━ CHAPTER THREE,
( plataforma 9¾ )

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HENRY ESTABA COMPLETAMENTE CANSADO de oír a Elizabeth exclamar cosas como: "¡Henry! ¿Sabías que el techo de Hogwarts está encantado para mostrar el clima del exterior?" Y él diciendo sarcásticamente: "Enserio, no me había dado cuenta."

El libro de Historia de Hogwarts, se había vuelto uno de los libros favoritos de Elizabeth. No salía leer mucho, a veces se aburría o perdía el interés rápidamente pero cuando encontraba un libro que realmente le llamara la atención lo leería más de 2 veces. Había encontrado unos libros en la biblioteca de su padre que hablaban más sobre la magia.

Elizabeth había decidido nombrar a su gata Ivy, la gata había mejorado, no seguía enferma y crecía demasiado rápido. Una vez había pillado a su gata comiéndose el hámster de Elliott y para evitar problemas con la única persona con la que había ensamblado una amistad decidió decir la verdad, Elliott era comprensivo, había dicho que estaba bien, realmente parecía que no le importara(Lio, como Elizabeth lo llamaba, había tratado de deshacerse del hámster, ya que temía que se le burlaran en Hogwarts) pero debía comprarle el helado más caro que hubiese en la heladería.

Estaba verdaderamente emocionada de poder ir a Hogwarts. Era como estar soñando.

Elizabeth estaba en su habitación, esperando a que su padre la llamara para que al fin pudiera irse. Miró otra vez su lista de Hogwarts para estar segura de que tenía todo lo necesario, y luego se paseó por la habitación sin saber que hacer.

Minutos después llego Henry para meter el baul al carro, tambien le habia entregado un billete del tren destino a Hogwarts.

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Se les había hecho tarde. Corrían por la estación de King Cross para llegar a la plataforma 9¾ a tiempo y no perder el tren. Allison no los había acompañado —eso alivio a Elizabeth un poco—, solamente eran Henry, Apolo y Elizabeth. Elizabeth sostenía a su gata en un solo brazo y Henry empujaba el carrito de equipaje donde estaba el baúl.

Elizabeth buscaba la plataforma 9 y 3/4, pero no estaba por ninguna parte. Mientras caminaban con rapidez Elizabeth chocó con un muchacho, los dos se disculparon al mismo tiempo. El muchacho se le había quedado viendo el billete de Hogwarts que Elizabeth tenía en la manos y rapidamente abrio la boca:

—O-oye, vas a..a Hogwarts? —Elizabeth asintió con los ojos entrecerrados. Este chico parecia de su misma edad, tenia cabello despeinado y negro. Usaba lentes. El chico alzó la mirada con nerviosismo.— ¡Yo también! Bueno puedes ayudarme, por favor. Es que no tengo idea de dónde queda la plataforma 9 y 3/4.

—¡Elizabeth, apurate! ¡Perderás el tren por estar haciendo amiguitos! —exclamó su padre molesto.

Elizabeth quería ayudar al muchacho pero su padre parecía demasiado impaciente. Entonces Elizabeth jalo la mano del chico y lo obligó a seguirla, el chico se quejó para que fuera un poco más despacio.

Alcanzaron al padre de Elizabeth, que estaba parado entre el andén nueve y díez.

Apolo observó la mano de su hija entrelazada con la del niño desconocido con cara de disgusto, prefirió no decir nada.

—Bueno, lo único que tienen que hacer es andar recto hacia la barrera que está aquí. No se detengan y no tengan miedo de chocar, eso es muy importante. Y para esto debes soltar la mano de mi hija, muchacho.

El chico se disculpó avergonzado y se separaron las manos. El chico aun asustado fue el primero en pasar, después Elizabeth junto a su padre, y al final Henry.

Una locomotora de vapor, de color escarlata, esperaba en elandén lleno de gente. Un rótulo decía: «Expreso de Hogwarts, 11h»

Lo había logrado.

El humo de la locomotora se elevaba sobre las cabezas de la ruidosa multitud, mientras que gatos de todos los colores iban y venían entre las piernas de la gente. Las lechuzas se llamaban unas a otras, con un malhumorado ulular, por encima del ruido de las charlas y el movimiento de los pesados baúles.

Pasó al lado de un chico de cara redonda que decía:

—Abuelita, he vuelto a perder a mi sapo.

—Oh, Neville —oyó que suspiraba la anciana.

El chico ya había desaparecido, y Elizabeth suspiro desilusionada. Pero quizas lo encontraria a Hogwarts.

Se oyó un silbido. Significaba que el tren estaba apunto de salir.

Apolo después de tanto tiempo la había abrazado. Elizabeth se había quedado estática, quería devolverle el abrazo a su padre pero algo dentro de ella la estaba deteniendo. Después se despidió de Henry con una simple sonrisa, rápidamente subió al tren sabiendo que de seguro la mayoría de los asientos estaban llenos.

—Hola, puedo sentarme? El tren está lleno...—dijo Elizabeth y de inmediato sus mejillas se sonrojaron al estremo, el chico de lentes estaba ahí sentado solo. 

El chico con lentes le sonrió.

—Puedes sentarte. Te ayudo con tu baul. —le chico la ayudo aponer su baul en un rincón del compartimiento.

Elizabeth se sentó en el asiento opuesto al chico. 

No lo había notado pero el chico tenía unos lindos ojos verdes. Cuando el chico se dio cuenta que ella lo estaba mirando, esta volteó rápidamente a mirar la ventana.

El tren comenzó a moverse.

Las casas pasaban a toda velocidad por la ventanilla. Elizabeth sintió una ola de emoción.

Estaban callados en un incómodo silencio.

—Gracias por ayudareme con la plataforma. Soy Harry, Harry James Potter.

—Soy Elizabeth Dianne Edwards-Newton....no quiero sonar grosera, pero que te paso en la frente. —de inmediato se arrepintió de haber dicho eso, de seguro sonó demasiado maleducada.

El chico la miró confundido. Ella era la única que parecía no conocerlo, y eso le agradó. Sonrió ligeramente y prosiguió a explicarles lo poco que sabía de su cicatriz.

Durante el poco tiempo que estuvieron hablando, Elizabeth trataba de evitar miradas con el chico. Le ponía un poco nerviosa, en su vida ningún chico le había sonreído(bueno solo Elliott, pero él no importaba).

La puerta del compartimiento se abrió y entró un muchacho pelirrojo con muchas pecas en la cara.

—Perdon ¿Hay alguien sentado ahí? —preguntó, señalando el asiento al lado de Elizabeth—. Todos los demás vagones están llenos.

Harry y Elizabeth negaron con la cabeza y el muchacho se sentó. 

Lanzó una mirada a Harry y luego desvió la mirada, como si no lo hubiera estado observando. 

—Eh, Ron.

Dijeron unos gemelos con cabelleras pelirrojas y tambien tenian la cara llena de pecas. 

—Mira, nosotros nos vamos a la mitad del tren, porque Lee Jordan tiene una tarántula gigante y vamos a verla.

—De acuerdo —murmuró Ron.

—Harry —dijo un gemelo—, y...ti no te conocemos —los dos gemelos le sonrieron a Elizabeth— somos Fred y George Weasley. Y él es Ron, nuestro hermano. Nos veremos después, entonces.

—Hasta luego —dijeron Harry, Elizbeth y Ron. Los gemelos salieron y cerraron la puerta.

—¿Eres realmente Harry Potter? —dejó escapar Ron. Harry asintió. 

—Oh... bien, pensé que podía ser una de las bromas de Fred y George —dijo Ron—. ¿Y realmente te hiciste eso... ya sabes...? 

Señaló la frente de Harry. 

Harry se levantó el flequillo para enseñarle la luminosa cicatriz. Ron la miró con atención. 

Elizabeth sentia que estaba sobrando en esa conversacion, asi que decidio recostarse en el asiento y mirar la ventana, decidio escuchar lo que hablaban.  

—¿Así que eso es lo que Quien-tú-sabes...? 

—Sí —dijo Harry—, pero no puedo recordarlo. 

—¿Nada? —dijo Ron en tono anhelante. 

—Bueno... recuerdo una luz verde muy intensa, pero nada más. 

—Vaya —dijo Ron. Contempló a Harry durante unos instantes y luego, como si se diera cuenta de lo que estaba haciendo, con rapidez volvió a mirar a Elizabeth.

—Y tu quien eres?

—Soy Elizabeth Edwards.

—Wow ¿Eres hija de Apolo Edwards? —la chica asintio— Tu padre es el mejor auror que puede existir, es muy respetado. El a atrapado a la mayoria de los seguidores de Quien-Tú-Sabes. Segun lo que salio en el Profeta, Lucius Malfoy acusa a tu padre por llenar su casa completa de serpientes venenosas, y en la habitacion del hijo de Malfoy, en la pared habia escrito con sangre "no te conviene que te vuelvas a volverse a meter con mi familia, Malfoy si no quieres que recuerde lo que paso y tu hijo termine pagando tus errores" Los Malfoy se lo merecian. 

—¿Cuando paso esto? —pregunto Elizabeth asustada y sorprendida. Ahora entendio lo que dijo Henry dijo "te aseguro que tu padre se encarga de él ". Enceserio que no sabia nada de su padre, ni lo que podia llegar hacer. 

—¿Son familia de magos? —preguntó Harry a los dos, ya que los encontraba tan interesante como Ron lo encontraba a él.

Elizabeth alzo los hombros en respuesta.

—Mi mamá era bruja, y mi papá mago pero son hijos de muggles.

—Eso creo —respondió Ron—. Me parece que mamá tiene un primo segundo que es contable, pero nunca hablamos de él. 

—Entonces ya debes de saber mucho mas sobre magia que nosotros. —dijo Elizabeth.

—Enserio no sabes nada de lo paso con tu padre?

—Toda mi vida me oculto que es mago.

—Oh —Ron decidio no seguir, sentia que la muchacha comenzaba a sentirse triste y giro a mirar a Harry, que miraba atentamente a Elizabeth— Oí que te habías ido a vivir con muggles —dijo Ron—. ¿Cómo son?

—Horribles... Bueno, no todos ellos. Mi tía, mi tío y mi primo sí lo son. Me hubiera gustado tener tres hermanos magos.

Comenzaron a hablar de las familias de magos, de los trabajos de los hermanos de Ron y mas. Elizabeth solo escuchaba atentamente.

Ron buscó en su chaqueta y sacó una gorda rata gris, que estaba dormida.

—Se llama Scabbers y no sirve para nada, casi nunca se despierta. A Percy, papá le regaló una lechuza, porque lo hicieron prefecto, pero no podían comp... Quiero decir, por eso me dieron a Scabbers.

Las orejas de Ron enrojecieron. 

—¿No te gustan las ratas?...La guardare. —y la volvio a meter es su chaqueta.

—Perdon, pero las detesto. Ademas no creo que seria buena idea que tengas a. Scabbers afuera, tengo una gata.

—No te preocupes yo detesto a la arañas. —dijo Ron, sonriendole.

Elizabeth volvio a apoyar su cabeza en la ventana. Miraba el hermoso paisaje.

Harry noto que la chica poco a poco iba cerrando los ojos, Ron entrecerro los ojos mientras via al chico sonreir.

Cuando quedo completamente dormida, Harry se levanto del sillon. Sostuvo la cabeza de Elizabeth para que no se golpeara con la ventana y la acomodo en el sillon haciendo que Ron se sentara en el otro sillon. No tenia una cobija pero la cubrio con su chaqueta.

—¿Te gusta Elizabeth? —se atrevio a preguntar el pelirrojo en susurro. El azabache evito la pregunta diciendo que si no guardaba silencio la despertaria— Pues parece que si. Sabes es raro que te guste una persona cuando apenas y la conoces.

╭ 𝗡𝗢𝗧𝗔 𝗗𝗘 𝗟𝗔 𝗔𝗨𝗧𝗢𝗥𝗔 ✧
┆ ✐; ❝HI, como estan? Creo que es un poco corto el capítulo. Por cierto ¿cuál es Casa de                   Hogwarts? Yo soy Hufflepuff . Por cierto, ya pusieron el libro en una lista de lectura publica, es que eso ayudaría que la historia llegara a mas personas...❞
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┆ ✐Recuerda; ❝ Espero que les guste y apoyen esta saga, por favor no sean lectores fantasmas, voten y comenten. ¡♡♡♡!❞
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Con cariño, Mary <3.