Eren besaba con cariño a Levi, seguían en la sala, de vez en cuando uno de los dos iba a ver a regalito, por esa noche parecía que su rebelde bebé les daría tiempo a solas.

Levi suspiro mientras paseaba sus manos por la espalda de Eren, el castaño también suspiro al sentir que las manos de su pareja se colaban por su camisa.

Levi: Te amo.

Eren: Te amo.

Se besaron una vez más, Eren se acomodó mejor mientras se quitaba la camisa, Levi veía atento las acciones de el castaño, mordió su labio cuando sintió a su adorado castaño sentarse a horcajadas sobre el, sus manos de inmediato se dirigieron a la cintura de el ojiverde, se volvieron a besar una vez más disfrutando de el momento.

La ropa estaba regada por la sala, los bajos gemidos de Eren eran una melodía perfecta a oídos de Levi, el azabache estaba facinado con tener debajo de el a su pareja.

Siguió embistiendo a un ritmo lento que prolongaba las cosas, un suspiro abandonó los labios de el castaño cuando sintió los labios de el azabache en su cuello, esa noche a la pareja se le fue en suspiros y palabras llenas de amor.