8: Kyubi
Se había alejado del rubio para así no ser un estorbo en su sueño de convertirse en Hokage, además de ello, a las personas cercanas a él siempre les pasaba lo peor.
Pensó que lo había logrado cuando él rubio ya no insistía en estar a su lado, sabía que Naruto se rendiría con él y era lo que quería, pero aún asi no había dejado de doler.
Aceptó ser el anbu de su sensei ya que así tendría la oportunidad de proteger a Naruto algún día, de estar a su lado al menos desde las sombras.
Pero vaya que estaba equivocado acerca de que el rubio menor se detendría, y grande fue sorpresa al saber que era su compañero.
Menma nunca había llamado su atención, pero desde que los presentaron presentía que algo raro pasaba con él.
Aún se sentía estúpido al no notar que era Naruto, tenía que decirle a su sensei, pero aún así no lo hizo..
No lo hizo cuando volvió a acercarse a él..
No lo hizo cuando volvieron a pasar tiempo juntos..
Y no lo hizo cuando ambos empezaron una relación a escondidas.
Sabia que era peligroso, todas las personas que quería o estaban a su alrededor sufrían.
-¿En qué piensas?. —Le dijo el rubio rubio con una sonrisa resplandeciente.
Se encontraban haciendo una misión y en un punto de regreso a la aldea se habían detenido en un prado a petición del rubio, ahora se encontraba acostado en sus piernas mientras este jugaba con su cabello.
Ahora que veía a Naruto desde ese ángulo no sabía que era más brillante, si su rubio o el sol..
Definitivamente Naruto.
-No quiero perderte. —Menciono sin darse cuenta.
-¿A que viene eso?. —Le pregunto con confusión, imaginando que Kakashi se refería al trabajo de anbu ya que siempre estaban en constante peligro. —No me pasara nada. —Le dijo con una sonrisa. —Y si algo me pasa, sabes que no sería tu culpa ¿Verdad?
-Si..
Llegaron a la aldea un día antes de lo que se suponía, apenas estaba por meterse el sol así que decidieron ir a dejar su informe al Hokage.
Entraron y el Hokage les sonrio, justo cuando Kakashi estaba por hablar una azabache entró al despacho sumamente histérica.
-Hokage-Sama, alguien ha secuestrado a Kushina-San. —Mikoto había entrado al despacho del Hokage sin siquiera tocar, estaba alterada y preocupada por su amiga.
-¿Como pasó?. —Le pregunto Minato parándose de su asiento de inmediato.
-Estábamos tomando el té, alguien entró a mi casa y nos atacó, de un momento a otro pareció que algo la absorbió y se la llevó, después perdí el conocimiento. —Relato Mikoto con lágrimas en sus ojos.
-Kakashi busca a Naruto, talves el pueda comunicarse con ella por la conección del kyubi. —Demandó el Hokage. —Menma tu.. —Se detuvo al ver que su anbu ya no estaba. —¿Dónde fue?
Minato parecía sumamente tranquilo pero era claro que estaba enojado, y algo desesperado por su tono.
Kakashi al no ver a su compañero ahí se preocupo, Naruto al tener chakra del kyubi podía comunicarse con Kushina su portadora, era seguro que el rubio menor haya salido a buscarla.
-Sensei. —Sin más que hacer, y con el miedo de que al rubio menor le pasara algo, confesó. —Menma es Naruto, el debió de ir tras Kushina-San..
Minato no salía de la impresión, iba a teletransportarse hacia Naruto, pero un claro rugido lo detuvo.
Él y Kakashi pudieron ver claramente cómo enmedio de la aldea aparecía el kyubi.
-Kakashi ve y ayuda a evacuar la aldea..
Cuando escucho que su madre estaba en peligro no tardó en comunicarse con Kurama, él le había dicho que alguien lo había sustraído de su madre y que Kushina no se encontraba nada bien.
Antes de perder su completa conección con Kurama este le dijo donde estaban, él de pequeño había exparsido kunais por todos los alrededores de la aldea para aprender el jutsu de su papá así que fue fácil llegar hasta ahí.
Cuando llegó corrió hacia la dirección que le había dado, y al ver a su madre sintió que su alma salía de su cuerpo, corrió hasta ella ya que estaba atada con unas cadenas y la desató.
Se acostó con ella en el césped mientras la abrazaba con fuerza, ni siquiera se había dado cuando las lágrimas empezaron a salir de sus ojos, quería gritar por la importancia que sentía cuando le llamaba y ella no le respondia.
-Menma.. —Escucho un murmullo débil que lo trajo a la realidad.
-¿Mamá?. —Murmuró quitándose la molesta mascara. —Soy yo, Naruto.. Ya estoy aquí, no dejaré que alguien mas te haga daño. —Le prometió, mientras sentía como su madre le acariciaba la mejilla alejando las lágrimas y le daba una sonrisa algo débil.
Naruto se asustó cuando su madre empezó a cerrar sus ojos, quería que todo fuera un mal sueño.
-¿Mamá? ¡¿MAMÁ?! ¡Por favor no me dejes!..
Sintio un apretón en su hombro y al voltear y ver a su padre con los ojos llorosos supo que su madre ya no estaba con ellos, ya no volverían a escuchar sus regaños y su casa no volvería a oler a pastel de frutas recién horneado..
-Es una lastima, pero ni siquiera un Uzumaki sobrevive a la sustracción del kyubi. —Menciono una persona con una mascara extraña y una capa negra que le cubría el cuerpo.
No tenía que ser experto para saber que él era quien había atacado a su madre, la dejó recostada y se levantó para desgarrar la carne de esa persona con su katana.
-Naruto yo me haré cargo. —Habló su padre, llamando su atencion. —Ve y saca al kyubi de la aldea.
-P-pero.. —Volteo a ver el cadáver de su madre, no quería dejarla ahí, no podía..
-Yo iré en un momento..
Aunque también quería darle su merecido a la persona con mascara, tenía que poner a salvo la aldea de Kurama y no podía llevar a su madre con él..
Sin más dejo un beso en la frente de su madre, haciendo que Minato sintiera un hueco en el pecho y se fue de ahí.
Al llegar a la aldea todo era un completo caos.
No podía creer lo que veía, todo la aldea estaba destrozada y el causante de esto era Kurama, sabía que el zorro no haría algo así.
Al momento de llegar hasta él noto que estaba siendo controlado, intentó acercarse y una ves logró tocar un poco del pelaje naranja se teletransporto lejos para que no causará más daños a la aldea.
Cuando ya estaban en el bosque se alejo unos cuantos pasos de Kurama y cayó al piso por el cansancio, nunca había teletransportado algo tan grande con él.
Vio como Kurama juntaba una gran cantidad de chakra en su boca y la apuntaba hacia su dirección, cuando ya estaba listo para lanzarle un kunai y mandarla a otra parte antes de que lo atacará esta se desvío hacia el cielo, noto como los ojos de Kurama volvían a su color y se quitaba aquel carmín que era tan característico de los Uchihas.
-Volviste a la normalidad.. —Murmuró Naruto con gracia al sentir que casi moria. —Quiere decir que mi papá pudo vencerlo..
-Lamento el casi matarte cachorro. —Le dijo con gracia Kurama.
El rubio simplemente se acercó hasta él y lo abrazo sintiendo el pelaje suave, causando que Kurama se abochornara o eso al menos hasta sentir como su pelaje se mojaba y escuchar unos hipidos.
-Ella no sobrevivió Kurama. —Murmuró sin poder contener más su llanto.
Minato llegó hasta donde estaba su hijo y grande fue su sorpresa al verlo abrazado del kyubi
-¡NARUTO! ¡Aléjate de él!. —Grito su padre al llegar donde estaba.
-¿Papá?. —Preguntó mientras lo veía, traía en brazos a su madre así que corrió hasta él y no pudo evitar romperse de nuevo.
Kurama les dio un momento, sintiendo un poco de empatia hacia los dos rubios quienes lloraban la pérdida de la pelirroja.
Una ves ambos se calmaron vieron al gran zorro frente a ellos, quien sólo se había acostado para darles privacidad.
-Él no nos hará nada papá, Kurama es bueno. —Le dijo el rubio con una sonrisa dirigida hacia el zorro.
-¿Kurama?.. —Murmuró Minato viendo a este.
-Tcz.. Hey mocoso, te dije que no andes diciendo mi nombre a cualquiera. —Le regaño, recibiendo un "lo siento" de parte de Naruto. —Como sea.. —Les dijo viéndolos de soslayo y sin poder evitarlo.. —Lamento su perdida cuarto..
Minato se sorprendió por ello pero aún así asintió, aunque Naruto dijera que el kyubi no haría nada, no podían dejarlo libre por ahí ya que podía volver a ser usado para lastimar gente, y al ver al zorro noto que él lo sabía.
-Solo si es Naruto.. —Le afirmó Kurama soltando un bufido, odiaba que lo enserraran, al menos esta ves quería elegir a su jinchuriki.
-Yo que.. —Murmuró el rubio sin entenderlo, pero al ver el rostro de su padre todo tenía sentido. —Por favor no.. No quiero que me dejes tu también.
Naruto se aferro a su ropa con fuerza, sabía que su papá nesesitaba sellar a Kurama, pero también sabía que ese sello se llevaba la vida de quien lo hacía.
Ya había perdido a su madre, no quería que también su padre lo dejara solo y sin más las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos.
-Siempre has sido tan obstinado, tanto que cuidaste de mi todo este tiempo y ni siquiera me di cuenta..—Le dijo Minato con gracia limpiando sus mejillas.—Dicen que la primera obligación hacia nuestros hijos es hacerlos felices, espero que tu mama y yo hayamos cumplido ese mandato contigo..
Sin mas Minato puso una barrera entre ellos y aunque quiso romperla era tarde ya que su padre había hecho el sello, solo le quedó esperar a que esto acabará y desmayarse por el dolor del sello, el cual fue poco comparado a todo lo que sentía, había perdido todo en menos de una noche.
Un peliplata llegó a sus recuerdos por inercia.
Si, talves no todo..
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