Título: El Príncipe Enamorado
Anime: Dragon Ball
Advertencia: ninguna

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Vegeta había estado entrenando duro en la Tierra después de la última amenaza a la que se habían enfrentado. A pesar de sus esfuerzos por ser el guerrero más fuerte, algo lo inquietaba. No podía dejar de pensar en Akima, la hermana de Goku. Ella había llegado recientemente a la Tierra para visitar a su hermano y había participado en algunas de las batallas. Aunque Vegeta nunca había pensado mucho en las relaciones antes, algo en la forma en que Akima luchaba y sonreía le había llamado la atención.

Una tarde, después de un intenso entrenamiento, Vegeta se encontró solo en el campo de batalla. Akima se acercó lentamente, con una sonrisa amistosa en el rostro. "Hola, Vegeta" dijo con calma. "¿Te importaría si entreno contigo un poco?"

Vegeta se sorprendió ante la solicitud, pero asintió con la cabeza. Comenzaron a luchar juntos, y Vegeta quedó impresionado por la habilidad de Akima. Su fuerza y agilidad eran impresionantes, y ella no se dejaba vencer fácilmente.

A medida que pasaba el tiempo, Vegeta y Akima pasaron más tiempo juntos fuera del campo de batalla. Compartieron conversaciones y risas, y Vegeta descubrió que disfrutaba de su compañía más de lo que estaba dispuesto a admitir. Cada vez que la veía sonreír, su corazón latía más rápido.

Un día, mientras observaban la puesta de sol, Vegeta finalmente reunió el valor para hablar. "Akima" comenzó con voz suave, "hay algo que quiero decirte." Se detuvo por un momento, buscando las palabras adecuadas. "He luchado toda mi vida, pero nunca he luchado por algo más allá de mí mismo. Ahora, te encuentras en mi mente constantemente, y no puedo evitarlo. Me gustas, Akima."

Akima lo miró con sorpresa, pero luego una cálida sonrisa se formó en sus labios. "Vegeta, también siento algo especial por ti," confesó. "No sé cómo explicarlo, pero desde que llegué a la Tierra, has ocupado un lugar en mi corazón

."

Vegeta y Akima se acercaron, compartiendo un beso bajo la luz de la luna. Así, dos guerreros que nunca habían buscado el amor encontraron algo más valioso que cualquier batalla: el amor el uno al otro.

A partir de ese día, Vegeta y Akima vivieron juntos en la Tierra, enfrentando los desafíos juntos como pareja. El amor que compartían era tan fuerte como sus habilidades de combate, y ambos descubrieron que había algo poderoso en permitirse ser vulnerables y enamorarse.