La oscuridad es otro mundo y sus ojos la salida.

Comenzó a caminar y solo la seguí, sus botas hacían un sonido entre las calles.

-¿Cuál es tu nombre?- pregunté de forma indiferente.

-Ya lo sabes Arturo- despidió tocando una puerta, un par de ojos se asomaron.

-¿Quién eres?- pregunto un hombre del otro lado.

-Lilith- respondí en voz baja, sonrió y el hombre cayó, Lilit abrió la puerta y quitó al hombre.

-Cierra la puerta - subió unas escaleras y solo mire la habitación era acogedora.

Tenían cables salidos por todos lados y un montón de piezas tiradas a un lado, no contaban con cámaras, nisiquiera electricidad, solo velas.

-Nesecito que entres a la red de operadores Warner- dijo finalmente son si capucha.

Parecía una persona normal con una pijama azul tomando té, recorrió el cuerpo del hombre y lo coloco en el sofá lo arropó y le dio un beso en la mejilla.

-No aré eso- contesté, respiro profundo.

-Sígueme tengo que mostrarte algo - subió las escaleras y comencé a seguirla.

Al abrir la puerta no distingi más que una luz una brillante, sus ojos, brillaban ante tal estela, los míos del mismos modo.

Un sol y una tierra, las paredes tenían pintura, árboles pintados en cada una, flores hermosas que solo había visto un par de veces pintadas a lo lejos, en recuerdos e imagines viejas.

-Mi vida es como un río, el agua emana una y otra vez y se queda ahí, el llanto no sale, el cambio entre mis recuerdos y la desesperación más haya de lo que hay, no más que muerte dolor y temor sin sentido, ya no hay vida luz, solo oscuridad fría y horrible oscuridad- esas fueron sus palabras.

-Buscas eso- no deje de verla, cada dibujo.

-¿Donde los viste?- pregunté.

-hay tantas dudas dentro del hombre,¿que es?, ¿De dónde viene?, jamás ve al pasado, pero que no puede regresar, construye y destruye el futuro es aquello de lo único de aquello de lo que se a adueñando un futuro que mato parte del pasado por qué fue fácil se adueñaron del solo para volver a repetir la historia, ¿Que es el hombre?, te daré la respuesta es aquel que vive de su alrededor y acaba con el, lo domina y cree que ya le pertenece solo por tener armas a su disposición, es aquello a si alrededor la composición dentro de el sus cambios y cada parte que desea eliminar de si mismo, aunque no lo borra del todo simplemente está dispuesto a no volver a retomarlo.

El echo de aver matado a la naturaleza de aver acabado con cada punto de nosotros a logrando que seamos menos hombres, a logrando que seamos menos nosotros, te puedo asegurar que has sentido que te falta algo, lo creo se que te falta algo no solo por los sentimientos eso también nos vuelve humanos, más has a nuestro alrededor la hambruna, cada parte por la que pasamos, vivimos en una pecera así lo elegiste.

Una vez que dejo de hablar no pude pensar en nada más solo la miraba y me deslumbraba, por aquello que tenía en las paredes flores, árboles , plantas , todo aquello que había dejado de ver desde hace años.

Como un acto desesperado al por qué me había llevado a ese lugar quera lo que tanto nesecitaba me pregunté que era lo que quería de mí no obstante antes de hacer alguna otra pregunta o tener una respuesta simplemente se acercó a mi, no sonrió no tenía ni una sola expresión facial.

Solo podía ver dolor en su rostro un dolor que simplemente resivia a casa paso que daba, uno indescriptible uno que recibía a cada paso que daba todo aquello que pintaba era lo que había dentro de ella.

Ella si tenía recuerdos no como los que había visto antes su nombre Lilith tal vez era ese y a pesar de que no lo negó antes cuando la llamé de ese nombre sabía que me acordaba de ella.

Era mucho más poderosa que cualquiera en este lugar, más poderosa que cualquiera dentro de este domo, tan enorme que acabo con cada uno de nosotros se dio la vuelta y simplemente respiró profundo.

-Nesecito que te conectes a mí los resultados de tu cuerpo son compatibles con los míos tu tienes algo que nesesito y yo conseguiré lo que tú nesecitas- la tomé del cuello, me miró sonriendo y me dio un beso, sus labios eran cálidos y suaves.

-¿Claro que somos compatibles?- se alejo de mi y la come de la cintura para volver a besarla, la acercaba a mi cuerpo, era calida y al mismo tiempo se alejaba.

El beso se convirtió en un momento en una hora, sus manos pasaban por mi nuca,sus labios no se separaban de los míos, sentia su respiración y el calor que emanaba dentro de ella.

La levanté y lleve al borde de una pequeña mesa, quite la capucha y desabroche de un solo golpe su vista estaba casi perdida, hundí mis manos dentro de ella, suspiraba y gemía, cada parte de ella se desconectaba junto con cada parte de mi, la tomé de cuello y levanté su cabeza, jadeaba, comencé a dejar besos en su cuello.

Me daba un sensación de querer más, de querer seguir, sus manos se perdían en mi cabello pequeñas, se enterraban en mi piel.

-No hay dolor- le dije entre suspiros introduciendo otro dedo dentro de ella.

-¿Quieres que siga?- pregunté mientras intentaba cerrar los ojos.

-Mirame deseabas una conexión no es así- me miró y sonrió.

Comencé a besar sus pechos, pasaba mi lengua por sus pezones eran suaves y calientes entre más probaba más deseaba.

Sus ojos brillaban de una forma que no había visto nunca, comenzó a tocar, empezó por mi pecho, y termino en mi cinturón desabrochó con cuidado, no podía dejar d verla o tocarla, pasar de tenerla frente a mi, tenía razón había una conexión rara pero la había, la tomé de ambas manos con una sola mano.

Deje de tocarla para penetrarla yo tenía el control de su cuerpo y ella me controlaba con la mirada con cada gemido que salía de su boca mientras que la pequeña mesa en la que se encontraba no dejaba de tambalear, su cuerpo quedo junto al mío, nuestras miradas brillaban sus labios no saltaban los míos y mi mirada no dejo de perderla de vista.