Narra Ji Min

Me sobre salte al escuchar varios gritos fuera de la habitación y es que me encontraba en la pequeña cama que teníamos Jeon y yo, y no precisamente era para dormir.

Jung Kook se estaba bañando y yo solo yacía con un pantalón de chándal y mi torso al descubierto, me levante de la cama y me puse la camisa de Kook la cual me queda muy grande.

— ¡Dame mi cargador, idiota! — Dios, no puede haber un tan solo día en el que no existan los gritos.

— ¡Appi, Ryu me está insultando! — Bien será mejor que intervenga antes de que corra sangre.

Abrí la puerta de mi habitación encontrándome con una escena de la cual si no fuera porque son mis hijos me estaría partiendo de la risa.

— Ya basta, Kai dale su cargador a Ryu, y Ryu Jin, por favor deja de insultar a tú hermano, eso es lo que son. No puede haber un día en el que esta casa esté en completa paz.

— Lo siento appi — Mis dos pequeños, ahora no tan pequeños hijos se disculparon y regresaron a sus habitaciones.

Estos últimos 12 años han sido un poco cansados, pero sobre todo felices, tengo una pequeña academia de danza en Seúl y Busan, Jeon tiene su exposiciones de fotografía al igual que un pequeño estudio donde hace fotografías a sus clientes.

— ¿De nuevo estaban discutiendo por el cargador? — asentí — Aunque ya sean mayores de edad seguirán siendo unos niños.

— Sí, realmente los amo, pero me causan muchas canas verdes — Suspire en derrota — Ryujin tiene que elegir una opción pronto, quedarse como humana o convertirse en vampira, Kai aún no tiene que decirnos, el será el próximo año.

— Ryu empezará la universidad pronto, estoy seguro que al ver a sus primos convertidos en vampiros también querrá serlo — se acercó a mí y me abrazo cocinando que su cuerpo mojado empapara mi ropa.

— ¿Qué sucedería si ella decide quedarse como humana? — hice aquella pregunta que rondaba por mi cabeza.

— Pues, aún será diferente a los demás, recuerda que nuestra hija es especia al igual que nosotros.

— No comprendo cómo es que tuvimos la suerte de conocerla — sonreí — Mi mamá siempre ha estado a su lado desde pequeña.

— Y es algo de lo que siempre estaré agradecido; Kai es un chico normal y realmente  no me preocupa de que no decida que hacer luego de cumplir los diecinueve.

— A ti tal vez no, pero a mí sí, Kai es mi pequeño y siempre lo será — me separé y me adentré a el cuarto de baño.

— Ji Min, sabes que no quise decir eso. — escuche la voz de Kook al otro lado de la puerta.

— A veces pienso que quieres más a Ryu, Kai también es tu hijo Jeon — le reproche con un dolor en mi pecho.

— Lo sé, joder sé que es mi hijo y lo adoro con mi corazón. No quise hacerme ver como si quiero más a Ryu — Apoye mi cuerpo en la puerta.

— Prométeme que me ayudarás a cuidarlos mientras deciden qué hacer con respecto a esa decisión – Le pedí en un susurró que sabía él podría escuchar.

— Lo prometo, mi Luna — una sonrisa apareció en mis labios.

— Yo también lo prometo, mi Sol — me enderece — ahora baja a  prepararles el desayuno — le ordene escuchando como bufaba y a regañadientes salía de la habitación.

Me adentré a la ducha y abrí está dejando que las gotas mojaran mi cuerpo.

Narra Jung Kook

Baje las escaleras y me detuve al ver a mi hijo acostado en el sofá con el celular, me acerque sin hacer mucho ruido y me puse detrás de él, pero toda acción que haría se detuvo.

— Se que estas detrás de mi appa — me dijo y yo solo me levante indignado.

— ¿Cómo supiste? — le pregunte a lo que Kai soltó una risita.

— Vivir con Ryu desde pequeños me llevo a agudizar más mis sentidos — me respondió mientras se sentaba y apagaba el celular — Ahora, quiero mi desayuno.

— Y luego tu appi me pregunta el por qué prefiero a tú hermana — le di la espalda pero eso no duró mucho al sentir como mi hijo se colgaba de esta — Kai, bájate de mi espalda — le pedí.

— No, haré que me quieras más que a mi hermana, papá — Me reprocho como cuando era pequeño.

— Vamos, Monkey bájate de mi espalda — empecé a reír contagiándome de la risa de Kai.

— Yo también quiero — Ryu Jin corrió hacia nosotros guindándose de mi cadera, ahora tenía a dos monos colgados de mi cuerpo.

— ¡Dios! — reí — ¡Jimin, tus hijos me quieren aplastar! — grité hacia la segunda planta donde sabía que mi rubio estaba bañándose.

— Vamos Appa, dinos quién es tu hijo preferido — reí y negué — ¿Por qué no?

— No tengo un preferido, a los dos los quiero por igual — dije, logrando que los dos se bajaran de mi cuerpo.

— ¿Qué pasa aquí? — mire hacia las escaleras donde estaba Ji Min.

— Tus hijos no me dejaron entrar a la cocina, porque disque tengo un preferido — me acerque a él y lo abrace por la espalda — Diles que no lo tengo, amor.

— Vengan aquí mis amores — los llamo y ellos se pararon frente a nosotros — Su padre no tienen ningún preferido, a los dos los quiere por igual, y si lo tiene yo seré quien lo castigue por eso, ¿entendido?

— Si appi — Respondieron al unísono para luego abrazar a mi chico.

Ji Min los ama a los dos, yo los amo a los tres porque ellos son la razón del porque existo en este mundo, del porqué no tuve la oportunidad de morir.

Me encamine a la cocina y saque la masa para hacer los panqueques, mientras en un vaso cualquiera vertía un poco de aquel líquido rojo que bebemos Ji Min y yo.

— ¿Cuándo podré probar la sangre? — Kai me pregunto mientras tomaba asiento en el taburete.

— Cuando decidas que es lo que quieres — le respondí — Si ser un vampiro o quedarte como humano.

— Mientras no puedo ni darle una probada — asentí — bien, entonces quiero un zumo de limón.

— Yo también quiero un zumo de limón appa — asentí y empecé a preparar la bebida de mis dos hijos.

Ji Min entró a la cocina y tomó su bebida dejando un bigote de esta en su boca — Tienes algo aquí — me acerque y chupe su labio superior apartando aquella sustancia roja.

— Amo cuando se comportan así — mi hija chillo cuando me separé del rubio.

— Y a mí me causa náuseas — mi hijo apartó su mirada — no el hecho de que sean dos hombre porque saben cuáles son mis preferencias, pero realmente cuando tengan sangre límpiense con una servilleta — reímos y solo empecé a cocinar el desayuno de estos dos revoltosos.

— Ryu, dentro de unos días inicias la universidad — mi hija asintió emocionada ante las palabras de su appi — ¿Qué escogiste?

— Danza, al igual que tú, appi — sonreí y es que está de más decir que mi hija no era talentosa, Ryu desde  pequeña lo vio ensayar, ella trataba de seguirle el paso a su appi y bueno, todo conllevó a esto.

— ¿No te interesaba la fotografía? — negó.

— Appa, yo seguiré tus pasos, la fotografía definitivamente es para mí  — me respondió Kai — Eso escogeré el próximo año.

— Hija, ¿ya sabes que elegirás? — ella negó antes la pregunta de Ji Min.

— No, todavía estoy pensando que es lo mejor, no quiero perder mis dones como humana, aunque no se si lo soy — susurro lo último.

— Hey, claro que lo eres, eres humana al igual que tu hermano, que tengas algo diferente no significa que no lo eres, solo te convierte en alguien único y especial — la abrace por los hombros.

— Gracias papá — Ji Min saco los panqueques de la estufa y los puso frente a los chicos.

— Coman, iremos a visitar a los tíos, y eso incluye a su tío Hyun — les dijo mientras se sentaba frente a ellos.

Y esta es mi familia, mi pequeña familia Jeon, la cual había conformado hace 12 años atrás, donde luego de años pensé que los fantasmas del pasado habían desaparecido por completo.

Quien diría que aquel eclipse entre JiMin y yo solo sería el comienzo.

Y aquí comenzamos nuevamente, ¿quiénes pensaron o tuvieron una idea de que la historia continuaría?

Quiero saber sus opiniones y que esperan para esta segunda temporada.

Quiero decirles que las actuaciones no serán frecuentes, puede que pasen dos semanas sin que pueda actualizar la razón es porque estoy muy sofocada con el colegio, prácticamente todo lo que hago en el día tiene que ver más con el que con mi vida. Solo espero me comprendan.

Nos leemos pronto (espero) 😊🥰💗

I Purple U 💜

S. Black Angel 🖤