Capítulo 26
-TRES.
-DOS.
Teníamos la piel de gallina. Pensábamos que este sería el fin para todos, pero escuchamos como mi preciosa chica grita con alegría en su voz -¡LO HICE, LO HICE!- ya por fin podemos estar tranquilos; sacamos el aire que teníamos acumulado en la garganta y no nos habíamos dado cuenta.
-Ok, y ahora ¿como la sacamos te ahí Joseph?- indago preocupado.
-No lo sé- sé pasa la mano por el cara frustrado -y lo más estresante es que no podemos abrirla con fuerza bruta, ya que sí lo hacemos, posiblemente la puerta se derrumbe y con eso todo lo que tenemos encima, es decir quedaríamos atrapados bajo tierra y si poder sacarla de allí.
-Scarlett intenta comunicarte con el primer grupo para que venga y nos ayuden a abrir la puerta de alguna manera.
-Entendido comandante- y hace el saludo marcial. Estúpido.
Estoy apunto de preguntarle algo a Ehilyn cuando escucho agua cayendo al suelo desde el otro lado, me acerco a la puerta -¿Ehilyn? ¿Ehilyn cariño, estás bien?- No me responde, pero en vez de eso vuelvo a escuchar lo mismo. Mierda Ehilyn está vomitando.
Joseph también se dio cuenta. -Niña sabemos que estas vomitando, debes calmarte para que se detenga el vomito, ya que si no vas a terminar desmayada. Relájate, respira por la nariz y exhala por la boca suave y profundamente. Intenta relajar tus músculo.
Escuchamos como poco a poco el vomito sesa.
-Ya-ya-a estoy bien, el día de hoy me ha dado dos veces con ésta... Pero no sé el porqué. Hoy me han pasado muchas cosas extrañas...
-Cariño nosotros si sabemosn el porqué, pero primero te sacaremos de allí y luego te lo explicaré. Por ahora siéntate y recuestate a la pared para que se te pase el mareo.
Pasan unos minútos en total silencio y la puerta del ascensor se abre y volteo inmediatamente. Son los chicos, y una sonrisa se forma en mi rostro al ver lo que han traído con ellos.
-Sacaremos a tu chica de allí sí o sí Forest- Dice William dando dos golpes con la palma de la mano a la máquina que traen en los brazos Nicolas y Paul. Es una cierra eléctrica
-Oigan, un momento, ¿donde esta Ison?
-Nadie sabe.
-Estaba con nosotros.
-Y luego no estaba.
-Ese muy desgraciado escapó, nos estaba ayudando para que no sospecháramos nada y luego huyó. Por eso les dije que no debíamos confiar en él.
-Niña ¿me escuchas?...
Ehilyn no responde, mierda. Me acercó a la puerta y la golpeo varias veces gritando su nombre. Pero nada...
-Forest posiblemente se haya desmayado por deshidratación.
-Lo se, lo sé- paso la mano por mi cabello para tranquilizarme.
-Bueno, mis amigos, no perdamos más tiempo y acabemos con esa estúpida puerta para que el príncipe pueda salvar a su doncella en a puros- todos me miran con una sonrisa en su rostro. Que estúpidos.
-Entendido- dicen todos al unísono.
Nos ponemos manos a la obra. Primero comienza William, luego Scarlett, y así sucesivamente todos los presentes. A decir verdad ninguno pensaba que sería tan difícil cortar la puerta, solo hemos logrado cortar la mitad. Que chasco, pensé que con esa máquina podríamos hacer todo rápido, pero no. Llevamos aproximadamente unos veinte minútos en esto. Y lo peor es que Ehilyn aún no despierta. Siento miedo, impotencia, frustración y muchos más sentimientos en este momento.
------
Estaba dentro de mis pensamientos cuando de pronto en un momento tan efímero la puerta cae hacia el lado opuesto. Todo esta vuelto un desastre.
Traspaso rápidamente así el otro lado y la veo, este tirada en el suelo, su piel está pálida, hay vomito junto a ella y también, un poco más allá.
Me acerco a ella y me agacho, toco su pálida piel con las yemas de mis dedos, esta fría como un cubo de hielo. Saco un pañuelo que traía conmigo y limpio un poco el vomito que tiene encima. Con delicadeza la envuelvo en mis brazos, para por cargarla, acercó mis labios a su frente y planto el beso más sutil en ella mientras le susurro que todo irá bien, que ya todo acabó. Al momento que la cargo me doy cuenta de que esta más delgada que la última vez que la vi, ese día que estuvo apunto de suicidarse y se lanzó hacia mí, y estuvimos apuntó de besarnos...
La miro un poco más y de pronto entré abre los ojos un poco pero inmediatamente los vuelve a cerrar. Recogo de la manera más simple su larga cabellera castaña para que no tenga problemas con ella.
-Ok, y ahora ¿como vamos a inyectarle la droga?
Gilburt pasa por mi lado y se acerca a una de las puertas, dispara a la manilla y de ésta y se abre -Pues hay que buscarla primero.
Todos hacen lo mismo en las otras puertas mientras yo cuido de Ehilyn, está arrecostada en mis piernas, está dormida a causa de el cansancio que debe de sentir su cuerpo en estos momentos, después de todo lo que ha vivido.
Escucho como abren y cierran cajones aquí y allá. Todos saben que hay aprovechar que Ehilyn se encuentra estable. Ojalá y puedan encontrar esa droga rápido.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro