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Padre me ha creado a mi y a mis hermanos, los siete protegemos su trono, aunque en realidad no sabemos de quién; mi lugar favorito siempre será el jardín, el paraíso de dios, me encanta escuchar esa cosa blanca llamada agua bajar por las enormes rocas y deslizarse entre mis manos cada que decido tocarla; un lugar de paz y tranquilidad, los llamados árboles siempre haciendo de las suyas, me encanta ver cómo pedazos de estos caen al suelo.

-Veo que te la pasas muy bien por aquí Damián.

-Asi es padre, este lugar es muy tranquilo.

-Sí así es, pero debo pedirte un favor, te pediré que ya no vengas por aquí.

-Pero... Se puede saber porque das está orden?

-Eh creado algo últimamente y al parecer este lugar puede ser su hogar.

-Es algún animal de los que me avias dicho que experimentarás como acompañantes?

-Es aún mejor, lo llamaremos mujer, un ser que pueda procrear a más vida.

-El primero que procreaste lo llamaste hombre, un ser casi idéntico a nosotros y lo terminaste matando.

-Si, pero esta vez será distinto, este ser tiene que obedecer a todos, solo servirá para procrear vida y servirnos a nosotros.

-Entonces la puedo conocer?

-Claro, de echo se encuentra en este sitio, la he traído conmigo.
Lilith pasa por favor

Mi padre hizo pasar a la mujer, al verla me quedé sorprendido cuan belleza había ahí, no creo que sea buena idea dejarla aquí, supongo que solo es una prueba de él.

-Bienvenida al paraíso de mi padre, espero te sientas cómoda.

-Calla Damián, así no debes de hablarle, eres su superior tienes que mostrar postura

-Lo siento mucho señor -hizo reverencia-

-Pero no tienes porque disculparte, el que habló fui yo, no tú.

-Damián!!, dije silencio, sal de inmediato!.

Mi padre está muy raro, supongo que no quiere cometer el mismo error que las veces anteriores.

Los días pasaban y no fui más a ese lugar, en el palacio siempre convivían mis hermanos pero varias veces a faltado uno de ellos, Seungmin quien se encuentra en el purgatorio, está mañana lo ví en la entrada del jardín, supongo que sigue ahí, pero porque él tiene permiso de entrar y nosotros no?.

Eso me causa demaciada curiosidad así que sin más tengo que ir a investigar.

Al llegar a la entrada me doy cuenta de que realmente sigue ahí, está con Lilith, pero no precisamente hablando; me adentre sin que me notarán y lo que vieron mis ojos no se lo deceo ni al peor enemigo de mi padre.

Lilith estaba colgada de un árbol con cadenas en las muñecas, los pies también las traían con grandes pesas dando asta el suelo, mi hermano la estaba torturando tanto que ella no hacía ningún movimiento, su cuerpo estaba demacrado por completo; junto al lago ahora un tono rojizo estaban los seres que mi padre avía dicho que ella tendría, todos muertos, mi hermano los estaba depedasando y dándole de comer.

Nunca había visto esto, solo se que esto es muy malo, ella es como nosotros tiene inteligencia, tiene sabiduría, porque tenemos que tratarla de esa manera, yo la veo como compañera no como juguete para pasar el rato, eso de darle de comer a sus propios hijos es repugnante; con odio y desprecio fui hacia mi hermano levantando la voz.

-Por qué haces eso?, padre dijo que no entremos a este lugar!!.

-Como te atreves a levantarme la voz, y ensima llegas y entras como si tuvieras el permiso, como ostras llegar aquí y gritarme! -dijo enojado-

-Eso yo te lo pregunté a tí, padre tiene que saberlo.

-Que tengo que saber Damián? -dijo llegando-

-Porque Seungmin hace esto, me dijiste que sería una compañera nuestra, como explicas esto.

Mi padre no dijo nada, simplemte se acercó a mi y me dió una bofetada.

-No tienes porque levantarme la voz de esa manera!, tu no tienes el derecho de reprocharme algo, todo lo que yo hago y ordenó está bien y nadie lo cuestionará.

-Pero... Padre, ella tiene conocimiento en todo, es igual a nosotros.

-Si tanto la defiendes, por qué no te la llevas.

-Eso haré, así tenga que renunciar a ser tu hijo!!.

Esas palabras estuvieron muy fuera de lugar, Seungmin no cuestiono nada y mi padre tampoco; tome a Lilith en mis brazos, le corte las cadenas y la cargue para después salir del jardín.

...

-No desviste hacer eso, te has metido en problemas con tu padre por culpa mía.

-Mi padre está mal, no dejaré que mueras como lo hizo con mi otro hermano.

-Hablas del quien llamó hombre?

-Si, hace varios siglos mi padre procreó a un ser como tu y como yo, y lo llamó hombre, él se encargaría de reinar el mundo de tierra bajo las órdenes de mi padre; se hizo nuestro amigo y jugando dijo unas palabras que a él no le gustó nada.

-Termino matandolo solo por eso?

-Asi fue, y creo que a mí me pasará lo mismo.

-Damián, -entro Félix demonio mayor- padre te está buscando, que hiciste?, está ves creo que no podré ayudarte.

-No tienes porque hermano, yo me protegeré solo.

Termine de curar las heridas de Lilith, Félix salió rumbo al palacio donde tambien me he de dirigir ahí, realmente no estoy preparado para nada, pero ya no dejaré que tome las decisiones por mi.

...

Al llegar al palacio todos mis hermanos estaban aquí, mi padre se veía un poco molesto pero eso no me detendría.

-Te admiro mucho Damián, tienes la determinación de tu padre, pero revelarte ante él fue un grave error.

-Ya estoy cansado de tus decisiones, dices que haces el bien pero porqué todos debemos obedecer, nos pides que seamos libres pero siempre nos pones límites.

-Yo soy su padre y tienen que obedecer!

-Pero esa no es libertad para nosotros!, nosotros también queremos hacer muchas cosas, salir del palacio, ir al lugar de la tierra, jugar con mis hermanos...
Siempre nos tratas como soldados y esclavos, nunca nos has visto como hijos, dime tú, que padre hace que su madre se coma sus propios hijos!

-Ella fue un experimento y al parecer fracasado no sabe servirnos tenía que castigarla!

-Yo no quiero vivir de esta manera, quiero que todos seamos iguales, que nos adoremos a nosotros mismos no a ti!

Esa fue la gota que derramó el vaso, un silencio profundo se escuchó dentro del palacio, nadie cuestiono nada y mi padre se quedó callado, mis hermanos que decían serlo me tomaron entre todos y amarraron hacia una pared.

-Eres una desgracias para mi reino y para mí trono!!. -dijo molesto-

-Pero padre, Lilith es como nosotros, todos merecemos toda esta riqueza por igual.

-Ella es una mujer, no puede estar a nuestro rango, siempre será inferior a nosotros y ustedes a mi; ellas solo servirán para procrear más vida.

-No crees que esto es injusto?, podemos ser diferentes a ellas, pero también tienen la capacidad que nosotros, eso no las hace inferiores.

-Callate!, -tomo las alas de Damián y las partió a la mitad- por revelarte ante mi, te echo de mi reino, caminarás por las tinieblas y te guiarás con el fuego que siempre quemaran tus pies por desobedecer.

-Mi propio padre me ha echado de mi hogar? -dije triste- qué crees que dirán cuando esto suceda?

-Dire que te has revelado y me quieres quitar mi trono, así nadie te protegerá, y todos estarán en tu contra.

-No puedes hacerle esto a tu hijo, solo por decir que todos somos iguales, y merecemos el mismo respeto que tú.

-No quiero escuchar más tus insultos!.

Salió de la sala, y lo que vendría sería peor que una tortura para mí ser; mis hermanos no perdonan nada y todos sabíamos eso.

Jimin Astaroth, mi hermano más pequeño y despiadado tomo mis medias alas y las arranco por completo, mis hermosas alas blancas quedaron destruidas, la sangre no tardó en brincar por cualquier lugar, otro más tomo mi rostro sacando mis ojos uno a uno y cortando mi lengua, para que según ellos dejaran de escuchar mi voz, pero eso solo los ensordecido más por los gritos que me causaban.
Seungmin no dudo en castigarme con su látigo, dando uno tras otro y riendo por lo que veían sus ojos.

Esto es cruel, una realidad que siempre se ha visto muy bien, mi padre me avía quitado mis alas, lo que significaba que puedo morir.

-ya se divirtieron, por que no terminan con esto de una vez?

-No Damián, no podemos matarte padre te tiene un castigo más.

-Cuando algún experimento falla, siempre se desase de él, no entiendo para que más me quiere aquí.

-Muy simple y ya te lo dijo te desterramos al mundo de las tinieblas así aprenderás a nunca más sobrepasar los límites.

-Jimin hermanito, yo sé que tú me comprendes miy bien, sabes que esto está mal.

-Yo solo se que mi padre me da muchas cosas por obedecer y no necesito más.

-Bien, solo espero que nadie se arrepienta de esto.

Todos se burlaron de mi, estaba claro que ya no sería parte de su vida, ya no son mis hermanos; estos me tomaron de las manos y arrastrando mi cuerpo llegamos al límite del palacio, sin más me tomaron y arrojaron al mundo de las tinieblas, escuché la voz de Lilith gritando mi nombre pero no supe nada más.

Mientras iba callendo mi cuerpo se dormía mutuamente, no sentía más el dolor, como si de un sueño se tratase, mis ojos no se regenerarian durante unos días, así que desde ya no puedo ver nada, mis manos las siento húmedas y no es presidamente agua como la que cae en el jardín, mas bien es mi sangre derramada por las cadenas en mis manos, duelen tanto que me estoy acostumbrando al dolor; se que no falta mucho para que mi cuerpo caiga en el suelo frío, pero yo no siento nada, simplemente el sueño me mata y mi conciencia se borra poco a poco.

...

-Damián!!... Damián!
Despierta pror favor!!...

-Lilith eres tu?

-Asi es Damián, soy yo

-A ti también te desterraron del palacio?

-No yo simplemente salte cuando tú también caías a este lugar.

-Pero.. por qué hiciste eso?, no tenías por qué hacerlo.

-Dios me dijo que si saltaba vería morir a mis primeros cien hijos a las veinte horas de nacidos y mis hijas a los 3 días; no lo pensé y decidí no dejarte solo en este lugar, ya estoy acostumbrada a esto, puedo aguantarlo.

-Eres muy valiente gracias por sacrificarte por mi.

A los tres días mi vista mejoro un poco, mis pies siempre ardían y Lilith empezó a sufrir su masacre con sus hijos, estuve rodeando todo el sitio lleno de tinieblas que en poco tiempo lo empeze a ver cómo un hogar, las risas de mis hermanos y las palabras de mi padre siempre estaban presentes en mi mente lo que me hacía odiarlos día a día.

Por fin después de un gran tiempo decidí vengarme, no estoy de acuerdo con el dictamen que a dado mi padre, ahora mi hogar son las tinieblas y yo seré el rey de este lugar, dónde cada ser que llegue aquí, será y hará lo que más le plasca para vivir su vida.

Lilith me ha acompañado, ella también tiene claro su objetivo y es vivir su vida sin que esté detrás de alguien, ella puede sola y puede hacer lo mismo que yo, no hay competencias, no hay reproches todos nos apoyamos en todo momento.

...

Los siglos pasaban y mis alas por fin están de regreso, solo que ahora van muy bien con mi personalidad pues son negras, hermosas y brillantes, me gustan mucho más que las otras y está ves las cuidare para que nadie pueda arrancarlas.

Lilith es mi compañera y está ves tendrá a su primer hijo que pueda vivir, mi reino se a echo popular entre otras criaturas que han llegado a vivir por aquí, en pocas palabras estamos creciendo como hogar.

-Damián, hay alguien que quiere verte en el mundo de tierra.

-A mi?, no conozco a muchos de la tierra pero bueno si son buenos entonces son bienvenidos.

Decidí ir a la tierra y ver lo que menos esperaba así es, eran mis hermanos mayores pero no entiendo el porque de su visita.

-Vaya hermanito si que has echo tu vida como tú querías.

-No tengo nada que ocultar, pero díganme qué los trae por aquí?

-Damián quiero que sepas que la tierra también es nuestro territorio y está prohibido que tus amenazas e incoherencias lleguen a este lugar, por órdenes de Dios sabemos que tendrás un hijo con Lilith, lo cual significa que tenemos que sacrificarlo en estas tierras para el bien de todos.

-Que?!!. Están locos?!, yo no sacrificaré a mi hijo!!.
Es una estupidez que ustedes mismos pongan esas reglas estúpidas y tengas que cumplirlas solo para satisfacer la sonrisa de su padre.

-Es una orden, una ves nacido ese ser vendremos de inmediato.

Sin decir más se marcaron, cómo pueden tener un corazón tan maldito, dar la vida de mi hijo para seguir en paz es algo que no permitire, porque yo si estoy en paz, y son ellos que me reprochan todo lo que hasta el día de hoy he conseguido.

Tengo que proteger a mi propio hijo, él no puede morir, solo faltan unos cuantos días para su nacimiento y yo me encargaré de que esté bien.

Los días pasaron Lilith y yo tendríamos un plan, y era que ella se fuese a otro lugar más recóndito de las tinieblas ahí criara a nuestro hijo y yo detendré a mi padre para que no les haga daño.

Esa misma tarde que Lilith se marchó, ellos llegaron con hambre de ver sangre y sin más empezaron a buscar por todo el lugar.

-Donde está?!, más vale que lo entregues.

-No lo haré Jimin, entrego mi propia vida por la de aquel primogénito mío.

-padre dijo que teníamos que matarlos a todos, así que te mataremos y después iremos por ellos.

-Siempre supe eso, que no quieren verme feliz con la decisión que tome pero gracias a mis rituales ya nadie nos hará daño y siempre reprochare lo más preciado de su padre si llegan a matarme.

-Tu no lo desides, pero tú muerte está asegurada.

Sin decir nada más, me tomaron y cortaron otra ves mis hermosas alas negras, pero está ves no por completo, tomaron mi vida pero no mi espíritu, cuando por fin mi cabeza tenían en manos un ritual que yo prepare se desató, este consiste en que ya no hay portales de la tierra a las tinieblas ni de el palacio a la tierra, mis hermanos se quedarán en las tinieblas para siempre, pagando cada uno de sus pecados.
Tal ves optuvieron mi cuerpo, pero no mi espíritu, reprochare todo lo que mi padre pueda crear, si no me dejó ser feliz, sus creaciones tampoco lo serán, mi venganza será eterna igual que la vida de él.

Mi hijo Lucifer ahora reinará las tinieblas por mi, mientras yo me quedaré aquí en la tierra para divertirme un poco, porque eso es lo que él quiere; yo no pude vivir en paz y el tampoco jamás lo hará.

Una vida por la eterna desgracia...

                                                    Fin.

Gracias por llegar al final, una historia para #bordescarnival2023, espero les haya gustado voten y síganme para más✨