22
Pov Jungkook
Todo esto se me hacía muy raro. La situación de Jimin era un tanto, complicada. No podía descifrar que estaba planeando o si de verdad formaba parte de aquel lugar lleno de enfermos mentales. Supongo que nos daba tiempo para averiguar, y lo haría.
Los últimos días, después de que Jimin se fue, estuve persiguiendo a Yoongi. Era extraño, solo se ocupaba de hacer la compra para la casa de Jimin y no salir más que para eso. No comprendía como es que alguien como él podía hacer tantas cosas sin siquiera desviarse de la rutina.
Hace un rato estaba en una cafetería con Jin reuniendo opiniones y puntos en cuanto al caso, que legalmente estaba cerrado, pero nosotros seguíamos investigando. a nivel personal e individual.
Iba de regreso a casa ya que era oscuro y no me arriesgaría a que me robaran o algo por el estilo. Pero sentía algo extraño en el estómago mientras caminaba por esa acera. Como si me estuvieran persiguiendo. Repetidas veces volteo pero no hay nadie, sin embargo, escucho pasos leves casi perdidos en el eco de la soledad de la calle, hasta pensé que alucinaba, hasta que sentí que alguien me tomó del brazo.
— ¡Ey! ¿Qué crees que hac-? — Me quedé paralizado al ver que era Taehyung ¿Qué hacía él por aquí?
— Te están persiguiendo. Vamos a aquel hotel. — Señaló con la barbilla un hotel de tres estrellas que estaba a unos pasos de nosotros cruzando la calle.
— ¿Estás inventando tal porquería para llevarme a un hotel? Eres un puerco de lo último. — Dije intentado zafarme.
— No podemos entrar por la puerta principal. Nos van a seguir hasta dentro. Tenemos que desviarnos por los pequeños callejones a nuestra izquierda hasta perderlos y poder conversar en privado. — Susurró serio, viéndome fijamente a los ojos. Estaba hablando en serio, ese no era el mismo chico coqueto de la otra vez.
— Bien. Pero suéltame.
Me suelta y sonríe tomando mi mano. Caminamos a paso apresurado mientras nos escondíamos por entre algunas calles. Efectivamente escuchamos pasos a nuestro ritmo intentar alcanzarnos pero gracias a Taehyung pudimos perderlos poco a poco. Ahora que corríamos, llegamos al hotel, ingresando por el estacionamiento.
— ¿Qué hacen aquí? — Nos preguntó el aparca coches mientras fruncía el ceño señalándonos.
— Aparcando nuestro coche. Este hotel no presenta un buen servicio, estuvimos esperando en la entrada y no vimos a ningún aparca coches. Para la próxima, hagan su trabajo, que vine a pagar una buena habitación y no pretendo dejar propina si tengo éste tipo de servicio. — Le habló Taehyung de mala manera al chico.
El aparca coches solo bajó la cabeza avergonzado. Taehyung me jaló a las escaleras y subimos al vestíbulo en donde pidió una llave de una habitación que ya tenía reservada mientras mostraba una identificación falsa suya y al parecer también tenía una con mi foto pero claramente, falsa. Perfecto, y yo, un abogado, entrando con él en la habitación de un hotel.
— ¿De dónde rayos sacas mi foto y haces una identificación falsa? — Pregunté sentándome en la cama con fastidio. — Me traes a un hotel ¿Para qué?
— Te estaban persiguiendo, Jeon.
— ¡Deja de mentirme, todo este tiempo estuviste mintiendo para conseguir lo que deseas!
— Bien, cálmate. Sabes que estoy siendo cómplice de Yoongi, pero quiero mucho a Jimin. No quiero que pase por lo que está pasando. Tuve que traerte a escondidas aquí porque si no Yoongi me mata, me asesina, sobre todo porque se enteró recientemente de que Jimin y yo ya nos conocíamos. — Me explicó quitándose la camisa.
— Pero ¿Es cierto que Yoongi asesinó a la familia de Jimin?
— ¿En serio no le crees a Jimin? — Me miró mal frunciendo el ceño.
Claro que creía en Jimin, tanto que no paraba de investigar, pero me parecía tan increíble que Yoongi fuera un psicópata inteligente y calculador.
— Si le creo, pero no sé qué hacer para sacarlo de allí.
— El psiquiátrico en donde Jimin y Hoseok se están quedando, es mío. — Confesó. — Puedo distraer a Yoongi y tenerlo un poco ocupado mientras investigas en la casa de Jimin, aunque no va a ser fácil. No debes estar solo en todo momento. Hay personas que te rodean y que no son de confiar. — Me hablaba desvistiendo su cuerpo hasta quedar en ropa interior.
Desvío el rostro avergonzado y suspiro. — Bueno. Pero en qué horario tendré que ir.
— En la noche casi madrugada, ese es el horario en el cual Yoongi va a ir al hospital psiquiátrico, así que ten cuidado y ve con Jin, también lleva a alguien fuerte, por si los atrapan. Van a necesitar fuerza, y tú eres un marica debilucho. — Se acercó y me empujó dejando mi cuerpo boca arriba sobre la cama.
— T- Taehyung. Qué crees que haces.
No me dió respuesta. Solo me besó. Sus manos se ocuparon de desabrochar mi camisa y dejar al descubierto mi pecho. Intenté apartarlo cuando comenzó a besar mi cuello pero, cómo no derretirse con sus labios, la manera en la que me estaba acariciando.
No pasó demasiado cuando ya estábamos desnudos, besándonos bajo las sábanas. Su cuerpo sobre el mío entre mis piernas y su boca succionando la mía. Lo odiaba por haberme engañado, robado y traicionado, pero de alguna forma, sus toques desprendían mi mente de la razón.
Me sentía acalorado de sobre manera por la sábana que nos cubría de la cadera para abajo. Nuestros miembros calientes y húmedos se frotaban y yo me encargaba de arquear la espalda ladeando mi cabeza para darle más acceso a mi cuello mientras lo sujetaba de la nuca.
— Detente, vas a marcarme. — Me quejé cuando comenzó a succionar con fuerza en mi cuello, más de la debida. Sólo soltó una pequeña carcajada en respuesta antes de seguir en lo suyo.
A pesar de estar concentrado gimiendo y jadeando bajo su cuerpo, escuché el rechinar leve de la puerta de la habitación abriéndose.
— Taehyung, detente un momento. — Pedí intentando regular mi respiración. Ni puto caso me hizo. Ingresó dos de sus dedos en mí y lo único que pude haber hecho es gemir agudo por como los movía.
— Verdad, Taehyung ¿Por qué no te detienes? — Esa voz me erizó la piel. Sentí mi sudor frío y miré a mi costado viendo una figura con un delantal blanco lleno de sangre.
— Y- Yoongi. — Le llamé asustado sintiendo ahora como Taehyung sacaba sus dedos de mí.
Me asustó más el hecho de que Yoongi tenía un cuchillo de carnicero en la mano mientras sonreía ampliamente.
— ¿Qué haces aquí? — Le preguntó Taehyung con sequedad como si no le afectara en realidad encontrar a Yoongi en aquel estado tan aterrador.
— Trabajo aquí, lo hago desde que mi asistente me dijo que habías rentado una habitación. Me pareció tan curioso que huyeron. Bueno, eso no importa. — Se acercó viendo su mano libre llena de sangre. — ¿Se puede saber que planeas hacer, Taehyung?
— Estaba a punto de tener sexo y me vienes a vigilar como si fuera tu novia. No, Yoongi, no lo soy. Tienes una noviecita que cuidar. Déjame coger tranquilo. — Retó con la mirada a Yoongi quien borró su sonrisa de inmediato. Prefería ver su sonrisa macabra, en serio, así de serio daba más miedo.
— Yoongi. No puedes entrar así nada más a una habitación que no es tuya por el hecho de que trabajes aquí. — Dije molesto intentando apartar a Taehyung pero él no me dejó, en lugar a eso, empujó su pecho contra el mío al mismo tiempo en el que sentía la dura virilidad de Taehyung empujarse en mi interior. Golpeé el hombro de Taehyung en respuesta mientras apretaba mis labios para no hacer ningún sonido.
— Disculpe por haber invadido su privacidad, Jeon. Si quiere vengo más tarde a tomarles fotos para tener más pruebas en su contra. — Se burló.
— Yoongi. Por favor ¿Serías tan amable de sacar escualido culo de la habitación? — Pidió Taehyung suspirando volviendo su mirada a mí. Me sonrojé y desvié la mirada. — Estoy ocupado con Jeon. — Dicho eso, ingresó el resto de su miembro en mí sin avisar.
— Claro, me iré. Pero recuerda que mañana visitaré a Jimin. Y hablaré del tema de su vuestro en cuanto a ti se refiere. Si me llega a decir algo que no me agrada, ten por seguro que voy a cortarte el cuello, Taehyung. — Amenazó mientras se daba la vuelta y caminaba de regreso a la salida.
Cuando el golpe de la puerta cerrándose se escuchó, golpeé en el pecho a Taehyung, lo cual no pareció no hacerle ni cosquillas. — Eres un idiota. Quítate de encima.
— No. — Gruñó en mi oído comenzando a mover sus caderas mientras succionaba el lóbulo de mi oreja.
Agh, odiaba todo esto, todo lo que Taehyung lograba causar en mí...
~o~
Narrador...
— ¡No déjame! ¡Por favor! ¡No más! — Gritó desesperado removiéndose en la cama, en la cual se mantenía sometido por un cuerpo sobre el suyo. — S- Suéltame~ Me duele~
La sangre brotaba de sus heridas realizadas con una jeringa, con la cual dejó líneas rojizas en la piel de sus brazos.
— No voy a detenerme. Por fin tengo a alguien con quien divertirme. — Comenzó a reír maniáticamente mientras rasgaba esta ves su cuello sin herirlo de gravedad, viéndolo gritar y retorcer. — ¡Eso es! ¡Muéstrame más! ¡Quiero ver el terror en tus ojos! —
— Por~ Por favor~ No sigas~ Me duele~ — Solloza sintiendo la sangre manchar su atuendo blanco. Nadie había escuchado sus gritos ya que estaba en una de las habitaciones más alejadas de todo el psiquiátrico.
— Seguiré hasta que te duela la garganta de suplicar, hasta que no puedas más y desees morir. Seguiré hasta que pierdas la puta cabeza. Porque nadie toca a Jimin, nadie, porque él es mío. Solamente mío. Nadie volverá a respirar el mismo aire que él. Nunca más.
— No le hagas daño~ No lo mates~ No te amará si me sigues haciendo daño~
— No me importa si me ama o no lo hace. Jimin es de mi propiedad y ni Yoongi, ni tú, ni nadie, volverá a tocarlo jamás. Y si tengo que asesinar a Jimin para tenerlo para siempre conmigo, lo haré. — Susurró mientras inyectaba tranquilizante en el muslo de Hoseok quién chilló por el pinchazo. — Ahora deja de decir estupideces y deja que te desvista. Tu cuerpo lleno de sangre me excita. — Murmura recostando a Hoseok en la cama mientras se desvestía.
Hoseok justo ahora, gracias al tranquilizante, se volvió como un muñeco, sufriendo aquello que no podía evitar, y todo por el precio de proteger a Jimin.
Porque aquel sujeto estaba obsesionado con Jimin, y si tenía que asesinar a Yoongi y cortar a Jimin en pedacitos, lo haría. Porque sólo él, era el que quería merecer volver a estar con Jimin, pensando que lo amaba cuando en realidad, era una obsesión enfermiza.
¿Podrán escapar con éste nuevo acosador que salió de entre las sombras?
¿Yoongi está en peligro?
¡Gracias por leer!
Besos
[ Capítulo Corregido ✓ ]
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro