Un mes había pasado Eren cuidaba de los hijos de sus amigos pero aún así extrañaba trabajar a tiempo completo.

Jean: Ánimo bastardo, encontrarás algo.

Eren: Gracias caballo.

Marco: Eren, sabes mi jefa hace poco comento algo sobre una niñera, al parecer el dueño de la empresa necesita una.

Eren: ¿De verdad?

Marco: Si, le pediré a mi jefa los datos y te los mando.

Eren: Eres un sol Marco.

En cuanto los datos estuvieron a su alcance se dirigió a la dirección dada para la entrevista de trabajo.

Con sólo tocar la puerta una mujer castaña de lentes lo jalo de la mano.

Hanji: ¿Vienes por el trabajo?

Eren: ¿Si?

Hanji: Bien, vamos a ver como calmas un berrinche.

En la sala se escuchaban los gritos y llanto de una pequeña, con sólo verla Eren casi corre hacia ella.

Eren: ¿Te sientes bien?

L: ¡QUIEROAMIMAMI!

Eren: ¿Puedo acercarme?

L: Si.

Eren: Ven aquí cielito, mira tus ojitos tan hermosos, ya no llores.

L: ¿Qu-quen e-eles?

Eren: Me llamo Eren ¿Y tú?

L: Ucy

Eren: Un gusto Lucy.

Las horas pasaron y por primera vez la pequeña no hacía de las suyas, el castaño y la pequeña rubia jugaban cuando la niña giro su rostro hacia la puerta viendo a su padre.

Lucy: Papá.

Eren: Ve a saludar linda.

Lucy: No.

Eren: Lucybu.

La pequeña se acercó al azabache, este se mantenía en silencio viendo a la niña.

Levi: Lucy.

Ante el tono de voz de su padre la pequeña buscó refugio en los brazos de Eren.

Eren: Tranquila.

Levi: ¿Quién eres?

Hanji: Un ángel caído del cielo, es la nueva, perdón nuevo niñero de Lucy.

Eren: Soy Eren Jaeger.

Levi: Vayamos al estudio ahí firmarás el contrato.

Eren: ¿De verdad?

Hanji: Si, ven Lucy vamos a la cocina, después seguirás jugando con Eren.

Estando solos el azabache examinó al castaño, no dudó en preguntar algunas cosas.

Levi: ¿Estado civil?

Eren: Soltero.

Levi: ¿Hace cuanto ciudas niños?

Eren: Sofía tiene 3 , desde hace 2 años, empecé cuidando a la hija de unos amigos y estudie puericultura.

Levi: Bien, si la loca te escogió es por algo, firma.

Eren: Señor hay un problema.

Levi: ¿Cuál?

Eren: El sueldo.

Levi: ¿Es poco?

Eren: Demasiado diría yo.

Levi: ¿Cuánto estas acostumbrado a ganar?

Eren: Menos de lo que ofrece.

Levi: Hagamos algo, ya que cuidaras de mi hija a tiempo completo te pagaré está cantidad contando lo necesario, ya sabes vacaciones y esas cosas.

Eren: Bien, lo hago por su hija, a su edad está muy solita.

Levi: Lo sé.

Eren: ¿Y si lo sabe por qué no hace algo?

Levi: Mocoso, no abuses de tu suerte, mi vida y como conviva con mi hija no es tu problema.

Eren: Perdón, si me disculpan iré con Lucy.

Desde su estudio Levi podía escuchar la infantil risa de su hija resonar en la casa, desde que la niña había crecido jamás la había escuchado reír, tal vez el castaño era buena opción después de todo.