Levi sonreía, una hermosa chica esperaba por el, justo cuando bajaba la escalera pudo ver a Eren arreglado y sonriente.

Eren: Buenas noches señor.

Levi: ¿Por qué estas vestido así?

Eren: Se lo dije hace dos días, hoy tengo una cita.

Levi: No puedes salir, yo saldré, tienes que cuidar a Lucy.

Eren: No señor, usted me dijo que estaba bien, además, mi cita llego.

Levi sólo se quedó ahí con la boca abierta viendo como Eren se iba, para cuando reaccionó escucho el llanto de su hija.

De mala manera se dirigió hasta allá, al entrar su corazón se estrujo al escuchar  y ver a su hija llorando a mares sin saber muy bien qué hacer se adentró a la rosada habitación para tomar en brazos a Lucy, la niña aún medio dormida se aferró a él.

Levi: Tranquila.

Lucy: Eren.

Levi: No está pequeña, vamos duerme.

Lucy: Quiero a Eren.

Levi comenzó a arrullar a la pequeña, está comenzó de nuevo a cerrar sus ojos, cuando el azabache pensó que por fin la niña había vuelto a dormir está lloró de nuevo al sentir que la dejaba en su cama.

Levi: ¿No quieres dormir sola verdad?

Lucy: No.

Levi: Vamos dormiré contigo.

Algo dudosa la niña accede a que su padre se quede con ella, cuando por fin la pequeña se durmió Levi contacto a Hanji, la chica aún le esperaba y si Hanji accedía a cuidar de Lucy la podría ver.

Con la respuesta de Hanji lo unico que pudo hacer fue velar el sueño de su hija. Algo frustrado entró a su habitación, mientras se quitaba el reloj un mensaje llamo su atención.

En ese momento quería matar a Hanji y a Eren, había arruinado su noche, sin más remedio se metió en el baño para tomar una ducha con agua fría que duró 20 minutos, 20 minutos en los que imaginaba como matar al par de castaños.

Cuando por fin salió de el baño, se colocó la pijama, se metió en su cama y de mala gana cerró los ojos.

....

Eren: ¿Se lo habrá creído?

Hanji: Si.

Marco: ¿Quieren más galletas?

Hanji: Por favor.