos mares de sangre de mi mente. Ladee mi cabeza a otro lugar para no ver esa asquerosa herida abierta y palpitante.

Mire como el fondo naranja que tanto se asemejaba a un bello atardecer había desaparecido y había sido sustituido por un deprimente gris de una interminable tormenta.

Las olas continuaban golpeándome, pero no me inmutaba ante ellas, yo seguía caminando sin ningún rumbo fijo, hasta que los vi...

Mis pilares...

Aquellas estatuas que antes se mantenían firmes, ahora estaban destrozadas... rotas... sus pedazos regados por todo el lugar. Ninguno había sobrevivido...

Me acerque a uno de los tantos escombros y lo toque. Estaba frío. Muy frío. El solo hecho de tocarlo hizo que sintiera un fuerte temblor en mi cuerpo, así que de inmediato aparte mi mano.

Estaba temblando.

En ese momento me mire las manos que estaban repletas de cicatrices. Miré mi reflejo en la sangre del mar y ahí pude ver mi como toda mi cara estaba llena de cicatrices y heridas. Todo mi cuerpo estaba lleno de ellas.

Heridas que aun desbordaban sangre, cicatrices que en lugar de mejorar solo se podrían más y más sin mejora absoluta. Y la herida que más destacaba era una enorme que se ubicaba justo en uno de mis corazones, en la misma posición donde estaría un corazón humano normal. Ahí solo había un enorme agujero que no paraba de chorrear sangre.

Este lugar de mi mente que en antaño solo me causaba paz, ahora solo me trae dolor.

Puro dolor.

Odio estar aquí. 

-Y a pesar de eso seguimos viniendo casi a diario – Bloody por fin se hizo presente.

Me di la vuelta y ahí lo encontré. En el mismo estado que yo, con las mismas heridas que yo. Con el mismo dolor que yo...

-¿Ahora que nos atormenta lo suficiente como para volver? – Nos sentamos en sincronía, una rodilla doblada como recargo para mis brazos y mi barbilla.

Mi mirada baja se pose en Bloody. Nos miramos a los ojos fijamente, yo sin ninguna expresión mientras que él me miraba con esa sonrisa tan cínica que lo caracterizaba.

-Todo, absolutamente todo...

Una vez más... odio estar aquí y aun así sigo viniendo. Je, en verdad aun no toco fondo... 

~0~

Joder... en serio que no tienen idea de como me costo hacer este capítulo. Maldición esto lleva esperando semanas, pero, aun así, estaba apagado de inspiración y ganas de escribir, todo eso se lo dedique a mi Shot más reciente [Que, por cierto, si no lo han leído deberían, ya que es de los mejores escritos que he hecho, disponible en mi Colección de One Shots "¡Que buen trago!" UwU], pero bueno, finalmente pude obtener las energías necesarias para ponerme a escribir y madre mía que sí escribí :Y

En fin, pero no solo es eso, sino que también mientras iba recuperando energías, también fui planeando muchas cosas y esto es algo que voy a avisar.

Tengo planeado más adelante voy a hacerles remakes [Y por "Remake" me refiero a que voy a cambiarlo casi por completo XP] a los primeros capítulos del fic. Sí ya lo hice con "The TV Lost House" puedo hacerlo con esta historia la cual, con todo lo que estoy planeando creo que será la obra con mejor desarrollo de personajes que haré UwU

También editare el resto de capítulos que no tendrán remake, simplemente para arreglar fallas de ortografía y algunos detalles que improvise y con este capítulo han cambiado.

Como por ejemplo los miembros de los "Avenged Sevenfold" [Lo sé, soy muy malo para nombrar grupos, tal cual me paso con los GLouds XD]

Y hablando de los "Avanged Sevenfold", sí, así es... no son OC's precisamente. Y se estarán preguntando...

¿Por qué?

Y la respuesta es muy sencilla... Soy muy malo haciendo OC's, así que por eso opte por usar personajes de otras series XD

Bueno, eso no es del todo cierto, en realidad, ya tenía planeado que Connie, Dipper y Marco aparecieran [Sí lo hice con Demencia puedo hacerlo de nuevo :b] y ya voy avisando que todo el grupo de los "Avanged Sevenfold" serán personajes de otras series.

Sin embargo, no consideren esto un Crossover, ya que no aparecerán más personajes de la misma serie de otros personajes. Es decir, que no aparecerá Star, Las Crystal Gems, ni el tío Stan, ni cualquier otro personaje de esa índole. [Sin contar que le cambié radicalmente la personalidad a los personajes que sí estoy usando, salvo Demencia que a esta solo le quite el Crush por Black Hat XD]

Ahora que sigo abordando el tema, en verdad que me alargue con el flashback, de verdad no esperaba que me saliera tan largo. Solo que deje que mis dedos hicieran lo suyo y... ¡bum! 6 K de puro flashback papá :b

En fin, espero que la revelación de los verdaderos nombres de los "Avanged Sevenfold" les haya gustado, y sí, todos esos nombres son nombres de demonios y también aparecerán nombres de ángeles y ángeles caídos, pero eso lo dejo para mi yo futuro.

Por cierto, respecto a este capítulo tengo algo que comentarles y es sobre las escenas dentro de la mente de Lincoln.

Quería preguntarles su opinión. Verán para estas escenas de la mente de Lincoln siento que es mejor hacerlas en primera persona, pero como el resto del capítulo está escrito en tercera persona pues quería preguntarles... ¿Esas escenas las hago en primera o tercera persona?

En serio, me gustaría que me dieran su opinión pues si no les molesta la manera en las que están escritas. Si es así solo díganlo, si les molesta para que esto sea cosa de una vez y tratar de hacerlo en tercera persona. Sin embargo, si no les molesta la combinación pues las haré de esa manera y ya, pero en serio me gustaría conocer su opinión (No se vale decir la de: "Hazlo como gustes" ya que sí les estoy preguntando es por algo :b)

Ya con toda esta reestructuración que estoy haciendo es importante que me den su opinión plss. 

Y bueno para este nuevo re-diseño que voy a hacerle, también incluye hacerle un cambio de look a Lincoln y a las Loud. Y aprovechando que en Wattpad se permiten las imágenes pues les pondré el como lucen las Loud en esta historia para que ya sepan como lucen y tranquilamente puedan saltarse las descripciones de apariencia de ellas en los capítulos que editare XD

El orden ira de mayor a menor:


Con Luan, solo tomen en cuenta la ropa de la primera imagen y en la segunda es su estilo de peinado uwu

Sobre Lincoln y Bloody pues le pedí a un amigo que me hiciera un dibujo de ellos dos, y pues aquí esta UwU

Gracias JuggernauticOps te amo bb <3

De momento, esos serían los diseños de las hermanas y como sus padres están igual, no vale la pena poner imagen. Con Bloody/Lincoln ya lo coloreare yo. Y hasta lo pondré de portada. 

Bueno, eso sería todo por mi parte, espero de verdad les haya gustado el capítulo pues me mate haciéndolo. Como sea, muy seguramente se me haya olvidado algo más que comentar, pero ahora mismo Me chupa tres pingos.jpg así que...

Se despide Dark-Mask-Uzumaki

Bye 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro