Capítulo 14: Lío
Mis manos están en su cintura y ella se aferra a rodear mi cuello. ¿Qué está pasando?
—¡Diana! ¡Ya! —la alejé con notorio nerviosismo, ella sonríe cubriendo su labio inferior con el dedo índice— ¿Qué fue eso?
—Un beso —por todos los santos, claro que lo fue, pero a eso no le refería—. ¿Nunca habías besado a alguien? —creo que no estoy respirando por su cara guasona— Ay, qué lindo, no te preocupes —mi espalda está contra la pared, ella se acercó recorriendo con sus dedos mi clavícula haciendo como si caminaran a mi cuello—, podemos practicar cuando sea y cuanto tiempo quieras.
Instintivamente mi mano fue al pomo de la puerta a abrirla de inmediato y salir, por lo menos corriendo. ¿Qué digo correr? Huyo de una vez mientras escucho a Diana gritar mi nombre.
Puedo decir que estoy asustado recorriendo los pasillos, recibo las miradas confusas de los alumnos en mi pasar, pero poco me importa cuando me dirijo a doblar la esquina queriendo entrar al baño. No puedo estar hecho más manojo de nervios, pero vaya que sí después de chocar con quién menos quería ahora haciendo que cayera.
—Me-Melody —mi voz me jugó mal.
—¡Trevor! —y para empeorar, Amanda está con ella— Fíjate por dónde andas.
—Lo siento —la ayudé a pararse, se preocupó al verme tan alterado—. No es nada —me excusé pasando por en medio de ambas entrando al sanitario para echar agua en mi cara.
Esto es malo, muy malo. Demasiado malo, si Diana dice algo todo se puede malinterpretar. Y no quiero que Melody lo malentienda sobretodo.
—Hey —hice un chillido cuando Brandon tocó mi espalda—. Pero bueno, hombre, ¿qué te pasa? Me encontré a Amanda y a Mely afuera preocupadas por ti. Tu chica quería entrar.
—Tengo problemas —su cara se pintó desconcertada—. Hablamos en casa, sólo diles que por el momento no puedo hablar —él asintió y se marchó.
El resto del día estuve pensante todo el tiempo, hubo profesores que llamaron mi atención, pero es que simplemente no podía tenerla en otro lado que no sea en Diana y ese momento tan bochornoso. Me robó mi primer beso, y no sé con qué motivo se atrevió a acercarse de esa manera a mí, pero en serio me irrita de gran manera.
¿Si Melody se llega a enterar podría no querer nada conmigo? Pensará cosas extrañas y que no me gusta.
Gruño con las manos en la cabeza por estar escuchando las carcajadas de Brandon. Estamos en casa, en mi habitación sentados en mi cama. Le cuento mi dilema y mi preocupación de perder a la chica que me gusta y este tarado se burla de mí.
—Te estás ahogando en un vaso con agua —seca sus lágrimas, pero su risa no se calma—. ¿Por qué piensas que Mely te va a rechazar porque una tipa loca te besó a la fuerza?
—Porque Diana y ella se llevan mal, esa chica siempre la molesta.
—Hermano, en verdad, te estás creando una historia bizarra en esa cabeza. No tienes de qué preocuparte, sólo sé sincero con Mely, explícale todo y ya.
Resoplé llevando mi cuerpo a caer en la cama tapando la cabeza con la almohada. Mi interior se siente perturbado por esto, como si de pronto el fabuloso día de playa que por mucho tiempo llevara planeando se viera echado a perder por la tremenda lluvia de dudas y preocupaciones.
Me puse a pensar en las citas que he tenido con Melody, todo el tiempo me siento en las nubes con ella y sin más sonrío como tonto. El pensar que se pueda enfadar porque me besé con Diana me causa mucho mal.
Es verdad, no busqué besarla sino que fue Diana la que a la fuerza me besó, pero me siento un infiel.
De pronto la puerta fue tocada por mi mamá diciendo que la comida estaba lista.
—¿Qué pasó? —preguntó recostada del marco de la puerta con los brazos cruzados. Cuando estaba por contestar con un nada, Brandon salió de soplón.
—Trevor se siente que ha faltado al voto sagrado de fidelidad porque una chica loca casi lo viola —dijo riendo.
¡¿Pero qué clase de explicación es esa?! Lo pateé habiendo hecho que cayera de la cama. Mamá me regañó por mi acción y luego se rompió a reír a carcajadas cuando Brandon terminó de explicar todo lo que en verdad pasó.
—Eres tan dramático como tu padre —sentencia mientras bajamos las escaleras hasta la mesa.
—¿Que yo qué? —preguntó papá terminando de poner los platos.
Nuestra cena en familia terminó siendo el análisis de mi situación amorosa y dilema mental de toda la estructura fantasiosa que creé. Pedí ansioso cambiar de tema, no quería seguir sintiéndome un pusilánime esta noche. Fue entonces que en la charla sobre el próximo trabajo de papá surgió lo que no me esperaba y más alegría me daba.
—¡¿Vas a trabajar en NightBlack?! —bramé asombrado parándome abruptamente de la mesa con ambas manos en la madera.
—Sí —papá y los demás me miran impresionados por mi exaltación, me senté de nuevo—. Haré las fotos promocionales de su fiesta de Halloween y estaré retratando el evento. ¿Por qué?
—Ese club es la fascinación de Melody, sobretodo por la DJ principal de ahí.
—¿Y por tu repentino ánimo quieres pedirme algo?
—¿Podrías conseguir que su ídolo le mande un saludo, vídeo o algo? Por favor —creo que soné muy desesperado, pues rió diciendo que haría lo que pudiera.
Poco después de acabar la cena me dediqué a pasar el tiempo en mi habitación, imagino la felicidad de Melody cuando le diga (si es que mi padre lo consigue) que tendrá un saludo de esa mujer que tanta ilusión tiene cuando la ve a través de las transmisiones de ese club.
Y entonces, como si de telepatía se tratase, o tal vez el universo te da lo que piensas y atraes con el anhelo, Melody me mandó un mensaje preguntando si me encontraba bien porque se quedó preocupada por mi errática actitud después del receso.
Trevor: Estoy bien, en verdad. No tienes nada de qué preocuparte.
Mandé el mensaje, luego un emoji sonriente con una gota de sudor en la frente. ¿Por qué se lo envío? Eso me hace ver culpable de algo, pero no debería sentirme así, no he hecho nada malo.
Ay mierda, ella está escribiendo.
Melody: ¿Seguro? Parecías muy tenso y angustiado. ¿El maestro de Inglés te regañó por algo?
No sé qué responder, todo fue una mentira de Diana.
Trevor: Sólo que necesito esforzarme más en la materia.
Eso no es del todo mentira, para su materia soy un asco, pero venga que puedo saber sobre cómo leer y hablar, pero que no me pregunten cuál es singular y cuál plural además del presente pospretérito y todo eso. Ya sé leerlo y hablarlo, ¿no se pueden conformar con eso?
Y más temprano que tarde Melody me dijo que me iba a enseñar.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro